Escribí siempre por error por equivocación por explosión y remanso y deseo extremado y desconsuelo y pobreza y extrañamiento y gracia y bendición de la misma poesía directamente de ella como si ésta fuera más ubicua que mi madre y que la mirada de mi padre que extraño que extrañaré siempre y el amor de la bella que jamás logré amar salvo cuando ella de mí se enamorara y de estas letras grabadas como a fuego sobre mi propia tonada de mudo y corazón de muerto para todo lo que no sea aquélla y su venida a este mundo como de contrabando como hurtando el tiempo y el espacio frente a todo el conocido aburrimiento o las exactas preguntas que jamás son respuestas a todo aquello mudo como cuando uno se pone a escribir y a mirar sin mirar a lado alguno sin finalidad ni esperanza de respuesta alguna escribir por escribir
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09/07/24: Hacia la traducción de Inkarrí al portugués brasileño
“Hasta justo antes de expirar
Vallejo no pensó en irse a España
Aunque dijo –“Me voy a España”
Quiso, más bien, y con firme decisión
Cogerse a la guapa enfermera argelina
Que lo atendía en la Clínica Arago”
Habría mucho que decir sobre cada trozo del Inkarrí de Pedro Granados, aunque aislados de su necesario conjunto. Aquí tenemos la relación sexualidad y muerte extremada por la actitud cholo-mestiza deseante y transgresora frente al “culo hermoso” de la enfermera y la universalidad del morirse peruanamente en París. Pero ésto no resultaría tan bello si no fuera por los arranques y arrastres coloquiales/orales y vocales en los intersticios de sílaba a sílaba y de fonema a fonema, en construcciones naturalmente paronomásticas. Un menudo ejemplo: Cogerse/argelina/Clínica Arago. De ahí las grandes dificultades de la traducción, puesto que el texto traducido tiene que re-crear Inkarrí según la inevitable composición de relaciones de su ambiente y paisaje cultural – con sus células rítmicas específicas. Para que a Inkarrí le gustara también ser brasilero. A.P.
Amálio Pinheiro é poeta, tradutor e professor no Pós-graduação em Comunicação e Semiótica da PUCSP. Coordena o Grupo de Pesquisa “Comunicação e Cultura: Barroco, Oralidades e Mestiçagem” (DGP CNPq/Lattes), onde se investigam as relações entre as áreas de literatura, comunicação e cultura na América Latina, ao mesmo tempo em que se experimentam modos de conhecimento não dualistas para o continente. Tem produzido ensaios e traduções comentadas de autores da Espanha, da América Latina e do Caribe. Desenvolve pesquisas sobre as relações entre a memória cultural, as artes e as ciências não clássicas, com ênfase nas conexões e ramificações entre voz, poema, corpo, séries culturais e paisagem urbana, que se desdobram aquém das dicotomias entre sociedade e natureza. Publicou, entre outros, “César Vallejo: o abalo corpográfico”, “César Vallejo a dedo” (tradução), “Aquém da identidade e da oposição. Formas na cultura mestiça”, “Nicolás Guillén: Motivos de son”, “Rafael Alberti: Sobre os anjos” (tradução), “América Latina: barroco, cidade, jornal”, “Tempo Solto” (poemas). (Fonte: Currículo Lattes).
08/07/24: Inkarrí: Estado de la cuestión
-Hay momentos en tu poemario que parecen parte de una conversación hostil con Altazor. Intenso lo tuyo y a veces persuasivamente confesional. Me atrapó.
-Mucha gracias, Alicia. Altazor constituiría la paulatina descorporeización (metafísica occidental); mientras Vallejo, más bien, apostaría precisamente por lo opuesto: la inclusión de todos los cuerpos posibles (metafísica amerindia o multinaturalismo). ¿No?
Sirva este sumario diálogo, entre una amiga académica y su discípulo, para situar el marco mayor de lo que a la larga propondría Inkarrí (Lima: VASINFIN Ediciones, 2024); es decir, su indagación penúltima porque la postrera pertenece exclusivamente al lector y muy rara vez se hace pública. Efectivamente, este reciente poemario de Pedro Granados se nos presenta a manera de un atajo, por lo común, frente a fatigosas e impotentes explicaciones, para en dos zancadas encontrarnos cara a cara con lo que constituye una ya porfiada reflexión trasatlántica sobre el cuerpo; y más bien, desde esta orilla, pasarnos algunas “diapositivas” de lo que se trae entre manos el multinaturalismo: “seres humanos y animales (y objetos) compartimos un alma común, lo que nos diferencia son los cuerpos”. Amerindios todos. Lo cual nos hace recordar una anécdota contada por Armando Almánzar Botello respecto a que, en el pueblo de sus abuelos, se sucedían permanentes discusiones sobre si tal o cual era verdaderamente un Almánzar en desmedro de otros que sólo pugnaban por serlo o en apariencia no lo eran; situación que zanjó de una vez por todas el abuelo de Armandito cuando, decididamente encaramado sobre una banca del parque del pueblo, enfatizó: -“Todos ustedes son Almanzar”. Y punto.
Entre otras lecturas que se vienen sucediendo, publicadas o no, tenemos ésta de un buen amigo, también poeta, que apunta a otros aspectos; aunque no por ello menos pertinentes:
-Querido Pedro, tu “Inkarrí” es una maravilla. Si en nuestro país no existiera tanta envidia, daría mucho que hablar porque se trata de un libro (con una voz distinta) que dice mucho acerca de la poesía, al revés de aquella (peruana y de otras latitudes) que, como bien dices, nada tiene que ver con la poesía y solo ofrece una grandilocuencia que habla demasiado y no dice nada. Sé que me estoy quedando corto en la apreciación de tus poemas y eso se debe a que me resulta difícil poner en palabras lo que he sentido -y sigo sintiendo- al leerlos. No sé cómo decírtelo, pero si pudieras verme en este instante, notarías mi emoción en el brillo de mis ojos, reflejo de lo que pienso y siento. Un gran acierto el cerrar el libro con “Desaparecer un cuerpo”, tremendo arte poética que echa luz sobre el resto de los poemas.
Hasta, aunque es posible se continúen multiplicando, otras reseñas ya publicadas y no menos agudas ni generosas (Carlos Quenaya, Roberto Zariquiey, Milton Manayay). Inkarrí, que cierra con broche de sol una saga constituida por los últimos poemarios de Pedro Granados: Roxosol (Arequipa, Perú: Cascahuesos, 2018), edición bilingüe español/portugués, con versiones de Amálio Pinheiro; La mirada (Buenos Aires: Buenos Aires Poetry, 2020); y la antología, Amerindios/Amerindians (New York: Artepoetica Press, 2020), con poemas traducidos al inglés por Leslie Bary, Sasha Reiter e Isaac Goldemberg.
07/07/24: The Look of Love
Interpretado por Dusty Springfield
Nos recuerda nuestra propia belleza
Y por cierto el de nuestras compañeras
Aquellas nítidas princesas de cuento
Pero la música de pronto ha madurado
No únicamente la canción
Letras a una melodía adosadas
Sino la manera cómo se derrumba
Todo aquel empedrado barranco
Su ruido de capas sucesivas y yuxtapuestas
Primero la niñez luego el amor
Toda expectativa
El aire propio y de nadie
Ningún destello de sol entre cuerpos posibles
Ni llegadas ni despedidas
Sino sólo este encierro de la voz
Este grito imposible
Pliegue de más pliegue de menos
Este surco del amor abriéndonos
El cuerpo del alma
Aire que todavía llega hasta aquí
Este desmoronamiento que somos
Que es cada uno
Antes de aparecer las piedras entre el fango
Curiosas alegres
Tal como liberadas
06/07/24: El Mecanoscrito Lorenzelli
Vallejo-Eielson: “Pero he venido de Trujillo a Roma”
Reseña de Cuando el amarillo mes de abril. Mecanoscrito Lorenzelli (Lima: PUCP Sistema de Bibliotecas, 2024). Carlos Castro Sajami, Kathia Hanza, Mariana Rodríguez Barreno (editores). Poemas mecanografiados (1956-1957) por Jorge Eduardo Eielson; corpus del libro Habitación en Roma, publicado en 1976, aunque con variaciones. Se enfoca la muy estrecha relación entre la poesía de Eielson y la de César Vallejo, sobre todo en que ambas constituyen una semejante propuesta amerindia. Una “instalación sobre Vallejo”, efectivamente, esto constituye la intervención de Eielson palpable en el Mecanoscrito Lorenzelli. Paralelas habitaciones amerindias en el Amor (Roma).
El más vallejiano de los poetas post vallejianos lo constituye, sin duda, Jorge Eduardo Eielson; en lo fundamental, por la perspectiva simétrica o multinaturalista (Viveiros de Castro) de sus propuestas y por el apego compartido de ambos hacia un determinado territorio o paisaje –la costa del Perú[1]— y el intento o la posibilidad de donar, más bien hacer proliferar, este mismo espacio local –individual-colectivo– y su talante post antropocéntrico en el mundo entero. Desde “Nostalgias imperiales” (Los heraldos negros), donde al canónico “Yo no sé” se le contrapone el simultáneo y enfático “[Yo soy] Un fermento de Sol” (“Huaco”) (Paz Varías); pasando por Trilce en tanto y en cuanto encarnación textual de Inkarrí (Granados 2014); hasta el legado amerindio –formas y niveles de conocimiento contenidos en los muros de Chan Chan– que encontramos en los relatos de “Cuneiformes” (Escalas)[2]. Paisaje multinaturalista, en suma, aunque también poemas que en su cotejo editorial han corrido diversa suerte; unos se han publicado en vida del autor y, otros, no. En este sentido, y en el paralelo o la continuidad Vallejo-Eielson que aquí trazamos[3], el poemario Habitación en Roma –en su versión de El mecanoscrito Lorenzelli (1956-1957) — constituiría, a su modo, aquellos “poemas póstumos” que en vida, con excepción de España, aparta de mí este cáliz, no se animó a llevar a la imprenta César Vallejo: “La condición inédita de su poesía europea es uno de los grandes misterios de la poesía moderna en esta lengua. ¿Por qué Vallejo no ordenó y publicó esa obra fundamental? (Julio Ortega 2014). La poesía de Eielson, más bien, se alimentaría de aquel discreto pudor vallejiano; es decir, no lo amilanaría la gravitación de la diglosia “Paris/ París” que percibiera Enrique Ballón en los poemas póstumos del autor de Trilce (Granados 2015), y de la cual –antes que nadie– sería consciente el propio César Vallejo[4]. Pudor vallejiano que, paradójicamente, liberara a Eielson del gabinete de escribir textos impecables y ultra canónicos: “entre 1954 y 1958 se concentra casi exclusivamente en la actividad literaria. Son los años en que produce los poemarios dedicados a la ciudad de Roma, así como su poesía más experimental” (Centro Estudi Jorge Eielson 12). Es decir, Vallejo rescataría a Eielson del fetiche de la letra y lo instalaría definitivamente en la respiración. Por lo tanto, ahora lo más importante sería la modulación de los sentimientos en la glotis del poema; antes que el modo en que resuenan los sonidos en la zona ulterior de la cavidad bucal; y, junto a esto, asimismo menos importante sería respetar el decoro de la norma: Cuando el amarillo mes de abril. El mecanoscrito Lorenzelli[5] se halla plagado de erratas. “Incorrección” que, asimismo, constituye un síntoma del abandono de la dictadura de la literatura por parte Eielson; lo cual lo llevaría a experimentar de modo paralelo y simultáneo con otras artes o en “nudo” con distintas y diversas plataformas.
Por su parte, aquello de “Pero he venido de Trujillo a Roma” remite, obviamente, a los versos 10-11 de Trilce XIV: “Pero he venido de Trujillo a Lima./ Pero gano un sueldo de cinco soles”[6], a manera de identificar un punto álgido en el cual convergen y se continúan las poéticas de ambos autores. Poetas de la ganancia suma en medio del menoscabo o la carencia, “cinco soles” de protección extra para los dos poetas. Sin embargo, al final, en Vallejo y en Eielson, no se trataría únicamente del testimonio de la fidelidad del sol y del consecuente empoderamiento del sujeto poético en el desplazamiento de un lugar a otro (Trujillo a Lima o Lima a Roma); sino, más didácticamente en Eielson, de la esencialización de un lugar –“elementarismo” (Rebaza Soraluz 42)– vía la reducción a lo más simple e imprescindible; en este caso, Habitación en Roma en tanto sinónimo de “Habitación en Amor”. En consecuencia, no se trata, tampoco en Vallejo, de ningún chauvinismo de color local, cultural o étnico; aunque, frente a su decepción ante aquella mitificada “ciudad sagrada”, el autor de Noche oscura del cuerpo, considere, de modo muy significativo:
un movimiento de reencuentro con los orígenes del Perú[7], que describe como una “salvaje” y “secreta civilización, más perfecta que la europea” y que “asombrará el espíritu y la inteligencia secular de Occidente (Rebaza Soraluz 2024: 39)
“Instalación sobre Vallejo”, efectivamente, constituye la intervención de Eielson palpable en el Mecanoscrito Lorenzelli. Paralelas habitaciones amerindias, en el Amor.
Referencias
Centro Estudi Jorge Eielson (2024). “Noticias biográficas. Jorge Eduardo Eielson”. Cuando el amarillo mes de abril. El mecanoscrito Lorenzelli. Lima: PUCP. 11- 13.
Eielson, J. E., Urco-Núñez, J., & Cisneros Cox, A. (1988). “Jorge Eduardo Eielson: el creador como transgresor”. Lienzo, (008), 189-205.
https://revistas.ulima.edu.pe/index.php/lienzo/article/view/3963
Granados, Pedro (2015). “Diglosia poética: Vallejo/Verlaine”. Lexis, Vol. XXXIX (1) 133-160.
Granados, Pedo (2014). Trilce: Húmeros para bailar. Lima: VASINFIN.
Ganados, Pedro (2004). Poéticas y utopías en la poesía de César Vallejo. Lima: PUCP.
Niebylski, Dianna (2002). “Releyendo Poemas humanos: Desposesión y lenguaje en el exilio”. HPR/ 1. 1-15.
Ortega, Julio (2014). La escritura del devenir. Madrid: Taurus.
Paz Varías, Miguel (1989). Vallejo: Formas ancestrales en su poesía. Lima: Marimba.
Rebaza Soraluz, L. (2024). “Una celda en Roma: Eielson y la austeridad de un asceta seglar en la ciudad sagrada”. Cuando el amarillo mes de abril. El mecanoscrito Lorenzelli. Lima: PUCP. 37-47.
Rebaza Soraluz, L. (2014). “El paisaje infinito de la costa del Perú: Jorge E. Eielson”. Vallejo & Co., dic. 29.
https://www.vallejoandcompany.com/el-paisaje-infinito-de-la-costa-del-peru-jorge-e-eielson-por-luis-rebaza-s/
Tarazona, E., Eielson, J. y Acha, Juan (2004). La poética visual de jorge eielson. Lima: Drama Ediciones.
Zegarra, Luis F. (2011). “Línea de pobreza y salarios, 1913-1925. Una primera aproximación”. Economía Vol. XXXIV, N° 67, enero-junio 2011. 39-56.
Viveiros de Castro, E. (2010). Metafísicas caníbales. Líneas de antropologia postestructural. Stella Mastrangelo (ed.). Madrid: Katk Editores.
© Pedro Granados, PhD -VALLEJO SIN FRONTERAS INSTITUTO-
04/07/24: Corazó deslenguado/ Cristino Bogado
«las grandes felicidades tienden
a alojarse más en el corazón que en la lengua»
Henry Fielding
Che rembo nde revire
opyryrỹi trompo alazanicha
Che py’apy nderako
roporo’úvove okakuaa
chikleicha háimete che mokõ
Mba’e porã peteĩ nonsense/absurdidad pura
ñande mano ndo pytu’uiri
ka’a paye oñepyrũ hyakuã
omanomea’e
ipirurire
Oikovejevy gallo sapukái
petaka Jameson napepe Mitchum bolsíllope
Tape nde reikuaaiva mo’oguipa ouva
ha na nde guerahamo’ãi movove
poesía oje’e chupe
Poesía héra pe tape henyhe kuña kuéragui
tape hesaráiva ijehegui
Achy chéve che corazó
poesíagui
Ambovayva poesía kuarahyre
omaña hagua
Papiro de Oxyrhincope osẽ
che yiyi del futuro no sosocialista
Oje mbova mba’evepe
ombyaípaiterire oĩmiva yvyári
Corazó deslenguado
kũ ndaipy’áiva
descorazonada lang
corazón exiliado de su lengua
py’a guasuko ku kirirĩ
El cucu oñenguatu hakokuápe
las cumbias del tiempo ñe’ẽ
Aña lomo ári oho mísape
el Poeta ko’ẽmbapotajave
Peteĩ poema invizible
jahechaỹva
Moñái kuára oĩ
ha ñe’ẽ yvoty kuára avei
Poeta oúramo oguevi jey
pe ikirirĩgui
tujairoma
otopata peteĩ mitãipe
oguahu hina hi’añomi
Kaguy porã oĩ
oiko
hete teepe
Poeta ndo guerekói araka’eve
mba’eve ome’ẽ hag̃ua de don/regalo/presente
upévare opyta chupe opurahéiminte…
Ysyry ombokunu’u
nde oporohayhúvape
ha mbói la póra kuéra tembiguái
Ndaipóri mba’e kuaa
jaikomínte umi kérape osẽvaekue ñandéve
Guahu porahéi ñe’ẽ yvoty mbarakapu
Ha’ete ndéve jeguaka/mba’e porã apo
guau guahu
peteĩ ñande año peguarãnte
ndaha’éi maymáva peguarã
ko akãngueko hina ha’e
Helena de Troya
03/07/24: Inkarrí en Lambayeque
Acto de presentación de «Inkarrí» (Lima, Ediciones VASINFIN, 2024), poemario de Pedro Granados (Vallejo Sin Fronteras Instituto). Lectura de comentarios: Amálio Pinheiro (PUC-SP); Carlos Quenaya (UPCH); Leonel Zuloeta (UNPRG); Zosimo Ventura (UNPRG); Milton Manayay (UNPRG).
Viernes 28 de junio de 2024
Auditorio de la Facultad de Agronomía
Ciudad Universitaria de Lambayeque
11.00 a. m.
Actividad organizada por el Círculo de Estudios “Luis Hernán Ramírez”, 27 años [Creado el 15 de octubre de 1997]. El Círculo agradece a las profesoras Nelly Gutiérrez, Julia Liza y Nora Ugaz; a sus exintegrantes Tomás Serquén y Karin Aguayo; al señor Rolando Santisteban.
Créditos: Giancarlo Montoya y Tatiana Flores (Oficina de Imagen Institucional FACHSE).
01/07/24: Nuestro poshumanismo
Eso que dicen
Aquello que evocan
Un destello
El compacto azul de la tela
Terminar es concluir
Mudar de página
Una gaviota con su pez
Entre la lengua
Así viajo
Agobiado de tanta vida
Una oruga se orienta
Hasta su inequívoca morada
Mi mujer me ve
Yo la veo
Un concepto a otro concepto
Acaso más grande entrelazado
El amor, un instante de bobagem
Como diría aquel jugado compatriota
Sobre la tan desolada Foz do Iguaçu
El rio, mi hermano
La nube, mi hermana
El mar, yo mismo
De adolescente
El sol de adulto
Esta noche cerrada de puro viejo
26/06/24: Todas las aristas de Eielson [Exposición]
En el centro cultural Inca Garcilaso del Ministerio de Relaciones Exteriores (Jr. Ucayali 391, Cercado de Lima) se puede visitar la muestra biobibliográfica Los reinos de Eielson, que rinde homenaje al escritor y artista peruano Jorge Eduardo Eielson (1924-2006), en el centenario de su nacimiento.
Este proyecto tuvo como curador a Renato Sandoval Bacigalupo, poeta, traductor y amigo del artista, quien ha procurado que los materiales en exposición no solo sean literarios, sino que puedan observarse todas las aristas y etapas de Eielson como creador.
https://peru21.pe/cultura/jorge-eduardo-eielson-todas-las-aristas-de-eielson-noticia/