AGÜEROS PARA ARMAR (Nobloga IX)

Para empezar, Juvenal Agüero, me recuerda a una paloma que conocí casi por casualidad.  Ella recogía -solamente haciendo uso de su pico- la comida escarchada de hierba que los alumnos dejábamos cerca de la cafetería del Campus de la Universidad Católica. Juvenal limeño, es un ave de libertad vasta a la cual se le han cortado las alas y él no lo sabe. Él sigue desplazándose de ciudad en ciudad sin lograr despegar. Avanza penetrando el mundo lentamente, sin embargo, la tierra lo espera calmada con una  mujer entre los brazos. (1) mujer = (1) oportunidad. El peruano, ha recorrido -con sus patas de gaviota- el deseo pantanoso de Manaus y no ha conseguido alzar vuelo tampoco desde Madrid; tan sólo ha logrado estremecerse con la vorágine consumista estadounidense. Juvenal ha llegado lejos, pero a paso torpe debido a la invalidez de sus alas. Y es esta lentitud la que no lo convence. Agota su energía galopando de aquí para allá, deseando separarse de su yo terrenal y elevar su espíritu animal sobre el cielo, empero, el suelo -todos aquí lo sabemos- es solamente preciso para nadar. Todos los animales pueden volar, pero –simplemente- algunos no logran despegar – creo haber leído por ahí.  (D. B.)

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Trilce/ Teatro: guión, personajes y público

Desde la perspectiva del ensayo de César Vallejo, “Notas para una nueva estética teatral” (1934), se lee Trilce en tanto teatro. Poemario u “obra teatral” con guión (mito de Inkarrí), determinados personajes y dirigida a un público tanto de la época (Lima-Perú) como del presente y overseas.

http://www.hispanistas.org.br/wp-content/uploads/2017/09/TrilceTeatro%20ABH%202017.pdf

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[Adelántate a los hechos]

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Adelántate a los hechos

No seas huevón ni huevona

Que en tu universidad gringa

Justo antes que te jubiles

Te van a preguntar por mí

Que qué es esta poesía

De la cual todo el mundo habla

Menos tu currículum

Ni tus sílabos

Que qué fue

Esto en las universidades

De medio pelo

Porque en las mejorcitas

Te dirán que qué mierda

Enseñaste entonces

Sobre América Latina

Que tergiversaste que desorientaste

Que mandaste al desvío

A tus pobres estudiantes

Que qué te pasó qué te paralizó

Que importaste a USA únicamente tu barrio

A tu grupo de  anuentes y serviles amigos

O, peor aún, que lo tuyo fue una farsa

Una auténtica comedia

En la que sólo tu suma ingenuidad confiaba

Hacías a espaldas de tu propia institución

¿A quién creías que así manipulabas, pendejo?

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AGÜEROS PARA ARMAR (Nobloga VIII)

CHAT  PERUANO

“El que no ha leído mi poesía, que se joda”

UNO

Me quedé solo entre un mar de mediocres y cobardes

-Eres un apestado, me dice Fredy

De visita en esta isla de monologantes

Este recodo olvidado del archipiélago

Si no tuviera fe si no tuviera amor

Si no te tuviera

Hace rato que hubiera dado con mis restos

En la huaca más próxima a mi domicilio

Pensar en el Perú es imposible

Porque aquí todo el mundo sólo

Quiere tener la razón

Algo se quebró en la placenta misma

De todos los peruanos

Una vocación común de huele pedos

Huevas y mojones

Es difícil encontrar un ser vivo que ya se haya graduado

Salvo por colosal accidente de la naturaleza

Por ciego empuje del desamor

Por  soledad letal

O por unos ojos donde dios directamente nos habita

Perú, excepcional agonizante

De  un lado los mineros

Del otro, la masa de esclavos (Simón Bolivar dixit)

Unos ojos donde dios directamente nos habita

Si no, más bien, unos polvorientos desechos

Una ropas estrujadas por el tiempo por la nada

Por lo invisible por el alma

Que tenaces  se han ido tragando

Casi ya el total de  nuestro miserable  cuerpo

 

DOS

Ustedes no me llegan ni al pincho

Lenguaraces poetas de feria

El que no ha leído mi poesía, que se joda

Los andinos queremos sentirnos del cono sur

Y militar en la nada a lo que dé lugar

Lo mismo los poetas brasileños

Aunque hallemos multinaturalistas excepciones

La nada es un dolor de estómago vacío, nada más

Y una tenaz negación a no lavar los platos

Porque aquello desde niños lo hizo nuestra mamá

La nada no existe durante un partido de fútbol

Ni ante un crepúsculo

Si previamente

No nos han lavado el coco los libros

Ni nos guiamos únicamente por conceptos

La poesía es el flash no el daguerrotipo

La poesía, una persecución donde tú eres la víctima

El perseguido

Aunque intentes parapetarte contra ello

Con  argumentaciones y mucho más con poemas

Un gasto exorbitante de tiempo, no de cultura

La poesía nunca es el poema

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Esquema de la poesía peruana: siglo XX al presente

“Vallejo era el principio y el fin” (JMAEl zorro de arriba y el zorro de abajo)

Variables:

MITO (M)

SOCIEDAD-HISTORIA (S-H)

INDIVIDUO (I)

Vallejo ← Ѳ

Esfera dividida en dos partes equivalentes, una superior y exterior, y la otra oculta (Trilce); con cada uno de sus puntos, al interior de ambas, asimismo equidistantes y con igual rango de valor respecto una de la otra.  El lenguaje, particularmente en Trilce, emana de esta línea divisoria entre aquella esfera.  Trilce, en cinabrio: “El color del tránsito, el mediador entre el día y la noche” (Carlos Brignardello).  Lenguaje liminar.

Eguren  Lenguaje simbolista.  Mundo alterno y alternativo: Realidad/ Noche.

Adán: Asume este mundo, pero en sus fragmentos (Barroco).  El sujeto poético no se otorga mucha importancia.  El lenguaje brota desde (S-H) –al centro mismo del poema– tras sucesivos y cada vez más breves círculos concéntricos, luego de M e I; es decir, desde la desubicación y deterioro de I.  Se adelanta al Barroco-coloquial (años 80-90) donde la poesía, respecto a los 50-60,  ya no constituye de modo preponderante S-H; sino que existe también un espacio para un desubicado I.  Narcisismo sin o con extremado narcisismo, aquello que va de Adán a, por ejemplo, la poesía escrita por mujeres en los años 80.

GuevaraDelgadoRomualdo, etc.  El lenguaje parte de M, el círculo concéntrico más periférico o distante de I y S-H.  Aunque de una lectura urbana de M, en términos de Socialismo.  Paradigma sanmarquino (UNMSM) por excelencia, aunque con formación e imaginación.  Y no la propuesta hipo real, y en automático,  en la que derivó la poesía “sanmarquina” a partir de los años 70 y hasta hoy en día.  Por ejemplo, incapaces de exorcisar al Covid 19 en sus poemas, se conformarían con abonar alguna teoría conspirativa sobre el tema.

Eielson [Varela] se halla ausente S-H, el mundo oscila entre M e I.  Y el lenguaje emana desde la intersección entre M e I (semejante a Paz, “el instante”).  Junto y de manera semejante a  Szyszlo o a MVLL, ciertamente interesados en cultura y arte precolombinos, aunque con exclusión del “cholo calato”.

Sologuren, mundos paralelos y alternos  de catadura trascendente –neorromántica o neoplatónica– de 1944 a 1960.  Pero desde Estancias (1960), mundos paralelos y también alternativos, aunque de carácter radicalmente distinto: inmanente y de ascendencia multinaturalista (Eduardo Viveiros de Castro) o budista Zen.  Aquello que en Eielson es significado y glamour, en Sologuren constituyen significantes listos –alfabeto– para una mediación conceptual y universal.

Hinostroza, el M(ito) del padre se halla al centro íntimo o entre S-H e I.  Aunque I no logra reparar la frustración, carencias o humillaciones de M; sólo las repite y, al final, las hace suyas (M=I).  Todo sucede en el ámbito privado de I.  Semejante a Cisneros, aunque en el caso de este último aquellas frustraciones –impostadas o “sobrescritas” (Julio Ortega)– representan más bien las zozobras de una específica clase social; en el Perú, aquella de muy “discreto encanto” (I=S-H); de allí el fácil recurso para captar simpatías –uso y abuso– del monólogo dramático.  Gesto que  algún poeta de los años 80 (Montalbetti) quisiera incluso se eleve o merezca el premio Nobel.

Luis Hernández Camarero, mundo en carpe diem en plena época naturalista o “canillita” de Hora Zero (años 70).  No existe el individuo, el lenguaje brota del estado de intersección o de gracia entre S-H y M (el mito de un  Sol espléndidamente núbil).  Es el primero que lee a Vallejo en clave gozosa, aunque no menos casual: “¿di, mamá?”.

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Lucas/ Alan Smith Soto

I

Lucas 23, 36

…llegándose y presentándole vinagre…

 

He de presentar vinagre

al amanecer,

 

al peto anaranjado

del lago pajarillo,

 

al lino

desnudo,

 

a la raíz sorprendida

por la pala.

 

II

Haiku

Lucas 24, 35

 

…y como había sido conocido de ellos al partir el pan…

 

El pan parte el pan

y comparte el silencio

una palabra.

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CAURENTENA

Trilce calendario solar vertical

Ceque mi llanto

Mi arritmia anímica inevitable

Mi abisal desamor

Contra los que leen a Vallejo

Como un socialista

Como un cristiano

Como un consumado ventrílocuo

Calendario que consulté

Que consultaba

Nomás estaba enamorado

Y veía ensartarse el amor

Tal cuentas de un collar

De perlas cultivables o no

Casi da lo mismo

Un collar un carrusel más bien

Que iba siempre hacia lo alto

Desde una simple emoción

Verla crecer hasta las nubes

Desde una sola desdicha

Desde una sola muerte

Que procuraba colgar sin demora

Sobre aquella noria

Sobre aquella nube de monólogos

En los momentos más frágiles

Unas lágrimas que eran también

Las de mi madre las de mi padre

Que no sé si alguna vez lloró

Las de mi hermanito Germán

Cuya flecha llega justo hasta aquí

Hasta esta agua que se cuela

Por la rendija

De esta puerta

Como se cuela

Este espejo que deslizo

Y abro para que le dé el sol

Les hablo desde todos mis años

Todos y cada uno y cada hora

Vallejo no era socialista

Vallejo no era cristiano

Vallejo no era poeta

Sino porque no había otro remedio

Y su mirada de roedor gigante

Acompañaba a la de la asexuada

Gaviota desde la que miraba

Cuando era un muchacho

Y la nube el sol la estrella fugaz

Los labios besándose de los astros

Aunque iba la mirada baja

Sabía me acompañaban

Sé que voy a morir

Sé que mi manera de leer

A Vallejo

Va a quedar en suspenso

No critico a los críticos

Menos los individualizo

La inmensa mayoría de ellos

Un arrecife de ganapanes

Tampoco aunque los deploro

Voy a hablar otra vez mal

De los poetas

Con una sola vez ya basta

Pero creo en Sasha Reiter

Como creo en Carlos Quenaya

Como creo en Ethel Barja

Sólo falta que ellos crean

También en ellos mismos

Y se aten al mástil de la existencia

Y no se cubran los oídos con cera

Hasta ya no creer más en  sirenas

Y sí creer en el Sol

Y sí creer en Vallejo

El más tierno entre todos sus hermanitos

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Crónicas de César Vallejo en el XI CONGRESSO BRASILEIRO DE HISPANISTAS (Recife, septiembre 1 al 4)

Titulo: “Y ME QUEDÉ VALLEJO ANTE MUCHAY”: BIOGRAFÍAS SOBRE EL AUTOR DE TRILCE

Autor: Pedro Granados

Área Temática: Estudos de Literatura e Cultura

Data da apresentação: 04/09/2020

Horário da apresentação: 16:30 as 18:30

Sala: COMUNICAÇÃO LIVRE – ESTUDOS DE LITERATURA E CULTURA | MESA 13. FILIAÇÕES E DESLOCAMENTOS NA LITERATURA DA AMÉRICA LATINA II

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AGÜEROS PARA ARMAR (Nobloga VII)

Otro día me topé con un taxista más que andaba cabezón, entre un tercero y no menos un enésimo, a cuyo taxi subí cumplidos los requisitos que, en Lima, celosamente se deben seguir para abordar uno de estos vehículos con provecho.  Claro, me refiero fundamentalmente aquí al económico; porque algún otro, por ejemplo el de la seguridad, uno lo va dimensionando en el camino. Los tips para tomar  un taxi en mi ciudad, al menos antes del empuje y moda de las aplicaciones, son los siguientes:

Nunca lo tomes a la salida de un restaurante.  Tomar un taxi, por ejemplo, en la puerta de un chifa, son por lo menos dos o tres soles más.

Nunca sonrías, en el Perú siempre se paga extra.  Por lo tanto, requiérelo con un perfil bajo o como levemente preocupado; aunque, sin exagerar,  porque en el Perú sufrir también tiene su precio.

Al solicitar un taxi, jamás levantes con exceso el brazo, tómalo siempre como al desgaire.  Sin darle importancia, por más que estés –como lo estaba en aquella oportunidad — desesperado por llegar puntual a la conferencia de mi amigo LEW.

Acuerda el precio de la carrera mirando fijo al taxista; aunque también modulando el énfasis.  Una mirada, más bien, como la de los botones que tienen por ojos los osos o las muñecas.  En fin,  si te es posible mirar sin mirar, mucho mejor; así se toma un taxi en Lima.

Por último, y ligado al tip anterior, mejor evitar tomar los taxis con las gafas de sol puestas.  Por una inescrutable razón, pero que he comprobado personalmente, hacerlo de modo contrario añadirá un par de soles a tu carrera.

En el centro, entonces, al mediodía por más señas, y con el tráfico embotellado, surgió entre aquel taxista y Juvenal Agüero el diálogo siguiente:

-Paso por un telo y me llama una señito, más bien joven, y me pide que la lleve al Rímac.  No se dejaba caer, colgaba todavía firme de su rama.  Bueno, enrumbo para Francisco Pizarro y, sorpresa, a poco de llegar a su casa, me dice desde el asiento de atrás: Uy, mi marido, si te dice algo, vengo de donde mi prima Aurora.  Está bien, le respondí, aunque una vez que se me prendió el foquito, agregué: ¿pero cómo es?  Y al vuelo me dio veinte soles .  Sin embargo, el venado  nada preguntó.

-¿Te ocurre a menudo este tipo de anécdotas?

-Muchas veces.  Pero nunca soy de aprovecharme, créame Mister.  Lo que pasa es que andaba con una arruga desde hace días y no sabía qué hacer; dinero extra para poder pagar el colegio de mis hijos…

-Fuiste oportuno, aunque hay ocasiones en que el taxista también puede ser la víctima.  Como aquella vez en que un colega tuyo me contó, de cuando empezaba a taxear, del modo en que se llevaron los treinta soles que hasta ese momento había reunido.  Subió a su coche una muchacha muy atractiva, se sentó justo detrás de él y, cuando estaba por llegar a su destino, amenazó por denunciarlo por intento de violación: “Bien que andabas mirándome. Me das lo que tengas ahora mismo o me arranco la blusa y te denuncio”.   Allí nomás aflojó el inexperto chofer.

-Eso no es nada, Mister, en mis veinte años en esta chamba me ha ocurrido algo semejante decenas de veces; aunque cuando era más joven o tenía la cara de huevón que, de seguro, lucía aquél que soltó sus treinta mangos.  Te dicen que tu carro huele raro, que las has querido drogar; te dicen, para no pagar, que mejor un rico mameluco.  Te dicen o amenazan con muchas cosas.  Pero estas arrugas y esta calvicie no vienen de yapa mi estimado amigo.

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