Poemas de Omar Pinedo

Negados para el erotismo y para la neurosis (voluntaria), estos poemas no se hayan negados para la poesía.   Basta sólo con que el autor acierte a protegerlos para el futuro; no las palabras ni tampoco la prosodia  que aquí y ahora emanan, sino la urdimbre y el temple de su malla de cazar insectos.  Nube de insectos traviesos o polen, da lo mismo, con que la poesía se anuncia, siempre, sobre todo ante un poeta joven.  Los problemillas a sortear en el Perú, en realidad insignificantes, son el modo en que hasta el día de hoy solemos leer a Vallejo; lo que decide el diario El comercio ser bueno en materia de poesía; el ingente número de poetas sin experiencia directa del gozo con la redonda, aunque con uniforme nuevo y reglamentario.  

II

Efímeras también

las mariposas breves del relente.

El río no es el tiempo.

(Sino el fluir y el cauce,

los guijarros y el agua que discurre,

– ¡brilla el pez que brinca! –

el rocío, el frío,

la gran roca desde la que observo,

el sonido).

Cumpleaños de papá

-La muerte es

llegar a casa y llorar en el baño

solo,

sin motivo aparente.

Mi amigo desapareció en el aire.

Aún hoy lo extraño.

P.G.

Puntuación: 5 / Votos: 2

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