I
Escribir a dos manos
Este es el secreto de la alta poesía
Igualito a tocar el piano
Sentado sobre la banca
Como un yacaré
Babas arriba
Mirada como en otra parte
Porque andas harto de ésta
Si la poesía te invita, acepta
Un día cualquiera
Un amor cualquiera
La vida de incontables minutos
Parecida
Te deslizaste hacia esta dimensión
Con tu poesía por pan
Y allí empieza toda esta acometida
Pero si orientarse y poner la cabeza
Fue todo tan rápido
Y tan de repente
Acepta la invitación
Que se parece a la de la religión
Pero no
Es el orgasmo de dios hecho para cisma
Según Adán y según recuerdo
Mis propios orgasmos
Pero a ver qué tiene que ver
Todo esto con la vida
La de ahora y la de ahorita
Según los dominicanos
Y los filósofos y los militantes
En los derechos humanos
De los objetos
La sanguínea sartén
El insondable vaso
La flemática cacerola
Todo
Para que lo sepas
Todo tiene que ver con la poesía
Alta y baja no da lo mismo
Pero uno ya se acomoda
Como cuando, a mi pregunta,
Mi amigo Cleymar me responde
Que no ha comido ni tortuga
Ni yacaré porque son muy bajitos
Eso es todo y sigo en babas
Y mirada como en otra parte
Y el corazón abierto
Aquí entre estas líneas estoy
Esperándote
Y no en las palabras
Como en otro lugar dijimos
Qué no era la poesía
II
Ojos de yacaré
Los que te aguardan
Pequeños y oscuros como gandules
Me dijo una vez una generosa muchacha
En vez de hablar, mejor me esparzo
El piano y la escritura
Son un instrumento de las vértebras
Aquí se halla el sonido
Y el atrevimiento
Pendulan la voz y también la mirada
Que hace rato yacen en babas
Igual a como en nuestro nacimiento
Atreverse a nacer de nuevo
Es esto la poesía