César Vallejo (1892-1938) sepultó con su obra poética -aunque también con sus persuasivas crónicas y ensayos- todos los indigenismos. Con esto sacó adelante un concepto y una práctica que podríamos motejar como Indigenismo-3, pero que preferimos -junto con Édouard Glissant- denominar “opacidad”. Bajo este lente, en nuestro estudio, identificamos poetas -y poéticas- “extranjeros”, transfronterizos, o de nacionalidad asimismo “opaca” (“peruana”); por ejemplo, la relación entre el “portunhol selvagem” (Brasil-Paraguay) y el Grupo Kloaka (Perú, años 80). Además, se debaten aportes recientes de importantes vallejólogos: Stephen Hart, Michael Clayton, Amálio Pinheiro, Julio Ortega, entre otros. Debate que resumiríamos en uno: enfoques tradicionales -humanistas o positivistas- versus posthumanistas o multinaturalistas, una vez englobado en esta última perspectiva crítica el concepto de “opacidad” aquí manejado. Nos dirigimos al investigador de las humanidades o de las ciencias sociales, tanto como al lector interesado en ponerse al día en torno a estas complejidades -literarias, sociales, culturales- hoy por hoy tan vigentes en nuestro metamorfoseado presente. P.G.
02/11/23: Habitáculos de la marea
01/11/23: PENSAR LA FORMA (PUCP)
29/10/23: [No la primera]
No la primera
Detenerse en la segunda
No continuar
Hasta que el fondo ceda
Y aflore el tesoro de la tercera
La cuarta es el puro silencio
Aunque también constituya una opción
La cuarta
Que no vemos, pero nos observa
Que no podemos seguir, pero nos divisa
Aunque ensordezca ante cualquier cuita
Y la hunda el más mínimo sentimiento
Y, sobre todo, no tolere nuestra astucia
Un muerto es demasiado para ella
No asiste a los funerales
Menos a los suicidios
La cuestión sería llegar hasta el final
Tal como a través de su enfisema
Nos confiara nuestro querido hermano Germán
Sujetar el cabo hasta que aflore el brioso pescado
Cimbreante atónito amenazante
Esta es la tercera y la que se ve
Y accede a compartir nuestros desasosiegos
La impertinencia de habernos puesto
A escribir poesía
Media lágrima medio ojo media sombra nuestra
Es aquello que escribe el poema
Un labio sobre otro
27/10/23: Gaspare, Coppola y De Niro
El poeta peruano, Gaspare Alagna (1956), autor de Memorias de un dios herido (Lima: Colmillo Blanco, 1989)
A lo Egúren, la voz de Alagna suena cautamente asordinada; y a lo Hernández Camarero o a lo Oquendo de Amat la arquitectura de su retórica se hilvana parcial, fragmentaria, aparentemente ingenua. Lo que sucede, veremos, es que en esta poesía se adopta la reflexión – generalizada en la poesía occidental desde Baudelaire – a partir del cuerpo y no exclusivamente de la mente; más aún, con Mircea Elíade diríamos, desde el ámbito de lo sagrado y no solo de lo profano. En las mejores páginas de este esbelto poemario, las manos – y por extensión sus metonimias –son índice, icono y símbolo semánticos cada uno de ellos estableciendo relaciones precisas con el lector; es decir, desde muy variados flancos. En síntesis, aquéllas van estableciendo con éste (el lector) una suerte de dialéctica en sentido lato; pero, tal en Sócrates o en Borges, como aventura intelectual que es –a un tiempo– mirada, diálogo y caricia. Mayéutica que empieza con el cuerpo y retorna a él; genuino intercambio, encuentro no secularizado: “En el itinerario de un reino / olvidado en el fondo de tu frente / en tu memoria de cactus que araño ahora / al silencio de las piedras / al flujo de las olas / a mis ojos de arena hundidos en la espuma” (“Senda”: p.13). P.G.
26/10/23: CARTA DE POESÍA MEXICANA CONTEMPORÁNEA/ JOSÉ HOMERO
“Ciertamente no hay una poética dominante, ni siquiera una escuela, pero en ese paisaje polifónico —más que caos—, es posible apreciar timbres, además de variedad vocal y sobre todo una constante: el abandono de la fe heredada del romanticismo en la poesía como núcleo metafísico” J.H.
file:///C:/Users/WINDOWS/OneDrive/Desktop/INFRARREALISMO/CARTA_DE_POESIA_MEXICANA_CONTEMPORANEA.pdf
25/10/23: CORRUPTOS UNIDOS
Lo mismo sucede, exactamente, no sólo con la política explícita; sino también con la poesía o, mejor dicho, con la administración del canon por parte de la institución literaria en boga: universidades, prensa, críticos, organizadores de ferias del libro, etcétera. Canon o lo que la gente debe leer y colaborar en su difusión. Institución no ignorante ni desinformada; sino absolutamente cínica. Tal como el proceder de los de la caricatura, y al modo como lo encarna una excelente película muy reciente (Killers of the Flower Moon, de Martin Scorsese), sobre manejo de mentalidades -y cuerpos- en contextos invadidos y colonizados. Manejo y aceptación o, por lo menos, resignación por parte de colonizados y manipulados. Yo no soy un colonizado, menos un pasivo; mi actitud, cuando en apariencia sólo hablo de mí, es ante todo política y en el campo cultural al que me conecto, la literatura y la poesía. Entonces, ¿lo que hago es denunciar? Nuestra institución literaria peruana y “peruanista” (internacional) merece ante todo la mofa; no llega todavía a ameritar el debate y, por lo tanto, a merecer la denuncia.
24/10/23: Revista Circuladô | Trilce 100 Anos
22/10/23: [Escribo desde Lagunas-Mocupe]
A Charito y su mamá
Escribo desde Lagunas-Mocupe
De lleno ya tomado por la arena
Con la cual coincidimos por carácter
Y acaso también por constancia y paciencia
Soy de lleno el mejor poeta y lector
De toda mi generación
Pero como ocurre con la arena
Esto no se sabe anda lejos
Es ventisca desde la playa todavía
No endiosar a ningún contemporáneo
Acaso sea la máxima siempre a seguir
De otra manera estimaríamos que A. Cisneros
Sólo se ha escondido por un momento
Que Varela fue Lispector
Que Hora zero tuvo algo que decir
Más allá de la ducha
O que la poesía es ahora consejos y advertencias
Tal como monitorea la institución literaria vigente
Todo un bien aderezado botiquín de autoayuda
19/10/23: Edgar Artaud Jarry: Fundador del Infrarrealismo
Resumen:
Postulamos al poeta y científico mexicano, Edgar Artaud Jarry, como un más plausible –
aunque no menos opaco– fundador del Infrarrealismo; sin los pliegues ni las frustraciones
de Roberto Bolaño o, respectivamente, de José Vicente Anaya.
Palabras clave: Infrarrealismo; Hora Zero; Edgar Artaud Jarry.
-En realidad no fui fundador, pero sí que estuve en el taller de la torre de la Rectoría que impartía Juan Bañuelos, donde conocí a Bolaño y Mario Santiago, los cuales contradijeron a Bañuelos cuando me tocó leer mis poemas y éste los clasificó como “clásicos”, repitiendo algunos versos, repitiendo “va que vuela”. Y entonces Mario y Bolaño le dijeron que mis poemas tenían más bien un enfoque “estridentista”, así comenzaron mis andanzas gracias a José Peguero, a reuniones en diversos sitios y lecturas, aunque el día de las fotografías famosas en Casa del Lago yo no estuve. No tenía dinero ni cómo recibir la invitación, me iba caminando a la Facultad de Ingeniería de la UNAM, desde la Villa Olímpica donde me alojaba un pariente cercano de mi padre. Ya era parte del infrarrealismo, no había ningún club de Toby, se aceptaban conocidos que se juntaban entrando y saliendo, yo me mantuve siempre en el grupo, así que cuento con muchas anécdotas y vivencias, malas y buenas. (Edgar Artaud Jarrry)[1]
[1] WassApp muy reciente.











