Archivo de la categoría: Docencia

Docencia universitaria

Trilce I/ Colegio Julio Armas Loyola

Colegio nacional JULIO ARMAS LOYOLA. Centro Poblado: LAGUNAS.

Actividad de verano, “Lectura y escritura creativas”, por Rosario Bartolini y Pedro Granados.  Niños mayormente de primaria, desde los seis años de edad.  Se les leyó Trilce I un par de veces y se les dijo que, luego de nuestra lectura en voz alta,  ellos podían escribir o dibujar lo que quisieran.

»Leer más

Recoda a los “poetas vivos y más vivos del Perú”

CODA A LOS “POETAS VIVOS Y MÁS VIVOS DEL PERÚ”

“Los poetas vivos y más vivos del Perú (y también de otras latitudes)” es un texto de 2002, aunque creemos que luego de 22 años sigue fresco.  En general, me reafirmo en lo que escribí allí.  Aunque añadiría que también ya nos hastió, en tanto poeta, Carlos López Degregori (el cual se “salvó” en el texto primigenio), por unidimensional; es decir, por no dar pistas de que saldrá algún día de su monólogo y conflictos de clase media, de su narcisismo ya rancio.  Y, también, agregar que el mayor aporte de Mario Montalbetti a la literatura y al pensamiento del Perú, fue el haber llevado –hacia los años ochenta– los recitales de poesía al Olivar de San Isidro.  Asimismo, que la noria del “Taller de poesía de San Marcos” –que dirigen o dirigieron Marco Martos con Hildebrando Pérez por  de medio siglo– fue lo segundo peor que le ocurrió a la poesía peruana; por contentarse y fomentar –bueno, acaso los tiempos no daban para otra cosa– el hipo-realismo bajo todas sus formas, prototipos de poetas incluido.  Decimos lo segundo peor, porque lo primero siguen siendo los versos y la crítica de poesía o de arte que publica los domingos El Comercio; verbigracia, los párrafos de porfiado de J.C. Yrigoyen o los del invariablemente precoz S. Pimentel.  Lo que urge más en nuestra poesía trasatlantica es talento y, en seguida, valentía, imaginación y buen humor para sacarla adelante.  La poesía es un don, pero al mismo tiempo “la poesía es dignidad” (acaso el mejor verso de Luis Hernández Camarero).  Por lo tanto, debemos hacernos dignos de ese don que constituye, a la larga, una sensibilidad que se sabe colectiva –como en su radical individualidad lo supo siempre César Vallejo– aunque ni políticos ni asesores de alguna cosa ni comerciantes ni profesores, de puro metidos, van a reconocer que no son poetas ni, en siguiente instancia, les interesa la poesía.  Por más teoría de la recepción que en su descargo los socorra o post-autonomía de la literatura que intente ampararlos.

En fin, de cara al futuro, me provoca establecer un balance de la crítica de la poesía peruana, digamos, post-Mariátegui.  Y, también, de la crítica a nivel de la región o, más bien, trasatlántica.  La poesía es su crítica.  Labor por ahora complicada porque –para variar– carezco de auspicios; aunque de algún modo mi manuscrito engavetado, “Autismo comprometido: sobre poesía hispana reciente”,  brinde ya algunas luces*.   Lo que sí podría anticipar es que en este periodo hemos tenido la suerte de tener pésimos lectores de poesía; gracias a los cuales reaccionamos e intentamos cultivar  nuestro propio huerto.  Entre tozudos reaccionarios/ as –que no aceptan, por ejemplo, sea el “cholito” César Vallejo, y no el clan Cisneros, el que realmente da la cara al mundo por el Perú — o lectores “comprometidos”  que, de modo invariable,  confunden la poesía con un discurso de ocasión.  Fascistoides que trajinan a Eguren, hombre humilde y poeta probo, lo jalonan de aquí para allá para oponerlo a Vallejo; como si  éste no hubiera sido el primero en reconocer la grandeza de Eguren, y dejara a nosotros percatarnos que este último está ya íntegro como una parte de Vallejo (sobre todo en Los heraldos negros).  Sin embargo, es justo advertirlo, en el periodo también hemos contado con algunos excelentes lectores  de poesía: Beatriz Sarlo, Julio Ortega, Amálio Pinheiro, Boris Schnaiderman o Teresa Guillén, a modo de muestra.

* Una versión menos ambiciosa de este último ya fue publicada, Autismo comprometido: Sobre poesía peruana reciente (Lima: Paracaídas Editores, 2013); libro que mereció –al margen del incisivo denuesto por los gazapos ortográficos allí colados–  una muy generosa lectura por parte del finado y recordado  Marco Aurelio Denegri.

 

RECODA A LOS “POETAS VIVOS Y MÁS VIVOS DEL PERÚ”

Publicamos esta “recoda” porque al asistir, hace muy poco, a una conferencia sobre canon literario lambayecano comprobamos que “la vida sigue igual”, asimismo, en el canon literario nacional.  La nuestra fue en poesía, años 70 al presente, una época de grupos tenaces disputándose la carcasa del poder simbólico local; los más militantes entre estos, Hora Zero y Kloaka, con el apoyo incondicional de la institución literaria en su totalidad (prensa, academia, bares limeños y algunos de provincia).  Grupos del oficialismo, pues, despertando adhesiones y simpatías entre propios y ajenos (el snob académico internacional).  Las individualidades de la “derecha” no fueron tan empoderadas –como ahora se dice– o proactivas, la realidad económico-social del país no estaba para nada a su favor; aunque, ahora mismo, comprobamos que se premia y reconoce a los más calladitos entre este colectivo, por lo general, limeño y evadido de la realidad.  Ciertamente, las cosas se inclinan cada vez más, no sólo en poesía,  hacia el margen derecho del río; es decir, hacia una cuita de los sentimientos o frustraciones, en paralelo, a una demostración de lo tan agudos o inteligentes que podemos ser.  Que la poesía, al contrario de lo dicho por Celan, no se expone, sino se impone.  Y que “La sabiduría sin valentía es estéril”, como ya lo decía nuestro contemporáneo, Baltasar Gracián. P.G.

»Leer más

Canon literario lambayecano, por Diego Portilla Miranda

Ayer asistimos  a esta conferencia en el Colegio San José de Chiclayo.  El público lo constituían, en su mayoría, estudiantes de la carrera de educación (área de literatura) de alguna universidad local.  Contra lo acostumbrado, el conferencista –maestro por la PUCP– no repasó nombres y semblanzas de obras; sino que se centró en lo concerniente a la creación del canon literario lambayecano.  Asunto, este último, de por sí pertinente y necesario en vistas a enriquecer nuestra conciencia de la complejidad del fenómeno de la literatura, en concreto en lo que toca a su recepción.  En definitiva, ¿por qué figura este autor y no otro en la lista?  ¿quién decide estudiarlo o incluirlo en aquella antología creativa o crítica?  ¿por qué es tan renuente, a pesar del peso de nueva información, el cambio o renovación de dichos nombres?  Y otras preguntas más aplicadas al contexto de la historia literaria de aquel departamento norteño.  La conclusión a la que se arribó, o al menos al que este asistente arribó, es que podríamos ampliar perfectamente el concepto de corrupción, mafia incluso , asimismo a este campo.  No existe una auténtica crítica literaria porque, dado el ínfimo y precario campo laboral,  donde todos se conocen, ejercerla sería hacerse de enemigos y afectar –en primerísimo lugar– el bolsillo propio.  No resulta lo de menos que, en cuanto a la consagración y circulación de los libros (poemarios, novelas, textos críticos) en nuestro país, ocurra algo muy semejante que en nuestra política nacional: Dina Boluarte en auxilio de su hermano Nicanor, Pedro Castillo y toda su familia metida en palacio de gobierno, los tapers de los Fujimori únicamente para sus súbditos (amas de casa, jueces, empresarios, profesores universitarios).  Si se trata de dirigir un haz de luz sobre un punto del escenario, no resultará improductivo iluminar también el resto del teatro.

»Leer más

Voltas e Revoltas do Barroco

Mesa 1 – Arquipélagos Barrocos Vozes do barroco: o arquipélago em movimento Amálio Pinheiro (Brasil) Falar com os animais Francisco Soares (Portugal) Jogos sonoros no barroco brasileiro Francisco Topa (Portugal) As poéticas do múltiplo no provérbio e seus operadores transversais Abreu Paxe (Angola) Mediação: Luís Fernando Pereira Mesa 2 – Voltas e Revoltas do Barroco Vallejo e barroco: Vallojo Pedro Granados (Perú) Escribir es salir del idioma. A propósito de Vallejo y lo que pasó en el Hotel Negresco Carlos Eduardo Quenaya (Perú) Cervantes y los dos barrocos. A vueltas con las tesis del hispanobrasileño Américo Castro José Antonio González Alcantud (Espanha) Revueltas de lo barroco en Haroldo de Campos Max Hidalgo Nácher (Espanha) Mediação: Amálio Pinheiro

»Leer más

Poesía dominicana del s.XXI: “leer poesía era (es) leer a Vallejo (PDF)

Fue a partir de una antología sobre poesía dominicana[1], estando de vacaciones en la media isla[2], la que motivó y activó escribiera un ensayo, “República Dominicana: La poesía que vendrá” (Granados 2001); el cual, pocos años después, se transformó en un libro, Breve teatro para leer: Poesía dominicana reciente (2014a), editado por el recientemente desaparecido  René Rodríguez Soriano.  Y hoy, luego de dos décadas, es otra antología sobre la materia la que desencadena me avoque al presente artículo.  En lo fundamental, se trata de reseñar Indómita & brava. Poesía dominicana 1960-2010, cuyo autor es el poeta e investigador, también dominicano, Manuel García Cartagena.

[1] “Juego de imágenes. La nueva poesía dominicana” (Santo Domingo: Isla Negra/ Hojarasca, 2001) en su 2ª edición, antología preparada por Frank Martínez (Santo Domingo, 1965) y Néstor E. Rodríguez (La Romana, 1971).

[2] “De tanto quejarnos del aislamiento de la literatura dominicana en el Universo no se sabe quién envió a Juvenal Agüero, el poeta peruano, a Santo Domingo, por allá por los años 90 del siglo pasado. Agüero se encandiló con la poesía y con la gente dominicana y se jodió para siempre, que está preso por la guardiemón” (Clodomiro Moquete).

Poesía dominicana del s.XXI: “leer poesía era (es) leer a Vallejo (PDF)

»Leer más

Por un 2024 en simetría

Foto por Rosario Bartolini, 2023

Por un año nuevo sin políticos ni policías ni poetas

Ni, por lo regular, alguna mezcla entre ellos

Vendiéndonos o lo hiporreal, por un lado,

O al mero humo de sus sesos, por el otro

El pensamiento anda virgen allá afuera

Y no es exclusivo de los humanos

Tal como consta en esta reveladora fotografía

Una mirada terca del horizonte hacia nosotros

»Leer más

TALLER DE RITMO 2024

Para encontrar tu propio ritmo o ecualizarlo

Taller de poesía online por cuencas culturales: “para encontrar tu propio ritmo o ecualizarlo”

Caribe, para sacudirse de Pablo Neruda.

Cono Sur, para que en nuestro contrato con el lector no intentemos, desde un principio, pasar por tipos listos.

Brasil, para que nuestro performance (cuerpo y ritmo) aterrice mejor en nosotros mismos y luego, y con más potencia, en el papel u otro soporte a través de la escritura. No estamos conminados a la poesía de autoayuda (“acción poética”); ni, tampoco, limitados a trascribir en portunhol selvagem.

Andina, para que leamos en su real expresión, de modo gozoso, a nuestro César Vallejo.

Amazonía, para sacudirse del espejismo y culto de los medios –exotismo, multiplicidad de lenguas u otros mimetismos– y optemos siempre, más bien, por las sensibilidades (ejemplo, la poesía “en español” de Luis Urteaga Cabrera); estas últimas nuestra lengua común.

Latina (USA), para que dialoguemos más fluidamente con las demás cuencas culturales; y descubramos que nos ligan más afinidades que nos separan aparentes diferencias.

España, para que una vez superadas la “poesía de la experiencia” y la “poesía de la conciencia” y la “poesía de la chocolatina”, etc., tomemos distancia y percibamos todo aquello como desde otra margen, la de América Latina.

México, porque no todo fue Octavio Paz ni todo debe ser ahora infrarrealismo o un Bukowski, no de sótano, sino de vitrina.

En español, portunhol selvagem, spanglish y un largo etcétera.

Contacto: vasinfin@gmail.com

»Leer más

VASINFIN NO BRASIL – VASINFIN NO PERU

A associação do VASINFIN (Vallejo Sin Fronteras Instituto, Lima-Peru) e do AME (Arquipélagos Mestiços, do Grupo de Pesquisa “Barroco, Oralidades e Mestiçagem”, COS-PUCSP-Brasil) deriva inevitavelmente das inúmeras e combinadas práticas poéticas e culturais, com enorme acervo de arquivos de conhecimento acumulado em torno de César Vallejo, nestes 100 anos da comemoração de Trilce, pelo grande vallejólogo peruano Pedro Granados (presidente do VASINFIN) e por Amálio Pinheiro (que agora preside o mesmo Instituto no Brasil).

Granados, além das vastas e penetrantes pesquisas e análises sobre o pluriverso Vallejo, — que incluem, por exemplo, Vallejo e Arguedas, Vallejo e os barrocos possíveis, Vallejo e o mito de Inkarrí, Vallejo e política etc., passando pelo profícuo aproveitamento do multiculturalismo canibalizante de Viveiros de Castro –, converge, poeta dos bons que também é, com nosso entendimento de que as noções mitológico-antropológicas e histórico-sociais, semântica e tematicamente disseminadas nos poemas, não podem vir desacompanhadas, para funcionar como performance de escuta e leitura, das cruciais análises micro-rítmicas e vocal-escriturais. Donde seus textos que exaltam a presença dos vários gestos, no “archipiélago Vallejo”, da marinera ou refalosa, do huaino e mesmo de certos componentes flamenco-arabizantes, que obrigam, nessa interlíngua trílcica, a uma reviravolta neuro-sensitiva participante da alegria na tristeza e do coletivo na solidão. Ou como resume Pedro Granados: “Letra, ritmo e coreografia a un tiempo” (“Trilce: húmeros para bailar”, p.15).

César Vallejo é um ponto nodal de entroncamento para se poder entender a posição das Américas Latinas de todas as falas do mundo e vice-versa, a partir de um descarrilamento plurilíngue desde as Colônias ameríndio-afro-imigrantes, que transtorna as noções progressivas do antigo, vanguardista, moderno e contemporâneo, tendo-se em vista a máxima invasão, em formas espiraladas e retorcidas, em arquipélago, calidoscópio e palimpsesto, do imprevisível dentro previsível, que é preciso escarafunchar e esgaravatar para repor o cortejo desregrado, fora de fluxo, em andamento.

As dificuldades para se ler Vallejo são as dificuldades para se entender, a partir de uma racionalidade ocidentalizante, a complexidade limite do continente de uma intralíngua mestiça mutuamente conivente com o externo (Tinianov, Lótman), essa dança de linguagens, corpos, paisagens e culturas levadas às últimas consequências. Disse Vallejo: “Escribí un verso en que hablaba de un adjetivo en el cual crecía hierba. Unos años más tarde, em París, vi en una piedra del cementerio Montparnasse un adjetivo con hierba. Profecía de la poesía.” (Del carnet de 1932).

Nessa trilha, o autor de Trilce nos remonta a fundações mito-poéticas que nos ajudam, por exemplo, em leituras polifônico-solares como as de um Sousândrade; e nos remete a ritmos e entonações de alegria silábico-acentuais que servem de marcas d’água para o entendimento dos Manifestos oswaldianos, tão necessário nestes concomitantes 100 anos da chamada Semana de Arte Moderna. E, assim por diante, todas as linguagens, séries, gêneros e formatos inclusos e rigorosamente mesclados.

Daí decorre a importância poético-política da tradução, que põe à mostra as formas e tonalidades, ao modo de uma de cuíca afro-tupi de fundo, das muitas realidades embutidas e dos repertórios abandonados nos escombros e entulhos das histórias oficiais, que a domesticidade linear das normas burocratizantes não consegue alcançar. Pensemos num Mar Paraguayo, de Wilson Gomes, com seu portunhol marchetado de guarani e jaguaretês, isso que Néstor Perlonguer chamou de “medula palpitante da língua”.

Daí todas as traduções transculturais. Comecemos com Trilce I, verdadeiro Manifesto abre-alas.

Amálio Pinheiro

https://arquipelagosmesticos.com.br/vasinfin-pagina/

»Leer más

Por una poesía no afiliada

“[Poesía] De Dios que cayó en orgasmo. Haciéndolo para cisma”, Martín Adán

Ni política

Ni estética

Ni ética

Ni finalmente humana

Esto evitaría manipulasen a los jóvenes

No necesariamente por incautos

A considerar o equiparar a la poesía

Con la conveniencia o debilidad

Carencia u oportunismo

De sus maestros o docentes o facilitadores

O como pueda denominarse a aquellos

Que exponen sobre una pizarra

Con automática sonrisa

Lo que ella fuese o halla sido

La esterilidad de los profesores

Ante la poesía es  absoluta

Como la de todo individuo

Sociologizado por aquí

Respecto a la política

Frente al resto de siglo que nos queda

 

© Pedro Granados, 2023

»Leer más

Acompañar: Taller de lectura y escritura

En la foto: Clarice Lispector

Se trata de acompañar a las personas en sus necesidades y descubrimientos expresivos: “Se escribe el poema para encontrar el alma y no a la inversa”, tal como se animara a subrayar, respecto de nuestro poemario (Soledad impura, 2010), el dominicano René Rodriguez Soriano [1] .  Acompañar a las personas en sus ensayos, iniciales o no, de una vocación de estilo tanto en el leer como en el escribir; los cuales van necesariamente de la mano: “Dime cómo escribes y te diré lo que escribes” (César Vallejo, El arte y la revolución).  En fin, este es un taller abierto a todos; en todos los niveles de su experiencia de la literatura y, simultáneamente, de su discernimiento de la misma.  Este no constituye, de modo convencional, un taller de poesía; el membrete de lo que hagamos (poesía, narrativa o ensayo) vendrá después.  Más, y acaso esto sea lo más importante, este taller es una oportunidad de auto-conocimiento. Es decir, cada uno lee y escribe desde un lugar (cultural, social, retórico, etc.) y ser cada vez más conscientes de esto ayudará a volvernos no sólo más lúcidos de nosotros mismos, sino también  a desarrollar y potenciar de un modo más personal nuestra propia lecto- escritura.

Este Taller online e individual se inicia la primera semana de enero de 2024.

Informes: vasinfin@gmail.com

[1] “Se escribe el poema para encontrar el alma y no a la inversa”. He leido Soledad impura para encontrarme sin buscarme, hermano. Entré en él como se entra a la vida, al agua y al amor (desnudo). Seguiré nadando en él, adentro para, a través de él y no con él, mirar el día en toda su cromática. Es la soledad impura más pura que conozco, quizás porque no pretende serlo química, matemáticamente ni todo lo contrario. Es el poema nadando a pecho suelto en lo profundo del charco, a todo pulmón. Gracias por tan valioso obsequio, que desde ya es uno de mis compañeros de viaje. René Rodriguez Soriano (República Dominicana).

http://librosdepedrogranados.blogspot.com/2010/02/soledad-impura.html

»Leer más