by Barnett Newman
La mañana catabólica
Ideal para drenar la poesía argentina
Ilusión que cae justo cuando el telón se derrumba
Borges no fue argentino, sino peruano
Tampoco Lugones, prueba de ello fue su suicidio
Anagnórisis radical sin atenuantes
Al Instagram de la poesía hispánica lo monitorean
Argentinos y españoles, a mujeres y hombres me refiero
No a los animales que aún no han decidido nacionalidad
Ni preferencias literarias
Aunque a mi perro Mique le chiflan las nanas
Derriten sus sesos hasta trocarlo en un conejo
O más o menos en alguno como nosotros
No será por la letra (digo yo) sino por la tonada
Que viene desde la tripa (João Cabral de Melo dixit)
Fracaso esterilidad caras de palo (con o sin el concurso de Eliot)
Han ganado y van ganando terreno por doquier
Peruano-argentino paulista-porteño dominico-español
Mexicanos atentos a sus atrapa nieblas
Dejan a diario sus babas por aquí
Arañan la tela de mi incrédula Laptop
No jodan desahuévense
Su poesía es una narrativa más que se morfaron
La tarde anabólica
© Pedro Granados, 2025