Un tanto al modo de Carlos Oquendo de Amat. En primer lugar, por experimentar a través de imágenes vanguardistas con su propio naif; es decir, algo entre la inocencia y el juego para intentar librarse, de manera ininterrumpida, de la tragedia o del horror. Poeta portugués extemporáneo de la Semana de Arte brasileña de 1922. Un Sousândrade con música y acompañamiento de concierto de rock y, en la plástica, de habitación empapelada con brillantes aristas de rascacielos; pero que no logran mitigar ni, menos, conjurar el desgaste en ninguna de nuestras vidas cotidianas (tenemos varias). Luís Serguilha y su set (sed) de TV. Inexplicable, acaso por muy explicable, la atención que le brindan ahora mismo a su posía en el Brasil. P.G.
v. 13 n. 2 (2023): LUÍS SERGUILHA: CORPOS DELIRANTES – ENTRE RITMOS E RASTROS À ESPREITA