Prepucio carmesí (2000). Diecisiete años de la primera novela del siglo XXI –escrita por un migrante peruano– trasandina, archipiélica o multinaturalista. Sin melancolías ni con el espíritu –típico o, peor todavía, profesional– de un sujeto andino damnificado. Post-exótica y post-indigenista (Indigenismos 1 y 2); la cual, apuesta más bien por la complejidad desde el origen, por la opacidad.