Archivo por meses: junio 2011

El arte de argumentar: una visión del ethos desde América Latina

20110530-Pedro Reygadas.jpg

¿Desde dónde escribimos sobre la verdad, la validez y lo verosímil en argumentación?, se pregunta Pedro Raygadas en un reciente artículo inmerso, a su vez, en un libro de los últimos meses [Introducción a la teoría de la argumentación. Leal Carretero, Ramírez Gonzalez, Favila Vega (coords.) (Guadalajara, México: Universitaria, 2010) 228-240]

Y él mismo responde: Desde una perspectiva de la liberación y de la transmodernidad anticolonial. De allí, precisa: «me interese más la fuente amerindia que la consabida y necesaria historia de la argumentación en la Colonia –que repite o innova a partir de patrones europeos».

Idea que supone, de entrada, validar la argumentación oral, emocional, estético-ética; y no la mera lógica.

La verdad es metafórica, no una adecuación aristotélica a lo real (León Portilla). Ni se halla enfrascada o limitada a la confrontación (tradición inglesa, francesa o alemana).

En suma, el argumentador amerindio presentaría un ethos (carácter del orador) complejo, capaz de combinar los modos: lógico, emotivo y kisceral (las creencias); es decir, también –y de modo simultáneo– lo ético, lo sacro y lo cultural… y, no menos, lo comunitario:

“La perspectiva de volverse nosotros puede complementarse con la teoría actual de la comunicación, que en lugar del yo pienso cartesiano y del intercambio mecánico de Shannon y Weaver, de Jakobson, supone un yo dialógico, que se involucra o no, que se acerca y se distancia, incurre en percances y hace reparaciones del proceso comunicativo en co-construcción” (238).

Por último, este estudioso mexicano lúcidamente agrega:

“La retórica debe abrirse al reconocimiento de otros géneros y partir de conceptos más amplios […] a la tradición oral y estallar en la multivariada explosión de las culturas más allá de Europa y de las lenguas llamadas indoeuropeas para comprender la persuación, la convicción y la verdad en el diálogo intercultural”

»Leer más

La luz es una máscara

20110601-Anitta.jpg

Para Lastenia Agüero de Granados

La luz es una máscara, la luz es un tabique

La luz es una sombra

Por un pasadizo corto voy donde mi madre

Me lleva un ángel

A modo de enfermera

Hace exactamente treinta años

Que no miro la cara de mi madre

Tal como está ahora o tal como estuvo

Siempre o tal como fue de manera usual

Si es así, la he visto varias veces

Innumerable número de veces

Y en las más distintas circunstancias

Pero qué sensación de claridad

Es la ambigüedad

El lado opaco de la luz

La inminencia

Qué pozo para el cerebro

Qué naufragio para los ojos

Qué agua excesiva para la boca

Toda esta breve caminata hacia mi madre

Es

»Leer más