EL AZAR Y EL IMPUESTO A LAS APUESTAS: ¿Cómo se regula en materia tributaria?
MARIO ALVA MATTEUCCI
- INTRODUCCIÓN
Una apuesta constituye un tipo de operación en el cual frente a un limitado o amplio espectro de posibilidades mostradas como oferta, el apostador opta por una de ellas a cambio de la entrega de una cantidad de dinero. Luego de un determinado proceso en el cual participa el alea, el azar o el albur, una de las opciones es la elegida.
Solo en el caso que el apostador haya elegido la opción que resulte ganadora, se hará acreedor a una cantidad de dinero superior al valor de su apuesta. Existiendo de este modo una ganancia tanto para el apostador como para la entidad donde se realizan las apuestas.
Desde la antigüedad han existido apuestas, la más remota mención de ello se encuentra en la obra La Eneida del poeta romano Virgilio, cuando indica que se realizan apuestas con conchas mezcladas en un casco. En este sentido, “la apuesta se constituye como una de las formas de enriquecimiento e interacción de mayor antigüedad en la civilización”[1].
El motivo del presente informe es analizar cómo se encuentra regulada a nivel municipal la afectación tributaria a las apuestas en el Perú, identificando el tipo de apuesta afecto y cuál no. Sigue leyendo