Debería estar diciendo algo sobre el plagio, dada la coyuntura por la que está pasando la PUCP. Otros han dicho ya lo que piensan sobre el asunto (ver este post en el GCC por ejemplo) pero yo la verdad no veo nada nuevo que pueda añadir sobre el tema, ya he opinado lo suficiente en este blog (un post que resume mi postura y enlaza a todos los otros en los que dije algo sobre el plagio es este) y creo que queda claro que pienso que el plagio es una lacra académica imperdonable, que debe ser combatida desde la universidad por todos los medios posibles, no solo punitivos sino sobre todo formativos.
Personalmente me ha tocado experimentar varios y diversos casos, desde el de la alumna que presionada por su familia para tener un rendimiento siempre extraordinario cae en el plagio al no poder cumplir con la carga de trabajos y tareas, hasta el ocioso que simplemente está en una maestría con el único fin de obtener un cartón y no tiene competencias para el trabajo académico, ni le interesa tenerlas. En el medio, situaciones de toda índole, alumnos que no entienden bien qué significa citar porque son muy jóvenes y están mal acostumbrados, otros cuyo background cultural es muy distinto al de la cultura académica y a los que les cuesta por eso dominar sus prácticas, e incluso el muy anecdótico caso de una estudiante que copió cuatro páginas de un libro mío y me las presentó como propias en un trabajo final, creyendo seguramente que eso me agradaría… El tema no da para más: hay que erradicar el plagio de la vida universitaria y formar la moral de los estudiantes para que dejen de plagiar no por temor al castigo sino porque comprenden la naturaleza moral de la falta y desean ser personas íntegras que valoran la transparencia y la honestidad.
Lo que cabe preguntarse, creo, es qué estamos haciendo los profesores universitarios desde las aulas para corregir las malas prácticas con las que los alumnos vienen del colegio. ¿Que estrategias de búsqueda de información les damos? ¿De qué manera corregimos la forma en que presentan sus ideas en un trabajo escrito, qué alternativas de redacción les ofrecemos? Conozco muchos profesores que no ponen una sola anotación en los trabajos de sus alumnos, con los que estos nunca tienen una idea cabal que les indique si lo que han hecho está bien o mal. Si bien los profesores obviamente no somos responsables de que los alumnos se copien, quizá tampoco estamos haciendo todo lo que se podría, desde las aulas de la universidad, para ayudarlos a que no lo hagan. » Leer más