Como dije en el post anterior, hace un par de días hemos regresado de Chile, a donde fuimos un grupo de profesores y estudiantes de la especialidad de psicología educacional de la PUCP para participar de las IX Jornadas de Psicología Educacional que este año fueron organizadas por la Universidad de Valparaíso.
La verdad es que aunque yo al principio no tenía muchas ganas de viajar, la experiencia fué sumamente provechosa por varias razones. Valparaíso y Viña del mar resultaron siendo ciudades muy hermosas (no tenía ni idea de que lo fueran tanto), muy lindas, con mucho encanto… ha sido muy agradable conocerlas. Tuvimos suerte y el clima estuvo bueno, mucho sol (aunque con viento frío), y eso hizo que el cielo estuviera despejado y el mar muy, muy azul. Muy lindo todo, daba ganas de levantarse temprano en la mañana para aprovechar el día y caminar por ambas ciudades un poco. Fué toda una experiencia subir al cerro por esos ascensores de seguramente más de cien años… Lo único malo fue que en general Chile es demasiado caro para nosotros.
Esta es la primera vez que hacemos un viaje académico con estudiantes (13 en total), y creo que esto ha sido particularmente signiticativo para todos. Además de asistir a las ponencias y comentarlas luego juntos, también pudimos reunirnos para evaluar varias cosas relacionadas a la psicología educacional en Chile, en el Perú, y particularmente en la PUCP, además de hacer algunos planes y proyectos para el futuro cercano. Esto ha fortalecido la identidad del grupo como psicólogos educacionales, me parece, y ha redundado en la motivación de todos.
Muchos de los estudiantes participaban por primera vez de un coloquio internacional, y la experiencia les ha enseñado mucho. Como profesora, veo que los principales aprendizajes han sido estos:
1) Haber tenido que preparar las ponencias que llevarían a Chile. Separar lo principal de lo accesorio, ajustar el material al tiempo disponible, simplificar las cosas para un público no necesariamente familiarizado con el Perú, etc. han sido aprendizajes valiosos.