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Miserando atque Eligendo

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Testamento del Papa Francisco

En nombre de la Santísima Trinidad. Amén.
Al presentir que se acerca el ocaso de mi vida terrena, y con la firme esperanza de la vida eterna, deseo expresar mis últimas voluntades únicamente respecto al lugar de mi sepultura.
A lo largo de mi vida y durante mi ministerio como sacerdote y obispo, siempre me he encomendado a la Madre de Nuestro Señor, la Santísima Virgen María. Por ello, pido que mis restos mortales descansen, en espera del día de la Resurrección, en la Basílica Papal de Santa María la Mayor.
Durante la década del 60, los Bergoglio en su casa de Flores. De pie: Alberto Horacio, Jorge Mario, Oscar Adrián y Marta Regina. Sentados: María Elena, Regina María Sivori y Mario José Francisco.Deseo que mi último viaje terrenal culmine precisamente en este antiguo santuario mariano, donde siempre me detenía a orar al principio y al final de cada Viaje Apostólico, confiando con confianza mis intenciones a la Inmaculada Madre y agradeciendo su tierno y maternal cuidado. Solicito que mi tumba se prepare en el nicho funerario de la nave lateral, entre la Capilla Paulina (Capilla de la Salus Populi Romani) y la Capilla Sforza de la Basílica, como se muestra en el plano adjunto.
La tumba deberá estar enterrada; será sencilla, sin ornamentación particular, y llevará únicamente la inscripción: Franciscus.
Los gastos de preparación del entierro serán cubiertos con una suma proporcionada por un benefactor, cuya transferencia he dispuesto a la Basílica Papal de Santa María la Mayor. He dado las instrucciones necesarias al respecto al Cardenal Rolandas Makrickas, Comisario Extraordinario de la Basílica Liberiana.
Que el Señor conceda una recompensa digna a todos los que me han amado y siguen rezando por mí. El sufrimiento que ha marcado el final de mi vida lo ofrezco al Señor, por la paz en el mundo y la fraternidad entre los pueblos.
Santa Marta, 29 de junio de 2022
FRANCISCO

Amantes de la Santa Cruz en Vietnam

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Hermanas Ngan Nguyen y Mung Nguyen con niños en la Iglesia Muong Cat. La imagen inferior muestra la construcción de un dormitorio en el distrito de Lac Son, provincia de Hoa Binh, Hanói, Vietnam. (Fotos cortesía de la hermana Mung Nguyen)

Por Ngoc Nguyen- National Catholic Reporter.
La Congregación de las Amantes de la Santa Cruz de Hanói, Vietnam, fue fundada en  1670 por el obispo francés Pierre Lambert de la Motte. La misión de las hermanas es centrarse principalmente en servir a mujeres y jóvenes en la educación, el trabajo social, la atención médica, la moral y la fe. Para llevar a cabo esta misión, las hermanas mantienen su compromiso de promover incansablemente la educación académica, religiosa y moral de niños, jóvenes y mujeres, especialmente en zonas pobres y rurales. Su presencia entre las comunidades étnicas muong de bajos recursos es una prueba del amor y la atención que comparten con esta población.
La parroquia de Muong Cat se encuentra en el distrito de Lac Son, provincia de Hoa Binh, y pertenece a la Arquidiócesis de Hanói. Es una zona reevangelizada de la arquidiócesis. Según el sitio web de la arquidiócesis, la parroquia cuenta con unos 200 feligreses de unas 7500 familias de la zona. Los misioneros llegaron aquí por primera vez en la década de 1790, y la parroquia de Muong Cat se estableció a principios del siglo XX. Posteriormente, la parroquia contó con el apoyo de misioneros y sacerdotes nativos que se ofrecieron como voluntarios para servir a la comunidad.
Según el sitio web de la arquidiócesis, antes de 1945, aproximadamente el 95% de los habitantes de esta comunidad eran católicos. Sin embargo, los misioneros se marcharon después de 1945, y la vida de fe decayó. Esto provocó el cierre de la iglesia y su conversión en un almacén comunitario y salas de reuniones.
En 2005, la iglesia fue demolida para construir una casa de reuniones para la aldea, lo que provocó que la parroquia perdiera propiedades y personal. Poco después, la comunidad católica resurgió, y las actividades de la parroquia resultaron en la asignación de nuevos párrocos a partir de 2018.
Ubicada en una zona rural montañosa, la población aislada enfrenta limitaciones tecnológicas y educativas; por lo tanto, vive en condiciones precarias y sus ingresos dependen de los productos agrícolas que cultiva en campos con deficiencia de nutrientes. Los niños no pueden acceder a una buena educación, y las personas mayores y enfermas tienen dificultades para acceder a los servicios de salud.
Asimismo, debido a su alejamiento de los institutos religiosos de la arquidiócesis, las personas carecen de los recursos espirituales necesarios para llevar una vida plena y ética. Según la Hna. Mung Nguyen, consejera de los Amantes de la Santa Cruz, la pobreza material y espiritual de las personas es un problema, lo que conlleva numerosos problemas, como el matrimonio adolescente. Además, la falta de educación puede derivar en explotación, trata de personas, consumo de drogas y otras actividades ilícitas.
Reconociendo la urgente necesidad de ayudar y reevangelizar a la gente de Muong Cat, el arzobispo de Hanoi, Joseph Vu Van Thien, invitó a las hermanas de los Amantes de la Santa Cruz de Hanoi a cooperar con la archidiócesis para mejorar los recursos de apoyo en 2023. Después de dos años de contribuir a la educación, la fe y la atención médica, las hermanas han sido testigos de las dificultades que enfrentan las personas, especialmente los niños.
Según la hermana Nhu Hoa Do, superiora general de los Amantes de la Santa Cruz de Hanói, es un desafío para los niños ir a la escuela debido al terreno montañoso, ya que deben caminar más de diez kilómetros desde su casa hasta la escuela. Aunque algunos padres llevan a sus hijos a la escuela por la mañana y los recogen por la tarde, muchos están ocupados trabajando en el campo sin tiempo para cuidar, acompañar y educar a sus hijos.
Reconociendo la urgencia de este asunto, las hermanas decidieron construir un dormitorio para estudiantes católicos y no católicos después del horario escolar. La construcción comenzó a principios de marzo de 2025 y se espera que finalice en diciembre. La hermana Nhu Hoa visualiza este dormitorio no solo como un espacio de alojamiento, sino también como un buen entorno de estudio donde las hermanas puedan guiarlos y ayudarlos a convertirse en personas responsables.
Las hermanas acompañarán a los estudiantes y son responsables de animarlos a estudiar educación superior como un camino para escapar de la pobreza, integrarse a la sociedad y reducir la probabilidad de matrimonio precoz o caer en las trampas de los males sociales.
El propósito del dormitorio es educar a las niñas para que maduren y sean productivas en la sociedad y la iglesia. Las hermanas planean recibir a 100 estudiantes de primaria a secundaria para la guardería, priorizando a los estudiantes con menos recursos que, de otro modo, perderían la oportunidad de estudiar. También recibirán a unos 50 estudiantes que residirán allí. Las hermanas esperan construir un dormitorio para niños en el futuro.
Además del dormitorio, las hermanas construirán una clínica para brindar atención médica básica a la población local. La clínica recibirá a quienes no puedan costear el tratamiento durante el día y dispondrá de habitaciones y otros alojamientos para los pacientes que deban permanecer más tiempo. La clínica contará con unas 30 habitaciones y tendrá capacidad para 60 pacientes.
El costo de este proyecto es financiado por donantes de Vietnam y otros lugares que aman a los pobres y desean cooperar con las hermanas para aliviar el sufrimiento humano. La financiación del proyecto es casi suficiente, pero las finanzas a largo plazo necesarias para sostenerlo siguen siendo inciertas. Sin embargo, a través de este proyecto, las hermanas han seguido demostrando su fe y confianza en Dios. Cuando se les preguntó dónde podrían conseguir los fondos para alimentos, medicamentos y herramientas para mantener y operar este proyecto, respondieron como Abraham: «Dios proveerá».
Confiando en el amor y la providencia de Dios, las hermanas creen que Dios las ayudará, las acompañará y enviará personas para apoyarlas. Que Dios bendiga los santos planes de las hermanas para cuidar del pueblo de Dios. Que Dios envíe más benefactores para ayudarlas a cumplir su misión de educar a las personas en situación de pobreza para que alcancen su potencial y ayuden a la iglesia y a la sociedad.

El 14 de abril de 2025 Jordi Bertomeu fue entrevistado por la radio catalana RAC1 sobre su labor como investigador del Papa Francisco en misiones especiales. Al referirse a su labor como investigador de la misión especial en el Perú que concluyó con la disolución del Sodalicio de Vida Cristiana, hizo alusión a actos ilegales que se habrían cometido por medio de la Asociación Civil San Juan Bautista. En concreto, indicó lo siguiente:
Entrevistador: Más allá de ser una secta abusiva, monseñor, ¿cómo han conseguido blanquear mil millones de dólares estas personas?
Jordi Bertomeu: Esa fue otra de las sorpresas que fuimos descubriendo. Y no tiene nada de gracia. Perú es un país con muchas carencias económicas. ¿Cómo lo han hecho? Perú es un país donde el 80% de la economía es sumergida, allá lo llaman “informal”. Hay mucha minería ilegal, mucha droga, mucho dinero negro que se blanquea. ¿Cómo lo hicieron? Vieron el negocio incipiente de los cementerios privados, que el Perú autorizó en el 94. Ya en el 99 tenían dos funcionando y fueron aumentando. Estos cementerios se acogieron al Concordato, es decir, eran como cementerios de la Iglesia, y no pagaban impuestos. Incluso consiguieron, gracias a un presidente corrupto que era amigo suyo -amigo del padre Berthel, factótum económico del Sodalicio-, que esas empresas cementerios fueran “islas fiscales”. Imagínense: una isla fiscal en un país ya de por sí tendencialmente corrupto. Ahí empezaron a blanquear dinero de mucha gente, potentados del país que se valían de ellos, de la Iglesia -que tiene una presunción de respetabilidad- y a la que nadie toca en esos países. Empezaron así. Aunque eran empresas sin ánimo de lucro, sabemos que usaban “offshores” para blanquear dinero mediante empresas pantalla. Primero lo hicieron en Panamá -salieron en los papeles de Panamá- y después, por respeto o miedo, trasladaron las “offshores” a Denver, Colorado. Ese dinero blanqueado volvió a Perú, ya “limpio”, entre comillas, e invirtieron en inmobiliarias, empresas agropecuarias, redes educativas, etc. ¿Cómo lo han hecho? Con la corrupción imperante en el país. Incluso descubrimos que, por ejemplo, la Fiscal General del Estado, Benavides —corrupta ella— estaba vendida a uno de los abogados del Sodalicio, Hauyón. Todo esto te hace pensar que la debilidad institucional de esos países —que también puede ocurrir en el nuestro— lleva a estas formas escandalosas de corrupción.
Ante lo expresado por el Sr. Bertomeu debemos decir lo siguiente:
1º. La Asociación Civil San Juan Bautista (ACSJB) desde su creación tiene como fines realizar labores asistenciales, religiosas y de auxilio mutuo en el área de la asistencia previsional y de sepultura. Cuenta con cementerios ubicados en distintos lugares del Perú, dónde brinda atenciones funerarias, acompañando a las familias, con la esperanza propias de la fe en la resurrección. La pastoral de estos cementerios fue encomendada al Sodalicio de Vida Cristiana. Sin embargo, la ACSJB y el Sodalicio siempre han sido dos instituciones jurídica y administrativamente independientes.
2º En relación con la difamatoria afirmación del Sr. Bertomeu de que la ACSJB usó el concordato para no pagar impuestos, debemos señalar que la ACSJB, al ser una asociación sin fines de lucro, nunca estuvo sujeta al impuesto a la renta y, por otro lado, los servicios funerarios que realiza no están sujetos al régimen del IGV. La figura jurídica de una Misión se equipara tributariamente en el Perú a una asociación sin fines de lucro, por lo que no existe diferencia alguna de tratamiento entre una u otra figura. En ese sentido, la afirmación de que se acogieron al concordato para no pagar impuestos no solamente es falsa, sino difamatoria.
3º En cuanto a que gracias a un presidente corrupto que era amigo del padre Baertl se consiguió que los cementerios de la ACSJB fueran “islas fiscales”, debemos expresar nuestro absoluto rechazo. No sólo por difamar al ex Presidente Alan García Pérez, al que califica directamente de corrupto, sino porque está muerto y no puede defenderse, además de nunca haber sido condenado por actos de corrupción. Pero lo más grave es que un representante de la Iglesia Católica sostenga sin ninguna prueba que la ACSJB, a través del Padre Baertl (quien nunca ocupó cargo en la ACSJB), ha sobornado al ex Presidente Alan García para conseguir que los cementerios sean islas tributarias. Lo dicho por el Sr. Bertomeu es una afirmación muy grave que no se puede hacer sin ningún tipo de prueba y por lo que tendrá que asumir su responsabilidad.
4º También es falsa la afirmación del Sr. Bertomeu de que la ACSJB, una empresa sin ánimo de lucro (sic), usaba “offshores” para blanquear dinero mediante empresas pantalla y que luego ese dinero blanqueado se reinvertía en el Perú por medio de la corrupción imperante en el Perú. En primer lugar, los excedentes económicos procedentes de las actividades de los cementerios no se obtuvieron con ningún tipo de fraude tributario. Por lo tanto, no se puede blanquear un dinero que se obtiene de una actividad lícita que no paga impuestos y que además realiza una asociación civil que tampoco paga impuestos. En segundo lugar, un representante de la Iglesia Católica que afirma la realización de actos de corrupción en supuestos actos de reinversión de dinero “blanqueado” debería ofrecer algún dato concreto y obviamente pruebas de lo que dice. No hacerlo constituye una abierta difamación por la que el Sr. Bertomeu tendrá que responder.
5º Sobre la afirmación de que la ACSJB habría blanqueado dinero de mucha gente, potentados del país, valiéndose de la Iglesia —que tiene una presunción de respetabilidad— y a la que nadie toca en el Perú, hay que decir que constituye una muestra más de la ligereza con la que se expresa un sacerdote de la Iglesia Católica y funcionario de confianza del Papa Francisco. ¿Puede identificar el Sr. Bertomeu a los potentados a los que la ACSJB habría blanqueado sus dineros ilícitos? ¿Cuáles son los delitos que esos potentados habrían cometido para obtener dinero sucio que luego era lavado por la ACSJB y sus empresas-fachada?
6º Finalmente, el Sr. Bertomeu señala que descubrió que, por ejemplo, la Fiscal General del Estado, Benavides —corrupta ella— estaba vendida a uno de los abogados del Sodalicio, Hauyón. Al respecto le preguntamos al enviado de Papa: ¿Tiene pruebas de que la Fiscal de la Nación es una corrupta? ¿Puede indicarnos en qué proceso se le ha condenado por corrupción? ¿Puede decir en qué proceso penal el abogado Hauyón se ha apersonado como abogado del Sodalicio? Es lamentable que un alto funcionario de la Iglesia Católica se expresa de esa manera sin ninguna prueba, reproduciendo prácticamente lo que siempre dicen dos periodistas en el Perú: Pedro Salinas y Paola Ugaz. Habría sido deseable que el Sr. Bertomeu averigüe la veracidad de lo que dicen los periodistas antes mencionados.
7º Es llamativo que el Sr. Bertomeu haya asumido una posición tan ligera y difamatoria en sus declaraciones. Más aún, si, además de haber sido el investigador del Sodalicio, ahora es el encargado de su disolución. Aunque también es cierto que no nos sorprende esta forma de proceder que emula a sus amigos Pedro Salinas y Paola Ugaz. En efecto, en el 2019 el Sr. Bertomeu ya se reunía con Pedro Salinas para conocer los detalles del caso del Sodalicio con cervezas entremedio, cuando aún no había sido enviado por el Papa Francisco para investigar al Sodalicio. Luego durante su visita al Perú reveló a Pedro Salinas y Paola Ugaz información reservada entregada por Giuliana Caccia y Sebastián Blanco para ridiculizarlos ante la opinión pública, lo que motivó una denuncia penal en su contra por violar el secreto profesional, ante lo cual hizo abuso de su poder para amenazarlos con excomulgarlos si no retiraban la denuncia. Y ahora se ha revelado que el mismo día de las primeras expulsiones de miembros del Sodalicio se reunieron en la casa de otro periodista con activa agenda en contra del Sodalicio para celebrar con Pedro Salinas y Paola Ugaz con varias copas de finos vinos. Por todo ello, no puede tomarse sino como una mentira más que el Sr. Bertomeu haya dicho en la entrevista con la radio catalana que siempre ha trabajado “bajo el radar” en su labor de investigador del Papa. ¿Eso es lo que entiende por “bajo el radar”?
Este comunicado pone en evidencia las mentiras que el Sr. Bertomeu está propalando en contra de la ACSJB. Con independencia del objetivo de esta comunicación, la ACSJB tomará las acciones legales correspondientes para que el Sr. Bertomeu se haga cargo de todas sus afirmaciones difamatorias en los tribunales juridiciales correspondientes.
Percy García Cavero
Vocero
Asociación Civil San Juan Bautista

Francisco volvió a la casa del Padre

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El papa Francisco, primer sumo pontífice latinoamericano y muy popular entre los fieles de todo el mundo pero enfrentado a una feroz oposición en su reforma de la Iglesia católica, murió este lunes a los 88 años.
El jesuita argentino, líder de la Iglesia católica desde 2013, había pasado 38 días hospitalizado por una grave neumonía y tras ser dado de alta el 23 de marzo, parecía debilitado, aunque participó el domingo en la celebración de la Pascua.
Esta mañana a las 07H35 (05H35 GMT), el obispo de Roma, Francisco, volvió a la casa del Padre”, anunció el cardenal Kevin Farrell en un comunicado publicado por el Vaticano en su canal de Telegram.
El viernes 14 de febrero de 2025, Francisco ingresó en el hospital Gemelli de Roma aquejado de una bronquitis. Le diagnosticaron una neumonía en ambos pulmones que requirió un intenso tratamiento y puso su vida en peligro. Finalmente fue dado de alta el 23 de marzo.
El domingo, todavía convaleciente , apareció en el balcón de la basílica de San Pedro del Vaticano y con una débil voz le deseó una “feliz Pascua” a los miles de fieles congregados allí por la Pascua.
El fallecimiento del papa dará inicio a una serie de actos protocolarios, dictados por la tradición y regidos por normas muy precisas.
Se prevén nueve días de exequias y un plazo de entre 15 y 20 días para organizar un cónclave con cerca de 130 cardenales electores, para elegir a un sucesor. Más de dos tercios de ellos fueron nombrados por Francisco.
Mientras tanto, es el cardenal camarlengo, el irlandés Kevin Farell, quien ocupará el cargo interinamente.
El lunes en el Vaticano, la bulliciosa plaza de San Pedro quedó en silencio mientras sonaban las campanas.
Vivió esta Pascua y se fue”, dijo Cesarina Cireddu, de la isla italiana de Cerdeña, con lágrimas en los ojos. “Ha vuelto con el Señor, vaya con Dios”.
Los grupos de turistas seguían caminando por la extensa plaza, mientras grupos de personas en silencio se apoyaban en una valla para rezar.
Hemos perdido a nuestro padre espiritual”, declaró Riccardo Vielma, un venezolano de 31 años que estudia para ser sacerdote.

Infografía con los momentos clave del papado de Francisco. Fuente: AFP

Un legado profundo

Francisco afirmó a finales de 2023 que quería simplificar los funerales papales y anunció su deseo de ser enterrado en la basílica de Santa María la Mayor de Roma, y no en la de San Pedro.
El exarzobispo de Buenos Aires Jorge Mario Bergoglio fue el primer pontífice en elegir el nombre de Francisco, el santo de los pobres, cuyas enseñanzas inspiraron su pontificado, iniciado el 13 de marzo de 2013.
El primer papa jesuita y latinoamericano de la historia se implicó sin descanso en la defensa de los migrantes, el medio ambiente y la justicia social, sin poner en entredicho las posiciones de la Iglesia en temas como el aborto o el celibato de los curas.
Numerosos dirigentes mundiales elogiaron su liderazgo de una Iglesia más abierta y compasiva.
El vicepresidente de Estados Unidos, JD Vance, que el domingo se reunió con el pontífice en el Vaticano, declaró desde India que su “corazón está con los millones de cristianos” del mundo.
El presidente argentino, Javier Milei, saludó la “bondad y sabiduría” del papa a pesar de las “diferencias” entre ambos.
El presidente del Gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, destacó “su compromiso con la paz, la justicia social y los más vulnerables”.
Nos dejó un gran hombre”, dijo la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, mientras que el presidente francés, Emmanuel Macron, afirmó que Francisco siempre estuvo “con los más vulnerables”.
Bergoglio – que con 21 años sufrió una pleuresía aguda que le supuso la ablación parcial del pulmón derecho y era conocido por sufrir de una ciática crónica que lo obligaba a cojear vistosamente – gozó pese a todo de relativa buena salud hasta 2023.
Ese año su estado se debilitó significativamente, que lo obligó a desplazarse en silla de ruedas y atizó los rumores sobre una posible dimisión, siguiendo el ejemplo de su predecesor Benedicto XVI.
El líder espiritual de 1,400 millones de católicos del mundo estuvo hospitalizado dos veces en 2023, lo que le llevó a reconocer los “límites” con los que tenía que lidiar y a cancelar su participación en actos destacados como la COP28 de Dubái en diciembre.

Reformas

Amante de la música y el fútbol y poco adepto a tomarse vacaciones, Francisco mantuvo durante años un ritmo frenético de trabajo, encadenando a menudo una docena de citas al día.
Tanto en Roma como en el extranjero, el “papa del fin del mundo”, que fue líder de los jesuitas durante la dictadura argentina en la década de 1970, denunció sin descanso todas las formas de violencia, los conflictos, la trata de seres humanos, la explotación económica y defendió los derechos de los migrantes.
Pero, pese a ser un acérrimo oponente al comercio de armas, asistió impotente a las guerras en Ucrania y en Oriente Medio.
Francisco, un político avispado conocido por su franqueza, también trabajó para reforma la Curia, el gobierno de la Santa Sede, desarrollar el papel de las mujeres y los laicos en la Iglesia y sanear las finanzas del Vaticano.
Para luchar contra los abusos sexuales a menores en la Iglesia, levantó el secreto pontificio y obligó a religiosos y laicos a denunciar los casos a su jerarquía.
Sin embargo no convenció a las asociaciones de víctimas, que lo criticaron por no haber ido lo suficientemente lejos.
Muy apegado al diálogo interreligioso, sobre todo con el islam, defendió hasta el final una Iglesia “abierta a todos”, lo que le costó duras críticas por parte de movimientos extremistas por su apoyo a los migrantes.

Periferia

El estilo cálido de este papa reformista que cada domingo deseaba “buen provecho” a los fieles en la Plaza de San Pedro despertó un gran fervor popular.
Pero también fue muy criticado por la oposición conservadora por su supuesta falta de ortodoxia y por ejercer un gobierno considerado como autoritario.
Esas críticas -plasmadas en peticiones, libros y carteles en las paredes de Roma- también proliferaron por la sombra de Benedicto XVI, que residió en el Vaticano hasta su muerte a finales de 2022, lo que hizo que durante años hubiera “dos papas”.
También hubo conflictos internos, con críticas de algunos cardenales, especialmente sobre el el sínodo sobre el futuro de la Iglesia celebrado de 2023, un proyecto que quedó inconcluso.
El estilo de Francisco, que prefirió un sobrio apartamento de dos habitaciones de 70 m2 al lujoso palacio apostólico e invitó a personas sin hogar y prisioneros a su mesa, también le valió críticas por desacralizar en exceso su papel.
El papa número 266º pareció más interesado por la “periferia” del planeta que por los grandes países occidentales.
También puso sobre la mesa nuevos debates dentro de la Iglesia, como con su encíclica ecologista y social “Laudato si”, un alegato contra el mundo de las finanzas y un llamado a salvaguardar el planeta.
Fuente: Diario Gestión.

El papa Francisco, el primer jesuita y el primer latinoamericano en dirigir la Iglesia católica, falleció. Tenía 88 años. © Mazur/catholicnews.org.uk.

Durante sus 11 años de pontificado, registró varias otras primicias

Fue el primer papa en dirigirse a una sesión conjunta del Congreso de Estados Unidos, el primero en pedir leyes de unión civil y aprobar bendiciones eclesiásticas para parejas del mismo sexo, y el primero en visitar Irak, la Península Arábiga, Mongolia y Myanmar.
Pero mientras los medios occidentales lo retrataron como un revolucionario que llevó a la Iglesia Católica al siglo XXI, en la práctica el Papa Francisco a menudo adoptó un enfoque más evolutivo ante el cambio.
Aunque los críticos lo acusaron persistentemente de intentar alterar la doctrina católica, parecía aspirar sobre todo a transformar la cultura de la Iglesia, instando a los católicos a encarnar lo que él consideraba las tres características de la presencia de Dios: cercanía, compasión y ternura. También buscó contrarrestar lo que consideraba la plaga del clericalismo ampliando progresivamente las responsabilidades de los laicos, incluso en el gobierno de la Iglesia.
Cuando Francisco fue elegido a los 76 años, algunos comentaristas predijeron que sería un papa interino sin trascendencia. Pero pronto se consolidó como una de las figuras más impactantes —e inusuales— que han ocupado la Sede de Pedro en la era moderna.
El 265° sucesor de San Pedro se presentó ante los católicos por primera vez la noche del 13 de marzo de 2013, vestido de blanco, sin la capa roja ribeteada de armiño que usan los nuevos papas. Desde la logia con vistas a la Plaza de San Pedro, invitó a los allí reunidos a rezar por él antes de impartirles su bendición. Al día siguiente, fue fotografiado pagando la cuenta en el hotel de Roma donde se alojó antes del cónclave.
En otra señal de que estaba dispuesto a romper con la costumbre papal, anunció que no se mudaría al Palacio Apostólico, la residencia de los Papas, sino que viviría en la Casa Santa Marta, una casa de huéspedes del Vaticano que alberga a los cardenales durante los cónclaves.
Estas primeras decisiones marcaron el tono de su papado poco convencional.
Camino al sacerdocio
El papa Francisco nació con el nombre de Jorge Mario Bergoglio el 17 de diciembre de 1936 en Buenos Aires, la capital argentina. Sus padres, Mario Bergoglio y Regina Sívori, eran inmigrantes italianos.
El mayor de los cinco hijos del matrimonio, el futuro Papa, terminó la escuela con un diploma de técnico químico. Entre sus pasiones se encontraban el fútbol (fue hincha de toda la vida del club porteño San Lorenzo de Almagro), el cine neorrealista italiano y la milonga, un baile anterior al tango argentino.
Su vocación al sacerdocio surgió una mañana cuando pasaba frente a su parroquia y sintió la inspiración de entrar. Vio a un sacerdote desconocido sentarse en un confesionario.
Sentí como si alguien me agarrara por dentro y me llevara al confesionario”, recordó. “Obviamente, le confesé mis cosas. Me confesé… pero no sé qué pasó. Ahí mismo supe que tenía que ser sacerdote; estaba completamente seguro”.
Fue aceptado en el seminario diocesano de Buenos Aires en 1956. Pero a los 21 años, sufrió una enfermedad pulmonar que puso en peligro su vida. Atribuyó su supervivencia a una enfermera que triplicó sus dosis de penicilina y estreptomicina. Los cirujanos le extirparon la parte superior del pulmón derecho.
Durante su convalecencia, decidió abandonar el seminario diocesano y solicitó la admisión en la Compañía de Jesús. Ingresó al noviciado jesuita en Córdoba, en el centro de Argentina, en 1958. Soñaba con servir como misionero en Japón y, sin éxito, pidió al Padre Pedro Arrupe, superior general de los jesuitas entre 1965 y 1983, que lo considerara para la tarea.
Fue ordenado sacerdote el 13 de diciembre de 1969 por el arzobispo Ramón José Castellano, arzobispo emérito de Córdoba. Era una época convulsa en la Iglesia católica tras el Concilio Vaticano II y la publicación de la encíclica papal Humanae vitae. La orden jesuita estaba a la vanguardia del cambio, especialmente en Latinoamérica. También estaba en crisis: muchos de los hombres presentes en el noviciado cuando él llegó una década antes se habían marchado.
En su ordenación, su abuela Rosa le entregó una carta que guardaría en su breviario el resto de su vida. «Que estos nietos míos, a quienes he entregado lo mejor de mi corazón, tengan una vida larga y feliz», escribió, «pero si en algún día doloroso, la enfermedad o la pérdida de un ser querido los llena de dolor, recuerden que un suspiro ante el Sagrario, y una mirada a María al pie de la Cruz, pueden hacer que una gota de bálsamo caiga sobre las heridas más profundas y dolorosas».
Desatando los nudos
Poco después de tomar sus votos perpetuos como jesuita en 1973, fue nombrado superior de la provincia jesuita de Argentina (incluyendo la responsabilidad del vecino Uruguay), sucediendo a un provincial que se había visto obligado a dimitir debido a las convulsiones dentro de la orden.
La provincia era significativamente más débil que cuando se unió el futuro Papa. A principios de la década de 1960, la provincia argentina de la Compañía de Jesús contaba con más de 400 miembros, con más de 100 hombres en formación, incluidos 25 novicios. Para 1973, contaba con un total de 243 jesuitas, nueve en formación y dos novicios.
Presidir la conflictiva provincia resultó extremadamente difícil para el hombre de 36 años, a quien sus compañeros jesuitas apodaban “La Gioconda” debido a lo que percibían como una inescrutabilidad al estilo de la Mona Lisa.
Poco después de asumir el cargo, estalló la Guerra Sucia en Argentina. Las fuerzas de seguridad y los escuadrones de la muerte atacaron a los opositores a la dictadura militar. En un incidente que sería analizado minuciosamente tras su elección papal, los sacerdotes jesuitas Padre Orlando Yorio y Padre Francisco Jalics fueron capturados y torturados por agentes de la junta.
Inmediatamente después de su elección, el papa Francisco fue tildado de “papa de la dictadura” por críticos que afirmaban que había traicionado a los sacerdotes ante las autoridades —o al menos no los había protegido—, citando el testimonio del padre Yorio, fallecido en el año 2000. Sin embargo, el padre Jalics declaró en 2013: “El hecho es que Orlando Yorio y yo no fuimos denunciados por el padre Bergoglio“. Los partidarios del papa señalaron que ningún jesuita perdió la vida mientras él era provincial y argumentaron que había salvado decenas de vidas.
Como superior, buscó reformar la provincia argentina, comenzando por la formación de los estudiantes jesuitas. Revisó su programa de estudios, enfatizó la labor pastoral y ofreció una base más profunda en la espiritualidad ignaciana.
Tras cesar en su servicio como superior en 1979, fue nombrado rector del Colegio Máximo de los jesuitas en Buenos Aires. Sin embargo, perdió el favor de miembros influyentes de la Compañía de Jesús en Argentina y otros lugares, y vivió un período de exilio que marcó profundamente su carácter.
Aceptó mudarse a Alemania en 1986 para trabajar en una tesis sobre el influyente teólogo alemán de origen italiano, Romano Guardini, pero sentía nostalgia. Durante su breve estancia, peregrinó a la ciudad bávara de Augsburgo, donde contempló una imagen mariana conocida como «María Desatanudos», una devoción que posteriormente popularizaría.
Tras abandonar su doctorado, regresó a Argentina, donde las tensiones dentro de la provincia jesuita alcanzaron su punto álgido, culminando en 1990 con su traslado a Córdoba, ciudad a más de 640 kilómetros de Buenos Aires, donde ejerció principalmente como confesor. Sus partidarios también fueron expulsados ​​y se les pidió que no se pusieran en contacto con él.
Al reflexionar sobre su introspección en Córdoba, en su primera entrevista importante como Papa, dijo: «Mi autoritarismo y mi rapidez para tomar decisiones me llevaron a tener serios problemas y a ser acusado de ultraconservador. Viví una época de gran crisis interior cuando estuve en Córdoba. Claro que nunca he sido como la beata Imelda [una persona virtuosa], pero nunca he sido derechista. Fue mi autoritarismo al tomar decisiones lo que me creó problemas».
El camino a Roma
Su exilio terminó en 1992, cuando el Papa Juan Pablo II lo nombró obispo auxiliar de Buenos Aires, por iniciativa del cardenal Antonio Quarracino, nombrado arzobispo de Buenos Aires dos años antes.
En su consagración, repartió estampas de oración que representaban a María Desatanudos. Tomó como lema episcopal las palabras «Miserando atque eligendo» («Y mirándolo con misericordia, lo eligió»), extraídas de una homilía en la que San Beda describió la vocación de Cristo a San Mateo.
Quarracino lo nombró vicario general, encargándole de la administración de la archidiócesis —que contaba con más de tres millones de habitantes— y contando con su gran apoyo como asesor. Aquejado de problemas de salud, el cardenal convenció a Juan Pablo II para que nombrara a Bergoglio en 1997 arzobispo coadjutor con derecho a sucesión, a pesar de la oposición en el mundo político argentino y en Roma. El nombramiento sorprendió a los observadores locales, ya que el hombre de 60 años tenía un perfil público relativamente bajo.
Tras el fallecimiento de Quarracino en febrero de 1998, Bergoglio lo sucedió de inmediato. Adoptó un enfoque distintivo en el liderazgo de la arquidiócesis, rechazando solicitudes de entrevistas y la residencia oficial del arzobispo, optando por vivir en un edificio de la curia arquidiocesana junto a la Catedral Metropolitana de Buenos Aires. Se centró en la evangelización y la atención a los pobres, y se le veía usando el transporte público, paseando por las villas miserias de la ciudad, asoladas por la droga, y lavando los pies a los enfermos de sida.
En febrero de 2001, el Papa Juan Pablo II le confirió el capelo cardenalicio durante un consistorio en Roma, junto a otras 36 personas, entre ellas el futuro decano del Colegio Cardenalicio Giovanni Battista Re, el inglés Cormac Murphy-O’Connor, el influyente brasileño Cláudio Hummes y Theodore McCarrick de Washington.
En octubre de 2001, sustituyó al cardenal Edward Egan como relator general de una asamblea del Sínodo de Obispos en Roma, después de que el arzobispo de Nueva York se viera obligado a regresar a su patria debido a los atentados terroristas del 11-S. Este puesto le permitió contactar con líderes de la Iglesia de todo el mundo, lo que elevó considerablemente su visibilidad internacional.
Bergoglio inicialmente rechazó el papel de presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, pero aceptó en 2005 y fue reelegido en 2008 para un nuevo mandato de tres años.
En abril de 2005, participó en el cónclave que eligió a Benedicto XVI. Según versiones posteriores, obtuvo el segundo mayor número de votos.
En 2007, desempeñó un papel crucial en la creación del influyente Documento de Aparecida, un modelo para renovar los esfuerzos de evangelización en Latinoamérica. El texto afirmaba que la Iglesia estaba llamada a una profunda y profunda revisión de su misión y necesitaba relanzarla con fidelidad y audacia en las nuevas circunstancias de Latinoamérica y del mundo.
Cumplió 75 años en 2011, la edad en la que los obispos diocesanos suelen presentar sus renuncias, pero permaneció en el cargo de arzobispo de Buenos Aires.
Una elección sorpresa
Cuando Benedicto XVI, de 85 años, renunció dramáticamente en 2013, muchos consideraron que el cardenal Bergoglio, de 76 años, era demasiado mayor para ser candidato a sucederlo. El papa alemán había indicado que quería dar paso a una figura más joven y vigorosa para abordar los problemas del Vaticano.
Pero el argentino impresionó a sus colegas cardenales con un discurso en una reunión previa al cónclave instando a los católicos a salir “a las periferias” y evitar la trampa de una “Iglesia autorreferencial”.
Fue elegido papa el 13 de marzo de 2013, en la quinta vuelta. Al aparecer en el balcón de la Plaza de San Pedro, sus primeras palabras fueron: «¡Hermanos y hermanas, buenas noches!». Pidió oraciones «por todo el mundo, para que haya un gran espíritu de fraternidad».
Pocos días después de ser elegido, explicó que había elegido el nombre de Francisco en honor a San Francisco de Asís y soñaba con una “Iglesia pobre, para los pobres”.
En lugar de mudarse al palacio apostólico, optó por permanecer en la Casa Santa Marta. Aclaró que la decisión no se tomó por motivos de austeridad, sino por lo que él llamó “razones psiquiátricas“: que no le convenía vivir solo. Posteriormente, colocó un cartel en la puerta de su suite con la advertencia “Prohibido quejarse“.
Francisco se hizo conocido y apreciado rápidamente por su atención a los marginados. Unas semanas después de su elección, celebró la misa del Jueves Santo en una prisión de Roma, lavando y besando los pies de doce reclusos como parte de la liturgia. Su pontificado estuvo marcado por encuentros espontáneos y sinceros con personas marginadas.
Otro sello distintivo del papado de Francisco fue su tendencia a reservar textos preparados para pronunciar discursos improvisados ​​en los eventos papales. Con frecuencia decía a las multitudes reunidas ante él que quería hablarles “con el corazón“.
El estilo informal de comunicación del Papa también incluía largas ruedas de prensa durante los vuelos de regreso de sus viajes internacionales. Los periodistas solicitaban con frecuencia sus comentarios sobre la actualidad política y eclesiástica, que solían generar titulares internacionales, junto con críticas por la ambigüedad o la confusión de sus palabras.
La polémica de ‘Amoris’
Las críticas alcanzaron su punto álgido con la publicación por Francisco de la exhortación apostólica Amoris laetitia en 2016. El documento, que abordaba la pastoral familiar, abordaba en gran medida ideas como el amor, la vocación y la superación del sufrimiento en el matrimonio y la vida familiar.
Pero una nota a pie de página en el octavo capítulo del documento, que se centraba en el acompañamiento de aquellos en “situaciones irregulares”, provocó una controversia significativa por su aparente sugerencia de que algunos católicos que se habían divorciado y vuelto a casar civilmente sin una anulación podrían recibir la Eucaristía.
“En ciertos casos, esto puede incluir la ayuda de los sacramentos… También quisiera señalar que la Eucaristía ‘no es un premio para los perfectos, sino una medicina poderosa y un alimento para los débiles’”, decía la nota.
Meses después de la publicación del documento, cuatro cardenales escribieron al Papa Francisco haciéndole cinco preguntas —conocidas como dubia (del latín “dudas”)— sobre la interpretación del capítulo ocho.
Los cardenales Walter Brandmüller, Raymond Burke, Carlo Caffarra y Joachim Meisner apelaron al Papa para que “resuelva las incertidumbres y aporte claridad”. Francisco se negó a responder, dejando que el debate sobre Amoris laetitia se extendiera a lo largo de su pontificado, con la implementación del documento variando en todo el mundo.
La batalla contra el abuso
En 2019, el Papa promulgó Vos estis lux mundi, un conjunto de políticas canónicas para investigar las denuncias de abuso, mala conducta o negligencia administrativa por parte de los obispos. En 2023, publicó una versión actualizada, que amplió las políticas para incluir a los líderes laicos de asociaciones internacionales reconocidas por la Santa Sede.
Vos estis fue aplaudido como un importante avance en la lucha contra los abusos en la Iglesia, al crear un mecanismo para responsabilizar a los obispos y otros líderes por su incapacidad para abordar las denuncias. Sin embargo, los críticos argumentaron que los protocolos seguían siendo insuficientes, en parte debido a la falta de transparencia en las investigaciones realizadas bajo su jurisdicción.
En Estados Unidos, varios obispos fueron objeto de investigaciones de Vos estis. Algunos fueron exonerados formalmente tras las investigaciones de Vos estis, y a uno se le permitió renunciar tras ser declarado culpable de mala conducta administrativa. Sin embargo, los resultados de varios otros casos no se hicieron públicos, y no quedó claro si se resolvieron.
Francisco fue acusado a menudo de aplicar un doble rasero en casos de abuso, mostrando indulgencia con sus aliados, como el desacreditado obispo argentino Gustavo Zanchetta y el artista de mosaicos, el padre Marko Rupnik. Si bien reconoció errores —por ejemplo, durante una visita a Chile en 2018, cuando describió a un obispo acusado de encubrimiento como víctima de calumnia—, insistió en que, en general, la Iglesia estaba avanzando en la lucha contra el abuso, que, según él, era un problema que afectaba a toda la sociedad.
Una de las contribuciones más perdurables de Francisco fue la creación en 2014 de la Comisión Pontificia para la Protección de Menores, dirigida por el cardenal de Boston, Seán O’Malley. Este organismo promovió la protección de menores en todo el mundo, incluso en los países en desarrollo, pero sufrió escasez de fondos, disputas internas y obstrucciones en la Curia Romana.
Represión litúrgica
Tras una cirugía de colon en julio de 2021, el Papa Francisco publicó la carta apostólica Traditionis custodes , imponiendo estrictas restricciones a la celebración de la Forma Extraordinaria de la Misa, también conocida como Misa Tradicional en Latín. Bajo las nuevas regulaciones, los sacerdotes estaban obligados a pedir permiso a su obispo para celebrar la Misa en latín, que ya no podía tener lugar en una iglesia parroquial.
El documento surgió a raíz de un cuestionario enviado en 2020 a los obispos del mundo por la Congregación para la Doctrina de la Fe, en el que se preguntaba sobre los aspectos positivos y negativos de la celebración de la antigua forma litúrgica. Se esperaba ampliamente que el Papa introdujera modificaciones modestas en Summorum pontificum, la carta apostólica de 2007 emitida por Benedicto XVI para permitir un uso mucho más amplio de la Misa Tradicional en latín. Sin embargo, los cambios radicales anunciados por Francisco sorprendieron a gran parte del mundo católico.
Francisco argumentó que si bien Summorum pontificum había “pretendido recuperar la unidad de un cuerpo eclesial con sensibilidades litúrgicas diversas”, había sido “explotado para ampliar las brechas, reforzar las divergencias y alentar desacuerdos que hieren a la Iglesia, bloquean su camino y la exponen al peligro de división”.
La represión fue controvertida. Algunos obispos decidieron suspender por completo la celebración de la Forma Extraordinaria en sus diócesis, mientras que otros invocaron su propia autoridad como pastores de la iglesia local para conceder dispensas a las nuevas regulaciones. El Vaticano intentó endurecer progresivamente las restricciones, insistiendo en que los obispos debían consultar a Roma antes de otorgar dispensas.
Los católicos con sensibilidades tradicionalistas lamentaron lo que vieron como la destrucción de comunidades que florecieron bajo las disposiciones de Summorum Pontificum, y algunos participaron en protestas públicas, especialmente en Francia.
El Papa Francisco buscó delinear una visión litúrgica positiva en su carta apostólica Desiderio desideravi de 2022 , que enfatizó la importancia del silencio, el asombro y una formación más profunda.
Vías sinodales
Una idea que gradualmente llegó a ubicarse en el centro del pontificado fue la “sinodalidad”, un neologismo que señala un intento de vigorizar las Iglesias locales promoviendo el debate y la colaboración entre el clero, los laicos y el Obispo de Roma.
En un discurso pronunciado en conmemoración del 50º aniversario de la institución del Sínodo de los Obispos por parte de Pablo VI en 2015, Francisco señaló que estaba comprometido a mejorar ese órgano consultivo.
«Es precisamente este camino de sinodalidad el que Dios espera de la Iglesia del tercer milenio», afirmó.
En 2021, inauguró un “proceso sinodal” global, una iniciativa trienal sin precedentes que comenzó con un ejercicio de escucha en las diócesis descrito como el mayor ejercicio de consulta en la historia de la Iglesia.
La etapa inicial, que se vio afectada por la baja participación en muchos países, fue seguida por asambleas continentales. La fase final consistió en las asambleas de los obispos del mundo en Roma en 2023 y 2024, con una participación laica significativamente mayor que en asambleas anteriores. El Sínodo sobre la sinodalidad concluyó con un documento final que instaba a una mayor participación laica en los procesos de toma de decisiones de la Iglesia, documento que el papa Francisco decidió incorporar a su magisterio papal ordinario.
En algunos sectores, la iniciativa generó expectativas de cambios radicales en la doctrina y la práctica católicas. Dichas expectativas fueron particularmente altas en Alemania tras un proceso sinodal de varios años en el que obispos y laicos selectos aprobaron resoluciones a favor de las diaconisas, una revisión del celibato sacerdotal, la predicación laica en las misas, las bendiciones a personas del mismo sexo y la diversidad de género.
Pero el Papa Francisco criticó con frecuencia la iniciativa alemana y trató de distinguirla del proceso global, que, insistió, era “un camino según el Espíritu, no un parlamento para exigir derechos y reivindicar necesidades según la agenda del mundo”.
‘¿Quién soy yo para juzgar?’
El Papa Francisco subrayó que adoptará un enfoque diferente a la homosexualidad que sus predecesores inmediatos durante una conferencia de prensa en el vuelo al final de su primer viaje al extranjero, a la Jornada Mundial de la Juventud en Brasil.
Cuando se le preguntó sobre su actitud hacia un supuesto “lobby gay” en el Vaticano, respondió: “Si alguien es gay y está buscando al Señor y tiene buena voluntad, entonces ¿quién soy yo para juzgarlo?”.
El comentario acaparó titulares internacionales y fue aclamado por muchos como una señal de que el Papa quería cambiar la doctrina de la Iglesia sobre la sexualidad. Posteriormente, el Papa explicó que estaba enfatizando que las personas no deben ser marginadas ni definidas por su sexualidad.
La ahora famosa frase “¿Quién soy yo para juzgar?” se convirtió en un grito de guerra entre quienes esperaban que el Papa guiara a la Iglesia hacia un rumbo más progresista. Otros católicos expresaron su frustración con el estilo improvisado del Papa, quejándose de que propiciaba confusión y falta de claridad en cuestiones morales.
En un documental emitido en 2020, Francisco recordó que, mientras ejercía como arzobispo de Buenos Aires, había abogado por leyes de unión civil para parejas del mismo sexo. En 2023, apoyó la despenalización de la homosexualidad en todo el mundo.
También elogió la labor del Ministerio New Ways —cuyos cofundadores, la hermana Jeannine Gramick y el padre Robert Nugent, fueron prohibidos por el Vaticano en 1999 de realizar trabajo pastoral con personas homosexuales— y del jesuita estadounidense, el padre James Martin.
En diciembre de 2023, el Papa Francisco aprobó la publicación de una declaración de la Oficina de Doctrina del Vaticano que aprobaba bendiciones breves y espontáneas para parejas del mismo sexo y parejas en “situaciones irregulares”.
El documento provocó una gran reacción, especialmente entre los líderes de la Iglesia africana, quienes luego anunciaron que habían recibido una exención para bendecir a las parejas del mismo sexo porque la práctica estaría “en directa contradicción con el espíritu cultural de las comunidades africanas”.
Reformando el Vaticano
La mayoría de los observadores creían que Francisco fue elegido con una doble tarea: reformar la Curia Romana, el gobierno central de la Iglesia Católica, y sanear las turbias finanzas del Vaticano. Persiguió ambos objetivos con determinación, pero adoptó un enfoque gradual que le provocó numerosos reveses.
Uno de sus logros más destacados fue la promulgación de una nueva constitución del Vaticano, Praedicate evangelium, en marzo de 2022, después de una gestación de nueve años supervisada por el Consejo de Cardenales, un órgano asesor que estableció meses después de su elección.
La constitución establecía que «cualquier fiel» podía, en teoría, dirigir un dicasterio o una oficina del Vaticano, según su competencia específica. Creó un nuevo Dicasterio para la Evangelización, que figuraba en primer lugar entre los dicasterios, por delante del otrora dominante Dicasterio para la Doctrina de la Fe.
Francisco creó una nueva Secretaría de Economía en 2014, dirigida por el enérgico cardenal australiano George Pell y encargada de “supervisar las estructuras y actividades administrativas y financieras de los dicasterios de la Curia Romana, las instituciones vinculadas a la Santa Sede y el Estado de la Ciudad del Vaticano”.
Pero figuras de la poderosa Secretaría de Estado consideraron el organismo una amenaza a su tradicional autonomía financiera y se opusieron. El Papa pareció alinearse en cierto momento con la resistencia, cuando la Secretaría de Estado suspendió una importante auditoría interna.
Después de que se supiera que la Secretaría de Estado había perdido millones tras una dudosa inversión en un lujoso inmueble londinense, el Papa quiso despojar al dicasterio de sus fondos financieros y de sus activos inmobiliarios, lo que supone un duro golpe a su prestigio.
El fiasco inmobiliario dio lugar a un largo proceso legal denominado “el juicio del siglo” del Vaticano, en el que participaron las principales figuras del acuerdo, entre ellas el cardenal Angelo Becciu, anteriormente segundo funcionario de mayor rango en la Secretaría de Estado, quien renunció a su cargo y perdió sus derechos como cardenal a instancias del Papa en 2020.
Atención a los migrantes
Francisco fue uno de los defensores más destacados del mundo de la dignidad de los migrantes y refugiados. Señaló que sería una prioridad de su pontificado cuando realizó su primer viaje como papa a Lampedusa, la isla más meridional de Italia, destino de decenas de miles de migrantes africanos. Allí, criticó lo que llamó “la globalización de la indiferencia“.
En una misa celebrada en 2016 en Ciudad Juárez, ciudad mexicana fronteriza con Estados Unidos, lamentó la tragedia humana que supone la migración forzada. Meses después, realizó una visita conjunta con el Patriarca Ecuménico Bartolomé I a un campo de refugiados en la isla griega de Lesbos. El viaje destacó el impacto humano de la crisis migratoria europea, impulsada por acontecimientos como la guerra civil siria.
En 2025, envió una carta a los obispos estadounidenses criticando las deportaciones masivas anunciadas por la administración Trump.
Guerra y paz
A lo largo de su pontificado, Francisco se interesó activamente en los asuntos internacionales, buscando utilizar los recursos diplomáticos de la Santa Sede para promover la paz y la reconciliación en todo el mundo, con resultados mixtos.
En 2014, el Papa alentó con éxito al presidente estadounidense Barack Obama y al presidente cubano Raúl Castro a forjar un acuerdo para comenzar a normalizar las relaciones entre los dos países.
En 2015, Francisco publicó la histórica encíclica Laudato si’ , que influyó en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de ese año en París, que adoptó un tratado internacional vinculante sobre el cambio climático.
Cuando Rusia lanzó su invasión a gran escala de Ucrania en febrero de 2022, tomó la inusual decisión de visitar la embajada rusa ante la Santa Sede para alzar la voz por la paz. En ocasiones, sus comentarios sobre el conflicto ofendieron tanto a los gobiernos ruso como ucraniano, pero estos continuaron colaborando con él entre bastidores en los intercambios de prisioneros y respondieron con respeto a sus propuestas de paz.
El derramamiento de sangre en Europa del Este pareció confirmar su convicción, largamente sostenida, de que el mundo estaba presenciando una “Tercera Guerra Mundial fragmentada”, librada a menudo fuera de la vista de los medios globales en Medio Oriente, África y Asia.
Aperturas al mundo islámico
En las relaciones interreligiosas, el papa Francisco priorizó el diálogo con el mundo islámico. En los primeros años de su pontificado, la violencia islamista azotaba Europa y Oriente Medio.
Deploró los ataques, pero se negó a equipararlos con el Islam, insistiendo en que eran intentos absurdos y blasfemos de justificar el asesinato en nombre de Dios, y sugiriendo que “en casi todas las religiones siempre hay un pequeño grupo fundamentalista“.
Pero también destacó los sacrificios de los cristianos asesinados por islamistas, apoyando la causa de beatificación del padre Jacques Hamel, asesinado mientras celebraba misa en Francia en 2016, y añadiendo al Martirologio Romano los 21 mártires coptos ortodoxos decapitados en una playa libia por militantes del Estado Islámico.
Durante una visita a los Emiratos Árabes Unidos en 2019, Francisco firmó el Documento sobre la Fraternidad Humana junto con el jeque Ahmed el-Tayeb, Gran Imán de Al-Azhar. El texto, considerado un hito en las relaciones entre católicos y musulmanes, invitaba a «todas las personas que tienen fe en Dios y fe en la fraternidad humana a unirse y trabajar juntas».
En 2021, el Papa Francisco realizó una visita histórica al Gran Ayatolá Ali al-Sistani, una de las autoridades religiosas más importantes del Islam chiita, en la ciudad iraquí de Nayaf.
Aperturas ecuménicas
Francisco realizó importantes esfuerzos para profundizar los lazos entre la Iglesia Católica y otras comuniones cristianas tanto de Oriente como de Occidente.
Disfrutaba de un vínculo afectuoso con el Patriarca Ecuménico de Constantinopla y aparecía frecuentemente junto al Arzobispo de Canterbury, respectivamente líderes de la segunda y tercera comuniones más grandes del mundo después del catolicismo.
También se acercó a las comunidades protestantes, pidiendo perdón a los valdenses de Italia por las actitudes y conductas anticristianas e incluso inhumanas de los católicos en siglos pasados. Conmemoró el 500.º aniversario de la Reforma con un viaje a la Suecia históricamente luterana.
También promovió lo que llamó el “ecumenismo de sangre”: la convergencia de cristianos bajo la amenaza de persecución en regiones como Oriente Medio.
Se convirtió en el primer Papa en reunirse con el jefe de la Iglesia Ortodoxa Rusa, firmando una declaración conjunta con el Patriarca Kirill durante su reunión en el Aeropuerto Internacional José Martí en La Habana, Cuba, en febrero de 2016.
Las relaciones con Kirill se deterioraron en medio de la guerra de Ucrania, después de que el Papa dijera que le había advertido al patriarca que no se convirtiera en el monaguillo de Putin. Sin embargo, los contactos de bajo nivel entre Roma y el Patriarcado de Moscú se reanudaron poco después.
Relaciones con la Iglesia de Estados Unidos
El papa Francisco viajó a Estados Unidos en 2015, justo después de una visita a Cuba. Se convirtió en el tercer papa en visitar la Casa Blanca, donde fue recibido por el presidente Barack Obama. Pronunció un discurso histórico ante una sesión conjunta del Congreso. Canonizó al misionero español Junípero Serra, habló en la Asamblea General de la ONU en Nueva York y celebró la misa de clausura del Encuentro Mundial de las Familias en Filadelfia.
En 2018, la atención se centró en las relaciones entre la Iglesia estadounidense y el Vaticano, tras la aparición de acusaciones de abuso sexual contra el cardenal Theodore McCarrick. El influyente exarzobispo de Washington renunció al Colegio Cardenalicio y posteriormente fue destituido del estado clerical. El Vaticano se enfrentó a una intensa presión para aclarar qué sabía y cuándo sobre las acusaciones contra McCarrick, que se remontaban a décadas atrás, pero no detuvieron su ascenso en la Iglesia.
En 2020, el Vaticano dio el paso sin precedentes de publicar un informe de casi 500 páginas que describe el grado de conocimiento que la Santa Sede tenía sobre McCarrick durante los papados de Pablo VI, Juan Pablo II, Benedicto XVI y Francisco. El informe defendió a Francisco ante las acusaciones de que, tras su elección, había ignorado las restricciones al ministerio de McCarrick impuestas discretamente por Benedicto XVI. Insistió en que la decisión del Vaticano de permitir que McCarrick siguiera visitando China, donde había establecido fuertes vínculos, «no requirió ninguna modificación de las indicaciones previamente transmitidas por la Congregación para los Obispos, ya que estas siempre habían permitido a McCarrick realizar actividades con el permiso de la Santa Sede».
En noviembre de 2018, el Vaticano intervino para impedir que los obispos estadounidenses votaran sobre un código de conducta episcopal y la creación de un organismo dirigido por laicos para investigar las denuncias contra obispos. En cambio, se orientó a los obispos hacia un “modelo metropolitano“, en el que los arzobispos metropolitanos supervisarían las investigaciones de las denuncias contra obispos dentro de sus provincias. Un modelo similar se adoptó finalmente a nivel de la Iglesia Universal en el documento Vos estis.
En 2021, el Vaticano bloqueó una declaración de la Conferencia Episcopal de Estados Unidos sobre el presidente entrante Joe Biden, que lamentaba que el segundo presidente católico de Estados Unidos tuviera la intención de “aplicar ciertas políticas que promoverían males morales y amenazarían la vida y la dignidad humanas, más seriamente en las áreas del aborto, la anticoncepción, el matrimonio y el género“.
El Vaticano intervino de nuevo más tarde ese mismo año en un debate entre los obispos estadounidenses sobre la «coherencia eucarística», que abordó si los políticos católicos que apoyaban el aborto legal debían recibir la Comunión. El Vaticano recalcó la importancia del consenso en un episcopado profundamente dividido sobre el tema.
En medio de estas tensiones, el obispo Joseph Strickland de Tyler, Texas, se erigió como un crítico episcopal singularmente franco del papa Francisco. En una medida canónicamente inusual, el papa destituyó a Strickland, quien había acusado a Francisco de “socavar el Depósito de la Fe“, de su cargo en 2023.
Francisco realizó nombramientos significativos en la Iglesia estadounidense que fueron ampliamente percibidos como un intento de inclinar el episcopado hacia una dirección “progresista“. Otorgó capelos rojos a obispos estrechamente vinculados a su programa, como el cardenal Blase Cupich y el cardenal Robert McElroy, mientras que pasó por alto a otros candidatos que ocupan sedes cardenalicias tradicionales en Estados Unidos.
Viajes históricos, nuevos cardenales y encíclicas
Francisco viajó a más de 40 países, y continuó hasta bien entrada su papado, cuando estuvo prácticamente confinado a una silla de ruedas. Una misa que celebró en Filipinas en enero de 2015 fue el evento papal más grande de la historia, con más de 6 millones de participantes. Con su viaje a la República Centroafricana en 2015, se convirtió en el primer papa en visitar una zona de guerra activa. También fue el primero en visitar Irak, donde pasó varios días en marzo de 2021.
Para diciembre de 2024, Francisco había nombrado a más de tres cuartas partes de los cardenales con derecho a voto en un futuro cónclave. Supervisó un cambio en la composición demográfica del Colegio Cardenalicio, nombrando miembros de más de 20 países que nunca antes habían tenido cardenales, entre ellos Brunéi y Papúa Nueva Guinea, al tiempo que se negaba a otorgar automáticamente el capelo cardenalicio a los arzobispos de sedes cardenalicias como Milán y París. Por lo tanto, su pontificado marcó un notable cambio de influencia del hemisferio norte al hemisferio sur.
El papa Francisco publicó cuatro encíclicas: Lumen fidei (que completa un texto de Benedicto XVI), Laudato si’, Fratelli tutti —un apasionado llamado a una mayor fraternidad— y Dilexit nos, inspirada en la devoción al Sagrado Corazón de Jesús. Otras obras importantes incluyeron las exhortaciones Evangelii gaudium, que estableció un programa de evangelización para su pontificado, y Querida Amazonia, que llamó al desarrollo de una Iglesia con rostro amazónico, cercana a los pueblos indígenas de la región en peligro.
El Papa Francisco nació el 17 de diciembre de 1936. Murió el 21 de abril de 2025.
Fuente: The Pillar Catholic.com
Jordi Bertomeu

Jordi Bertomeu, el hombre que suprimió al Sodalicio de Vida Cristiana: Crónica de un poder personal y absoluto

Por Erwin Scheuch.
Todo está consumado. El Sodalicio de Vida Cristiana ha sido oficialmente suprimido por el Dicasterio para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica. Esta es la historia del que lo enterró: el que fue su fiscal, juez, verdugo y hoy Comisario Liquidador, Jordi Bertomeu Farnós.
El reciente artículo “Las ‘amistades peligrosas’ de monseñor Bertomeu, el agente 007 del Vaticano: conflictos de interés y borrado de webs”, publicado por El Español, muestra una comprometedora foto de un grupo de periodistas, todos acusadores del Sodalicio, celebrando en Roma la expulsión de un grupo de sodálites. Junto a ellos vemos a un personaje, qué, aunque riéndose eufóricamente, sabe que no debería de estar ahí: Monseñor Jordi Bertomeu.
El funcionario del Santo Oficio, designado por el Papa Francisco para investigar el Sodalicio de Vida Cristiana está en ese momento exacto al centro de un grave conflicto de intereses.
La red de activistas y comunicadores salió rápidamente en defensa de la culpable fotografía. “El (Bertomeu) no es juez, es investigador” dice uno, “es solo una cena de amigos” añade otro, “ya había terminado su misión”, remata un tercero. Excusas que suenan a mentiras.
¿Investigación diligente o montaje vil?
Como se puede ver en esta publicación con fecha del 22 de octubre, el Papa se reunió en el Vaticano con los dos miembros de la Misión Scicluna-Bertomeu.
Según la misma publicación, estos le reportaron al Papa sobre “los avances de la investigación”, por lo tanto, no es verdad que la Misión había terminado, como afirman sus defensores.
El círculo íntimo: amistades que dictan un juicio
Cabe interesarse por los integrantes de la fotografía revelada por El Español.
Pedro Salinas y Jordi Bertomeu se conocieron en febrero de 2019 en Roma. Desde entonces Bertomeu comenzó a recibir los correos que Pedro Salinas le enviaba sobre las supuestas víctimas del Sodalicio. No faltaron las reuniones amenas e íntimas. “¿Cuál es el problema de tomarse unas cervezas con Bertomeu?”, pregunta Salinas. En tomar cervezas, ninguno. Pero juzgar con anticipación una de las personas que Bertomeu iba a investigar sí lo es. En aquel momento, el funcionario de Doctrina de la Fe dijo que la demanda de Monseñor Eguren contra Salinas era injusta. Semanas después, la justicia peruana condenó a Salinas por difamación.
Años más tarde Bertomeu solicitó una investigación al Sodalicio. Su petición se fundamentó en las acusaciones de Paola Ugaz que denunciaba una supuesta persecución en su contra por parte del Sodalicio. Y aunque esta supuesta persecución nunca ha sido probada por la justicia peruana, Bertomeu obtuvo luz verde.
Se suma Renzo Orbegozo, que no se le conoce profesión, pero ahora se ha vuelto un asiduo escritor de un portal español, a cuyo director Bertomeu ofrece las primicias.
Iniciada la Misión, Bertomeu incluyó entre las acusadoras a la periodista Elise Allen, una exintegrante de las Fraternas. Es ella quien recibe en su casa, junto con su esposo John Allen, al círculo íntimo que festeja en la problemática fotografía.
El gran bluff de Bertomeu
Se desconocen las facultades otorgadas a Bertomeu por el Papa, pues no ha exhibido el decreto que las precise. Tan solo existe un Apunte para la Audiencia, es decir, el memo por el cual Bertomeu pide facultades. No se sabe cuáles fueron finalmente otorgados, pero en todo momento Bertomeu los ocultó. Consiguió algo que pocos pueden: ejercer poderes de los cuales probablemente carece.
Según él, vino a investigar solo asuntos económicos, pero luego admitió que la Misión vino a investigar múltiples acusaciones. En realidad, a Bertomeu solo le interesaba conocer el patrimonio del Sodalicio: el mismo que administraría posteriormente.
Sus defensores dicen que solo hacía de notario y que las interrogaciones eran lideradas por Charles Scicluna. No obstante, es Bertomeu quien interrogó a Giuliana Caccia y Sebastián Blanco. Estos dieron sus testimonios por separado y, misteriosamente, acabaron en manos de periodistas, en lo que podría constituir una grave violación del secreto profesional.
Notario, investigador y de repente abogado de quienes alegaban ser víctimas. Según nuestras fuentes Bertomeu incitó a varias personas a que publiquen sus testimonios y pidan reparaciones. Los llevó ante el Papa, ante la Prefecta de Vida Consagrada, y facilitó reuniones con altos funcionarios de la Santa Sede.
La metamorfosis de Bertomeu siguió, revistiendo repentinamente la función de un fiscal acusador. Presentó las notitia criminis a las autoridades del Sodalicio para la investigación de 15 personas. En el escrito tipificaba los supuestos “ilícitos graves” e indicaba el camino que, según él, correspondía seguir: la expulsión por el escándalo grave causado por una conducta culpable (can. 696 CIC).
Tras más de 4,500 páginas de investigaciones, el Superior del Sodalicio no encontró ninguna razón jurídica para expulsar a ninguno de los acusados. La mayoría de los hechos alegados por Bertomeu se probaron falsos, y los que sí sucedieron o causaron escándalo décadas atrás ya habían prescrito y se habían reparado. Los expedientes se entregaron el 26 de agosto a la Misión, siguiendo los plazos acordados con quien supuestamente la dirigía, Monseñor Scicluna. ¿Bertomeu entregó los resultados al Dicasterio de Vida Consagrada?
Juez sin ley y verdugo sin capucha
Bertomeu ha dicho que expulsar a los sodálites “era una decisión ya tomada”. No interesaba el debido proceso. Para lograrlo, presionó a las autoridades del Sodalicio, exigiendo que la entrega de las defensas sea el 5 de agosto, y si no se presentaban, se procedería igualmente. Al no presentarse defensas, todas las acusaciones se declararían verdaderas, y así fue. Bertomeu ignoró las indicaciones de su jefe que había autorizado entregar las defensas tres semanas después.
Con ese argumento el 6 de agosto obtuvo del Papa una autorización que utilizó como “arma letal”: se habría facultado al Dicasterio de Vida Consagrada a expulsar por “causas diferentes” a las previstas en el Código de Derecho Canónico.
Aún con el permiso del Papa para expulsar, el Dicasterio debía revisar primero las conclusiones del Superior del Sodalicio, el juez competente. Solo si consideraba que el Superior había actuado contra el derecho podía asumir la causa. Bertomeu habría ocultado las pruebas presentadas por el Superior del Sodalicio, argumentando que la expulsión estaba autorizada. Ello explica los decretos del Dicasterio, que no conocía ni las imputaciones ni tampoco los resultados de las investigaciones. Engañando a unos y otros, Bertomeu se convirtió en juez de las expulsiones.
Hasta ahora no se conocen los motivos de las expulsiones. En ningún decreto figura la motivación, ni existe un razonamiento jurídico: esto impide a los acusados defenderse. Este grave perjuicio procesal no es más que una violación del derecho a la defensa, un derecho reconocido canónicamente y consagrado en la Declaración Universal de Derechos Humanos.
Conste que a Bertomeu no le importa el derecho. En sus propias palabras: “la estricta legalidad mata, y lo dice un canonista”. ¡Vaya canonista, nada menos que el 007 de Vanity Fair!
Jactándose de su desprecio del derecho y de la legalidad, Bertomeu hizo expulsar a 15 miembros del Sodalicio, consumando la primera parte de su plan diseñado desde el inicio de la Misión. Pero se necesitaba hacer escarnio, y para ello recurrió al Nuncio Apostólico en el Perú, que firmaría las Notas de Prensa que Bertomeu redactó. Estudiadas para hacer el mayor daño posible, se convierten en las primeras comunicaciones de la Santa Sede que incurren en difamación agravada. En los decretos, las expulsiones se atribuían a un genérico “por otras causas”, pero las notas de prensa mostraban un listado de nombres, junto a otro de faltas, sin especificar a quién correspondía que falta. Así, mientras en el decreto nadie cometió nada, en los comunicados todos pudieron cometer todo.
Y el verdugo se declaró víctima
Finalmente, con las últimas expulsiones terminó la tarea de la Misión, y a su juicio el Sodalicio y todas las obras fundadas por Figari debían ser suprimidas. Para poder sustentar su recomendación al Papa fue necesario que existiera un grupo importante de expulsados, mientras más notables mejor. Varios sodálites de las primeras generaciones, o que habían ejercido puestos de gobierno, fueron sacrificados para tal objetivo. Yo entre ellos.
Bertomeu está gravemente comprometido con las víctimas. Ha creado una expectativa que sería satisfecha con generosas sumas de dinero, que se repartirá en una nueva ronda de reparaciones. Él mismo se ha declarado víctima, junto a los otros integrantes de la fotografía revelada por El Español. Y, como convenientemente señala Bertomeu, hay que ser generosos, algo muy fácil cuando se trata del dinero ajeno. Veremos que hace, porque como él dice: “si no hay, pues no hay, ¿qué quieres que haga?”
Mentiras y manipulación: el laberinto de Bertomeu
Bertomeu ha dicho siempre que el Papa es quien decide. Pero el Sumo Pontífice confía, como lo hace cualquier Jefe de Estado atareado por centenares de asuntos, en quien le lleva los documentos: en este asunto es Bertomeu.
Dos casos demuestran el abuso de confianza de Bertomeu con el Papa.
El primero se refiere al intento de excomunión de los peruanos Giuliana Caccia y Sebastián Blanco. Bertomeu, en su desesperación por una denuncia penal que estos ciudadanos presentaron por violar el secreto profesional, culpó al Sodalicio de ello, y, el mismo día de la expulsión, hizo firmar al Papa un precepto penal con amenaza de excomunión. El precepto nunca se aplicó y dos meses después, ante Caccia y Blanco, el Papa dijo que él no recordaba haber firmado ese precepto, revocándolo.
El segundo caso es el referido a la expulsión de los sodálites Juan Carlos Len y el P. Jaime Baertl, firmado por el Dicasterio el día 21 de octubre y refrendado por el Papa el 23. Las más de 500 páginas del expediente de defensa se presentaron el 14 de octubre, tan solo una semana antes, en los días en que se celebraba el Sínodo en Roma. De hecho, la foto en donde aparece Bertomeu y Scicluna con el Papa es en la Sala del Sínodo, en un descanso entre sesiones. El Papa, los jefes del Dicasterio y Monseñor Scicluna habían estado muy ocupados yendo todos los días al Sínodo. ¿Quién leyó el voluminoso expediente? El único que tenía tiempo para dedicarlo al Sodalicio era Bertomeu, pero sabemos que no le interesaba leerlo. Obtuvo otra firma del Papa, con argumentos que desconocemos.
Los desastres que va dejando sus mentiras y manipulaciones son numerosos: ha comprometido al Papa, a dos Prefectos de Dicasterio, al Nuncio en el Perú, y al Arzobispo de Malta. Hoy quiere cobrar honorarios, algo inusual en funcionarios de la Santa Sede con puesto fijo. Con la excusa de sus cargos, que debieran ser discretos, cobra por viajes donde busca figurar como el enviado del Papa ante miles de personas, sea en Filipinas, en Ecuador o en Bolivia.
Sin duda, estamos ante un personaje que suscita muchas dudas. Notario, abogado, fiscal, juez, verdugo y para rematar, «víctima». Un personaje sin reparos en incurrir en claros conflictos de interés, sin consideración por la ley de la Iglesia ni tampoco por el derecho de los fieles.
Este es Jordi Bertomeu Farnós, el sacerdote que puso fin al Sodalicio de Vida Cristiana mediante la mentira, la amenaza y la manipulación. Tras su paso, deja un sinfín de fieles perdidos, de católicos perjudicados en sus derechos, de sacerdotes sin parroquias, de promesas pecuniarias hechas a periodistas y activistas. Todo un escándalo para la Iglesia de la misericordia.
Este es Jordi Bertomeu Farnós, el todopoderoso funcionario del Vaticano. Tras Chile y Perú, ¿dónde le llevará ahora su ilimitada ambición?

Jane Tomaszewski

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Foto familiar muestra a Jane y Dan Tomaszewski con sus hijas, Gigi y Marian, en el día de la primera Comunión de Gigi en 2023. (Foto: Cortesía de Jane Tomaszewski)

Es descendiente directa de un mártir católico canonizado

Por Matthew McDonald– National Catholic Register.
Jane Tomaszewski estaba pensando en convertirse al catolicismo cuando se enteró de un hecho inusual sobre sí misma.
Ella es descendiente directa de un santo canonizado.
“Eso fue lo decisivo para mí: ‘Oh, creo que estaba destinado a ser católica’”, dijo Tomaszewski al Register.
Esta rareza es motivo de conversación, pero también un signo de interrogación, como dijo al Register Hans Whitmer, director de formación en la fe de la parroquia de Tomaszewski, al describir la vez que escuchó sobre ello por primera vez el verano pasado, antes de que Tomaszewski se uniera al programa de conversión de adultos de la parroquia.
Pensé: ‘¿Es eso real?’“, dijo Whitmer.
El Register hizo una pregunta similar, a la que Tomaszewski, cuyo nombre de soltera es Kim, proporcionó un árbol genealógico compilado por su tío que muestra que ella es la tataranieta de Nam Chong-sam (c. 1816-1866), uno de los 103 mártires coreanos que San Juan Pablo II canonizó en 1984 en Seúl.
Nam, cuyo nombre cristiano era Juan el Bautista, era sobrino y ahijado de un alto funcionario del gobierno coreano y se incorporó al servicio público. Según una breve biografía, su trabajo era complejo, tanto porque el gobierno, en general, desconfiaba del catolicismo como porque sus funciones oficiales a veces implicaban el culto a los antepasados, lo cual contradecía las enseñanzas católicas.
Nam se vio envuelto en una persecución anticatólica en 1866. Fue arrestado y torturado antes de ser decapitado afuera de la Pequeña Puerta Oeste de Seúl.
Nam y otros 102 son conocidos colectivamente como “San Andrés Kim Taegon, San Pablo Chong Hasang y compañeros” en el calendario litúrgico de la Iglesia, cuya festividad es el 20 de septiembre.
Santo en la Familia
¿Por qué son raros los descendientes de santos canonizados?
La gran mayoría de las aproximadamente 11,000 personas que la Iglesia Católica Romana reconoce como santos eran sacerdotes, monjas o hermanos laicos que hicieron votos de celibato y, por lo tanto, es poco probable que tengan descendientes biológicos.
Sólo alrededor del 19% de los estadounidenses que actualmente están siendo considerados para la santidad (23 de 129) eran laicos, según un sitio web llamado “American Saints and Causes”, que rastrea dicha información.
Y dado que los registros vitales detallados y duraderos son un fenómeno relativamente nuevo en la civilización humana, a la mayoría de las personas les cuesta rastrear sus árboles genealógicos más allá de los siglos XVIII o XIX. Se estima que unas 1600 personas han sido canonizadas desde 1850, muchas de ellas célibes y muchas de siglos anteriores.
Nunca había conocido a nadie relacionado con un santo, y soy católico de cuna. Fue una locura“, dijo Dan Tomaszewski, el esposo de Jane.
Dijo que reza a San Nam Chong-sam por la salud y el bienestar de su familia. Se imagina a sus hijos de primero y cuarto grado rezando en el futuro al santo, su antepasado directo.
Es increíble, y es algo que nuestras dos hijas, con suerte, podrán seguir usando por el resto de sus vidas, una vez que se den cuenta de su importancia“, dijo.
Whitmer, quien dirige el programa de conversión de adultos de la parroquia, dijo que la importancia de la conexión familiar de Jane ha crecido para él con el tiempo.
Cuanto más lo pienso, más profundo es”, dijo.
La ha obligado a profundizar un poco más. Creo que es una verdadera bendición para ella“, dijo.
‘Ven al agua’
Jane Tomaszewski, de 48 años, hija de inmigrantes coreanos, creció en Cincinnati. Tiene una licenciatura en ingeniería química y una maestría en administración de empresas. Conoció a su esposo Dan mientras ambos trabajaban en la industria petrolera. Hoy, ayuda a gestionar la parte comercial de las clínicas de salud mental que dirige su esposo.
Mientras crecía, su familia asistía a iglesias metodistas y presbiterianas, pero ella no fue bautizada.
Dan fue criado como católico, pero dejó de ir a la iglesia de joven. Durante las restricciones por el coronavirus, Dan y Jane trasladaron a su hija mayor a una escuela parroquial católica y comenzaron a asistir a misa allí.
A Jane le encantaba la música de la parroquia San Roberto de Newminster en Ada, Michigan, especialmente el himno Come to the Water, que escuchó desde muy pequeña.
“El Espíritu Santo me invadió. Cantando esta canción, se me saltaron las lágrimas”, declaró Jane al Register.
Sabía que estaba en el lugar correcto, que debía estar allí, que debía hacer esto“, dijo. “Hay algo en la belleza de los elogios que realmente me cautiva”.
Su hija mayor recibió la Primera Comunión en San Roberto. A medida que su segunda hija, ya en primer grado, se acercaba a la preparación para su Primera Comunión, Tomaszewski se empeñó en llegar antes que ella.
Creo que esa fue parte de mi motivación: necesitamos poder ir a la Comunión juntos como familia”, dijo.
The Register le preguntó sobre las implicaciones contraculturales de lo que está haciendo, ya que más personas abandonan la Iglesia Católica en Estados Unidos que las que ingresan a ella, según un informe de febrero de 2025 del Pew Research Center.
En mi opinión, también me parece que hay una contracorriente que atrae a la gente”, dijo, “porque a medida que el mundo avanza en una determinada dirección, a la gente no siempre le gusta lo que ve”.
Tomaszewski fue bautizada durante la Misa de Vigilia Pascual en St. Robert de Newminster, seguido de la Confirmación y la Primera Comunión.
Ella forma parte de una gran cosecha este año en la Diócesis de Grand Rapids, que espera 222 bautismos esta Pascua, además de 262 personas ya bautizadas que se incorporan formalmente a la Iglesia Católica mediante una profesión pública de fe. Ese número total de conversos —484— es un 19 % mayor que en 2024 (407). También es el más alto en la diócesis desde 2011 y un 36 % mayor que en 2019 (357), el año anterior a la pandemia de coronavirus.
El nombre de confirmación de Jane es Nam Chong-sam.
Su madre, Inja Kim, dijo al Register por correo electrónico que está emocionada por el próximo bautismo de su hija y agradecida a la familia Tomaszewski por su fuerte fe católica.
Llegué a Estados Unidos en 1973 y no fui a la iglesia, lo cual me hace sentir culpable. Ahora Jane me está compensando —dijo—. Soy una madre muy feliz aquí.

Concluye proceso legal iniciado por 5 exmiembros del Sodalicio

En octubre de 2015 la 26ª Fiscalía Provincial Penal de Lima inició una Investigación de Oficio por el delito de violación sexual de menores contra 1 sodálite y 2 exsodálites. La investigación fue abierta tras la presentación del libro ‘Mitad monjes, mitad soldados’ en el que tres de los 30 testimonios publicados narraban episodios de contenido sexual ocurridos en la década de 1980.
En enero de 2016 la 26ª Fiscalía Provincial Penal de Lima archivó la investigación debido a que no se presentó ninguna víctima a declarar sobre los delitos sexuales.
En mayo de 2016 5 exsodálites presentaron una denuncia ampliatoria por los delitos de (a) Secuestro mental, (b) Lesiones psicológicas graves, y (c) Asociación ilícita para delinquir. Entre los acusados se encontraban (7) miembros y (3) exmiembros del Sodalicio de Vida Cristiana.
El Sodalicio realizó además los siguientes pagos en favor de las víctimas: Pagos por asesoría legal y por asesoría canónica, gastos notariales, viajes para firma notarial y/o presentación del testimonio, entre otros gastos.
Luego de iniciada la investigación preparatoria, en octubre de 2016 se llevaron a cabo las diligencias en Roma (Italia) a cargo de la Fiscalía para recabar el testimonio de Luis Fernando Figari, quien en ese momento residía en Italia de acuerdo a una disposición del Dicasterio para los Institutos de Vida Consagrada y Sociedades de Vida Apostólica.
En enero de 2017 la 26ª Fiscalía Provincial declaró como inexistentes los 3 delitos denunciados (secuestro mental, asociación ilícita para delinquir y lesiones psicológicas graves). En marzo de 2017 la 6ª Fiscalía Superior declaró nulo el archivo de la investigación.
En noviembre de 2017 la 18ª Fiscalía Provincial formuló denuncia contra algunos de los investigados y excluyó a otros. Además solicitó prisión preventiva para Luis Fernando Figari, y los exsodálites Virgilio Levaggi, Daniel Murguía y Jeffery Daniels.
En octubre de 2019, en segunda instancia, la 6ª Fiscalía Superior confirmó la exclusión de algunos de los denunciados y archivó definitivamente la denuncia contra 4 sodálites.
En diciembre de 2019, el presunto delito de crimen organizado (asociación ilícita para delinquir) fue derivado a la 1ª Fiscalía Supraprovincial de Crimen Organizado. Además el pedido de prisión preventiva quedó anulado con dicha disposición.
Tras 5 disposiciones de archivar la investigación y 5 recursos admitidos para anularlas, en junio de 2024, la Fiscalía dispuso archivar por sexta vez y de manera definitiva la investigación preliminar por lo que no procedió continuar ni formalizar la investigación preparatoria contra los denunciados por secuestro metal y lesiones psicológicas graves.
Finalmente, en septiembre de 2024, la 2ª Fiscalía Superior Nacional Especializada contra la Criminalidad Organizada declaró infundado el recurso de los denunciantes contra la disposición de la Fiscalía de archivar la denuncia de asociación ilícita para delinquir, por lo que se confirmó así el archivo definitivo de la investigación preparatoria.
En el momento de la supresión, el Sodalicio contaba con 135 miembros en los 9 países donde estaba presente. Juan Carlos Boldt Pérez, último Vicario General del SCV, informó a El Comercio que será decisión personal de cada exmiembro laico vincularse, si así lo desea, con alguna congregación o institución existente. En el caso de los sacerdotes que deseen seguir con el ministerio, deberán entrar en un proceso de vincularse con alguna comunidad religiosa o diócesis en la cual el Obispo del lugar los acepte.
Cada uno está llamado a hacer un proceso de profunda reflexión. Son muchos los años que hemos dedicado a una vida de servicio a la Iglesia en el Sodalicio. Somos personas de fe. Es un tiempo de revisión y de escuchar renovadamente la voz de Dios. Es significativo para nosotros que el decreto haya sido firmado en la Semana Santa donde hacemos memoria del Misterio Pascual del Señor. Esta semana adquiere una dimensión muy particular para todos nosotros, en estar más unidos que nunca a nuestro Señor Crucificado. Esperamos que sea un tiempo profundo de conversión, para pedir perdón y acogernos al camino redentor que Jesucristo nos ofrece. Esa es nuestra esperanza”, dijo en comunicación escrita con este Diario.
Sobre las empresas vinculadas del Sodalicio, Boldt Pérez respondió que “todos los entes a nombre del Sodalicio tanto en el ámbito civil como eclesial serán extintos, y de esto se encargará el comisario”. Sin embargo, “otras instituciones que tuvieron relación con la labor apostólica del Sodalicio seguirán funcionando bajo dirección de sus responsables y cumpliendo sus fines como ha sido hasta ahora”.
Consultado específicamente por asociaciones como Asociación San Juan Bautista, la red de colegios sodálites y la Fundación Acción Solidaria, dijo por escrito que seguirán funcionando: “Se ha suprimido el Sodalicio, no estas instituciones que seguramente seguirán su labor según sus fines. Sus representantes son los responsables por ellas”.
El Sodalicio tenía seis comunidades en el Perú: Nuestra Señora de Chapi (Arequipa), Santa María (Chincha), Santa María de la Evangelización (Lima), Madre de la Fe (Lima), Nuestra Señora de Guadalupe (Lima), Nuestra Señora de la Reconciliación (Lima). Sobre esto, último Vicario General del SCV indicó que cada lugar tiene realidades diversas en personas y labores apostólicos. “Primero se debe velar por los miembros consagrados de cada una de las sedes en esta nueva etapa. Secundariamente debemos tomar en cuenta los distintos ámbitos apostólicos donde desempeñaban su labor. Me parece importante cuidar para que no se pierda la labor pastoral que se realizó por tantos años en estos lugares. Varios obispos han manifestado su cercanía y su deseo de que los ex miembros del Sodalicio puedan seguir sirviendo en sus Diócesis”, añadió.
Finalmente, de iniciarse nuevos procesos legales o investigaciones fuera del ámbito eclesial, el comisario será el responsable de responder de forma institucional. “Ahora ya no existe más el Sodalicio, cualquier proceso de carácter legal que involucre al Sodalicio extinto lo debe atender el Comisario. Él es el representante designado por la Santa Sede”, respondió Boldt Pérez. 
Fuente: Diario El Comercio.

Pascua de Resurrección

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Catecúmenos en la iglesia de San Hugo en Huntington Station, Nueva York (foto CNS/Gregory A. Shemitz)

Los jóvenes se están convirtiendo al catolicismo en masa, impulsados ​​por la pandemia, Internet y alternativas “laxas”

Por Rikki Schlott– New York Post.
Sydney Johnston creció en un hogar cristiano no confesional, pero ahora, este millennial del Upper West Side es una devota católica.
“Hay algo tan hermoso y trascendental en los rituales y la historia antigua de la misa católica que se ha preservado”, declaró Johnston, de 30 años, a The Post. “La iglesia realmente transmite un grado de reverencia que no encontré en el enfoque más liberal y laissez-faire de las iglesias no confesionales”.
Confirmada en diciembre de 2024 en la Iglesia de Notre Dame en Morningside Heights, Johnston es una de un número creciente de jóvenes que se acercan a la Iglesia Católica desde otras denominaciones, religiones e incluso sin ninguna fe.
Sídney JohnstonSydney Johnston se convirtió al catolicismo después de explorar docenas de denominaciones cristianas. Emmy Park para el NY Post.
Según el Registro Católico Nacional , algunas diócesis reportan aumentos interanuales de entre el 30 % y el 70 % en el número de nuevos conversos. La Diócesis de Fort Worth, Texas, por ejemplo, experimentó un aumento del 72% en el número de conversos tan solo entre 2023 y 2024.
El Post habló con varios jóvenes católicos nuevos que citan la pandemia, Internet y el desagrado por las alternativas protestantes “laxas” como razones para recurrir a la fe.
Johnston creció en el condado de Orange, California, y nunca se sintió del todo satisfecha con su fe protestante.
“Parecía más una experiencia cultural que algo realmente arraigado en la historia y con un fundamento teológico profundo”, recordó.
A los 20 años, se había alejado por completo de la iglesia, pero, cuando llegó la pandemia mientras Johnston estudiaba física e historia en Columbia, de repente tuvo tiempo para considerar lo que faltaba en su vida.
Sídney JohnstonJohnston fue criada sin denominación religiosa pero prefiere la estructura de la Iglesia Católica. Emmy Park para el NY Post.
“Hasta ese momento, era una adicta al trabajo, pero durante la pandemia, comencé a reflexionar y a revisar mis críticas al cristianismo”, dijo. “Empecé a leer la Biblia y encontré muchísima sabiduría, belleza y significado”.
Al salir del confinamiento, emprendió una búsqueda de dos años a través de docenas de denominaciones para encontrar una iglesia que fuera adecuada para ella.
“Tenía esta pregunta en mente: ¿Siento a Dios aquí? ¿Se siente como un lugar sagrado? Así que presté mucha atención a los aspectos estéticos y espirituales de los servicios”, recordó. “Y al final, me sentí más atraída por la misa católica”.
Sydney Johnston en la iglesiaSydney Johnston fue confirmada como católica en diciembre. Emmy Park para el NY Post.
El reverendo Raymond Maria La Grange, de la iglesia de San Vicente Ferrer en la avenida Lexington, confirmó a The Post que al menos tres cuartas partes de sus nuevos conversos tienen entre 20 y 30 años y que “fue realmente después [de la pandemia] que la parroquia en general comenzó a crecer”.
“Algunos eran protestantes, otros no religiosos, algunos católicos que nunca practicaron la fe. Hombres y mujeres”, dijo. “Algunos adinerados, otros viviendo al día. Algunos son intelectuales, algunos místicos. Algunos conocieron a católicos que los trajeron, otros llegaron solos y apenas conocían a ningún católico”.
“Es una época divertida para ser sacerdote. Es muy ajetreado, en el buen sentido”, añadió La Grange.
Adrian Lawson encontró el catolicismo a través de Internet.
Adrián LawsonLa mente de Adrian Lawson se abrió al catolicismo gracias a un debate en YouTube. Cortesía de Adrian Lawson
Lawson, un desarrollador de software de 30 años del sur de California, fue criado sin una denominación religiosa y fue ateo durante su adolescencia, pero finalmente encontró la iglesia evangélica cuando tenía poco más de 20 años y estaba sufriendo.
“Estaba lidiando con una enfermedad mental y el sentido de la vida, y esas son preguntas que no podría responder sin la religión”, dijo. “Mi salud mental mejoró muy rápidamente, y la iglesia me mostró una forma diferente de ver la vida. Simplemente me volví menos egocéntrico, y eso me hizo mucho más feliz”.
Pero se sintió impulsado a investigar el catolicismo después de ver un animado debate en línea entre un creador católico y protestante, Cameron Bertuzzi, sobre la historia de la iglesia.
Cameron BertuzziEl influencer cristiano Cameron Bertuzzi se convirtió al catolicismo e inspiró a muchos jóvenes a hacer lo mismo. Scott Dalton para el NY Post
La propia conversión pública de Bertuzzi después de ese debate es citada a menudo por los jóvenes católicos conversos en línea como un momento de “píldora roja” para ellos.
El nativo de Houston, de 38 años, que fue criado como un cristiano carismático y ha hecho contenido protestante en YouTube durante años, dijo que el debate lo llevó a la conclusión de que no tenía más opción que convertirse.
“Al final pensé: ‘Necesito hacer esto. Necesito convertirme al catolicismo’”, declaró a The Post. “Trascendí las objeciones que tenía, y la verdad es que no me quedaba ninguna. Pensé: ‘No hay nada que me impida ser católico, así que probablemente debería abrazarlo’”.
Cameron BertuzziCameron Bertuzzi ahora es miembro de una iglesia católica en Texas. Scott Dalton para el NY Post
Desde entonces, Bertuzzi ha sido muy abierto acerca de ser un converso en su popular canal de YouTube, un recurso al que Lawson recurrió a menudo en su propio viaje hacia el catolicismo.
A pesar de la “fuerte reacción negativa” de sus padres, Lawson comenzó a asistir a los servicios católicos en 2022 y se convirtió hace un año.
“Tenía ansiedad, depresión y ataques de pánico, pero desde que comencé a rezar el rosario regularmente, no he tenido ninguno de esos problemas”, dijo.
Adrian Lawson en una iglesiaAdrian Lawson dice que rezar con un rosario ha ayudado considerablemente a su salud mental.
Cortesía de Adrian Lawson
Como catequista —un miembro laico que enseña la fe— en su parroquia, Lawson estima que ha habido un aumento interanual del 50% en el número de conversos, muchos de ellos de entre 20 y 30 años. Ha observado que los conversos tienden a ser más tradicionales, un poco más fervientes y firmes en sus creencias.
“Creo que mucha gente se siente insatisfecha con su experiencia en las iglesias protestantes”, dijo. “Y creo que muchos jóvenes buscan una comunidad y un propósito, y lo encuentran en la Iglesia Católica”.
Algunos jóvenes se están convirtiendo desde fuera del cristianismo por completo. Marin Minamiya, de 28 años y residente de Austin, se crio en la fe sintoísta en Japón, pero comenzó a explorar el catolicismo mientras estudiaba ciencias de la información en la Universidad de Columbia.
Marin MinamiyaMarin Minamiya fue criada como sintoísta pero se convirtió al catolicismo mientras estudiaba en Columbia. Cortesía de Marin Minamiya
Marin MinamiyaMarin Minamiya dice que ser católica la ha convertido en una mejor persona. Cortesía de Marin Minamiya
“Creo que ser católico inevitablemente te hace tener una perspectiva positiva de la vida porque Dios es bueno”, dijo Minamiya, quien se graduó en febrero. “Me da mucha confianza y me brinda mucho apoyo de la comunidad católica para convertirme en una mejor persona y una persona virtuosa”.
Minamiya, que trabaja en informática y tiene el récord de ser la mujer más joven en haber escalado el monte Manaslu en Nepal, se convirtió en diciembre de 2024.
La decisión de convertirse al catolicismo fue más difícil para Taylor New, de 27 años y originaria de Cincinnati. A los 21, siendo miembro activo de su comunidad evangélica, se topó con un youtuber que le explicaba por qué estudiar la historia del catolicismo la llevó a convertirse.
“Decidí verlo sin pensarlo mucho, pero bromeo diciendo que ese video arruinó mi vida de la mejor manera, porque me impulsó a investigar”, le dijo New a The Post.
Taylor NewTaylor New dice que un video de YouTube impulsó la búsqueda que la llevó al catolicismo. Cortesía de Taylor New
Taylor New en la iglesiaTaylor New inicialmente se resistió a convertirse al catolicismo, pero decidió convertirse en 2024. Cortesía de Taylor New
Después de meses de leer y ver videos, New, que trabaja en seguros, llegó a la conclusión de que la historia de la Iglesia Católica la convertía en la única fe cristiana legítima, pero tenía miedo de dejar atrás su comunidad.
“Era algo que no quería hacer. Le rogué a Dios que no me hiciera católica”, dijo. “Encontré mucho apoyo en mi iglesia, simplemente porque no tenía una familia muy unida en casa”.
Pero, después de años de conflicto interno, finalmente decidió asistir a las clases de la Orden de Iniciación Cristiana de Adultos para convertirse en 2024.
En retrospectiva, ella atribuye a Internet el haber mostrado el camino: “Muchos jóvenes se están convirtiendo a la fe, y creo que eso se debe simplemente a que hay una gran cantidad de cosas para buscar en Internet, y la gente está en una búsqueda de la verdad que los lleva a gravitar hacia la Iglesia Católica”.
Teoría de La Grange: «Diría que el impulso más común de los jóvenes es que se dan cuenta de que el mundo no puede proporcionarles ningún orden moral ni razones para vivir de una manera determinada. La cultura del libertinaje los ha dejado a la deriva».

Sodalicio de Vida Cristiana firmó decreto de supresión y quedó disuelto oficialmente

El Sodalicio de Vida Cristiana ha dejado oficialmente de existir. Este 14 de abril de 2025, el Superior General de la comunidad firmó el decreto de supresión como Sociedad de Vida Apostólica laical en la sede del Dicasterio para Institutos de Vida Consagrada y Sociedades de Vida Apostólica en el Vaticano, en presencia de Sor Simona Brambilla, Prefecta del Dicasterio.
La decisión, aprobada directamente por el papa Francisco, pone fin a una institución que por años estuvo marcada por denuncias de abusos físicos, psicológicos y sexuales, y una estructura interna calificada por sus críticos como “sectaria y abusiva”.
Con dolor y obediencia aceptamos esta decisión”, señala el comunicado publicado por el Sodalicio en su sitio web, donde también expresa un pedido de perdón: “Nuestra mirada se dirige también a las víctimas, les reiteramos nuestro sincero pedido de perdón por los maltratos y abusos cometidos en nuestra comunidad. Pedimos perdón también a toda la Iglesia y a la sociedad por el dolor ocasionado”. Asimismo, fue anunciado el nombramiento de Monseñor Jordi Bertomeu Farnós como Comisario Apostólico encargado de la ejecución del proceso de supresión.
El decreto, fechado originalmente el 14 de enero, fue entregado recién ahora debido a la necesidad de identificar propiedades y fundaciones moralmente vinculadas al Sodalicio, con el fin de evaluar su destino como parte de la reparación a las víctimas y el sustento de los miembros que dependían económicamente de la comunidad. Además del núcleo central del Sodalicio, el Vaticano ha dispuesto la supresión de sus ramas femeninas (la Fraternidad Mariana de la Reconciliación y las Siervas del Plan de Dios) y del Movimiento de Vida Cristiana, con presencia en América, Europa y Asia.
Jordi Bertomeu, Elise Harris, Renzo Orbegozo, Sor Simona Brambilla, Paola Ugaz y Pedro Salinas.
El camino hacia la desaparición del Sodalicio comenzó hace más de dos décadas con las denuncias de exmiembros, y fue profundizado por las investigaciones de los periodistas Pedro Salinas y Paola Ugaz. Estas revelaciones expusieron un sistema de abusos sistemáticos liderado por su fundador, el laico peruano Luis Fernando Figari, quien fue finalmente expulsado en agosto de 2024. A lo largo de los años, la organización también fue acusada de emprender campañas de desprestigio contra sus críticos, incluyendo al cardenal Robert Prevost y a los enviados especiales del papa Francisco, Charles Scicluna y Jordi Bertomeu.
El comunicado del Sodalicio concluye citando una frase de esperanza: “El Buen Señor tiene caminos misteriosos -citan en su comunicado- por los cuales siempre puede hacer nuevas todas las cosas. Con esperanza nos encomendamos a las oraciones de todos en estos momentos”. Sin embargo, para muchas víctimas, el cierre marca más un punto de justicia y reparación que de redención.
Fuente: Diario El Comercio.

Sodalicio de Vida Cristiana

COMUNICADO

Informamos que el día de hoy, 14 de abril de 2025, el Superior General del Sodalicio, ha firmado el decreto de supresión de nuestra comunidad en la sede del Dicasterio para Institutos de Vida Consagrada y Sociedades de Vida Apostólica, en presencia de Sor Simona Brambilla, Prefecta del Dicasterio. Asimismo ha sido nombrado como Comisario Apostólico para las tareas relacionadas con la supresión del Sodalicio Monseñor Jordi Bertomeu Farnós. Con dolor y obediencia aceptamos esta decisión aprobada de manera específica por el Papa Francisco que pone fin a nuestra sociedad.
Damos en primer lugar gracias a Dios por nuestra vocación, porque nos llamó sin mérito alguno a servir en la Iglesia. Atesoramos que gracias a su acción amorosa ha permitido que muchas personas de diversos países vivan con nosotros una experiencia común de fe auténtica, de fraternidad, de ardor apostólico que ha dado muchos frutos.
Nuestra mirada se dirige también a las víctimas, les reiteramos nuestro sincero pedido de perdón por los maltratos y abusos cometidos en nuestra comunidad. Pedimos perdón también a toda la Iglesia y a la sociedad por el dolor ocasionado. Confiamos en que los esfuerzos que hicimos en el proceso de reparación den frutos, y seguiremos ofreciendo nuestras oraciones para que el Señor pueda sanar las heridas que se han producido.
Queremos expresar nuestra gratitud a todos nuestros hermanos sodálites, laicos y clérigos, que han sido parte de la comunidad a lo largo de nuestra historia y que generosamente han dedicado años de su vida a colaborar con la misión apostólica de la Iglesia.
Gracias a los pastores que nos han acogido para trabajar apostólicamente en sus diócesis, especialmente agradecemos a los delegados pontificios, que nos han orientado y acompañado con mucha dedicación, caridad y sabiduría en nuestro proceso de renovación. A nuestras familias, amigos y a toda la familia espiritual presente en diversos países por su cercanía y su apoyo.
El Buen Señor tiene caminos misteriosos por los cuales siempre puede hacer nuevas todas las cosas. Con esperanza nos encomendamos a las oraciones de todos en estos momentos, para que, acompañados siempre de la intercesión de Santa María, sea para nosotros un tiempo privilegiado de conversión y de escuchar renovadamente la voz de Dios, siempre en comunión con el Santo Padre y nuestra Madre la Iglesia.
Sodalicio de Vida Cristiana
Anexo: Informe Final de Reparaciones en el Sodalicio de Vida Cristiana– Abril 2025 (PDF)

Comunicado Oficial  Movimiento de Vida Cristiana

El 14 de abril de 2025, en las oficinas del Dicasterio para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica, en virtud de la delegación conferida por el Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, ha sido notificado (intimado) en la ciudad de Roma, el Decreto de supresión del Movimiento de Vida Cristiana, Asociación Privada de Fieles de Derecho Pontificio.
Los miembros del MVC acogemos con obediencia filial esta decisión, aprobada de manera específica por el Papa Francisco. Renovamos nuestra adhesión al Santo Padre y a la Santa Iglesia, a quienes reiteramos nuestra fidelidad y amor.
Desde lo más hondo de nuestro corazón, expresamos nuestro sincero pedido de perdón a todas las personas que hayan sufrido cualquier forma de abuso al interior del Movimiento de Vida Cristiana. Pedimos a Dios el don de la reconciliación para todos y renovamos nuestro compromiso de colaborar con verdad y justicia en todo camino de reparación.
En medio de esta situación de dolor, confiamos en que el Señor Jesús, que no abandona la obra de sus manos, nos sigue llamando a vivir la comunión, a perseverar en la unidad y a entregarnos con generosidad al anuncio del Evangelio.
Queremos manifestar nuestra profunda gratitud al Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, y a tantos obispos y miembros de la Iglesia, que en diversos países nos han acogido y ofrecido su compañía y apoyo a lo largo de todos estos años.
También nuestra gratitud y cariño por el camino recorrido a todos los miembros del Movimiento de Vida Cristiana y de la familia espiritual sodálite, a nuestros familiares, amigos y colaboradores.
Guiados por la gracia del Espíritu Santo, continuemos siendo testigos del Evangelio, con corazones humildes y dispuestos a servir como apóstoles de la reconciliación. Como María, atesoremos en el corazón aquellos frutos auténticos de fe, servicio y apostolado que están vivos en nuestros corazones.
Movimiento de Vida Cristiana

Domingo de Resurrección 2025

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Evangelio según San Juan 20,1-9.
El primer día de la semana, de madrugada, cuando todavía estaba oscuro, María Magdalena fue al sepulcro y vio que la piedra había sido sacada.
Corrió al encuentro de Simón Pedro y del otro discípulo al que Jesús amaba, y les dijo: “Se han llevado del sepulcro al Señor y no sabemos dónde lo han puesto“.
Pedro y el otro discípulo salieron y fueron al sepulcro.
Corrían los dos juntos, pero el otro discípulo corrió más rápidamente que Pedro y llegó antes.
Asomándose al sepulcro, vio las vendas en el suelo, aunque no entró.
Después llegó Simón Pedro, que lo seguía, y entró en el sepulcro: vio las vendas en el suelo, y también el sudario que había cubierto su cabeza; este no estaba con las vendas, sino enrollado en un lugar aparte.
Luego entró el otro discípulo, que había llegado antes al sepulcro: él también vio y creyó.
Todavía no habían comprendido que, según la Escritura, él debía resucitar de entre los muertos.

Homilía del Padre Paul Voisin CR de la Congregación de la Resurrección:

En septiembre de 1996, comencé un programa sabático en la Universidad Jesuita de Toronto, Ontario. Fue un programa de ocho meses de renovación teológica y pastoral para sacerdotes, hermanas, hermanos y laicos. La mayoría de nosotros éramos católicos, pero había unos pocos presbiterianos y anglicanos. La mayoría de nosotros éramos canadienses, pero había británicos, estadounidenses, coreanos y nigerianos. Durante la primera semana, planearon un viaje en autobús a las cataratas del Niágara. Viví los primeros treinta y dos años de mi vida en una hora y media de las cataratas del Niágara, y probablemente había estado allí treinta veces. Sin embargo, para muchos de mis compañeros de clase fue la primera vez que veían las majestuosas y poderosas cataratas. Fue tan interesante ver sus reacciones. Acabo de dar la vista y la experiencia por sentadas, pero la única forma en que puedo describir su reacción fue “asombro”. Estaban hipnotizados por la maravillosa vista, el rugiente agua en movimiento rápido, las formaciones rocosas, la niebla y el arco iris. Habiendo estado allí tan a menudo, había perdido esa sensación de asombro.
Cuando vinimos a misa hoy, sabíamos que Jesús había resucitado de entre los muertos. Fue tan sorpresa para nosotros. Y, así que tal vez, en nuestra condición humana, no tenemos el sentido de ‘asombro’ que los primeros discípulos tuvieron en la tumba vacía. Estoy seguro de que su reacción fue de shock, y sorpresa, y luego, para aquellos que encontraron la piedra rodó lejos, la tumba vacía, y (en el evangelio de Marcos) un joven vestido de blanco -obviamente ángel- de alegría cuando el ángel dijo: “No te asombres: Ves a Jesús de Nazaret, el crucificado. Ha resucitado, no está aquí“. Qué reacción debió haber tenido en los discípulos, que llegaron a la tumba tristes y derrotados a la muerte de su Maestro. Ellos no habían entendido cuando Jesús habló de “resucitar de entre los muertos“, o que su cuerpo era el “templo… reconstruido en tres días“. Ahora su tristeza se convirtió en alegría, y su decepción en en entusiasmo. ¡Jesucristo había resucitado de entre los muertos! ¡Dios había hecho lo improbable y lo imposible!
Mientras reflexionaba sobre esta idea de “asombro“, me pregunté a mí mismo “¿Cómo puedo, casi dos mil años después experimentar asombro y asombrarme ante la resurrección de Jesús de entre los muertos, cuando hoy no me sorprendió?
Mi reflejo me llevó a darme cuenta de que este “asombro” es mío aquí, hoy, si me encuentro con el Jesús resucitado. No sólo el Jesús de la historia, que murió y resucitó hace miles de años, sino Jesús vivo y activo aquí y ahora. Este encuentro se hace realidad para mí si durante la temporada de Cuaresma crecí en unión más estrecha con Jesús a través de mi oración, mi ayuno y mis actos de caridad.
La resurrección que celebramos no puede permanecer para nosotros sólo un momento en el tiempo, una fecha cada año en el calendario. La resurrección de Jesucristo necesita impregnar nuestras vidas, nuestro ser. Nuestro ‘asombro’ seguirá siendo una realidad para nosotros al reconocer y experimentar la presencia del Señor resucitado con nosotros.
¿Cómo experimentamos y vivimos la resurrección de Jesús aquí y ahora? Antes que nada, ayuda a reflexionar sobre nuestras vidas y las pequeñas “resurrecciones” que hemos experimentado – los momentos de miedo, desesperanza y desánimo cuando pensábamos que las cosas nunca podrían cambiar, nunca mejorar. ¡Pero lo hicieron! ¡Dios nos sorprendió! Y, en retrospectiva, podemos ver cómo Dios trabajó para traernos a la resurrección y a una nueva vida. Tuvimos un cambio de actitud, un cambio de prioridades y un cambio de vida. Ese es el poder de la resurrección, y es nuestro si nos unimos profundamente con Jesucristo, fuente de nuestra esperanza y salvación. Estas pequeñas ‘resurrecciones’ nos llevan a experimentar el ‘asombro y asombro’ del Jesús resucitado.
Segundo, debemos estar preparados –en el presente y el futuro– para las sorpresas de Dios, para experimentar el ‘asombro y la maravilla’. Podemos acercarnos a una persona, una situación u una ocasión –en casa, en la escuela o en el trabajo– y pensar que sabemos cómo funcionará. Podemos decirnos a nosotros mismos, ‘Nunca van a cambiar’, ‘No hay manera de que esto funcione’, ‘Esto no tiene esperanza’. Si estamos cerrados a la gracia de Dios y su poder para sorprendernos –en nosotros mismos o en otros– somos obstáculos (en lugar de instrumentos) de la voluntad de Dios. Qué gran responsabilidad tenemos ante Dios y unos contra otros: ser instrumentos de Dios. Si somos personas de esperanza, Dios puede trabajar en y a través de nosotros, y se haga su voluntad. Todos buscamos una segunda oportunidad, o una centésima oportunidad. Así que, debemos dar a otros ese regalo de esperanza en sí mismos, y del amor y misericordia de Dios para ellos. Podemos cambiar. Podemos ser renovados y transformados en Cristo. Pero, debemos estar alertas a los caminos de Dios y cómo Él se revelará, tal vez no como esperamos o queremos, sino como lo dicta su sabiduría. Estos casos nos llevan a compartir el “asombro” del Jesús resucitado con otros, para que puedan reconocer su presencia y ser renovados en su amor.
Mientras viajamos a través de la temporada de Pascua, escucharemos los evangelios de las apariciones de la resurrección, fortaleciendo a los discípulos hasta que Él los deje en la gloriosa ascensión. Una vez más, Jesús nos sorprenderá continuamente en estas apariciones: sus palabras y acciones.
También durante la temporada de Pascua, nuestra primera lectura cada día será de los Hechos de los Apóstoles en los que veremos a los discípulos y apóstoles viviendo la misión de Jesús. Su ‘asombro’ ante la resurrección de Jesús los llevó a actuar, a compartir la vida y la enseñanza de Jesús. Con la venida del Espíritu Santo han sido animados y habilitados para ser los mensajeros de Dios, compartiendo la buena noticia de Jesús que les ha sido transmitida. ¡Su palabra es vida! Ellos también harán cosas grandes y maravillosas que revelarán el poder y la presencia de Jesús, sorprendiéndose a sí mismos y a otros con el ‘asombro y maravilla’ del Señor resucitado.
Aquí y ahora, somos esos discípulos. Nuestras vidas son los “hechos” de nuestra vida apostólica como seguidores de Jesús, como personas salvadas por el sufrimiento, la muerte y la resurrección del Señor. No demos por sentado ese poder y la presencia de Dios en lo que decimos y hacemos, pero redescubramos cada día ese ‘asombro’ de conocer, amar y servir al Señor resucitado.

Algo está pasando en la Iglesia

Buena parte de la Iglesia católica en occidente, en visible decadencia desde hace décadas, ha experimentado un sorprendente crecimiento: ¿Es solo una moda o el inicio de un renacer?

Por Alejandro Bermudez.
En Estados Unidos, desde 2023, las diócesis comenzaron a registrar un fenómeno: el significativo crecimiento de personas que entraban a la Iglesia católica en el día más emblemático: El Sábado de Gloria, durante la Vigilia Pascual.
El diario New York Post publicó este Viernes Santo de 2025 un artículo titulado “Los jóvenes se están convirtiendo al catolicismo en masa, impulsados por la pandemia, internet y alternativas ‘laxas’
El artículo informa que: “Algunas diócesis (en Estados Unidos) reportan aumentos interanuales del 30% al 70% en nuevos conversos. La Diócesis de Fort Worth, Texas, por ejemplo, experimentó un aumento del 72% en conversos tan solo entre 2023 y 2024”.
El diario neoyorkino entrevistó al Padre Raymond Maria La Grange, párroco de la Iglesia de San Vicente Ferrer en la famosa Avenida Lexington en Manhattan, el corazón comercial y financiero de Nueva York, donde las conversiones han venido aumentando sistemáticamente.
Especialmente entre los jóvenes: al menos tres cuartas partes de sus nuevos conversos tienen entre 20 y 30 años.
“Algunos eran protestantes, otros no religiosos, algunos católicos que nunca practicaron la fe. Tanto hombres como mujeres”. “Algunos eran adinerados, otros vivían al día. Algunos son intelectuales, algunos son místicos. Algunos conocieron a católicos que los trajeron, otros llegaron por (buscar en) internet y apenas conocían a algún católico”.

¿Fenómeno mundial?

Pero el fenómeno no es solo en Estados Unidos. Recientemente la revista Catholic World Report tomó nota de lo que el reconocido intelectual católico norteamericano Robert P. George publicó en su cuenta en X: “Algo está pasando. Está pasando en Francia. Está pasando en Inglaterra. Está pasando en Estados Unidos. Empecé a notarlo hace unas semanas, el Miércoles de Ceniza. Parece terriblemente repentino, así que quizás sea solo un pequeño ‘blip’ (en el radar). De ser así, se trata de un ‘blip’ generalizado”.
George se refería al anuncio de la Iglesia católica en Francia de que 10,384 catecúmenos adultos serán recibidos en la iglesia esta Pascua, lo que supone un aumento del ¡45% con respecto a 2024! De ellos, el 42% se encuentra en el grupo de edad de 18 a 25 años.
Por su parte, en abril, la Sociedad Bíblica Británica publicó un extenso sondeo que mostraba que la asistencia a la iglesia en Gran Bretaña había aumentado un 55% desde 2018. Una estadística sorprendente fue que, del 16% de las personas de entre 18 y 24 años que asisten regularmente a la iglesia, el 41% son católicos, una minoría en el país nominalmente anglicano. A este paso los católicos superarán a los anglicanos por primera vez desde la ruptura de Enrique VIII gracias a la asistencia de feligreses más jóvenes.
El artículo del Catholic World Report señala además que aunque no se ha publicado un informe oficial a nivel nacional, sacerdotes canadienses afirman que algo similar podría estar ocurriendo en Canadá. Dice CWR: “El padre Troy Nguyen es capellán de la Capellanía de San Francisco Javier, con sede en la Catedral de Santa María en Calgary, Alberta, y miembro del consejo presbiteral diocesano.
Nguyen afirma que 400 adultos serán bautizados esta Pascua en la diócesis, una cifra significativamente superior al promedio de los últimos cinco años. Sin embargo, Nguyen afirmó que la cantidad de asistentes a misa es la métrica que más le sorprende. Incluso en los últimos cuatro meses, ha habido un crecimiento. ‘He visto un repunte en la asistencia a misa, especialmente entre los jóvenes adultos. El Domingo de Ramos fue una locura’ dice el sacerdote canadiense”.

Las razones

Al final, lo que mueve a las personas a la Iglesia de Cristo, especialmente jóvenes, es la misteriosa gracia de Dios.
Pero el agudo analista anglicano David Roseberry, que aboga por una reforma conservadora de su denominación, intenta explicar en un artículo en su página “The Anglican” por qué protestantes -incluyendo anglicanos- y agnósticos están volviéndose católicos. El análisis de Roseberry, titulado “Por qué está surgiendo la Iglesia Católica Romana en Inglaterra y qué revela sobre la Fe en un era de incertidumbre” merece ser leído entero.
Pero esta es su conclusión: ¿Por qué la Iglesia Católica Romana está en auge en Inglaterra mientras la Iglesia Anglicana declina? Porque:

  • El catolicismo ofrece claridad en una época confusa.
  • Ofrece arraigo en tiempos turbulentos.
  • Ofrece una fe visible, practicada y moralmente seria en una cultura cada vez más a la deriva.
  • Y, sobre todo, ofrece convicción, de esas que te atraen, incluso si no estás seguro de creerlo tú mismo.

¡Feliz Pascua de Resurrección!

Viernes Santo 2025

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Evangelio según San Juan 18,1-40.19,1-42.
Jesús fue con sus discípulos al otro lado del torrente Cedrón. Había en ese lugar una huerta y allí entró con ellos.
Judas, el traidor, también conocía el lugar porque Jesús y sus discípulos se reunían allí con frecuencia.
Entonces Judas, al frente de un destacamento de soldados y de los guardias designados por los sumos sacerdotes y los fariseos, llegó allí con faroles, antorchas y armas.
Jesús, sabiendo todo lo que le iba a suceder, se adelantó y les preguntó: “¿A quién buscan?“.
Le respondieron: “A Jesús, el Nazareno“. El les dijo: “Soy yo“. Judas, el que lo entregaba, estaba con ellos.
Cuando Jesús les dijo: “Soy yo”, ellos retrocedieron y cayeron en tierra.
Les preguntó nuevamente: “¿A quién buscan?”. Le dijeron: “A Jesús, el Nazareno”.
Jesús repitió: “Ya les dije que soy yo. Si es a mí a quien buscan, dejen que estos se vayan”.
Así debía cumplirse la palabra que él había dicho: “No he perdido a ninguno de los que me confiaste”.
Entonces Simón Pedro, que llevaba una espada, la sacó e hirió al servidor del Sumo Sacerdote, cortándole la oreja derecha. El servidor se llamaba Malco.
Jesús dijo a Simón Pedro: “Envaina tu espada. ¿ Acaso no beberé el cáliz que me ha dado el Padre?”.
El destacamento de soldados, con el tribuno y los guardias judíos, se apoderaron de Jesús y lo ataron.
Lo llevaron primero ante Anás, porque era suegro de Caifás, Sumo Sacerdote aquel año.
Caifás era el que había aconsejado a los judíos: “Es preferible que un solo hombre muera por el pueblo”.
Entre tanto, Simón Pedro, acompañado de otro discípulo, seguía a Jesús. Este discípulo, que era conocido del Sumo Sacerdote, entró con Jesús en el patio del Pontífice,
mientras Pedro permanecía afuera, en la puerta. El otro discípulo, el que era conocido del Sumo Sacerdote, salió, habló a la portera e hizo entrar a Pedro.
La portera dijo entonces a Pedro: “¿No eres tú también uno de los discípulos de ese hombre?”. El le respondió: “No lo soy”.
Los servidores y los guardias se calentaban junto al fuego, que habían encendido porque hacía frío. Pedro también estaba con ellos, junto al fuego.
El Sumo Sacerdote interrogó a Jesús acerca de sus discípulos y de su enseñanza.
Jesús le respondió: “He hablado abiertamente al mundo; siempre enseñé en la sinagoga y en el Templo, donde se reúnen todos los judíos, y no he dicho nada en secreto.
¿Por qué me interrogas a mí? Pregunta a los que me han oído qué les enseñé. Ellos saben bien lo que he dicho”.
Apenas Jesús dijo esto, uno de los guardias allí presentes le dio una bofetada, diciéndole: “¿Así respondes al Sumo Sacerdote?”.
Jesús le respondió: “Si he hablado mal, muestra en qué ha sido; pero si he hablado bien, ¿por qué me pegas?”.
Entonces Anás lo envió atado ante el Sumo Sacerdote Caifás.
Simón Pedro permanecía junto al fuego. Los que estaban con él le dijeron: “¿No eres tú también uno de sus discípulos?”. El lo negó y dijo: “No lo soy”.
Uno de los servidores del Sumo Sacerdote, pariente de aquel al que Pedro había cortado la oreja, insistió: “¿Acaso no te vi con él en la huerta?”.
Pedro volvió a negarlo, y en seguida cantó el gallo.
Desde la casa de Caifás llevaron a Jesús al pretorio. Era de madrugada. Pero ellos no entraron en el pretorio, para no contaminarse y poder así participar en la comida de Pascua.
Pilato salió a donde estaban ellos y les preguntó: “¿Qué acusación traen contra este hombre?”. Ellos respondieron:
“Si no fuera un malhechor, no te lo hubiéramos entregado”.
Pilato les dijo: “Tómenlo y júzguenlo ustedes mismos, según la Ley que tienen”. Los judíos le dijeron: “A nosotros no nos está permitido dar muerte a nadie”.
Así debía cumplirse lo que había dicho Jesús cuando indicó cómo iba a morir.
Pilato volvió a entrar en el pretorio, llamó a Jesús y le preguntó: “¿Eres tú el rey de los judíos?”.
Jesús le respondió: “¿Dices esto por ti mismo u otros te lo han dicho de mí?”.
Pilato replicó: “¿Acaso yo soy judío? Tus compatriotas y los sumos sacerdotes te han puesto en mis manos. ¿Qué es lo que has hecho?”.
Jesús respondió: “Mi realeza no es de este mundo. Si mi realeza fuera de este mundo, los que están a mi servicio habrían combatido para que yo no fuera entregado a los judíos. Pero mi realeza no es de aquí”.
Pilato le dijo: “¿Entonces tú eres rey?”. Jesús respondió: “Tú lo dices: yo soy rey. Para esto he nacido y he venido al mundo: para dar testimonio de la verdad. El que es de la verdad, escucha mi voz”.
Pilato le preguntó: “¿Qué es la verdad?”. Al decir esto, salió nuevamente a donde estaban los judíos y les dijo: “Yo no encuentro en él ningún motivo para condenarlo.
Y ya que ustedes tienen la costumbre de que ponga en libertad a alguien, en ocasión de la Pascua, ¿quieren que suelte al rey de los judíos?”.
Ellos comenzaron a gritar, diciendo: “¡A él no, a Barrabás!”. Barrabás era un bandido.
Pilato mandó entonces azotar a Jesús.
Los soldados tejieron una corona de espinas y se la pusieron sobre la cabeza. Lo revistieron con un manto rojo,
y acercándose, le decían: “¡Salud, rey de los judíos!”, y lo abofeteaban.
Pilato volvió a salir y les dijo: “Miren, lo traigo afuera para que sepan que no encuentro en él ningún motivo de condena”.
Jesús salió, llevando la corona de espinas y el manto rojo. Pilato les dijo: “¡Aquí tienen al hombre!”.
Cuando los sumos sacerdotes y los guardias lo vieron, gritaron: “¡Crucifícalo! ¡Crucifícalo!”. Pilato les dijo: “Tómenlo ustedes y crucifíquenlo. Yo no encuentro en él ningún motivo para condenarlo”.
Los judíos respondieron: “Nosotros tenemos una Ley, y según esa Ley debe morir porque él pretende ser Hijo de Dios”.
Al oír estas palabras, Pilato se alarmó más todavía.
Volvió a entrar en el pretorio y preguntó a Jesús: “¿De dónde eres tú?”. Pero Jesús no le respondió nada.
Pilato le dijo: “¿No quieres hablarme? ¿No sabes que tengo autoridad para soltarte y también para crucificarte?”.
Jesús le respondió: “Tú no tendrías sobre mí ninguna autoridad, si no la hubieras recibido de lo alto. Por eso, el que me ha entregado a ti ha cometido un pecado más grave”.
Desde ese momento, Pilato trataba de ponerlo en libertad. Pero los judíos gritaban: “Si lo sueltas, no eres amigo del César, porque el que se hace rey se opone al César”.
Al oír esto, Pilato sacó afuera a Jesús y lo hizo sentar sobre un estrado, en el lugar llamado “el Empedrado”, en hebreo, “Gábata”.
Era el día de la Preparación de la Pascua, alrededor del mediodía. Pilato dijo a los judíos: “Aquí tienen a su rey”.
Ellos vociferaban: “¡Que muera! ¡Que muera! ¡Crucifícalo!”. Pilato les dijo: “¿Voy a crucificar a su rey?”. Los sumos sacerdotes respondieron: “No tenemos otro rey que el César”.
Entonces Pilato se lo entregó para que lo crucificaran, y ellos se lo llevaron.
Jesús, cargando sobre sí la cruz, salió de la ciudad para dirigirse al lugar llamado “del Cráneo”, en hebreo “Gólgota”.
Allí lo crucificaron; y con él a otros dos, uno a cada lado y Jesús en el medio.
Pilato redactó una inscripción que decía: “Jesús el Nazareno, rey de los judíos”, y la hizo poner sobre la cruz.
Muchos judíos leyeron esta inscripción, porque el lugar donde Jesús fue crucificado quedaba cerca de la ciudad y la inscripción estaba en hebreo, latín y griego.
Los sumos sacerdotes de los judíos dijeron a Pilato: “No escribas: ‘El rey de los judíos’, sino: ‘Este ha dicho: Yo soy el rey de los judíos’.
Pilato respondió: “Lo escrito, escrito está”.
Después que los soldados crucificaron a Jesús, tomaron sus vestiduras y las dividieron en cuatro partes, una para cada uno. Tomaron también la túnica, y como no tenía costura, porque estaba hecha de una sola pieza de arriba abajo,
se dijeron entre sí: “No la rompamos. Vamos a sortearla, para ver a quién le toca”. Así se cumplió la Escritura que dice: Se repartieron mis vestiduras y sortearon mi túnica. Esto fue lo que hicieron los soldados.
Junto a la cruz de Jesús, estaba su madre y la hermana de su madre, María, mujer de Cleofás, y María Magdalena.
Al ver a la madre y cerca de ella al discípulo a quien él amaba, Jesús le dijo: “Mujer, aquí tienes a tu hijo”.
Luego dijo al discípulo: “Aquí tienes a tu madre”. Y desde aquel momento, el discípulo la recibió en su casa.
Después, sabiendo que ya todo estaba cumplido, y para que la Escritura se cumpliera hasta el final, Jesús dijo: Tengo sed.
Había allí un recipiente lleno de vinagre; empaparon en él una esponja, la ataron a una rama de hisopo y se la acercaron a la boca.
Después de beber el vinagre, dijo Jesús: “Todo se ha cumplido”. E inclinando la cabeza, entregó su espíritu.
Era el día de la Preparación de la Pascua. Los judíos pidieron a Pilato que hiciera quebrar las piernas de los crucificados y mandara retirar sus cuerpos, para que no quedaran en la cruz durante el sábado, porque ese sábado era muy solemne.
Los soldados fueron y quebraron las piernas a los dos que habían sido crucificados con Jesús.
Cuando llegaron a él, al ver que ya estaba muerto, no le quebraron las piernas, sino que uno de los soldados le atravesó el costado con la lanza, y en seguida brotó sangre y agua.
El que vio esto lo atestigua: su testimonio es verdadero y él sabe que dice la verdad, para que también ustedes crean.
Esto sucedió para que se cumpliera la Escritura que dice: No le quebrarán ninguno de sus huesos.
Y otro pasaje de la Escritura, dice: Verán al que ellos mismos traspasaron.
Después de esto, José de Arimatea, que era discípulo de Jesús -pero secretamente, por temor a los judíos- pidió autorización a Pilato para retirar el cuerpo de Jesús. Pilato se la concedió, y él fue a retirarlo.
Fue también Nicodemo, el mismo que anteriormente había ido a verlo de noche, y trajo una mezcla de mirra y áloe, que pesaba unos treinta kilos.
Tomaron entonces el cuerpo de Jesús y lo envolvieron con vendas, agregándole la mezcla de perfumes, según la costumbre de sepultar que tienen los judíos.
En el lugar donde lo crucificaron había una huerta y en ella, una tumba nueva, en la que todavía nadie había sido sepultado.
Como era para los judíos el día de la Preparación y el sepulcro estaba cerca, pusieron allí a Jesús.

Homilía del Padre Paul Voisin CR de la Congregación de la Resurrección:

Estoy seguro de que todos hemos recibido un regalo que valoramos por encima de todos los regalos que hemos recibido. Para mí es el anillo que llevo puesto. Cinco meses antes de hacer mis votos perpetuos como resurreccionista, mi abuelo paterno murió. Después de su muerte, me dieron su anillo. En realidad había sido usado por mi abuela paterna durante sesenta años, y después de su muerte comenzó a usarlo. Ocho años después era mío. Mis padres y mis dos tías sabían que yo quería un anillo para mis votos perpetuos, y esta era la solución perfecta (especialmente porque cada tía no quería que la otra lo consiguiera). Lo he usado durante cuarenta y seis años y veinticuatro días.
Hoy celebramos el gran regalo que Dios el Padre nos ha dado – Su único Hijo engendrado, Jesús. Y celebramos el gran regalo de Jesús: Su vida. En este Viernes Santo conmemoramos su pasión y muerte. La lectura de la Pasión de San Juan nos ayuda dramáticamente a reconocer este gran regalo dado a un gran precio. Como católicos conocemos las Estaciones de la Cruz, y la lectura de la Pasión cada año en el Domingo de Ramos y el Viernes Santo nos han dado muchas oportunidades para acompañarlo en ese doloroso viaje que comenzó en el Jardín de Getsemaní y terminó en el Calvario. Solo podemos empezar a imaginar el dolor físico y el sufrimiento de Jesús, y el dolor psicológico de quienes lo acompañaron: su madre, María, Verónica, las mujeres santas y los muchos discípulos. La mayoría de los que presenciaron su sufrimiento y muerte no estaban “comprometidos” en la vida de Jesús – para ellos era sólo otra persona. Pero para el Padre, era su único Hijo. Para María era su Hijo único. Para sus discípulos Él era su Señor y Maestro.
No hay regalo más grande que el regalo de la vida de uno. Pensamos en esto en particular cuando alguien muere al servicio de la sociedad – como la policía, el personal de bomberos, los agentes de emergencia o los soldados. Pensamos en esto cuando la valentía de alguien rescató o protegió a alguien, que terminó en su vida perdida.
Pero no sólo deberíamos pensar en el regalo de la vida cuando se acabe, sino reconocer y apreciar el regalo de la propia vida que compartimos en la vida, aquí y ahora. Con demasiada frecuencia no reconocemos ni apreciamos la vida de las personas que forman parte de nuestras vidas. Con demasiada frecuencia podemos estar tan envueltos en nosotros mismos que no los ‘ver’, o acompañarlos, o realmente comprometidos en su vida.
Mientras celebramos la muerte del Señor hoy -la celebramos porque se ha convertido en la fuente de la vida y la salvación para todos nosotros- recordemos y reconozcamos el don del Padre, y del Hijo, y cómo podemos apreciar el don de vida, y salvación que ellos nos han extendido. Apreciemos la vida que compartimos con otros, y la que ellos comparten con nosotros. Apreciemos la vida de Dios en nosotros y compartamos con otros.

Jueves Santo 2025

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Evangelio según San Juan 13,1-15.
Antes de la fiesta de Pascua, sabiendo Jesús que había llegado la hora de pasar de este mundo al Padre, él, que había amado a los suyos que quedaban en el mundo, los amó hasta el fin.
Durante la Cena, cuando el demonio ya había inspirado a Judas Iscariote, hijo de Simón, el propósito de entregarlo, sabiendo Jesús que el Padre había puesto todo en sus manos y que él había venido de Dios y volvía a Dios, se levantó de la mesa, se sacó el manto y tomando una toalla se la ató a la cintura.
Luego echó agua en un recipiente y empezó a lavar los pies a los discípulos y a secárselos con la toalla que tenía en la cintura.
Cuando se acercó a Simón Pedro, este le dijo: “¿Tú, Señor, me vas a lavar los pies a mí?“.
Jesús le respondió: “No puedes comprender ahora lo que estoy haciendo, pero después lo comprenderás”.
“No, le dijo Pedro, ¡tú jamás me lavarás los pies a mí!”. Jesús le respondió: “Si yo no te lavo, no podrás compartir mi suerte”.
“Entonces, Señor, le dijo Simón Pedro, ¡no sólo los pies, sino también las manos y la cabeza!”.
Jesús le dijo: “El que se ha bañado no necesita lavarse más que los pies, porque está completamente limpio. Ustedes también están limpios, aunque no todos”.
El sabía quién lo iba a entregar, y por eso había dicho: “No todos ustedes están limpios”.
Después de haberles lavado los pies, se puso el manto, volvió a la mesa y les dijo: “¿comprenden lo que acabo de hacer con ustedes?
Ustedes me llaman Maestro y Señor; y tienen razón, porque lo soy.
Si yo, que soy el Señor y el Maestro, les he lavado los pies, ustedes también deben lavarse los pies unos a otros.
Les he dado el ejemplo, para que hagan lo mismo que yo hice con ustedes“.

Homilía del Padre Paul Voisin CR de la Congregación de la Resurrección:

Tradicionalmente, una parte importante del día en la vida de una familia es la comida compartida. Hoy, por desgracia, parece que la comida diaria juntos se vuelve cada vez más difícil, ya que todo el mundo tiene horarios y compromisos que hacen difícil encontrar tiempo para el otro. Este es un comentario triste sobre la vida familiar hoy en día. Estoy seguro de que todos tenemos recuerdos felices de comidas especiales compartidas con seres queridos, tal vez un banquete de bodas, un cumpleaños o aniversario, una graduación u otro momento significativo en la vida de un individuo y una familia.
Esta noche, nuestras lecturas de las Sagradas Escrituras hablan sobre comidas compartidas. Primero, en las Escrituras Hebreas (Éxodo 12:1-8, 11-14), escuchamos sobre la primera comida de Pascua. Una y otra vez Moisés había ido al Faraón con el mismo mensaje “Deja ir a mi gente”, pero Faraón no lo hizo. Entonces Dios envió una serie de plagas sobre los egipcios, terminando con la muerte del primogénito. Esos hogares con la sangre del cordero en el poste de la puerta se salvaron de esta tragedia. El ángel de la muerte “pasó” sus hogares. Hasta el día de hoy esta comida, junto con sus oraciones y canciones, hace que ese momento de liberación del pueblo elegido parezca como si fuera hoy.
Jesús tomó dos elementos de esa comida de Pascua -pan y vino- y los transformó en su cuerpo y sangre. San Pablo cuenta la última cena a los Corintios (1 Corintios 11:23-26). Ahora Jesús es el cordero, y su sangre es la fuente de nuestra liberación del poder de la muerte. Con su sangre hemos sido salvados.
Jesús no deja duda, en la institución de la Eucaristía, de que Él está presente para nosotros. Ese pan se convierte en su Cuerpo, y ese vino se convierta en su Sangre. Él no dice “Esto representa mi cuerpo”, o “Esto es un símbolo de mi sangre”. ¡Lo es! Es por eso que el Cuerpo de Cristo que no se consume en la celebración en la mesa del Señor se guarda en el tabernáculo, porque sigue siendo el Cuerpo De Cristo.
En nuestra mesa en casa comemos, compartimos y celebramos. Sería muy triste si nuestra comida familiar se redujera a sólo comer. Es nuestra oportunidad para compartir – nuestro día, nuestras esperanzas, nuestros logros, nuestros miedos y nuestras decepciones. Es nuestro momento para celebrar que nos amamos unos a otros en nuestra familia, que estamos involucrados en la vida del otro y que estamos comprometidos unos con otros. Alrededor de la mesa del Señor, hacemos más que comernos el cuerpo y la sangre de Jesús. Compartimos nuestras oraciones, que reflejan nuestra gratitud y nuestras preocupaciones. Compartimos nuestra fe en la oración y el canto. También celebramos que somos una familia de fe, una comunidad, y que nosotros también – al igual que nuestra propia familia – somos importantes el uno para el otro. Nosotros juntos formamos el cuerpo de Cristo.
Esta eucaristía es una importante fuente de gracia para nosotros. Aquí estamos alimentados y nutridos.
El fruto de la vida de Dios que compartimos se hace evidente en el evangelio (Juan 13:1-5). Esa gracia produce virtud dentro de nosotros. Esa gracia nos mueve hacia el servicio – viviendo a semejanza de Jesús el Salvador. El lavado de los pies es significativo, porque era el trabajo en la casa del sirviente en la parte inferior del peldaño. Ese era el trabajo del chico nuevo, la función desagradable que todos estaban felices de dejar atrás. Pero Jesús eligió ese servicio humilde – al borde de ser humillante- para dar a los apóstoles una señal concreta de su amor y dar de sí mismo. ¡Su escándalo en este acto no sería nada comparado con su confusión y tristeza por lo que iba a ocurrir en las próximas veinticuatro horas! Ese servicio en la cruz superaría el lavado de los pies a pasos agigantados. De hecho, ¡Él vino a servir, no a ser servido!
Este ejemplo de Jesús el Señor nos llama al servicio humilde de los otros. A veces puede significar hacer cosas mundanas, o cosas que preferiríamos no hacer, cosas que podemos sentir que están ‘por debajo’ de nosotros. Sin embargo, ese es el precio del servicio verdadero, inspirado por Jesús – respondiendo a la necesidad de otros. Para servir necesitamos una sensibilidad para reconocer la necesidad de los demás. Cuando estamos en contacto con nuestras propias necesidades, y reconocemos cómo nuestras necesidades han sido satisfechas –por el Señor y otros – podemos identificar y responder más fácilmente a las necesidades de los demás.
Esta noche celebramos la institución de la Eucaristía y la institución del Sacerdocio. Apreciemos esta comida sagrada – nuestra comida, compartir y celebrar – y experimentemos verdaderamente esa presencia divina del Señor cuando nos acercamos a encontrarlo en su cuerpo y sangre. Que su vida abundante en nosotros nos dé la gracia de servir, como Él sirvió, y de dar nuestras vidas generosamente en su nombre.

Diócesis de Bismarck

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Por Patti Maguire Armstrong – National Catholic Register.
“Ubicación, ubicación, ubicación” es un argumento popular al comprar una casa. Para muchas familias católicas, esa ubicación es Bismarck, Dakota del Norte, una capital cuya reputación como una sólida comunidad católica atrae a personas de todo el país.
Según Will Gardner, agente inmobiliario de Century 21 junto con su esposa, Laura, en los últimos cuatro o cinco años, ha habido una creciente tendencia de familias a mudarse aquí, atraídas por la sólida educación católica de la Universidad de Mary, las buenas escuelas católicas, las parroquias activas y los sacerdotes dinámicos. Es un lugar que tuvo buenos comienzos y ha prosperado con los años.
Hace treinta y cinco años, cuando mi esposo Mark buscaba trabajo en radio, oramos para que Dios nos guiara a un lugar donde pudiéramos crecer en santidad y criar a nuestros hijos en un buen ambiente. Un gerente de radio que buscaba un periodista se enteró de Mark a través de sus contactos y le ofreció el puesto. Vinimos y criamos a diez hijos aquí. En aquel entonces, cuando preguntábamos a los pocos forasteros qué los había traído a Bismarck, era sorprendente la frecuencia con la que la respuesta era: “Dios nos trajo aquí”.
Parecía un lugar bastante sólido en aquel entonces, a pesar de la escasez de sacerdotes. Pero con el tiempo, se arraigó un florecimiento lento y constante de una cultura católica dinámica, marcada por una explosión de vocaciones, mayor asistencia a misa, confesiones frecuentes, un crecimiento de familias jóvenes y un número cada vez mayor de eventos y actividades católicas.
¿Qué pasó?
Sin duda, el llamado diocesano a orar por las vocaciones hace 30 años tuvo un gran impacto, junto con la Hora Santa vespertina del lunes por las vocaciones, que comenzó hace más de 20 años en la Catedral del Espíritu Santo y desde entonces se ha extendido a otras parroquias. Tras su investidura en 1997, el obispo Paul Zipfel se comprometió a colocar un sacerdote en cada escuela secundaria católica y celebró una “Entronización del Sagrado Corazón de Jesús” en la diócesis. El obispo David Kagan, quien lo sucedió en 2011, renovó ambas iniciativas.
Otro factor clave es que la Universidad de Mary (UMary) pasó de ser una institución predominantemente regional a una que comenzó a atraer profesores de otros estados. Actualmente, figura en guías que destacan la auténtica educación católica, incluyendo la ” Guía de Identidad Universitaria Católica ” anual del Register.
Una vez establecidos esos estándares, los profesores comenzaron a reubicarse, y los estudiantes que buscaban una educación católica sólida y asequible empezaron a llegar de todas partes, y a quedarse. Gardner comentó que, además de familias que buscan un ambiente católico auténtico, también ve padres y hermanos que siguen a estudiantes universitarios. “Estoy ayudando a un abogado de California a encontrar una casa junto al lago, y acabo de ayudar a su hijo, que se graduó de la Universidad de Mary, a encontrar un hogar“.
Una familia que se mudó aquí desde Nevada”, dijo, “se sentía en el cielo porque podía ir a misa todos los días, a cualquier hora, en tantas iglesias. Hay misas por toda la ciudad, con una variedad de sacerdotes jóvenes y mayores, llenos de energía”.
En cuanto al frío invierno, Gardner lo ve como algo positivo, diciendo que anima a la gente a “trabajar duro, ser firme y comprometerse a estar aquí. Es un reflejo de su fe: quieren hacer las cosas bien, no siempre de la manera fácil”. Añadió que los veranos son hermosos.
En el sentido de las agujas del reloj desde arriba: los estudiantes rezan en la gruta mariana de la Universidad de María; la misa diaria atrae a los fieles a la Catedral del Espíritu Santo, y la familia Gallik se reúne en la iglesia, feliz de haberse mudado de Montana.Estudiantes rezan en la gruta mariana de la Universidad de Mary; la misa diaria congrega a los fieles en la Catedral del Espíritu Santo, y la familia Gallik se reúne en la iglesia, feliz de haberse mudado de Montana. (Foto: Cortesía de la Universidad de Mary; Patti Armstrong; y la familia Gallik)
Los ‘Elegidos Congelados’
Lacey y Mark Gallik se mudaron a Bismarck desde Bozeman, Montana, en julio de 2021 con sus siete hijos, quienes ahora asisten a St. Mary’s Central High School y a la escuela primaria Cathedral of the Holy Spirit.
“Fue un largo proceso de discernimiento”, admitió Lacey. Mientras oraba al respecto, Mark se cruzó con un viejo amigo, Mike McMahon, exentrenador de fútbol americano y administrador de la Universidad de Mary.
“Bismarck lo tiene todo: sacerdotes jóvenes y carismáticos y una universidad y una comunidad vibrantes”, les dijo.
El trabajo de Mark como director financiero de una empresa de software pasó a ser remoto en 2020, así que decidieron visitar Bismarck. “Era una semana fría y nublada de marzo”, recordó Gallik, pero de camino a casa, “todos los chicos dijeron que querían mudarse aquí”.
Los padres de Lacey también vinieron el pasado febrero. “Estoy totalmente tranquila”, dijo. “Tengo plena confianza en que aquí es donde Dios nos quiere. Mark y yo sentimos que nuestro hogar es donde está nuestra familia. No teníamos apego a Montana, pero sí a la idea de convertir a nuestros hijos en santos”.
Algo que les ayudó a tomar esa decisión fue una hoja de cálculo que Mark creó, donde enumeraba todas las oportunidades sacramentales en la ciudad. “Si los sacramentos van a santificar nuestras vidas, Jesús es adorado todo el día en la ciudad, y hay confesión todos los días”, dijo Lacey, y añadió que “los católicos fieles de Montana llaman a esta zona los ‘Elegidos Congelados’. Hay muchísima gente que viene de otros estados. Es bastante alocado, pero la gente está dispuesta a hacer cosas radicales por su familia y su fe”.
Kyla y Stuart Anderson, ambos farmacéuticos de Great Falls, Montana, vieron a su hijo graduarse de Carroll College en Helena. Su siguiente hija se matriculó en la Universidad de Mary en 2015. Cuando la familia los visitó, Kyla comentó que se enamoró de Bismarck. Luego, su segunda hija comenzó a asistir allí. “Empecé a rezar”, explicó. “Le decía a Nuestro Señor que me encantaría vivir en un ambiente tan católico”.
Tenían una farmacia provida en Montana, y cuando surgió la oportunidad de venderla, la aprovecharon. Mientras tanto, su hijo Carter ingresó al Seminario de San Pablo en St. Paul, Minnesota, para estudiar para la Diócesis de Helena con el obispo Austin Vetter. En una conversación con el obispo Vetter, quien anteriormente había servido en la Diócesis de Bismarck, este les confirmó a los Anderson que Bismarck era, sin duda, una comunidad católica fiel.
Se mudaron en mayo del año pasado. Su hija mayor vive en St. Paul y está esperando su segundo hijo. Otra hija asiste a la Universidad de Mary, y sus dos hijos menores asisten a la escuela secundaria St. Mary’s y a la escuela primaria St. Anne’s. “Bismarck ha superado nuestras expectativas”, compartió Anderson. “Quiero agradecer a la gente de Bismarck, no solo a la comunidad católica. Han sido muy amables y acogedores. Estoy asombrado por la cortesía y el esfuerzo que se demuestra aquí”.
Familias BismarckDerek y Bridget Turbide sonríen como recién casados ​​en una boda de la familia Anderson; los Turbide y los Anderson disfrutan de la vida de Dakota del Norte en Bismarck.
Estudiantes alojados
Derek Turbide, el mayor de ocho hermanos, se mudó a Bismarck en 2012 desde Palos Verdes Estates, una ciudad costera del condado de Los Ángeles, California. Quería vivir la experiencia del Medio Oeste durante cuatro años mientras asistía a una universidad católica pequeña y asequible.
Visitó la Universidad de Mary durante su penúltimo año de preparatoria. Su madre insistió en que eligiera el mes más frío para ver qué le esperaba. Llegaron en febrero y sufrieron una ventisca, pero Turbide se dejó seducir por el calor del campus. “Había una verdadera alegría que nunca había experimentado en ningún otro lugar”, dijo. “Allí se respiran los valores benedictinos, desde el rector hasta el profesorado y el alumnado”.
De vuelta en casa, compartió la experiencia con su amigo Mark Dever, un año mayor que él y que planeaba asistir a una pequeña universidad local donde su padre enseñaba. Turbide le sugirió a Dever que se arriesgara y fuera a la Universidad de Mary. “Si te gusta”, dijo, “nos vemos allí. Si no, no hay problema; siempre puedes volver”.
A Dever le gustó tanto que se quedó después de graduarse y ahora es el director creativo de Stand Firm Productions. El plan de Turbide para Dakota del Norte era inicialmente de solo cuatro años, pero luego conoció a Bridget, de Littleton, Colorado, con quien se casó, y ahora están echando raíces.
Su hermana Teresa está en el programa de enfermería en UMary, y su próxima hermana, Catherine, asistirá en otoño.
Turbide también se enamoró de la naturaleza, convirtiéndose en un ávido cazador y pescador, acompañado a menudo por Bridget. «Algo está sucediendo en Dakota del Norte que es muy grande, muy poderoso y muy cristiano», dijo.
Lo mejor, añadió, es que las iglesias de aquí son diferentes a todas las que ha visto, por el ruido. ¡Tantos niños!
“Dicen que si tu iglesia no llora, se está muriendo”, dijo Turbide. “Estaré aquí el resto de mis días”.

Domingo de Ramos 2025

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Evangelio según San Lucas 22,14-71.23,1-56.
Llegada la hora, Jesús se sentó a la mesa con los Apóstoles y les dijo:
He deseado ardientemente comer esta Pascua con ustedes antes de mi Pasión,
porque les aseguro que ya no la comeré más hasta que llegue a su pleno cumplimiento en el Reino de Dios“.
Y tomando una copa, dio gracias y dijo: “Tomen y compártanla entre ustedes.
Porque les aseguro que desde ahora no beberé más del fruto de la vid hasta que llegue el Reino de Dios“.
Luego tomó el pan, dio gracias, lo partió y lo dio a sus discípulos, diciendo: “Esto es mi Cuerpo, que se entrega por ustedes. Hagan esto en memoria mía“.
Después de la cena hizo lo mismo con la copa, diciendo: “Esta copa es la Nueva Alianza sellada con mi Sangre, que se derrama por ustedes. La mano del traidor está sobre la mesa, junto a mí.
Porque el Hijo del hombre va por el camino que le ha sido señalado, pero ¡ay de aquel que lo va a entregar!“.
Entonces comenzaron a preguntarse unos a otros quién de ellos sería el que iba a hacer eso.
Y surgió una discusión sobre quién debía ser considerado como el más grande.
Jesús les dijo: “Los reyes de las naciones dominan sobre ellas, y los que ejercen el poder sobre el pueblo se hacen llamar bienhechores.
Pero entre ustedes no debe ser así. Al contrario, el que es más grande, que se comporte como el menor, y el que gobierna, como un servidor.
Porque, ¿quién es más grande, el que está a la mesa o el que sirve? ¿No es acaso el que está a la mesa? Y sin embargo, yo estoy entre ustedes como el que sirve.
Ustedes son los que han permanecido siempre conmigo en medio de mis pruebas.
Por eso yo les confiero la realeza, como mi Padre me la confirió a mí.
Y en mi Reino, ustedes comerán y beberán en mi mesa, y se sentarán sobre tronos para juzgar a las doce tribus de Israel.
Simón, Simón, mira que Satanás ha pedido poder para zarandearlos como el trigo,
pero yo he rogado por ti, para que no te falte la fe. Y tú, después que hayas vuelto, confirma a tus hermanos“.
Señor, le dijo Pedro, estoy dispuesto a ir contigo a la cárcel y a la muerte“.
Pero Jesús replicó: “Yo te aseguro, Pedro, que hoy, antes que cante el gallo, habrás negado tres veces que me conoces“.
Después les dijo: “Cuando los envié sin bolsa, ni alforja, ni sandalia, ¿les faltó alguna cosa?”.
“Nada”, respondieron. El agregó: “Pero ahora el que tenga una bolsa, que la lleve; el que tenga una alforja, que la lleve también; y el que no tenga espada, que venda su manto para comprar una.
Porque les aseguro que debe cumplirse en mí esta palabra de la Escritura: Fue contado entre los malhechores. Ya llega a su fin todo lo que se refiere a mí”.
“Señor, le dijeron, aquí hay dos espadas”. El les respondió: “Basta”.
En seguida Jesús salió y fue como de costumbre al monte de los Olivos, seguido de sus discípulos.
Cuando llegaron, les dijo: “Oren, para no caer en la tentación”.
Después se alejó de ellos, más o menos a la distancia de un tiro de piedra, y puesto de rodillas, oraba:
“Padre, si quieres, aleja de mí este cáliz. Pero que no se haga mi voluntad, sino la tuya”.
Entonces se le apareció un ángel del cielo que lo reconfortaba.
En medio de la angustia, él oraba más intensamente, y su sudor era como gotas de sangre que corrían hasta el suelo.
Después de orar se levantó, fue hacia donde estaban sus discípulos y los encontró adormecidos por la tristeza.
Jesús les dijo: “¿Por qué están durmiendo? Levántense y oren para no caer en la tentación”.
Todavía estaba hablando, cuando llegó una multitud encabezada por el que se llamaba Judas, uno de los Doce. Este se acercó a Jesús para besarlo.
Jesús le dijo: “Judas, ¿con un beso entregas al Hijo del hombre?”.
Los que estaban con Jesús, viendo lo que iba a suceder, le preguntaron: “Señor, ¿usamos la espada?”.
Y uno de ellos hirió con su espada al servidor del Sumo Sacerdote, cortándole la oreja derecha.
Pero Jesús dijo: “Dejen, ya está”. Y tocándole la oreja, lo curó.
Después dijo a los sumos sacerdotes, a los jefes de la guardia del Templo y a los ancianos que habían venido a arrestarlo: “¿Soy acaso un ladrón para que vengan con espadas y palos?
Todos los días estaba con ustedes en el Templo y no me arrestaron. Pero esta es la hora de ustedes y el poder de las tinieblas”.
Después de arrestarlo, lo condujeron a la casa del Sumo Sacerdote. Pedro lo seguía de lejos.
Encendieron fuego en medio del patio, se sentaron alrededor de él y Pedro se sentó entre ellos.
Una sirvienta que lo vio junto al fuego, lo miró fijamente y dijo: “Este también estaba con él”.
Pedro lo negó, diciendo: “Mujer, no lo conozco”.
Poco después, otro lo vio y dijo: “Tú también eres uno de aquellos”. Pero Pedro respondió: “No, hombre, no lo soy”.
Alrededor de una hora más tarde, otro insistió, diciendo: “No hay duda de que este hombre estaba con él; además, él también es galileo”.
“Hombre, dijo Pedro, no sé lo que dices”. En ese momento, cuando todavía estaba hablando, cantó el gallo.
El Señor, dándose vuelta, miró a Pedro. Este recordó las palabras que el Señor le había dicho: “Hoy, antes que cante el gallo, me habrás negado tres veces”.
Y saliendo afuera, lloró amargamente.
Los hombres que custodiaban a Jesús lo ultrajaban y lo golpeaban;
y tapándole el rostro, le decían: “Profetiza, ¿quién te golpeó?”.
Y proferían contra él toda clase de insultos.
Cuando amaneció, se reunió el Consejo de los ancianos del pueblo, junto con los sumos sacerdotes y los escribas. Llevaron a Jesús ante el tribunal
y le dijeron: “Dinos si eres el Mesías”. El les dijo: “Si yo les respondo, ustedes no me creerán,
y si los interrogo, no me responderán.
Pero en adelante, el Hijo del hombre se sentará a la derecha de Dios todopoderoso”.
Todos preguntaron: “¿Entonces eres el Hijo de Dios?”. Jesús respondió: “Tienen razón, yo lo soy”.
Ellos dijeron: “¿Acaso necesitamos otro testimonio? Nosotros mismos lo hemos oído de su propia boca”.
Después se levantó toda la asamblea y lo llevaron ante Pilato.
Y comenzaron a acusarlo, diciendo: “Hemos encontrado a este hombre incitando a nuestro pueblo a la rebelión, impidiéndole pagar los impuestos al Emperador y pretendiendo ser el rey Mesías”.
Pilato lo interrogó, diciendo: “¿Eres tú el rey de los judíos?”. “Tú lo dices”, le respondió Jesús.
Pilato dijo a los sumos sacerdotes y a la multitud: “No encuentro en este hombre ningún motivo de condena”.
Pero ellos insistían: “Subleva al pueblo con su enseñanza en toda la Judea. Comenzó en Galilea y ha llegado hasta aquí”.
Al oír esto, Pilato preguntó si ese hombre era galileo.
Y habiéndose asegurado de que pertenecía a la jurisdicción de Herodes, se lo envió. En esos días, también Herodes se encontraba en Jerusalén.
Herodes se alegró mucho al ver a Jesús. Hacía tiempo que deseaba verlo, por lo que había oído decir de él, y esperaba que hiciera algún prodigio en su presencia.
Le hizo muchas preguntas, pero Jesús no le respondió nada.
Entre tanto, los sumos sacerdotes y los escribas estaban allí y lo acusaban con vehemencia.
Herodes y sus guardias, después de tratarlo con desprecio y ponerlo en ridículo, lo cubrieron con un magnífico manto y lo enviaron de nuevo a Pilato.
Y ese mismo día, Herodes y Pilato, que estaban enemistados, se hicieron amigos.
Pilato convocó a los sumos sacerdotes, a los jefes y al pueblo,
y les dijo: “Ustedes me han traído a este hombre, acusándolo de incitar al pueblo a la rebelión. Pero yo lo interrogué delante de ustedes y no encontré ningún motivo de condena en los cargos de que lo acusan;
ni tampoco Herodes, ya que él lo ha devuelto a este tribunal. Como ven, este hombre no ha hecho nada que merezca la muerte.
Después de darle un escarmiento, lo dejaré en libertad”.
Pero la multitud comenzó a gritar: “¡Qué muera este hombre! ¡Suéltanos a Barrabás!”.
A Barrabás lo habían encarcelado por una sedición que tuvo lugar en la ciudad y por homicidio.
Pilato volvió a dirigirles la palabra con la intención de poner en libertad a Jesús.
Pero ellos seguían gritando: “¡Crucifícalo! ¡Crucifícalo!”.
Por tercera vez les dijo: “¿Qué mal ha hecho este hombre? No encuentro en él nada que merezca la muerte. Después de darle un escarmiento, lo dejaré en libertad”.
Pero ellos insistían a gritos, reclamando que fuera crucificado, y el griterío se hacía cada vez más violento.
Al fin, Pilato resolvió acceder al pedido del pueblo.
Dejó en libertad al que ellos pedían, al que había sido encarcelado por sedición y homicidio, y a Jesús lo entregó al arbitrio de ellos.
Cuando lo llevaban, detuvieron a un tal Simón de Cirene, que volvía del campo, y lo cargaron con la cruz, para que la llevara detrás de Jesús.
Lo seguían muchos del pueblo y un buen número de mujeres, que se golpeaban el pecho y se lamentaban por él.
Pero Jesús, volviéndose hacia ellas, les dijo: “¡Hijas de Jerusalén!, no lloren por mí; lloren más bien por ustedes y por sus hijos.
Porque se acerca el tiempo en que se dirá: ¡Felices las estériles, felices los senos que no concibieron y los pechos que no amamantaron!
Entonces se dirá a las montañas: ¡Caigan sobre nosotros!, y a los cerros: ¡Sepúltennos!
Porque si así tratan a la leña verde, ¿qué será de la leña seca?”.
Con él llevaban también a otros dos malhechores, para ser ejecutados.
Cuando llegaron al lugar llamado “del Cráneo”, lo crucificaron junto con los malhechores, uno a su derecha y el otro a su izquierda.
Jesús decía: “Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen”. Después se repartieron sus vestiduras, sorteándolas entre ellos.
El pueblo permanecía allí y miraba. Sus jefes, burlándose, decían: “Ha salvado a otros: ¡que se salve a sí mismo, si es el Mesías de Dios, el Elegido!”.
También los soldados se burlaban de él y, acercándose para ofrecerle vinagre,
le decían: “Si eres el rey de los judíos, ¡sálvate a ti mismo!”.
Sobre su cabeza había una inscripción: “Este es el rey de los judíos”.
Uno de los malhechores crucificados lo insultaba, diciendo: “¿No eres tú el Mesías? Sálvate a ti mismo y a nosotros”.
Pero el otro lo increpaba, diciéndole: “¿No tienes temor de Dios, tú que sufres la misma pena que él?
Nosotros la sufrimos justamente, porque pagamos nuestras culpas, pero él no ha hecho nada malo”.
Y decía: “Jesús, acuérdate de mí cuando vengas a establecer tu Reino”.
El le respondió: “Yo te aseguro que hoy estarás conmigo en el Paraíso”.
Era alrededor del mediodía. El sol se eclipsó y la oscuridad cubrió toda la tierra hasta las tres de la tarde.
El velo del Templo se rasgó por el medio.
Jesús, con un grito, exclamó: “Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu”. Y diciendo esto, expiró.
Cuando el centurión vio lo que había pasado, alabó a Dios, exclamando: “Realmente este hombre era un justo”.
Y la multitud que se había reunido para contemplar el espectáculo, al ver lo sucedido, regresaba golpeándose el pecho.
Todos sus amigos y las mujeres que lo habían acompañado desde Galilea permanecían a distancia, contemplando lo sucedido.
Llegó entonces un miembro del Consejo, llamado José, hombre recto y justo,
que había disentido con las decisiones y actitudes de los demás. Era de Arimatea, ciudad de Judea, y esperaba el Reino de Dios.
Fue a ver a Pilato para pedirle el cuerpo de Jesús.
Después de bajarlo de la cruz, lo envolvió en una sábana y lo colocó en un sepulcro cavado en la roca, donde nadie había sido sepultado.
Era el día de la Preparación, y ya comenzaba el sábado.
Las mujeres que habían venido de Galilea con Jesús siguieron a José, observaron el sepulcro y vieron cómo había sido sepultado.
Después regresaron y prepararon los bálsamos y perfumes, pero el sábado observaron el descanso que prescribía la Ley.

Homilía del Padre Paul Voisin CR de la Congregación de la Resurrección:

En Roma, Italia, he visitado a menudo un lugar sagrado en particular. Se trata de la heladería Della Palma, cerca del Panteón. Ofrecen más de ciento cincuenta sabores de helado. Cada vez que voy, elijo bolas de diferentes tipos -con fruta, con nueces o cualquier otra característica que le dé un sabor único- pero siempre al menos una bola de una de las más de veinte opciones de chocolate. Al fin y al cabo, somos libres de cambiar de opinión; de lo contrario, no habría tantas opciones disponibles.
Siempre pienso en este aspecto del cambio de opinión cuando escucho los dos evangelios de hoy, Domingo de Ramos. Este es el único día del año litúrgico en que escuchamos dos evangelios. Son diametralmente opuestos. Primero escuchamos el evangelio de la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén (Lucas 19:28-40), y luego la lectura de la Pasión (Lucas 22:14-23:56). En el primero, la multitud recibe a Jesús en la ciudad santa y canta “¡Hosanna! ¡Bendito el que viene en el nombre del Señor!”, extendiendo sus mantos en el camino ante él, como una alfombra, para dar la bienvenida al gran maestro y hacedor de milagros de Galilea. Sin embargo, solo unos días después, la misma multitud grita: “¡Crucifícalo! ¡Crucifícalo!”. Obviamente, en pocos días, la gente cambió de opinión sobre Jesús.
Durante estas últimas semanas de Cuaresma, las lecturas diarias reflejan una creciente oposición a Jesús. Ha sanado a personas en sábado. Ha llamado a Dios su Padre, incluso con el término cariñoso “Abba” o “Papá”. Los funcionarios del templo, los fariseos, están cada vez más preocupados por la fama que está adquiriendo. Además, los reta por no predicar y desviar a sus congregaciones. Las autoridades judías también estaban preocupadas, políticamente, por que este Jesús y sus seguidores incitaran una revuelta que amenazara el delicado equilibrio que intentaban mantener con las autoridades romanas. Ya contaban con líderes autorizados, y no había cabida para un autoproclamado Mesías. Esto podría acarrear la pesada mano de Roma sobre ellos.
La mayoría de la gente de Jerusalén no lo conocía, como sí lo conocían los de Capernaúm y Nazaret. La mayoría solo había oído hablar de él: de sus sabias palabras y sus milagros. Al enterarse de que entraba en su ciudad para la Pascua, se congregaron para darle la bienvenida, por si acaso los rumores eran ciertos y realmente era el Mesías. El Viernes Santo, ante esta falta de conocimiento y experiencia personal de la mayoría sobre Jesús, solo hacía falta que algunos infiltrados se infiltraran entre la multitud y los incitaran con rumores, medias verdades, exageraciones y mentiras. La multitud, más curiosa que creyente, podía volverse rápidamente contra Jesús.
En nuestra condición humana, quizás podamos identificarnos con ambas multitudes: la del Domingo de Ramos y la del Viernes Santo. A veces, nuestras palabras, acciones y vidas dan alabanza y gloria a Jesús. Nos llenamos de gracia y le respondemos como fieles discípulos y administradores. Sin embargo, en otras ocasiones, nuestras palabras, acciones y vidas niegan o traicionan nuestra relación con Jesús. En lugar de la gracia obrando en nosotros, hay pecado. En lugar de testimonio, hay mal ejemplo. Y en lugar de discipulado y corresponsabilidad, hay apatía o animosidad.
La decisión que tomemos esta semana al acompañar a Jesús el Jueves Santo —en la Misa de la Institución de la Eucaristía y el Sacerdocio —, el Viernes Santo — en el Vía Crucis y en la Liturgia de la Pasión y Muerte —, y en la Vigilia Pascual y las Misas del Día de Pascua — celebrando la Resurrección — es mucho más importante que el sabor de helado que nos haya llamado la atención. Estamos hablando y mostrando quiénes somos en relación con Jesucristo. Hagamos de esta semana una verdadera «Semana Santa» al dedicar tiempo a acompañar a Jesús y a nuestros hermanos y hermanas en Cristo en estas celebraciones de nuestra fe, consolidando y expresando que Jesús es verdaderamente nuestro Salvador y que le pertenecemos.