No soy ninguna experta en los errores del razonamiento humano, aunque es un tema que me parece interesante y me ha llamado siempre la atención. Para no cansar a los que no comparten mi misma pasión por el desarrollo moral -motivo de la mayoría de entradas de este blog- comparto aquí algunas ideas sobre el razonamiento. Tomo el caso del razonamiento de probabilidades, un clásico largamente estudiado por los psicólogos, como un ejemplo entre otros muchos posibles.
El razonamiento es un proceso que permite a las personas extraer conclusiones a partir de premisas dadas previamente. Dentro de las teorías acerca del razonamiento humano, el razonamiento probabilístico es considerado un tipo de razonamiento que se apoya en los modelos de la teoría de probabilidades. La probabilidad es un concepto matemático que tiene que ver con las leyes del azar: es la frecuencia esperada o teórica cuando entran en función las leyes de la casualidad.
Los valores de probabilidad varían entre 0 y 1, donde el valor 1 equivale a la certeza absoluta y el valor 0 equivale a la ausencia de probabilidad. Por ejemplo, la probabilidad de que “Juan muera algún día” es 1 (100 % de certeza de que ocurrirá), mientras que la probabilidad de que “María viva 270 años” es 0 (100 % de certeza de que el evento no ocurrirá). Sin embargo, en la vida cotidiana los eventos rara vez tienen una probabilidad de 1 ó 0, sino que las probabilidades se ubican en un número intermedio entre estos dos extremos.