En varias ocasiones he dicho en este blog que me parece que en el Perú a muy poca gente le importa verdaderamente la infancia, aunque las autoridades digan retóricamente lo contrario. En este post reciente, por ejemplo, hablé del problema de la educación inicial y de la indiferencia de muchas personas hacia ella.
Ahora quiero señalar ya no la tremenda falta de servicios para niños (parques, museos infantiles, etc.) que tienen nuestras ciudades, sino simplemente el pésimo y lamentable estado en que se encuentran los pocos que tenemos.
Salí a pasear con una amiga y nuestros dos niños al parque Batalla de Abtao, que si no me equivoco pertenece al distrito de Lince. Las plantas del parque están muy bien cuidadas, lo que es muy positivo en una ciudad como Lima que cada vez tiene más cemento y menos verde (dicho sea de paso, ayer pasé por la avenida Arequipa a la altura de la primera cuadra, y vi que habían sacado todo el césped de la berma central y estaban poniendo adoquines de cemento!!). Sin embargo, los juegos del parque, que fueron novedosos cuando se inauguraron por haber sido diseñados por artistas plásticos, se encuentran en un estado más que vergonzoso.
Y no digo solamente que les falta pintura (aunque claro, una manita de color no les caería nada mal):
sino cosas que ya atentan contra la seguridad y la diversión de los niños. Miren por ejemplo esta red: