Ahora que por todos lados se oyen voces, a mi juicio desinformadas, acerca de que la moral es básicamente un conjunto de emociones, y que la educación “en valores” (como la llaman casi todos) debe orientarse a trabajar los afectos, porque “lo cognitivo” es muy duro, o muy incompleto, o cosas así, este artículo de Larry Nucci cae como refrescante agua en el desierto.
La referencia es esta:
Nucci, L (2016). Recovering the role of reasoning in moral education to address inequity and social justice. Journal of Moral Education, 45 (3), 291-307.
A mi se me hace muy evidente que sin fomentar el razonamiento no hay educación moral, y que ese no es solo un componente más -entre otros muchos posibles- sino que debe ser el foco, lo central de todo proyecto educativo. Sé sin embargo que no es así para la mayoría y por eso recomiendo mucho la lectura de este artículo. Es un excelente texto. Les dejo el abstract:
This article reasserts the centrality of reasoning as the focus for moral education. Attention to moral cognition must be extended to incorporate sociogenetic processes in moral growth. Moral education is not simply growth within the moral domain, but addresses capacities of students to engage in cross-domain coordination. Development beyond adolescence in moral thinking is in two forms: (1) the gradual application of morality in broader adult contexts, and (2) the result of social discourse and progressive readjustments at the individual and societal level of views of the morality of societal practices. Postconventional moral reasoning is not a rarified stage of moral cognition, but an orientation and set of discourse skills potentially available to all normally developing adult moral reasoners.

Martín Salinas, psicólogo educacional y ex alumno mio de la PUCP, ha escrito esta breve reflexión acerca de los conservadurismos en el fútbol de menores, un asunto al que muy poca gente le presta atención.
Hace unos días puse el enlace a una noticia sobre el reciente fallo de la Corte Constitucional de Colombia que le da la razón a una estudiante acerca de que no es legal, ni bueno ni adecuado, que un colegio prohíba el uso de “mechas californianas”. En realidad, el asunto es más de fondo, pues tiene que ver con el control que pretenden ejercer muchos colegios sobre el modo en que los estudiantes se visten y arreglan, es decir, sobre su apariencia personal y sus cuerpos. La entrada sobre el tema es