Uno a veces se pregunta cómo se toman ciertas decisiones educativas o, mejor dicho, por qué – a pesar de los enormes avances de la investigación psicológica- aun subyacen errores conceptuales de fondo en muchas personas que tienen la capacidad de decidir planes y políticas en el sector educación. Quizá la información no llega a ellos como debiera llegar, lo que es muy preocupante y lamentable. Quizá no la consideran importante, lo que resultaría mucho peor.
Una idea plenamente equivocada pero lamentablemente bastante común es asumir que las competencias desarrolladas en un campo disciplinar se van a trasladar a otro como por arte de magia, y que por lo tanto, si se desarrolla la capacidad de leer un cuento también se desarrolla la de leer un texto científico, y que si desarrollamos el pensamiento lógico matemático entonces este se trasladará a la ciudadanía y como consecuencia tendremos ciudadanos participativos y críticos.
Nada más lejos de la realidad. Los enfoques que asumían que uno podía ejercitar ciertas habilidades (la capacidad de análisis por ejemplo) en el “vacío”, es decir, con ejercicios en abstracto, como si se tratara de ejercitar un músculo levantando una pesa, y que luego esta capacidad así generada se generalizaría a todos los campos y contenidos disciplinares están hace tiempo desacreditados. El conocimiento implica una relación entre el individuo y las características del objeto con el que se relaciona y del contexto en el que ocurre tal relación. Así, las investigaciones indican que el aprendizaje es situado y que los programas llamados integrados o infusionados (Monereo, Pozo y Castelló, 2001) son los que tienen efecto durable en los aprendizajes de los estudiantes. Se trata entonces de aprender las cosas en contexto porque los contenidos específicos con los cuales se relaciona el sujeto (las características del objeto con el que entra en relación) le hacen demandas distintas a su sistema cognitivo, las que no siempre son generalizables a contextos y materias diferentes de aquellas con las que se aprendió.