Cuando yo hacía mi doctorado en los Estados Unidos hubo un chico que se suicidó por deudas. Ni siquiera trabajaba, pero ya tenía sus tarjetas de crédito sobregiradas y había acumulado tal cantidad de deuda que simplemente percibió que no podría salir del hoyo, y se mató. Y estamos hablando de un país en el que la gente está mucho más familizarizada que nosotros al crédito y al uso de tarjetas.
Definitivamente, muchas personas no saben manejar sus recursos, gastan más de lo debido, no entienden como funcionan los créditos y, muchas veces, son presa fácil de préstamos engañosos que los llevarán a la quiebra. ¿Qué los lleva a actuar así? ¿Cómo hacen las familias para introucir a los niños en la vida económica? ¿Lo hacen de manera crítica, o no? Precisamente de estos temas se ocupa Marianela Denegri, reconocidísima psicóloga que trabaja en la Universidad de la Frontera, en Temuco, Chile, y muy conocida experta en psicología económica.
He puesto en otras entradas del blog enlaces a trabajos suyos. Ahora quiero dejarles una entrevista titulada “los chilenos somos analfabetos económicos” (aplica para los peruanos también), en la que da mucha información interesante sobre el tema. A leerla aquí.
Estimada Susana,
Esta es una brecha enorme en la formación escolar e incluso universitaria de los estudiantes.
El modelo de manejo del dinero lo heredamos de nuestros padres, y el patrón se mantiene a lo largo de nuestra vida, excepto que deseemos emprender otra vía de ganancias o romper con esquemas heredados. Kiyosaki lo explica muy bien en su libro "Padre rico, padre pobre". Fuera de lo discutible que es su enfoque, rescato el que ponga sobre el tapete la importancia real de la educación financiera de los hijos. Claro, el problema es que trasmitimos lo que sabemos, y muchas veces no es ni la unica ni la vía más adecuada de llevar las finanzas en la vida real en el tiempo que le toca vivir a los hijos, sobre todo si sus expectativas de convivencia con el dinero son distintas a las nuestras.
Saludos!