La revista Human Development (que muchos años atrás se llamaba Vita Humana) ha reeditado un articulo clásico de Lawrence Kohlberg:
Kohlberg, L. (2008). The Development of Children’s Orientations Toward a Moral Order. I: Sequence in the development of moral thought. Human Development, Vol. 51, 1, 8 – 20
Que es una reimpresión de este artículo:
Kohlberg, L. (1963). The development of children’s orientation toward a moral order, I: Sequence in the development of moral thought. Vita Humana, 1963, 6, 11-33.
Los artículos y libros de Kohlberg son de difícil acceso para muchas personas, muchos están agotados, y otros se encuentran en revistas muy antiguas o que las bibliotecas locales no tienen. En este sentido esta reimpresión es bienvenida (algo que algunos consideran como “las obras completas” de Kohlberg son los libros The psychology of moral development y The philosophy of moral development, pero ambos están agotados hace mucho tiempo y además, debieron ser parte de una trilogía de la cual el último tomo, que debió haberse llamado The education of moral development, no salió jamás, por lo que no son tan obras completas que digamos).
Lawrence Kohlberg solía decir que el niño pequeño es un filósofo. Y es un filósofo porque los niños durante su desarrollo lidian con las grandes interrogantes que han mantenido ocupados a los filósofos durante siglos: están interesados en las categorías básicas de la experiencia. Parte del encanto que nos ofrece un niño pequeño es su forma idiosincrásica de lidiar con las constancias de los objetos del mundo. Aquellos que tienen hijos saben que si un bebé de -por ejemplo- 6 meses está tratando de alcanzar un objeto, dejará de hacerlo si este se cubre con un pañuelo: el juguete no existe ya para él. A los 18 meses el niño sabe que los objetos existen aunque él no pueda verlos todo el tiempo, pero no es sino hasta los 6 años aproximadamente cuando los niños ven la naturaleza física y la identidad de un objeto como inmodificables. Ese mismo desarrollo de las categorías de la experiencia aparece también en el campo de la moral, aunque muchos de nosotros no estamos acostumbrados a pensar en los niños como filósofos que establecen constancias en el mundo también en ese campo.
El abstract del artículo que se ha reimpreso es este:
The article focuses on the development of children’s orientations toward a moral order in relation to the view of moralization by most social scientists as a process of internalizing culturally given external rules through rewards, punishments or identification. From the perspective of a developmental psychology such as that of Jean Piaget or J.M. Baldwin, internal moral standards are rather the outcome of a set of transformations of primitive attitudes and conceptions. These transformations accompany cognitive growth in the child’s perceptions and orderings of a social world with which he is continuously interacting.