El aprendizaje y la enseñanza de la historia fue el tema de mi clase de esta semana en el curso de procesos cognitivos y afectivos aplicados a la educación.
Si bien el tiempo de la clase es breve como para discutir a fondo un tema tan complejo (y fascinante, desde mi punto de vista), sí alcanzamos a hacer tres lecturas sobre el tema y a generar discusión sobre ellas, lo que creo sirvió como para darles a los alumnos una idea de lo que está detrás de la enseñanza de la historia. Ya en la práctica tendrán oportunidad de analizar el Diseño Curricular Nacional y debatir sobre los programas que abordan temas de historia y Ciencias Sociales en la escuela pública de nuestro país.
Las lecturas que hemos hecho para esta clase (las reparti en distintos grupos, no todos leyeron todas) son:
Cole, E. (2007). Transitional Justice and the Reform of History Education. The International Journal of Transitional Justice, Vol. 1, 115–137
Carretero, M. y Limón, M. (2005). Construcción del conocimiento y enseñanza de las ciencias sociales y la historia. En Carretero, M. Construir y enseñar las ciencias sociales y la historia. Buenos Aires: Aique
Piaget, J. (1999). La psicología del niño y la enseñanza de la historia. En Piaget, J. De la pedagogía. Buenos Aires: Paidós.
La primera lectura trata el tema del rol de los cursos de historia en sociedades que se están recuperando de conflictos internos (etapas de justicia transicional). Sobre ella he comentado algo en este enlace.
La segunda aborda el tema de la construcción del conocimiento histórico por parte de los niños, analizando sus ideas previas y la manera en que manejan el tiempo y la causalidad histórica.
La tercera lectura es un comentario que hace Jean Piaget acerca de las características del pensamiento infantil y su relación con el aprendizaje de la historia. Revisa para ello algunos datos de investigaciones que revelan la particular concepción de los hechos históricos que tienen los niños en función de su egocentrismo (pensar que el pasado es similar al presente que conocen solo que lleno de “cosas viejas”, tipo las casas de los picapiedra) o a su incapacidad para operar sobre el tiempo y el espacio (no comprender los tiempos paralelos en dos espacios geográficos distintos, o pensar por ejemplo que sus padres o abuelos participaron de las cruzadas!).
Habría que prestarle un poco más de atención a estos temas. Definitivamente la investigación sobre ellos ha aumentado, pero aun es un tema minoritario si se le compara por ejemplo con los estudios acerca de la construcción del número y el aprendizaje de las matemáticas, que son mucho más abundantes. La historia (y las CCSS en general) son materias fundamentales para construir identidad, para descentrar a los niños de su particular punto de vista y darles la oportunidad de coordinar perspectivas y ver el mundo desde el punto de vista de los demás, para construir estructuras de causalidad complejas (ya que la causalidad histórica reviste complejidades particulares y los hechos históricos siempre son multicausados), para entender procesos dinámicos, y mucho más. Es una pena que en la mayoría de escuelas se desconozcan los aportes psicológicos al respecto, y se aborde a menudo la enseñanza de la historia y de las CCSS tan precaria e intuitivamente.
Hola Susana,
es bien interesante el investigar ka enseñanza de la historia en niños andinos que tienen lenguas en las que hay marcadores de validación y evidencialidad.
Un artículo que nos habla sobre las peculiaridades de la enseñanza de historia en niños andinos (aunque no tengo la lectura muy presente ahora)es el de Teresa Valiente: "Historia social, historia local y educación bilingüe". (En: Allpanchis. Lengua y nación en el mundo andino. N° 29/30 Año XIX. Instituto de Pastoral Andina. Cusco, 1987.)
Saludos
n
Hola Nila,
A ver, cuentame mas de ese articulo. Y si puedes, explica a los legos (como yo) que son marcadores de validación y evidencialidad.
Hola Susana,
dice Adelaar: "La evidencialidad hace una distinción entre hechos observados personalmente (‑mi) y hechos de observación no-personal o indirecta (‑si). Se trata de una distinción principalmente objetiva. La validación es sobre todo subjetiva porque diferencia entre casos en los que el hablante se hace responsable de la autenticidad de los hechos comunicados (‑mi) y casos en los que, por el contrario, el hablante declina tal responsabilidad (‑si).
Enseñar historia a un niño andino y decirle por ejemplo: "Colón dEscubrIó América" para el niño, como que no, porque el profe no ha evidencializado el hecho, sino que se lo han contado y se la ha creido,,,
En verdad, es bien delicado el asunto. En cuanto tenfa el artículo (no sé a quién le he prestado el libro y no me lo ha devuelto) lo escaneo y te lo paso
Nila, interesante. Hay muchas investigaciones desde el enfoque Piagetano, obviamente no contextualizadas en educación bilingue ni mucho menos, que también seria interesante revisar, por ejemplo, aquellas que tratan con cómo entienden los niños los hechos que no han vivido, aquello que "les cuentan" pero que ellos no tienen oportunidad de ver. A ver si mas adelante retomo el tema.
Me parece acertado su comentario sobre la enseñanza de la historia en ese nivel, pero los profesores no estan capacitados para problematizar un problema histórico en el tiempo y espacio y hacer que el infante se interese por la patria chica y a parit de ahi vaya creando un conocimiento propio, para que pueda romper con el paradigma de la historia oficial.
hola Susana, me pareció muy interesante el tratamiento que hace sobre este tema que lo considero muy importante para la formación de los niños y jóvenes. Es necesario que demos la importancia debida a la enseñanza de la historia pues es la base cognitiva y valórica necesaria en la formación de los niños y jóvenes. Nosotros los peruanoa tenemos una base muy débil en la valoración de lo histórico, sino tomamos atención en ello que esperamos de nuestro país de aqui a unos años?. Es justo que nuestros niños y jóvenes tengan una valoración de la cultura y su cultura para poder identificarse con ella plenamente.