Por Luciano Revoredo- www.laabeja.pe
Un día como hoy 17 de mayo, en 1980, mientras el Perú se aprestaba para celebrar las elecciones generales, en Chuschi, Ayacucho, Sendero Luminoso hizo su primera acción pública. En una rápida incursión destruyó las ánforas y las actas que serían usadas en aquel proceso electoral. Ese fue el inicio de la etapa más negra en la historia nacional. Una pesadilla que se prolongó por más de una década de la más brutal violencia, de un absoluto desprecio por la vida humana por parte de este grupo terrorista que declaró la guerra al país.
Poco a poco fuimos acostumbrándonos a convivir con la muerte. Todo el Perú se convirtió en el escenario de la perversidad y la crueldad senderistas. La masacre de campesinos, religiosos, técnicos, políticos, empresarios, autoridades y sobre todo miembros de las fuerzas armadas fue convirtiéndose en noticia de todos los días.
Lamentablemente la memoria colectiva es frágil y las sociedades se acostumbran rápidamente a los cambios sobre todo si son para mejor. Es así, que tras la derrota militar y política del senderismo por parte del gobierno del Presidente Fujimori, poco a poco fuimos olvidando la pesadilla que vivimos. Hoy en día los jóvenes mayoritariamente ignoran lo que fueron esos años.
Todo esto sumado a la infame complicidad de la izquierda, que a través de la siniestra Comisión de la Verdad, de personajes indignos como García Sayán y tontos útiles como Paniagua, ha venido maquillando la verdad, hablando de conflicto armado interno, liberando terroristas, etc.
Es así que surge una especie de historia oficial basada en la vileza de estos aliados del terror. La llamada izquierda caviar se suma a esta tendencia y hoy en día se pretende equipara el terror con la heroicidad y la legalidad de las acciones con que nos protegieron las fuerzas armadas.
El reciente caso del Lugar de la Memoria, conocido como LUM, en una curiosa coincidencia fonética con la palabra LUMinoso, no es más que la punta del iceberg. Se trata de un centro de adoctrinamiento y apología terrorista.
Han de quedar grabados para la historia de la infamia, los nombres de los promotores de este lugar. Mario Vargas Llosa entre ellos y el entonces alcalde de Miraflores Manuel Masías, que de manera inconsulta, entregó un valioso terreno de propiedad de los vecinos de Miraflores para la construcción de este albañal ideológico.
Las consecuencias de tantos años de engaño y de construcción de una “verdad” a la medida de las izquierdas cómplices del terror es que ahora muchos ya les creen. Una prueba de ello son los desatinos publicados hoy en la página web del internacional History Channel:
“Sendero Luminoso es fundado a fin de la década del 60 por un grupo de militantes e intelectuales de izquierda liderados por el profesor Abimael Guzmán. Fuertemente arraigado en regiones campesinas pobres y estudiantes universitarios, el grupo es responsable de 35,000 muertes hasta su desarticulación casi completa en la década del 90. Sendero Luminoso provoca el surgimiento de grupos paramilitares de derecha cuyos métodos similares de aniquilamiento y represalia dejan un número semejante de victimas en la sociedad peruana. El grupo terrorista resurgió en 2003 y aún se mantiene activo en ciertas zonas de Perú”.
Es decir toda la versión caviar en un párrafo. Contra esto es que hay que luchar. La defensa de la realidad, de la verdad histórica, el desenmascaramiento del terror y sus aliados es un deber de todo peruano bien nacido.
Francisco Tudela: “El LUM es la falsificación deliberada de la historia”
Por Sofía López- Diario Correo.
Francisco Tudela, excanciller de Alberto Fujimori, considera que en las instituciones del Estado deben decidir “si van a ceder dócilmente a esta falsificación de la historia” en casos de apología al terrorismo.
¿Qué definición le daría al Lugar de la Memoria (LUM)?
El LUM es una derivación de la Comisión de la Verdad y la Reconciliación.
¿Cuál cree usted que es su orientación ideológica?
Su orientación no es solamente la del guía del LUM, sino que representa un criterio compartido en los sectores que han manejado la institución desde su concepción.
¿Qué podemos decir de lo ocurrido con el congresista Edwin Donayre en el LUM?
Lo que pasó alerta al Perú sobre un problema muchísimo más grave que es el control -casi absoluto- de los espacios de pensamiento por el neomarxismo que vuelve a sus orígenes y, por ende, de su narrativa.
¿Cuál cree que es el problema de fondo del LUM?
Es la falsificación deliberada de la historia desde una multiplicidad de instituciones, algunas públicas y privadas, pertenecientes a las esferas del mundo mediático, del mundo académico y del mundo de las ONG.
¿Y qué cree que buscan esas tres esferas?
Estos tres espacios alienados debajo de la política de la historia satisfacen expectativas que vienen de la izquierda europea y la izquierda norteamericana.
¿Observa algún responsable?
Hay decenas de responsables. Desde el fundador del LUM que fue Mario Vargas Llosa, también el Gobierno alemán, hay responsables en las Naciones Unidas que vendieron este proyecto al expresidente Alejandro Toledo, pasando por los directores y todos los ministros de Cultura y de Educación que no se han atrevido o se han beneficiado de esta nueva narrativa; además de los profesores universitarios que no solo son de extrema izquierda.
¿Hay forma de corregir esta situación?
Tendría que haber una toma de conciencia de los políticos, frente a lo cual soy escéptico.
¿Qué más se puede hacer?
El Perú tiene que definir a través del Parlamento, de la Presidencia y del ministerio de Cultura y de Educación si van a ceder dócilmente a esta falsificación de la historia o si van a reaccionar con severidad.
¿Qué podemos rescatar de lo ocurrido?
Se ha mostrado con claridad la narrativa ideológica que tergiversa la historia nacional. El Perú tiene que comprender que, dependiendo de que su historia sea verdadera o no, podrá construir su futuro. Si el país construye su historia sobre la verdad, podrá crear una identidad nacional que no sea puesta en duda.
Edwin Donayre visita el LUM
El congresista de Alianza para el Progreso (APP) Edwin Donayre ha solicitado la reestructuración del Lugar de la Memoria (LUM), luego de una visita que hizo a finales de abril, en donde, según denunció, una trabajadora de la institución hizo apología al terrorismo. Gabriela Eguren, especialista en estrategias pedagógicas y artísticas, ha negado esta acusación.
A continuación las claves para entender el caso:
1. Donayre encubierto
Durante la última semana de representación, el congresista Edwin Donayre acudió al Lugar de la Memoria (LUM), donde aparentando ser otra persona (con peluca y disfraz), grabó a Gabriela Eguren, especialista en estrategias pedagógicas y artísticas del recinto. El ex comandante general del Ejército publicó el video a inicios de esta semana, donde se ve y escucha a Eguren dar una serie de opiniones personales sobre la lucha contra el terrorismo y el indulto humanitario al ex presidente Alberto Fujimori.
“El ex presidente [Pedro Pablo Kuczynski] acaba de indultar a Fujimori bajo el supuesto motivo de que está enfermo, bajo la premisa que está enfermo, podría también el abogado de Abimael Guzmán [cabecilla de Sendero Luminoso] pedir que se le libere porque está viejo y enfermo”, indica la trabajadora del LUM durante la visita guiada a Donayre y otras personas.
Donayre acusó, tras recorrer el Lugar de la Memoria, que en esa institución se hace “apología al terrorismo”. Agregó que el Ministerio de Cultura le envió una “carta irónica” en la que le agradecieron su visita, pese a que fue de encubierto.
2. La respuesta de la ministra Balbuena
La ministra de Cultura, Patricia Balbuena, indicó que Eguren fue retirada del Lugar de la Memoria, porque “una persona que trabaja en un lugar como este no puede dar opiniones personales, porque no cabe”. Agregó que todos los guías y funcionarios del LUM deben ampararse en información que “esté corroborada y que sea de carácter oficial”.
“En la medida de que el personal no cumpla con esas reglas básicas de trabajo tenemos que retirarlas para que esto no se vuelva a repetir”, manifestó anoche en el programa “Nada está dicho”.
Balbuena consideró que el LUM debe “contribuir” al proceso de “sanar” el país, que aún tiene heridas abiertas por el terrorismo.
Explicó que para ello el relato en las visitas guiadas “tiene que ser tratado con profesionalismo” por respeto a las víctimas.
3. “No estoy relacionada a SL ni al MRTA”
Gabriela Eguren, la ahora ex trabajadora del LUM grabada por Donayre, negó que la acusación hecha por el congresista de APP, en el sentido, de que ella hizo apología del terrorismo durante su exposición. Afirmó que no tiene ninguna relación con Sendero Luminoso ni con el MRTA ni con el Movadef u otro grupo terrorista. “Yo quiero negar todos estos cargos”, expresó.
En comunicación con “Américas Noticias”, Eguren contó que el parlamentario de Alianza para el Progreso se presentó como un ciudadano colombiano desplazado por las Fuerzas Armadas de Colombia y que, además, fingió ser sordomudo. “Entonces, este señor Donayre a través de otro señor pide que haga énfasis en el accionar violento de las Fuerzas Armadas en contra de la sociedad civil”, refirió.
La ex trabajadora del LUM también señaló que “señora chilena que vino con Donayre” le preguntó “todo el tiempo” sobre el indulto al ex presidente Alberto Fujimori y sobre la situación del cabecilla terrorista Abimael Guzmán.
“Yo conozco a las víctimas, tengo años escuchando audiencias, conociendo a las personas afectas, jamás voy a querer que esto [el terrorismo] vuelva a suceder”, acotó.
4. El video está en evaluación
El ministro del Interior, Mauro Medida Guimaraes, informó ayer que una unidad especializada de la Policía Nacional “está evaluando este video”, en referencia a la grabación hecha por Edwin Donayre.
“La unidad especialidad está evaluando este video, lo tiene que evaluar desde diferentes enfoques, entonces estamos esperando los resultados y, seguramente, con la participación del Ministerio Público se van a adoptar las acciones correspondientes”, indicó.
Al respecto, la congresista de Nuevo Perú Indira Huilca dijo que a Gabriela Eguren se le “está haciendo una imputación que es muy delicada” e indicó que el Parlamento no puede “ser cómplice de ello”.
“Hay que revisar toda la información, esa señorita no ha cometido ningún delito, se le está intentado montar una estrategia de negacionismo y es lamentable que para eso se preste un congresista”, manifestó en el pleno del Parlamento.
Fuente: Diario El Comercio.
Terrorismo a secas
Por Diana Seminario– Diario El Comercio.
La nuestra fue la generación del terrorismo, de las bombas y de los paros armados. Sonaba un estruendo y la siguiente pregunta era ¿dónde habrá sido? No había peruano que no supiera qué era un carro-bomba, un ‘terruco’. A todos se nos ha muerto alguien a causa del terror. Un pariente, un conocido, un amigo. O quizá conozcas a alguien cuya familia fue víctima de Sendero Luminoso o del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru.
No sabemos en qué momento se reescribió la historia ni cuando la pesadilla que vivimos los peruanos la quisieron maquillar de “conflicto armado interno”. No sabemos cuándo, pero sí sabemos quiénes. Tampoco sabemos exactamente cuándo se habló de la “violencia política” de los 80 y se equiparó los sangrientos y crueles ataques terroristas con las acciones de los militares y policías que pusieron el pecho y sus vidas por detener el avance del terror. No podemos negar que algunos miembros de las Fuerzas Armadas y policiales cometieron excesos en su accionar, pero eso no los equipara con quienes solo vinieron a sembrar odio o terror.
Es por esto indignante saber que la congresista del Frente Amplio María Elena Foronda contrató a la militante del MRTA Nancy Madrid Bonilla en su oficina parlamentaria. Nuestros impuestos pagaron el sueldo de esta persona sentenciada por terrorismo. “Fue un error político”, se apresuró a defenderse Foronda. Hasta podríamos creerle que se tratara de un hecho aislado, pero las acciones del Frente Amplio respecto al pasado terrorista han sido una ofensa para los peruanos.
O ya nos olvidamos del congresista Rogelio Tucto, para quien Abimael Guzmán, el cerebro despiadado de Sendero Luminoso, debe ser indultado para acceder a una “verdadera reconciliación”.
Y hace apenas un año Justiniano Apaza (FA) cuestionó que los miembros del comando Chavín de Huántar que participaron en el exitoso rescate de los rehenes de la residencia del embajador japonés fueran declarados Héroes de la Democracia y consideró que algunos miembros del MRTA eran “presos políticos”.
Más actual aun, el congresista Hernando Cevallos está seguro de que los terroristas que cumplieron su sentencia sí podrían trabajar para el Estado.
Aunque fue elegida por el Frente Amplio, y actualmente es parte de Nuevo Perú, es célebre la repentina pérdida de memoria de la entonces candidata al Parlamento Marisa Glave, en una entrevista con el periodista Christian Hudtwalcker.
Ella ponía énfasis en la necesidad de tener memoria. “Vamos a tener memoria y a recordar [que] tuvimos la época del caucho y la desperdiciamos, tuvimos la época del guano y la desperdiciamos, tuvimos la época de la minería y la desperdiciamos… empezamos a tener memoria y a recordar o estamos condenados a repetir lo mismo”. Es entonces cuando Hudtwalcker le pregunta: “¿Cuál fue el papel de la izquierda cuando llegó el terrorismo al país? ¿Cuál es tu memoria?”. Y la respuesta es, efectivamente, para no olvidar: “En lo personal era bastante pequeña, no viví esa época con mayor conciencia”.
Estamos a tiempo de recuperar la verdadera historia, sin eufemismos y con justicia. Las instituciones no han sabido honrar el pasado. Nos toca a los ciudadanos decir la verdad de lo que verdaderamente pasó en aquellos años, sin miedo a la verdad.