La religión democrática y la clase política: el caso de Martín Vizcarra
Por Jeffrey Kihien Palza– LaAbeja.pe
Martin Vizcarra Cornejo, llegó a la presidencia del Perú después de la renuncia de Pedro Pablo Kuczynski -PPK- del cual era su vicepresidente, el 23 de marzo de 2018. PPK renunció debido a su comprobada relación laboral con la empresa Odebrecht, cuyos directivos han confesado el pago de sobornos prácticamente a todos los políticos del Perú. Vizcarra fue apoderado de Odebrecht en la obra Carretera Transoceánica. Las primeras denuncias oficiales contra Vizcarra las realizó el Congreso de la Republica del Perú en el año 2003, mediante comisión formada para indagar posibles casos de corrupción en el gobierno de Alberto Fujimori entre 1990-2000. La investigación encontró responsabilidad delictiva contra Vizcarra, el mismo que armó una licitación para adjudicar la obra del canal de Jachacuesta del Proyecto Pasto Grande, sin haber realizado estudio técnico alguno. Para la aprobación de esta licitación, la cual fue ganada por la empresa JJCAMET, el padre de Martin Vizcarra Cornejo, Cesar Vizcarra Vargas, Prefecto de Moquegua durante el primer gobierno de Alan García (1985-1990) tuvo influencia preponderante, exigiendo a funcionarios de Pasto Grande la aprobación de la licitación. El dueño de JJCamet en ese entonces era Jorge Camet, quien fue Ministro de Economía de Alberto Fujimori por más de cinco años. La empresa JJCamet es investigada desde el año 2016 por ser parte de la presunta mafia del “club de la construcción” que obtenía obras públicas sobornando a políticos y funcionarios del estado, y, por estar coludida con Odebrecht. Fernando Camet Piconne, hijo de Jorge Camet ex ministro de Fujimori, fue detenido en España en mayo del 2023 y está en espera de ser extraditado a Perú donde le espera prisión preventiva. La pregunta es: ¿Por qué PPK invito a formar plancha presidencial a Martin Vizcarra, si sabían sobre la investigación del Congreso? La respuesta es otra evidencia sobre la religión democrática y, su debilidad frente a la clase política que la mantiene y se beneficia de ella.
El ex Presidente Vizcarra y su presunto modelo de delito tienen un patrón que no ha cambiado, tal cual lo descubrió la investigación del Congreso del Perú de 2003, solicitan sobornos a cambio de adjudicación de obras públicas. En el proyecto del Túnel de Jachacuesta se justificó la licitación de la obra con un estudio técnico de la empresa ATA, cuyo propietario es el Ingeniero y compañero de universidad de Vizcarra, José Manuel Hernández, que fue Ministro de Agricultura de Agricultura de PPK 2016-2018. Ese supuesto estudio, incompleto o deficiente ocasionó que la obra cuyo presupuesto inicial era de US$17 millones, termine costando US$64 millones de 1989. Todo sospechoso. En el interrogatorio frente a la comisión investigadora del Congreso, Martin Vizcarra Cornejo incurrió en contradicciones entre lo que respondió y los documentos presentados, cometiendo el delito de falsedad genérica. Vizcarra es mentiroso. Otro patrón de conducta, es continuar trabajando con las mismas personas. José Manuel Hernández y su empresa ATA fue también supervisor de la obra del Proyecto Pasto Grande “Lomas de Ilo”, iniciada cuando Vizcarra era Gobernador Regional de Moquegua, 2011-2014, cuyo planteamiento de proyecto y ejecución es una estafa, pues se gastará más dinero en energía eléctrica para bombear el agua desde la fuente a un canal, que los beneficios de producción agrícola, y, el proyecto está muy mal ejecutado, otra estafa, han transcurrido casi ocho años desde que se inauguró la obra, y no funciona. Instalaron tubos de fibra de vidrio para llevar agua de 1400 m.s.n.m a 20 m.s.n.m, la fuerza de la pendiente del agua ocasiona que las tuberías revienten. Era de esperar.
José Manuel Hernández, a quien Vizcarra ha negado como amigo, es ahora colaborador eficaz contra Vizcarra en un juicio de soborno precisamente por la obra Lomas de Ilo y Hospital de Moquegua. Hernández ha declarado que él pidió el soborno a nombre de su amigo Vizcarra, ofició como cobrador y lo llevó a recoger el dinero con sangre, la sangre del pobre pueblo peruano que paga altísimos impuestos. La democracia no pudo detener el delito de ambos cuando fueron descubiertos por el Congreso en el 2003, por el contrario a uno lo premiaron como Ministro y el otro fue Presidente de la República del Perú. Los judas modernos no tienen remordimiento, no devuelven las 30 monedas, siempre van por más.
Vizcarra, descubierto y denunciado públicamente por su gestión en Pasto Grande el siglo pasado, continuo con su comportamiento inmoral, utilizando el mismo esquema, trabajando con su gente de confianza y comprometiéndolos en una organización criminal. Siendo Ministro de Transportes de PPK el 2016, llevó a sus esbirros de Moquegua a trabajar con Él en las ligas mayores del estado peruano, donde las comisiones de sobornos se calculan en base a miles de millones. La “Banda de los Moqueguanos”, como se les conoce, destruyó el gentilicio moqueguano. El nacido en la sureña ciudad de Moquegua, paso de ser una persona noble, educada y moralmente fiable, a ser considerado a imagen y semejanza de Vizcarra; mentiroso, aprovechador, adúltero, bufón, inmoral.
No soy entusiasta de las prisiones preventivas, porque se han convertido en una herramienta para perseguir judicialmente a los enemigos políticos de los políticos que tienen el poder de turno. También porque elimina el principio jurídico, el dogma, de la presunción de la inocencia, y, los que sufren las consecuencias son los ciudadanos comunes y corrientes, los que solo desean trabajar y vivir tranquilos sin que el estado, que son los políticos, molesten demasiado. Sin embargo, entre los procesos judiciales de políticos corruptos, al ex Presidente Vizcarra no se le mide con la misma vara que a otros, a los cuales si se les ha aplicado prisión preventiva sin motivo alguno.
El Articulo 268 del Nuevo Código Procesal Penal Peruano, estipula los motivos y circunstancias por las cuales se debería solicitar y aprobar prisión preventiva contra un ciudadano. Existen elementos de convicción de la culpabilidad de Vizcarra en el proceso Hospital de Moquegua y Lomas de Ilo. Los testigos son los que le pagaron el soborno, los mismos dueños de las empresas coimeras. También el amigo negado, dueño de ATA, José Manuel Hernández, ha delatado a Vizcarra, todos han aportado testigos que corroboran sus afirmaciones y abundantes pruebas. La pena solicitada es de 15 años de prisión por el delito de cohecho pasivo. El art 268(b) estipula es procedente prisión preventiva cuando la pena es mayor a cinco años y, el presupuesto más importante, 268(c); peligro de obstaculización y peligro de fuga.
Son de público conocimiento las conversaciones telefónicas interceptadas por la fiscalía, entre dos colaboradores muy cercanos a Martín Vizcarra Cornejo; Hugo Misad Trabuco (el Turco) ex funcionario de Provias, supuestamente colocado allí por Vizcarra para supervisar el dinero de las coimas solicitadas y, el suboficial de la Policía Nacional del Perú, Manuel Zambrano. En esas conversaciones telefónicas interceptadas en entre el 11 y 13 de enero del 2014, el policía Zambrano solicita a Misad para comprar 400 o 500 lagartitos –muñeco de tela con el cual se identifica Vizcarra- para repartir entre los leales a Vizcarra, demostrando el tamaño de la organización criminal. El policía Zambrano informa también a Misad sobre la presencia de policías de inteligencia que han llegado de Lima para vigilar al ex Presidente, cometiendo infidencia. Luego coordina con el mismo Misad, el cual responde que preguntará a Vizcarra que debiera escribir el policía Zambrano en su informe al Poder Judicial, ya que Vizcarra está en proceso y tiene que solicitar permiso al juez para salir de Lima, observando reglas de conducta. Esta conversación sería suficiente para condenar a Misad y Zambrano por tráfico de influencias, pero hasta el momento no ha sucedido absolutamente nada. Este es un indicio que los tentáculos de la organización criminal de Vizcarra tiene contactos dentro de la PNP con policías corruptos, los cuales le facilitarían fuga, obstaculizarían cualquier investigación en su contra, escondiendo pruebas o amedrentando a detractores. Motivo suficiente para detenerlo preventivamente.
A esto se suma el escandalo reciente. Cesar Figueredo Muñoz, ex candidato al Congreso por Lima en uno de los partidos políticos de Vizcarra, Somos Perú, el otro es el nuevo partido, Perú Primero, donde Figueredo es secretario general. De acuerdo a las acusaciones y declaraciones públicas de un testigo, cercana a Figueredo, con quien habría tenido una relación sentimental a cambio de trabajo en el estado, este le solicitó un video o grabación a la testigo, con el cual habría extorsionado al ex Primer Ministro de Perú Alberto Otárola, solicitando que lo nombre director de Registros Públicos a nivel nacional. Al no acceder Otárola, ese audio se filtró alterado a la prensa, ocasionando la renuncia del Ministro. La prensa sospechosamente nunca investigó sobre la veracidad y autenticidad del audio. Vizcarra puede tumbarse ministros, fiscales, ser entrevistado en la prensa nacional, organizar partidos políticos y movimientos regionales, y ahora su mano aparece en el intento de vacancia de la presidente Dina Boluarte. No tiene remordimiento alguno. Debe tener una inmensa fortuna, dinero con sangre del pueblo peruano, que moría a causa del encierro salvaje decretado por Vizcarra y sus esbirros con excusa de la pandemia, mientras ellos se frotaban las manos con las compras estatales a dedo. Me temo la democracia, como eligió la libertad de Barrabas, elegirá ahora la libertad del bufón Vizcarra, ese es el fin de sus partidos políticos.
El pueblo peruano se hace constantemente la pregunta ¿Por qué Vizcarra sigue libre si obstaculiza la justicia? Esa es la democracia. En cambio a la Presidente del Perú, Dina Boluarte le allanaron su casa en menos de tres semanas, con Vizcarra se tardaron cuatro años y, por lo mostrado en prensa, más parecía una comedia burlona, teatro negro, porque Vizcarra dijo que él solicitó el allanamiento, y mostró el escrito, burlándose del fiscal, del juez y de todo el Perú. Comunicado de la presidencia de Ecuador tras la detención de Jorge Glas.
Policía de Ecuador irrumpió en la embajada de México en Quito y detuvo al ex vicepresidente Jorge Glas
El gobierno ecuatoriano señaló que “al haberse abusado de las inmunidades y privilegios y conceder un asilo diplomático contrario al marco jurídico convencional, se ha procedido con su captura”
La Policía de Ecuador irrumpió en la embajada de México en Quito, y detuvo al ex vicepresidente Jorge Glas, horas después de que el gobierno mexicano le concediera asilo político en medio de tensiones diplomáticas entre ambos países.
La información fue confirmada por la presidencia de Ecuador a través de un comunicado en sus redes sociales en el que asegura que “Jorge Glas Espinel, condenado a pena privativa de libertad por la justicia ecuatoriana, ha sido detenido esta noche y puesto a órdenes de las autoridades competentes”.
“Ningún delincuente puede ser considerado un perseguido político. Jorge Glas ha sido condenado con sentencia ecuatoriana y contaba con disposición de captura emitida por las autoridades competentes”, agrega el documento.
Para el gobierno ecuatoriano “al haberse abusado de las inmunidades y privilegios, concedidos a la misión diplomática que alberga a Jorge Glas, y conceder un asilo diplomático contrario al marco jurídico convencional, se ha procedido con su captura”.
“Ecuador enfrenta un conflicto armado no internacional, cuyas repercusiones en la democracia y paz ciudadana solo serán incrementales de continuarse o condonarse los actos que interfieren con el estado de derecho, la soberanía nacional o con temas de injerencia en asuntos internos del país”, se lee en el comunicado.
“Ecuador es un país soberano y no vamos a permitir que ningún delincuente quede en la impunidad”, añadió la Presidencia ecuatoriana.
Imágenes de medios locales mostraron el ingreso de uniformados a la legación, ubicada en el norte de Quito, y que estaba resguardada en la parte externa por policías y militares.
Roberto Canseco, jefe de la sección consular mexicana en Quito, dijo visiblemente conmocionado fuera de la embajada que “como delincuentes allanaron la embajada de México en Ecuador; esto no es posible no puede ser, es una locura”.
Poco antes de la irrupción en la sede diplomática, la canciller mexicana publicó un mensaje en X, donde insistía a Ecuador para conceder el salvoconducto a Glas para permitir su salida.
“El derecho de asilo es sagrado y estamos actuando en congruencia plena con las convenciones internacionales, otorgando asilo a Jorge Glas. Confío en que el gobierno de Ecuador disponga del salvoconducto cuanto antes”.
Un día antes, la tensión entre los dos países escaló después de que el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, hiciera unas declaraciones que Ecuador consideró “muy desafortunadas” sobre las últimas elecciones en las que ganó el mandatario ecuatoriano Daniel Noboa.
Como reacción, el gobierno ecuatoriano declaró persona non grata al embajador de México.
Fuente: Infobae.com