Chau, Susy

[Visto: 1330 veces]

Saqueo institucional

Por Martha Meier Miró Quesada- Editora Diario El Comercio
Faltan horas apenas para que Susana Villarán de la Puente le entregue la posta de la alcaldía a Luis Castañeda Lossio. La gran mayoría de limeños y limeñas respiraremos aliviados, no porque Castañeda vuelva sino por la partida de la primera mujer elegida por voto popular como alcaldesa de la capital peruana. Si Castañeda barrió en las ánforas, fue gracias a la pésima gestión de la saliente, siempre tan simpática, innegablemente carismática, pero incapaz  de reconocer su impericia para el cargo. 
Villarán de la Puente desoyó consejos, confió en la gente equivocada, se alió con signados por el fracaso, convirtió el municipio en agencia de empleos para sus allegados y anduvo por el camino equivocado, sin darse cuenta o sin querer darse cuenta de ello.  
¿Qué nos deja Susana? Una municipalidad en quiebra –según los integrantes de la comisión de transferencia– con 1,550 millones de soles en contingencia por deudas y costos de un exceso de seis mil trabajadores; un déficit patrimonial en Emmsa, Emape, Pro Transporte e Invermet; una estela de ineptitud; a la doctora Pilar Freitas (contra la que marcharon los propios “susanistas” cuando fue propuesta como defensora del Pueblo); y a electores sin ganas de repetir el plato de mujeres para liderar la capital.
¿Fue Susana bien intencionada? Puede ser, pero la percepción es que trató de construir una plataforma política para la izquierda pitucona de cara al 2016. ¿Es Villarán un cadáver político? No, y seguramente  la veremos integrando alguna lista para el próximo Congreso. Esto, pese a que en su despedida afirmó que no participará en otra elección
Ahora bien, recordemos la relatividad de los ¡no! de Villarán. Dijo que “definitivamente ¡no!” postularía a la reelección, pero ese “no” mutó en “sí” y se lanzó a la piscina vacía, sabiendo que la mayoría de limeños no votaría por ella. Enfrentó una masiva derrota en las urnas: quedó tercera, a 40 puntos de distancia de Castañeda.
Villarán hizo un balance de su gestión y no hubo autocrítica (era de esperarse). Dijo que dejaba 165 obras en marcha y que se va “con los bolsillos vacíos” (esperamos que haya cancelado ya su irregular préstamo a la Caja Municipal). “Es posible gobernar con las manos limpias y la frente en alto”, añadió. Y con eso demostró, una vez más, que no entiende que gobernar es sinónimo de trabajar arduamente y dar buenos resultados, y que en todo esto poco interesa la posición de la frente. 
Su tarea era resolver al menos uno de los problemas de Lima y no la cumplió. Eso de las “manos limpias” suena bonito, pero no encaja con quien por cuatro años cobró un sueldo para realizar un trabajo que no satisfizo a los supuestos beneficiarios, es decir a los capitalinos.
 “Allá los ciegos que no quieren ver los logros de mi gestión”, dijo Susy, condenando a las tinieblas a ese casi 90% de vecinos que no votamos por ella. En fin.
Saqueo institucional
La Comisión de Transferencia de la Municipalidad de Lima presentó en conferencia de prensa su informe final, elaborado a partir del análisis del documento de Rendición de Cuentas entregado por la gestión de Susana Villarán, el pasado 20 de diciembre.
El mencionado informe cuenta con 24 páginas de observaciones que, según Patricia Juárez, Fernán Altuve y Alfredo Saavedra (integrantes de la Comisión de Transferencia), ya fue entregado a la Contraloría para que se hagan las investigaciones de posibles actos de corrupción, irregularidades y desfalcos.
En uno de los puntos se observa que la Beneficencia Pública registra una deuda de más de S/57 millones y –según el grupo de transferencia– estaría quebrada; asimismo, la Empresa Municipal de Mercados (EMMSA) se encuentra en situación crítica con una necesidad de inyección de S/15 millones. En resumen, según los voceros, hay una quiebra institucional de S/1,550 millones por todas las contingencias.
Fernán Altuve señaló durante la conferencia de prensa que “cuando me llamaron para ser parte de la comisión pensé que la Municipalidad estaba en una mala situación, pero nunca pensé que tan mal”.
MÁS OBSERVACIONES
Como dio a conocer Perú21, en el informe final además se señala que los gastos en sueldos y obligaciones de la Municipalidad de Lima se incrementaron en 400%, pasando de S/58’624,466, en 2010, a S/235’917,446.
Al respecto, la teniente alcaldesa electa de Lima por el partido de Solidaridad Nacional (SN), Patricia Juárez, señaló –en conversación con Perú21– que el mayor reto que debe enfrentar la nueva gestión edil es lograr sanear la economía de la Municipalidad Metropolitana de Lima.
“Debemos hacer una reingeniería de la institución y ver qué vamos a hacer con los 6,000 trabajadores que se han incrementado en la planilla de la Municipalidad Metropolitana de Lima en los últimos cuatro años”, apuntó.
En la misma rueda de prensa, el regidor de Solidaridad Nacional Alfredo Saavedra se refirió al Plan Metropolitano de Desarrollo Urbano de Lima y Callao (PLAM 2035) que la ex alcaldesa Susana Villarán presentó hace algunos días.
Saavedra señaló que “el PLAM 2035 presentado por Villarán no existe. Es solo una idea que no ha sido aprobada por el Concejo Metropolitano porque no es un proyecto culminado, solo es un power point”.
En el informe final también se señala que se identificaron 358 consultorías presupuestalmente cargadas al PLAM 2035, orientadas en su mayoría a personas naturales, y que la gestión edil saliente no quiso proporcionar detalles sobre las mismas.
VILLARÁN DEJÓ SU CARGO
De otro lado, Susana Villarán se despidió de su cargo como alcaldesa de Lima e hizo un balance de su gestión en una ceremonia en el local principal de la comuna.
Expresó que su gestión está dejando US$1,500 millones en ejecución de obras, 60% más de ingresos que hace cuatro años, y una calificación como la segunda municipalidad con mejor capacidad crediticia de América Latina.
Lima tiene resultados y solo los ciegos no los quieren ver y los sordos no quieren oír”, dijo. Calificó de “falsedades” las denuncias de la Comisión de Transferencia.
En el informe presentado por la Comisión de Transferencia también se señala que el Puericultorio Pérez Araníbar tiene capacidad operativa para 1,200 beneficiarios y actualmente solo se acogen a 220 menores debido a que la Beneficencia de Lima está en quiebra.
También se detectó que de las 19 obras que la gestión saliente presentó como “gestionadas”, solo cinco se encuentran finalizadas. Cinco ni siquiera se han iniciado.
Fuente: Diario Perú21.

Puntuación: 5 / Votos: 56

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *