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Factor religioso como fenómeno humano

Hechos de los Apóstoles

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Consideraciones Eclesiológicas ante Camino Sinodal: Prefecto del Dicasterio para Obispos a episcopado alemán

Intervención completa en español del prefecto del Dicasterio para los Obispos a episcopado alemán en Vaticano sobre el tema del sínodo.

También el prefecto para el Dicasterio de los Obispos, el cardenal Marc Ouellet, tuvo una intervención en el encuentro con el episcopado alemán en el Agustinianum de Roma. Y dejó clara la postura de la Curia del Papa ante las propuestas del Camino Sinodal invitando incluso a una moratoria. A continuación el texto completo en español de la intervención.

Volviendo al espíritu de los Hechos de los Apóstoles

Por el Cardenal Marc Ouellet- Prefecto del Dicasterio para los Obispos
En su Carta al Pueblo de Dios en Camino en Alemania, el Papa Francisco, en comunión con su predecesor Benedicto XVI, constató el deterioro de la vida cristiana en el país e invitó a todo el pueblo a confiar en Cristo como clave de la renovación; el Santo Padre escribió que se trata de «un deterioro, ciertamente polifacético y de difícil y rápida solución, que exige un planteamiento serio y consciente que nos impulsa a ser, en el umbral de la historia presente, como aquel mendigo al que dijo el Apóstol: «No poseo ni plata ni oro, pero lo que tengo te lo doy: ¡en el nombre de Jesucristo, el Nazareno, camina! (Hechos 3:6)». Me remito a este pasaje de la mencionada carta para ofrecer algunas breves consideraciones eclesiológicas sobre su búsqueda sinodal, en el espíritu de los Hechos de los Apóstoles. Lo hago como hermano en el episcopado, pero también pensando en las necesidades de los fieles de a pie.
Vosotros, los sucesores de los apóstoles en Alemania, os habéis tomado en serio la tragedia de los abusos sexuales por parte de los clérigos, y habéis lanzado, al modo típico alemán, una operación de estudio con los recursos de la ciencia, la fe y las consultas sinodales, para lograr una revisión radical que ponga fin a este fracaso moral e institucional. Los acalorados debates que han tenido lugar y las propuestas de reforma que han surgido merecen ciertamente un elogio por la atención, el compromiso, la creatividad, la sinceridad y la audacia manifestados por vuestro Camino Sinodal, en el que los laicos han desempeñado un papel igual, si no preponderante. Después de haber estudiado detenidamente sus conclusiones, es espontáneo rendir un sincero homenaje al gigantesco esfuerzo de autocrítica institucional, al tiempo dedicado a estas reflexiones y a la inversión de trabajo conjunto entre teólogos, obispos y pastores, hombres y mujeres, para lograr ciertos consensos, aunque con fatiga y considerable tensión. Nos corresponde ahora reaccionar a sus propuestas, que contienen muchos elementos agradables de carácter teológico, organizativo y funcional, pero que también plantean serias dificultades desde el punto de vista antropológico, pastoral y eclesiológico.
Varios críticos autorizados de la orientación actual del Camino del Sínodo en Alemania hablan abiertamente de un cisma latente que la propuesta de sus textos, tal como están, correría el riesgo de refrendar. Sé muy bien que no es su intención llegar a una ruptura con la comunión universal de la Iglesia, ni favorecer una vida cristiana descendente que se ajuste al «Zeitgeist» más que al Evangelio; al contrario, las concesiones que aparecen en sus propuestas han sido, por así decirlo, arrancadas por la fortísima presión cultural y mediática; entiendo que su intención es precisamente evitar un cisma haciendo más creíbles a los ministros del Evangelio, multiplicándolos y cualificándolos, y creando comunidades cristianas más inclusivas y respetuosas con todas las actitudes, para ser valoradas de acuerdo con la dignidad humana y el concepto cristiano de la persona. Resulta llamativo, sin embargo, que la agenda de un grupo limitado de teólogos hace unas décadas se haya convertido de repente en la propuesta mayoritaria del episcopado alemán: abolición del celibato obligatorio, ordenación de viri probati, acceso de las mujeres al ministerio ordenado, revalorización moral de la homosexualidad, limitación estructural y funcional del poder jerárquico, consideración de la sexualidad inspirada en la Teoría de Género, propuesta de cambios importantes en el Catecismo de la Iglesia Católica, etc.
«¿Qué ha pasado?», «¿Dónde hemos llegado?», se preguntan incrédulos muchos creyentes y observadores. Es difícil resistirse a la impresión de que el asunto de los abusos, que es muy grave, ha sido aprovechado para impulsar otras ideas que no están inmediatamente relacionadas.
Evaluando las propuestas en su conjunto, tenemos la impresión de que nos encontramos no sólo con una interpretación más amplia de la disciplina o la moral católica, sino con un cambio fundamental que suscita serias preocupaciones, como ha mencionado ahora el Prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe. Parece que estamos ante un proyecto de «cambio de la Iglesia» y no sólo de innovaciones pastorales en el ámbito moral o dogmático. Desgraciadamente, tengo que constatar que esta propuesta global, ya ampliamente difundida en Alemania y en otros lugares, perjudica a la comunión eclesial, porque siembra la duda y la confusión en el pueblo de Dios. Todos los días recibimos testimonios espontáneos que se quejan del escándalo causado a los pequeños por esta propuesta inesperada y contraria a la tradición católica.
No es de extrañar que estos resultados dividan no sólo a la Conferencia Episcopal local y a la Iglesia en Alemania, sino al episcopado mundial, que no ha dejado de reaccionar con asombro y preocupación. Este hecho debe hacernos reflexionar sobre la tarea primordial de los obispos, que es enseñar según el Magisterio de la Iglesia y el Sumo Pontífice (cf. lg 25). Todo obispo, desde su ordenación y afiliación al colegio de los sucesores de los apóstoles, cum et sub Petro, está facultado para representar a la Iglesia universal en la porción particular que le ha sido confiada y para asegurar la comunión de su porción con la Iglesia universal. Los criterios de esta comunión están recogidos en Lumen Gentium, Christus Dominus y el Codex.
El hecho de que la Carta de Orientación del Papa Francisco de junio de 2019 fuera aceptada como un punto de referencia espiritual pero no realmente como una guía para el método sinodal tuvo consecuencias significativas. Tras este distanciamiento inicial del Magisterio del Pontífice en el plano metodológico, el calendario de trabajo vio aumentar progresivamente la tensión con el Magisterio oficial en el plano del contenido, dando lugar a propuestas abiertamente contrarias a la enseñanza reafirmada por todos los Pontífices desde el Concilio Ecuménico Vaticano II. Sorprende en este sentido la actitud adoptada ante la decisión final de San Juan Pablo II sobre la imposibilidad de que la Iglesia católica proceda a la ordenación de mujeres sacerdotes. Esta actitud revela un problema de fe con respecto al Magisterio y un cierto racionalismo intrusivo que no se conforma con las decisiones tomadas salvo lo que parece personalmente convincente o si no es ampliamente aceptado por el sentimiento común. Este ejemplo simbólico, sumado a los otros cambios morales y disciplinarios que se propugnan, socava la responsabilidad de los obispos en su ministerio principal y ensombrece todo el esfuerzo de la mencionada asamblea, que parece estar muy influenciada por los grupos de presión, por lo que muchos la juzgan como una iniciativa arriesgada, destinada a decepcionar y fracasar porque «se salió de los carriles».
Gracias a Dios, estos textos, que han sido redactados y votados, pero que todavía están abiertos a nuevas enmiendas en la última sesión prevista para marzo, incluyen también desarrollos apreciables para el replanteamiento pastoral y eclesiológico, por ejemplo: un marcado sentido de la justicia y la obligación moral de reparación hacia las víctimas de abusos, la promoción del sacerdocio bautismal, la actitud de reconocimiento de los carismas. Teniendo en cuenta las circunstancias y las agudas tensiones que acompañaron a las sesiones en el momento de la votación, teniendo en cuenta sobre todo la consulta en curso para el Sínodo Universal sobre la Sinodalidad, nos parece que es necesaria una moratoria sobre las propuestas presentadas, y una revisión sustancial a realizar más tarde, a la luz de los resultados del Sínodo romano. Tenemos providencialmente la oportunidad de combinar perspectivas adoptando un cambio metodológico que podría ayudar a mejorar las tesis del Camino Sinodal Alemán, en el sentido de escuchar más profundamente el planteamiento del Papa Francisco y del Sínodo Universal de los Obispos. Es evidente que la metodología del sínodo universal es diferente de la utilizada en Alemania: es ciertamente menos parlamentaria, más atenta a la participación global y a alcanzar consensos formados sobre la base de una profunda escucha espiritual del pueblo de Dios.
La razón fundamental de esta moratoria es la preocupación por la unidad de la Iglesia, que descansa en la unidad de los obispos en comunión y obediencia a Pedro. Avalar esta controvertida propuesta de un episcopado atribulado sembraría aún más dudas y confusión entre el pueblo de Dios. Teniendo en cuenta el panorama mundial ecuménico y geopolítico perturbado por las guerras, es de esperar que la mayor difusión de esta propuesta no resuelva los problemas que pretende remediar: el éxodo masivo de fieles de la Iglesia, el éxodo de los jóvenes, las llamadas «causas sistémicas» de los abusos y la crisis de confianza entre los fieles.
La principal limitación de esta propuesta es quizás un cierto enfoque apologético, basado en los cambios culturales en lugar de apoyarse en el anuncio renovado del Evangelio. Si posees oro y plata, ciencia y prestigio ampliamente reconocido, y lo gestionas todo con generosidad, no te olvides de testimoniar con fuerza y sencillez la fe en Jesucristo de la que tu pueblo es mendigo.
Con el ejemplo y las enseñanzas del Papa Francisco, podemos volver al espíritu de los Hechos de los Apóstoles, ofrecer a Jesucristo en primer lugar a las necesidades de curación y conversión de nuestro pueblo, no pretender que las soluciones culturales o institucionales sean indispensables para hacer creíble la figura de Jesús, aunque sea propuesta por ministros imperfectos pero confiados en la gracia y la misericordia divina. Este es el mensaje inicial del Papa Francisco que ahora debemos recoger y aplicar a la revisión de los resultados del Camino Sinodal.
Fuente: Traducción realizada por el Padre Jorge Enrique Mújica LC, director editorial de ZENIT.

Sínodo alemán contra el Catecismo

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5 preocupaciones ante Camino Sinodal Alemán: Prefecto del Dicasterio para Doctrina de la Fe a episcopado alemán

Por Cardenal Luis Francisco Ladaria Ferrer SJ- Prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe.
Hay un pasaje de la carta del Santo Padre al Pueblo de Dios sobre el Camino en Alemania que constituye el trasfondo de esta breve intervención mía. El Papa Francisco escribe en el párrafo 9 de la citada carta: «La Iglesia universal vive en y de las Iglesias particulares [Lumen Gentium, 23], así como las Iglesias particulares viven y florecen en y de la Iglesia universal, y si se encuentran separadas de todo el cuerpo eclesial, se debilitan, se pudren y mueren. De ahí la necesidad de mantener siempre viva y eficaz la comunión con todo el cuerpo de la Iglesia, que nos ayuda a superar la ansiedad que nos encierra en nosotros mismos y en nuestras particularidades, para poder mirar a los ojos, escuchar o renunciar a las urgencias para acompañar a los que quedan en el camino. A veces esta actitud puede manifestarse en el más mínimo gesto, como el del padre al hijo pródigo, que deja las puertas abiertas para que, cuando vuelva, pueda entrar sin dificultad [cf. Evangelii gaudium, 46]. Esto no es sinónimo de no caminar, avanzar, cambiar o incluso debatir o disentir, sino que es simplemente la consecuencia de saber que somos constitutivamente parte de un cuerpo mayor que nos quiere y nos espera, y que también queremos y esperamos, y necesitamos. Es el gusto de sentirse parte del santo y paciente Pueblo fiel de Dios».
Las palabras que siguen quisieran ahora precisamente despertar en cada uno de nosotros esta conciencia de que somos constitutivamente parte de un cuerpo más grande, y que es precisamente esa comunión con todos los demás miembros de la Iglesia la que puede permitir -más que otros mil gestos o proclamas rotundas- esa hospitalidad tan necesaria hoy hacia los que se han quedado en el camino.
Y, efectivamente, son muchos y muchas los que hoy ya no se sienten «en casa» en la casa del Señor y se quedan fuera de ella. Luego todavía hay muchos y muchas que se sienten profundamente traicionados por los hombres y mujeres de la Iglesia católica y ya no asisten. Sobre todo, finalmente, hay muchos y muchas que ya no sienten ninguna confianza en nosotros, los obispos. Y esto ocurre no sin razón. Nuestros pensamientos se dirigen inmediatamente a la dolorosa página de los abusos sexuales y, en general, del abuso de poder por parte del clero, y a todas las veces que en esos casos nuestra respuesta como Iglesia no ha estado a la altura de la situación. En este sentido, no nos cansaremos de pedir perdón a las víctimas de estos abusos, ofreciéndoles nuestra posible ayuda; al mismo tiempo, no nos cansaremos de renovar cada día nuestro empeño para que los abusos contra los menores y los abusos de poder de los hombres y mujeres de la Iglesia no vuelvan a producirse. Desde este punto de vista, puedo asegurarle que el Dicasterio para la Doctrina de la Fe se compromete con todas sus fuerzas y con los máximos escrúpulos a que se apliquen las penas previstas en el Código a los clérigos que han sido culpables de tan abominables delitos.
Desde este punto de vista, es más que encomiable el esfuerzo que la Iglesia en Alemania está haciendo internamente para establecer protocolos de seguridad para prevenir cualquier abuso contra menores y cualquier otra forma de violencia contra adultos por parte de clérigos y en todo caso dentro de las instituciones eclesiásticas. Este compromiso ha encontrado su particular concreción en el Camino Sinodal iniciado en 2019 por la Iglesia en Alemania, que está alcanzando una fase especialmente importante en estos mismos meses.
Ahora, precisamente en el espíritu de ese «saber que [todos] somos parte constitutiva de un cuerpo más grande que nos quiere y nos espera, y que también nosotros queremos y esperamos, y que necesitamos», evocado por las palabras antes mencionadas de la carta del Santo Padre al Pueblo de Dios que está en camino en Alemania, me corresponde, como Prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, presentaros, Venerables Hermanos, cinco preocupaciones concretas que surgen de la lectura atenta de los textos que hasta ahora se han discutido en vuestro Camino Sinodal.
Primera preocupación: el género literario de los textos
La primera preocupación se refiere al género literario de los textos. Dado que el suyo no es un sínodo, sino un camino sinodal, no parece estar previsto ningún documento final por ahora. ¿Pero no deberíamos pensar en algo así como un documento final del Camino Sinodal o algo similar? Tal pregunta se impone cuando se advierte que en tantos pasajes de los textos del Camino Sinodal hay afirmaciones genéricas sobre las posiciones presentes en el santo pueblo de Dios, referencias alusivas a evidencias científicas y sociológicas, uso de resultados exegéticos aún discutidos y cuestionables, declaraciones sin vacilación del fin de la metafísica y del eclipse de toda verdad, protocolos genéricos de posible reconocimiento público de la doctrina eclesial, y finalmente referencias a teólogos y teólogas sin nombre y sin posibilidad de identificación. Estas cosas están quizá muy claras para los autores de los textos y para los lectores cualificados, pero si formamos parte de un cuerpo mayor y estos textos (con sus traducciones ya disponibles a otras lenguas) empiezan a tener una difusión global, no parece descabellado proponer un documento final o algo similar en el que pueda surgir un proceder más lineal y menos dependiente de afirmaciones que no están del todo comprobadas.
Segunda preocupación: la conexión entre la estructura de la Iglesia y el fenómeno del abuso clerical contra menores y otros fenómenos de abuso
La segunda preocupación es la conexión entre la estructura de la Iglesia y el fenómeno del abuso clerical contra menores y otros fenómenos de abuso. El discurso que plantean los textos, también por su extensión y por las necesarias repeticiones en varias ocasiones, no parece tener en cuenta la especificidad del cuerpo eclesial. Ni que decir tiene que hay que hacer todo lo que se pueda para evitar que se sigan produciendo abusos de clérigos contra menores, pero esto no debe implicar una reducción del misterio de la Iglesia a una mera institución de poder ni una consideración previa de la Iglesia como una organización estructuralmente abusiva, que debe ser puesta bajo el control de supercontroladores lo antes posible. Desde este punto de vista, el mayor riesgo de muchas de las sugerencias operativas de los textos del Camino Sinodal es el de perder uno de los mayores logros del Concilio Vaticano II, a saber, la clara doctrina de la misión de los obispos y, por tanto, de la Iglesia particular.
Tercera preocupación: la visión de la sexualidad humana según la doctrina de la Iglesia
La tercera preocupación se refiere a la visión de la sexualidad humana según la doctrina de la Iglesia y, en particular, tal como se expresa en el Catecismo de la Iglesia Católica de 1992. La impresión general que puede surgir a este respecto de la lectura de los textos del Camino Sinodal es que en este terreno de la doctrina de la Iglesia no hay casi nada que salvar. Habría que cambiar todo. ¿Cómo no pensar en el impacto que esto tiene en tantos fieles que escuchan la voz de la Iglesia y se esfuerzan por seguir sus pautas de vida? ¿Deben pensar que lo han hecho todo mal hasta ahora?
No debería ser demasiado fácil pensar que la sexualidad humana es algo límpido y desprovisto de la ambivalencia que conlleva todo gesto humano, y más aún todo gesto humano relacionado con el ejercicio de la sexualidad. Hubiera sido deseable, por parte de los autores de los textos y de la Asamblea del Camino Sinodal, ser más cautelosos y tener cierta confianza en la visión que el Magisterio ha realizado de la sexualidad en las últimas décadas. Salvaguardar el carácter constitutivamente generativo y generacional del ser humano sigue siendo una de las grandes tareas proféticas de la comunidad de creyentes en este tiempo de progresiva mercantilización de la existencia humana.
Cuarta preocupación: acceso de la mujer al orden sacerdotal
La cuarta preocupación se refiere al papel de las mujeres en la Iglesia y, en particular, a la cuestión del acceso de las mujeres a la ordenación sacerdotal. También en este caso, los textos del Camino Sinodal parecen quedarse cortos en una hermenéutica participativa de las posiciones magisteriales, reduciendo todo a la siguiente constatación: la dignidad fundamental de las mujeres no se respeta en la Iglesia católica, porque no pueden acceder a la ordenación sacerdotal. La posición del Magisterio es en verdad más específica. El punto decisivo a este respecto no es que las mujeres en la Iglesia católica no puedan acceder a la ordenación sacerdotal; el punto es que hay que aceptar la verdad de que «la Iglesia no tiene en absoluto la facultad de conferir la ordenación sacerdotal a las mujeres» (San Juan Pablo II, Ordinatio sacerdotalis).
Aquí encuentra su pleno significado ese sentimiento de formar parte de un cuerpo mayor, de un cuerpo que no está desarticulado, sino de un cuerpo que, por voluntad explícita del Señor Jesús, tiene su guía en Pedro y sus sucesores. Quisiera añadir inmediatamente que las últimas deliberaciones del Camino Sinodal de querer dirigir una petición al Santo Padre Francisco para reabrir esta cuestión, ciertamente amortiguan los tonos altamente polémicos del texto específico sobre el acceso de las mujeres a la ordenación sacerdotal, y por ello sólo podemos estar agradecidos. Por supuesto, queda la cuestión del destino final de estos textos del Camino Sinodal. La sugerencia fraternal sigue siendo la de llegar a una síntesis más tranquila y decididamente más acorde con ese «sentimiento de que somos constitutivamente parte de un cuerpo mayor» que guía esta intervención mía.
Quinta preocupación: ejercicio del magisterio eclesial
La quinta y última preocupación se refiere al ejercicio del magisterio eclesial y, en particular, al ejercicio del magisterio episcopal. En los textos del Camino Sinodal casi se olvida el dictado de la constitución conciliar Dei Verbum y, en particular, la cuestión de la tradición de la fe a través de la sucesión apostólica: «Los apóstoles, pues, para que el Evangelio se conservara siempre intacto y vivo en la Iglesia, dejaron a los obispos como sucesores suyos, ‘confiándoles su propio lugar de maestros’» (dv, 7).
Antes de la redacción del corpus del Nuevo Testamento, existe de hecho la comunidad de discípulos del Señor Jesús llamada a llevar a todos los hombres y mujeres de la tierra el mensaje de la buena nueva del Dios para todos los amores. Esta comunidad, sin embargo, es una comunidad ordenada, fundada sobre un líder que es Pedro y puesta bajo la dirección de los Doce, que tienen la tarea de autentificar el testimonio de los demás discípulos y discípulas del Señor. A lo largo de los siglos, este orden en la diaconía de todos al reino de los cielos se hace posible precisamente gracias a la presencia y misión de los obispos y, de manera especial, a la presencia y misión del Obispo de Roma. A quien se debe, precisamente por esto, una tarea especial en acompañar a todos a vivir la caridad en la verdad y la verdad en la caridad. Y si es cierto que el magisterio está bajo el juicio de la Palabra, también es cierto que la Palabra se hace viva y resuena como viva precisamente gracias al ejercicio del magisterio de los obispos y del Obispo de Roma en particular. ¡Qué reconfortante es para todo obispo saber que siempre es cum Petro y sub Petro!
Por tanto, no es posible equiparar esta delicada y decisiva tarea en la vida de la Iglesia católica con otros ministerios en ella como el de los teólogos y los expertos en otras ciencias.
Conclusión
Venerables hermanos, estas son las preocupaciones que, en el espíritu de ese sentimiento de que todos somos constitutivamente parte de un cuerpo mayor, he querido poner en vuestro conocimiento. La Iglesia universal necesita a la Iglesia que está en Alemania, así como la Iglesia que está en Alemania necesita a la Iglesia universal. Pero debemos querer «necesitarnos» unos a otros, debemos querer esperarnos unos a otros, debemos querer esta comunión de vida y de camino. Y, en verdad, esto es precisamente lo que su sincero y profundo deseo de ser cada vez más una Iglesia en la que todos puedan sentirse en casa, en la que todos puedan sentirse parte de una familia, una Iglesia en la que Dios revele a todos su rostro de Padre, Hijo y Espíritu Santo, especialmente ahora después de las dramáticas páginas que hemos vivido por la evidencia de terribles abusos de clérigos contra menores y su gestión por parte de algunos obispos que no siempre estuvo a la altura de la gravedad de la situación.
Que el Señor bendiga nuestra voluntad de necesitarnos unos a otros.
Fuente: Traducción realizada por el Padre Jorge Enrique Mújica LC, director editorial de ZENIT.

El Cardenal Marx dijo que lo afirmado por el Cardenal Ladaria y el Cardenal Ouellet en Roma, sobre el sínodo alemán, eran meras opiniones.

Tras la agitada visita Ad Limina de los obispos alemanes, donde al menos tres cardenales de curia intentaron mostrar las inconsistencias doctrinarias y metodológicas del llamado Camino sinodal alemán, y al menos uno de ellos solicitó su suspensión, el Cardenal Reinhard Marx –uno de los grandes promotores de ese sínodo local– no se dio ni mucho menos por aludido.
El lunes pasado, en el Club de la Prensa de Munich, el purpurado afirmó que las conversaciones en Roma con los Cardenales vaticanos no se pueden interpretar en el sentido de que “hemos recibido un tirón de orejas y ahora nos detendremos, haremos las maletas y el Camino Sinodal habrá terminado”.
Para el Cardenal Marx “los discursos del Prefecto del Dicasterio de la Fe, Luis Ladaria, y del Prefecto del Dicasterio para los Obispos, Marc Ouellet, que se publicaron después, habían sido ‘conferencias’”, solamente, subrayó.
Aún más, solo “eran una opinión, pero no una decisión del Papa”. Contó algo ya conocido, que la mayoría de los obispos alemanes había rechazado “muy claramente” la propuesta de moratoria del proyecto de reforma sinodal. Dijo igualmente que “al fin y al cabo, no son los únicos organizadores del Camino Sinodal, sino junto con los laicos: ‘No podemos decir que los dejaremos de lado’”.
Resumiendo: en Roma lo que escucharon los prelados teutónicos fueron solo algunas y meras opiniones, y nada, siguen adelante. Ninguna reflexión en profundidad sobre las advertencias hechas acerca de los errores doctrinarios apuntados (particularmente en materia de moral sexual y teología eclesial), ni sobre la afectación que están causando a la comunión de la Iglesia y la confusión en los fieles.
Ahora el de Tréveris
Por lo demás, las manifestaciones contrarias a la moral católica por parte de prelados de Alemania siguen a tambor batiente: Ahora tenemos la del Obispo de Tréveris, Monseñor Stephan Ackermann, quien con ocasión de un encuentro y un “servicio” con un grupo queer, aseguró que “con el camino sinodal, decimos claramente que necesitamos una reevaluación de la enseñanza de la Iglesia sobre la homosexualidad”.
Es esa justamente una de las críticas hechas por el Cardenal Prefecto del Dicasterio de la Doctrina de la Fe, Monseñor Ladaria, quien dijo a los obispos alemanes en Roma que los textos del llamado camino sinodal alemán sugerían que “hay que cambiarlo todo” en lo que respecta a la enseñanza de la Iglesia sobre la sexualidad, en contradicción con el Catecismo de la Iglesia Católica.
Fuente: GaudiumPress.com

Suman 100 los cardenales y obispos que advierten del riesgo de cisma en Alemania

Por WALTER SÁNCHEZ SILVA– ACI Prensa.
Ya son 100 los cardenales y obispos de todo el mundo que advierten del riesgo de cisma de la Iglesia en Alemania, debido al curso que sigue el polémico Camino Sinodal en el país europeo.
El Camino Sinodal es un controvertido proceso de varios años que comenzó en diciembre de 2019 y en el que participan obispos y laicos de Alemania para tratar temas como el ejercicio del “poder”, la moral sexual, el sacerdocio y el papel de las mujeres en la Iglesia, temas sobre el que han expresado, públicamente y en diversas ocasiones, posturas contrarias a la doctrina católica.
El 11 de abril, poco más de 70 obispos, entre ellos los cardenales Francis Arinze, Raymond Burke, George Pell y Wilfred Napier, a quienes ahora se han sumado el italiano Camillo Ruini y el chino Joseph Zen-ze kiun, enviaron una “carta fraterna” a los obispos de Alemania para advertir del peligro de cisma.
Entre los 100 firmantes, están también un arzobispo argentino, dos uruguayos, dos brasileños, algunos de Hungría y también Ucrania, quienes se unen así a los prelados de Estados Unidos, Canadá, Tanzania y Camerún, entre otros.
En la carta, los obispos explican que lo que ocurre en la Iglesia Católica en un país puede influenciar a otros, por lo que manifiestan su “creciente preocupación acerca de la naturaleza del proceso del Camino Sinodal alemán en su conjunto y el contenido de sus diversos documentos”.
“La seriedad de estas observaciones se desprende tanto de la confusión que el Camino Sinodal ha causado, y continúa causando, como del potencial para el cisma en la vida de la Iglesia en que derivará inevitablemente”, alertan los obispos.
Los prelados expresan su preocupación en siete indicaciones que tienen su raíz en el capítulo 12 de la Carta de San Pablo a los Romanos, especialmente en la advertencia de no acomodarse “al mundo presente”.
Entre las preocupaciones de los cardenales y obispos están que “las acciones del Camino Sinodal socavan la credibilidad de la autoridad de la Iglesia –incluyendo la del Papa Francisco– la antropología cristiana y la moral sexual, y la verosimilitud de la Escritura”.
También destacan que los textos del Camino Sinodal “parecen mucho más inspirados por el análisis sociológico y la política contemporánea, incluyendo las ideologías de género” y que parece “reinterpretar y menoscabar el significado de la libertad cristiana”.
“El Camino Sinodal muestra más sumisión y obediencia al mundo y a las ideologías que a Jesucristo, nuestro Señor y Salvador”, advierten también los obispos.
En mayo de 2021, sacerdotes y agentes pastorales de la Iglesia en Alemania bendijeron parejas homosexuales en un evento titulado “El amor gana” en más de 100 lugares en todo el país, con el apoyo de varios obispos como el presidente de la Conferencia Episcopal, Mons. Georg Bätzing, y en abierta rebelión a la explícita prohibición de la Congregación para la Doctrina de la Fe en el Vaticano, publicada en marzo de ese año.
El Cardenal Reinhard Marx, Arzobispo de Múnich, expresidente de la Conferencia Episcopal Alemana y uno de los promotores del Camino Sinodal, propuso en febrero el fin del celibato para los sacerdotes en la Iglesia Católica.
El 31 de marzo dijo que el Catecismo de la Iglesia Católica “no está escrito en piedra” y que se puede “dudar de lo que dice”.
Los obispos que deseen adherirse a la carta fraterna pueden escribir al correo episcopimundi2022@gmail.com
Puede leer la carta fraterna completa en este enlace https://www.aciprensa.com/noticias/breaking-cardenales-y-obispos-alertan-riesgo-de-cisma-de-la-iglesia-en-alemania-38042

Testimonio de una víctima de Rupnik

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Me dijo que me besaba como besaba el altar donde celebraba la eucaristía

La ex religiosa asegura que el jesuita le pidió hacer un trío con otra mujer de su comunidad “porque según él, la sexualidad debía ser libre de posesión, a imagen de la Trinidad”.
La primera vez que me besó en la boca me dijo que así besaba el altar donde celebraba la Eucaristía, porque conmigo podía experimentar el sexo como expresión del amor de Dios”. De esta manera comienza el relato de Anna (nombre ficticio). Ella es la primera víctima del jesuita Marko Rupnik que se atreve a denunciar al religioso. Lo hace ahora, con 58 años, después de todo un calvario que vivió durante casi una década y que le ha dejado profundas huellas a nivel psicológico y espiritual. Ahora, ha relatado todo lo sucedido al diario italiano Domani.
En 1985, yo tenía 21 años y estaba en la facultad de medicina. Pensé en ir como misionera después de graduarme y sentí la necesidad de crecer en la fe. También me apasionaba el arte y una monja que conocía me presentó a este pintor jesuita que tenía un pequeño estudio en la Piazza del Gesù de Roma”, explica. En aquel entonces Rupnik, diez años mayor que ella, estaba en su primer año de sacerdocio. “Me sentí a gusto con él y de inmediato se convirtió en mi guía espiritual”, dice.
Más adelante, sentenció que esa sensación de familiaridad se debía a que el jesuita “tenía un fuerte carisma personal para explicar el Evangelio y una gran sensibilidad para identificar las debilidades de las personas. Entonces entendió de inmediato mi fragilidad, las inseguridades y los miedos que tenía”.
“Me sentía importante para él: me gustaban sus pinturas ya menudo hablábamos mientras pintaba. Luego comenzó a subrayar cada contacto entre nosotros, diciéndome que cada gesto tenía un significado preciso: incluso un simple apretón de manos o una caricia en el brazo se convirtió en una ocasión para subrayar mi feminidad”, explica. En aquel momento, “no podía entender que ese abrazo después de cada confesión era una invitación a ir más allá. De la misma manera, no podía imaginar que entonces, cuando me explicó que los cuerpos dibujados en las placas de Kamasutra eran una forma de arte, ya era un asiduo visitante de los cines porno”.
Entender el discernimiento ignaciano
A Anna, el comportamiento de Rupnik a veces le “parecía extraño, pero lo explicaba con su ser artista”. “Quería que yo modelara para él y una vez me pidió que posara para uno de sus cuadros porque tenía que dibujar la clavícula de Jesús y no buscaba chicas “mundanas”, que en su opinión solo expresaran sexualidad, sino por un persona en busca como yo”, señala. No fue difícil, dice, que aceptara y “desabrochar algunos botones de mi blusa, porque para mí, que era ingenua e inexperta, solo significaba ayudar a un amigo”. En aquella ocasión le besó “levemente en la boca, diciéndome que así besaba el altar donde celebraba la Eucaristía”.
“Yo estaba aturdida: por un lado quería huir, por otro el padre Marko me animó diciéndome que yo podía vivir esa realidad porque yo era especial y era un regalo que el Señor nos daba solamente a nosotros; que sólo conmigo podría vivir, incluso físicamente, perteneciendo a Dios sin posesión, en libertad, a imagen del amor trinitario”, explica.
Para entender que la víctima creyese a Rupnik apunta que “hay que saber cómo funciona el discernimiento ignaciano: estás llamado a la total disponibilidad y apertura y es tu padre espiritual quien te guía en entender lo que es bueno y lo que es malo”. De esta manera, “si tu guía dice que Dios lo quiere y no obedeces, te pones en contra de Él. Ahí es donde puede colarse la manipulación, como sucedió con el padre Rupnik. Tenía miedo de cometer un error, miedo de perder su aprobación, me sentía fuertemente dependiente de su juicio”.
Y es que, si ella “no hacía lo que él quería, inmediatamente decía que mi camino espiritual estaba estancado y me presentaba como “equivocado” a los otros jóvenes del grupo que mientras tanto se formaba a su alrededor. Solo el padre Marko decidía quién era bueno y quién valía la pena apoyar, el que estaba en el error era humillado y puesto a un lado”.
“No era amor, sino miedo”
“En el verano de 1986, antes de que se fuera de viaje, nos encontramos en su estudio. Celebramos juntos la Eucaristía y luego esperó que me desvistiera y dejara que me tocara como siempre. Pero esa vez me negué y me atacó con palabras muy duras y mezquinas, diciendo que yo no valía nada, que nunca haría nada bueno; añadió que para él ahora sólo había otras dos mujeres, cuyos nombres me dio, y que quería terminar toda relación conmigo”, explica. “Estaba desesperada porque ahora dependía totalmente de su aprobación. No era amor, solo miedo a cometer un error. Desde entonces he decidido dejar de lado mis dudas y confiarme totalmente a él”.
“Creía que lo que vivíamos juntos me haría una mejor persona ante Dios; en cambio, fue solo el comienzo de la distorsión de mi identidad y la pérdida de mí misma”, reconoce. “Su obsesión sexual no fue improvisada sino profundamente conectada con su concepción del arte y su pensamiento teológico. Al principio, el Padre Marko se infiltró lenta y suavemente en mi mundo psicológico y espiritual aprovechando mis incertidumbres y fragilidad y al mismo tiempo usando mi relación con Dios para impulsarme a tener experiencias sexuales con él”, asegura.
“Así, el sentirme amada como la Sabiduría jugando ante Dios, como está escrito en el libro de los Proverbios, se transformó en la petición de juegos eróticos cada vez más extremos en su estudio del Collegio del Gesù de Roma, mientras pintaba o después de la celebración de la Eucaristía o después de la confesión”, relata la ex religiosa, que llegó a la Comunidad Loyola de Eslovenia únicamente siguiendo los mandatos de Rupnik. “El Padre Marko me pidió entonces que dejara la medicina y me fuera a Eslovenia con la superiora, Ivanka Hosta, y otras seis hermanas. Aislado de mi familia y amigos, era fácil para Marko manipularme a su gusto”.
Hizo sus primeros votos en enero de 1988, y los repitió en 1991. Por aquel entonces, los abusos de Rupnik “se habían vuelto más agresivos”. “Recuerdo una masturbación muy violenta que no podía detener y durante la cual perdí la virginidad, episodio que dio lugar a pedidos urgentes de sexo oral. La dinámica era siempre la misma: si tenía dudas o me negaba, Rupnik me desacreditaba frente a la Comunidad diciendo que no estaba creciendo espiritualmente. No tuvo frenos, utilizó todos los medios para lograr su objetivo, incluso confidencias escuchadas en confesión. Ahí es donde comenzó mi colapso mental”.
Muchas más víctimas
Asimismo, relata que Rupnik le pidió, incluso, “hacer un trío con otra hermana de la comunidad, porque según él, la sexualidad debía ser libre de posesión, a imagen de la Trinidad donde, decía, ‘la tercera recogía la relación entre las dos’. En esos contextos me pedía vivir mi feminidad de forma agresiva y dominante y como no podía hacerlo me humillaba profundamente con frases que no puedo repetir”.
“El último paso de este descenso a los infiernos fue el paso de las justificaciones teológicas del sexo a una relación exclusivamente pornográfica”, dice. “En 1992, cuando estaba en cuarto año de filosofía en la Gregoriana, también me llevó dos veces a ver películas porno en Roma, en via Tuscolana y cerca de la estación de Termini”.
Fue el momento en el que ella tuvo, además, conciencia de que Rupnik abusaba de otras mujeres con las mismas estrategias que había utilizado con ella. “A principios de la década de 1990, éramos 41 hermanas y el padre Rupnik, que yo sepa, logró abusar de casi veinte. A veces a un alto precio: una de ellas, en un intento de resistir, se cae y se rompe el brazo”.
De hecho, ella intentó detenerlo, pero “estaba imparable en su delirio. Incluso lo amenacé con demandarlo pero me respondió: ‘¿Y quién quieres que te crea? Es tu palabra contra la mía: si hablas, te dejo por loca”. En aquel momento, “solo quería que todo terminara”, y fue cuando intentó suicidarse. Pero sobrevivió.
A partir de ahí, todos los intentos que hizo de hablar, tanto con la superiora de la comunidad como con los superiores de Rupnik –entre ellos Tomáš Špidlík (más tarde creado cardenal diácono en 2003 por Juan Pablo II)– no sirvieron de nada. De hecho, Špidlík reaccionó diciendo que no quería escuchar su testimonio, aunque fue en confesión, y redactando él mismo su carta de renuncia como religiosa. “Aún la conservo”, asegura.
Lo único que le ocurrió a Rupnik entonces fue que regresó a Roma para continuar con su carrera. Mientras, ella vio como la superiora de la comunidad llegó, incluso, a enviar una carta a su familia diciendo que era esquizofrénica. “Años después Ivanka me escribió pidiéndome perdón a mí y a mi familia, a quienes les habían dicho que era esquizofrénica. Después de mi renuncia sufrí de depresión durante mucho tiempo e incluso después no pude tener una relación amorosa y formar una familia”, asegura.
Fuente: Revista Vida Nueva.

Cronología de las investigaciones sobre las acusaciones contra el Padre Marko Rupnik SJ

Se trata de dos cuestiones: la absolución de cómplice en materia de 6º mandamiento (que implica la excomunión para el confesor y la invalidez de la confesión); y los abusos contra personas adultas.
Por su interés, ofrecemos una cronología elaborada por la Compañía de Jesús con relación al caso de Marko Rupnik. Como se puede advertir, se aprecia mejor que se trata de dos cuestiones: la absolución de cómplice en materia de 6º mandamiento (que implica la excomunión para el confesor y la invalidez de la confesión) y los abusos contra personas adultas.
Absolución de un cómplice de un pecado contra el 6º mandamiento
– Octubre de 2018: Las acusaciones de absolución de un cómplice por parte del Padre Rupnik en un pecado contra el sexto mandamiento son recibidas por el delegado de la Curia de la Compañía de Jesús para las casas internacionales en Roma (DIR). La Compañía establece una investigación preliminar.
– Mayo de 2019: La investigación considera creíbles las acusaciones. Se envía un expediente a la Congregación para la Doctrina de la Fe (CDF)
– Junio de 2019: El Padre Verschueren, superior mayor de DIR, impone restricciones.
– Julio de 2019: la CDF pide a la Compañía que ponga en marcha un proceso administrativo penal
– Enero de 2020: los jueces (todos son externos a la Compañía de Jesús) dicen por unanimidad que sí hubo absolución de cómplice
– Mayo de 2020: la CDF declara que se produjo la absolución de un cómplice y, por tanto, declara que el Padre Rupnik se encuentra en estado de excomunión latae sententia; la excomunión es levantada por un decreto de la CDF ese mismo mes.
Acusaciones de mala conducta del Padre Rupnik contra miembros de la Comunidad de Loyola
– Junio de 2021: La CDF se pone en contacto con la curia general de la Compañía de Jesús sobre las acusaciones relativas al Padre Rupnik y a algunos miembros de la comunidad de Loyola
– Julio de 2021: El Padre General establece una investigación preliminar dirigida por una persona externa a la Compañía. El Padre Verschueren, Superior Mayor del DIR, impone restricciones.
– Enero de 2022: La investigación concluye que había un caso al que responder. Los resultados se envían a la CDF con la recomendación de un proceso penal.
– Octubre 2022: La CDF dice que los hechos están prescritos; no se puede proceder a ningún juicio.
– Continúan las restricciones de julio de 2021 sobre el ministerio del Padre Rupnik.
Nota sobre el papel del Delegado para las Casas Internacionales en Roma– Nota explicativa:
El Delegado para las casas romanas es el superior mayor de las siguientes comunidades e instituciones:
– Colegio del Gesù
– Colegio Bellarmino
– Centro Aletti
– Universidad Gregoriana
– Pontificio Instituto Bíblico de Roma
– Pontificio Instituto Bíblico de Jerusalén
– Pontificio Instituto Oriental
– Residencia jesuita Peter Canisius
– Observatorio Vaticano
– La Civiltà Cattolica
– Colegio Russicum
Fuente: ZENIT Noticias.

Ordenación de mujeres

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El peligro que presenta el camino sinodal alemán no es solo un posible cisma, sino que arrastre a toda la Iglesia a una cancelación de la fe y la moral católicas mediante una tolerancia ‘de facto‘ en la vida de la Iglesia con tesis contrarias a ellas.

Camino sinodal alemán: «La prueba de la verdad vendrá con la cuestión de la ordenación de mujeres»

Por la dimensión histórica y económica de la Iglesia alemana, y por el patente contagio que está suponiendo para las conferencias episcopales centroeuropeas, el “camino sinodal” que ha emprendido inquieta a toda la Iglesia universal.
En el último número de La Nef (diciembre 2022, nº 353), que consagra un dossier especial a los sínodos en la Iglesia, Jean Bernard hace un breve y esclarecedor resumen de lo que está sucediendo entre los católicos germanos y sus consecuencias a corto plazo.
Un camino sinodal en caída libre
Si la Reforma protestante se encarnó en Alemania en el siglo XVI en una persona, el ex monje agustino Martín Lutero, la ruptura que probablemente se produzca en este mismo país más de cinco siglos después tendrá el rostro de una institución, el Synodaler Weg [Camino Sinodal].
Estructura y programa
Puesto en marcha en marzo de 2019 tras la divulgación de un informe que ponía de manifiesto graves fallos en la gestión de los abusos sexuales, el camino sinodal es tanto una estructura como un programa de acción.
Una estructura, ya que consta de unos 230 miembros -principalmente 67 obispos y 69 representantes del Zentrum der Deutschen Katholiken (ZdK)- que se reúnen en cuatro “foros” distintos: “Poder y separación de poderes en la Iglesia“; “La vida sacerdotal hoy“; “La mujer en los ministerios y funciones de la Iglesia“; “Vivir con éxito las relaciones: vivir el amor en la sexualidad y la pareja“.
Un programa de acción, porque se ha propuesto adoptar y presentar a Roma textos destinados a responder a las causas estructurales que, a su juicio, están en el origen de la grave crisis que afecta a la Iglesia alemana. Sin embargo, después de cuatro sesiones plenarias y antes de la última prevista para febrero de 2023, sería un eufemismo decir que algunos de los textos adoptados provisional o definitivamente se alejan de forma impresionante del Magisterio y del Catecismo de la Iglesia.
Las propuestas
Sirvan como ejemplo algunas de las propuestas: la participación de los laicos en la elección de los obispos; la ordenación de hombres casados y el matrimonio de sacerdotes; la destitución de obispos y párrocos tras la votación del consejo episcopal o del consejo parroquial; el diaconado femenino y la reflexión sobre el “ministerio sacramental de personas de todos los sexos“; la admisión de la homosexualidad y la anticoncepción; y la posibilidad de modificar los registros de bautismo en caso de cambio de sexo.
Georg Bätzing
El presidente de la conferencia episcopal alemana, Georg Bätzing, nombrado obispo de Limburg en 2016 por Francisco, apoya el cambio de la doctrina de la Iglesia sobre la homosexualidad y la ordenación de mujeres.
De hecho, esta verdadera asamblea constituyente en la que parece haberse convertido el camino sinodal, de sinodal tiene solo el nombre: aparte de que está fuera de todo marco canónico y de que sus miembros, especialmente los de la ZdK, no son en absoluto representativos del conjunto del laicado católico, ha sido escenario de espectaculares escenas de intimidación contra la minoría fiel al Magisterio.
El camino sinodal es, en cambio, francamente… alemán. Tanto, que parece reflejar las especificidades de este país y de su Iglesia: un poderoso progresismo que irriga las facultades de teología y los órganos de prensa; una influencia protestante a la que se une un complejo antirromano; una fascinación por el Zeitgeist, el “espíritu de los tiempos“; un impacto menor de los pontificados de Juan Pablo II y Benedicto XVI; un número muy elevado de funcionarios laicos en la Iglesia, cuya subordinación estatutaria a los clérigos alimenta frustraciones masivas; un apetito por las estructuras institucionales complejas y los discursos técnicos, etc.
¿Riesgo de cisma?
Y con tales tribulaciones, surge una pregunta: ¿hay que temer un cisma? ¿Conduce el camino sinodal a la creación de una iglesia nacional alemana que, de hecho, sería otra rama del protestantismo alemán? Es cierto que la presión a favor de reformas radicales es fuerte y decidida, y que no solo proviene de las asociaciones de laicos, sino también de una importante mayoría de obispos (incluido el obispo Bätzing, presidente de la Conferencia Episcopal alemana). Además, anticipándose a la respuesta de Roma, varios obispos ya han anunciado la aplicación, en sus diócesis, de algunas decisiones adoptadas por el camino sinodal, con el efecto de dejar obsoletas de facto secciones enteras del catecismo, como la moral sexual.
El hecho es que, para pasar del estado de latencia al de realidad, el cisma debe ser sancionado por la autoridad jerárquica. Hasta ahora, Roma parece haberse convertido en un espectador impotente y vacilante de los acontecimientos en Alemania, aunque el papa Francisco, de nuevo recientemente, haya ironizado: “Digo a los católicos alemanes: Alemania tiene una gran y hermosa Iglesia protestante. No querría otra, que no sería tan buena como la que ya tienen“.
La prueba de la verdad -y de la fuerza- vendrá sin duda con la cuestión de la ordenación de mujeres, una exigencia que parece ser una de las más simbólicas e insistentes del camino sinodal. Dado que no cabe esperar ningún cambio por parte de Roma en esta cuestión, como se confirmó a los obispos alemanes durante su reciente visita ad limina, cualquier iniciativa de un obispo para ordenar a una mujer conllevará inevitablemente la excomunión prevista en el canon 1379 del Código de Derecho Canónico, una disposición introducida por el propio Papa Francisco en junio de 2021…
Fuente: www.religionenlibertad.com
Traducido por Verbum Caro- Red de Traductores Católicos. 

Religiosa reconocida entre las 100 mujeres más influyentes de 2022 rechaza sacerdocio femenino

Por Andrés Jaromezuk.
La hermana Nathalie Becquart, subsecretaria del Sínodo sobre sinodalidad, fue incluida por la BBC entre las 100 mujeres más inflluyentes e inspiradoras del mundo en 2022.
La religiosa, quien fue nombrada por el Papa Francisco para acompañar el proceso de mayor apertura de la Iglesia a la participación de la mujeres, dijo que el sacerdocio femenino “no es una cuestión abierta“.
Becquart señaló que hay muchas maneras en que las mujeres pueden servir a la Iglesia, pero la ordenación no es una opción.
“Para la Iglesia Católica en este momento, desde un punto de vista oficial, no es una pregunta abierta“, dijo Becquart a la BBC.
“No se trata solo de que te sientas llamado al sacerdocio, siempre es un reconocimiento de que la Iglesia te llamará a ser sacerdote. Así que tu sentimiento o decisión personal no es suficiente“.
Al mismo tiempo, la hermana Becquart expresó: “Creo que necesitamos ampliar nuestra visión de la Iglesia. Hay muchas, muchas maneras en que las mujeres pueden servir a la Iglesia”.
En una entrevista realizada en abril de 2021, tras ser nombrada por el Santo Padre en la secretaría general del Sínodo de los Obispos, la religiosa comentó:
“Hay un desarrollo de la corresponsabilidad de todos los bautizados en el gobierno eclesial, que no está necesariamente ligado a la ordenación. (…) La cuestión primordial no es la de la ordenación, sino ¿qué ministerios necesita hoy la Iglesia para cumplir su misión de evangelización?“.
Fuente: Catholic News Agency.

Justicia negada

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Ex provincial jesuita dice que manejo del ‘caso Rupnik’ es ejemplo de “justicia negada

Representa “un daño mortal a la Orden Jesuita, pero más aún a la Santa Madre Iglesia”, advierte también el Padre Matarazzo.

Sobre el caso del Padre Iván Rupnik ha hablado otro jesuita, el Padre Gianfranco Matarazzo, antiguo superior de la Provincia Euro-Mediterránea de la Compañía de Jesús, en términos nada elogiosos sobre la forma como se ha tratado últimamente la cuestión.
Como se recordará,  circularon en días pasados informaciones acerca de un posible levantamiento de excomunión al sacerdote Iván Rupnik a inicios de año por parte del Papa, después de la supuesta condena de un tribunal eclesiástico por violación del canon 977 del Código Canónico, que trata de la absolución sacramental a un cómplice en pecado contra el sexto mandamiento.
Tras esas informaciones, la Compañía de Jesús emitió un comunicado afirmando que se habían recibido denuncias contra el sacerdote en el 2021 por “su modo de ejercitar el ministerio”, que se había nombrado un investigador religioso externo a la compañía, y que los resultados de esa investigación habían sido enviados al Dicasterio de la Doctrina de la Fe, el cual –en octubre pasado– concluyó que los hechos material del inquérito ya habían prescrito. El comunicado de la Compañía expresa que en los hechos investigados “no hay menores involucrados”, pero no menciona más sobre la sustancia o los resultados de la investigación. Al tiempo, órganos como Aciprensa replicaron informaciones de una fuente, diciendo que las presuntas víctimas serían al menos nueve mujeres, que denunciaron los hechos al comisario de la Comunidad Loyola, quien realizó una visita canónica a dicha comunidad y aún es comisario de la misma. La Comunidad Loyola fue fundada por una religiosa de quien el Padre Rupnik era amigo y padre espiritual.
Los cuestionamientos
Vienen ahora las declaraciones del Padre Matarazzo, también reportadas por Aciprensa, quien manifiesta claramente su inconformidad con el manejo interno dado al asunto:
Hoy con el ‘caso Rupnik’ nos aferramos a la ‘prescripción’ y a esperar que todo pueda detenerse ahí. ¿Está el Señor llamándonos a este enfoque?”, se pregunta el Padre Matarazzo.
El presbítero, que es también delegado para el apostolado social y los abusos en la Iglesia siciliana afirmó que “el ‘caso Rupnik’ es un tsunami de injusticia, falta de transparencia, gestión cuestionable, actividad disfuncional, trabajo personalizado, comunidad apostólica sacrificada al líder y trato desigual”.
El Padre Matarazzo etiqueta el asunto como “un caso ejemplar de justicia negada”, y advierte del daño a la propia orden fundada por San Ignacio y al prestigio de la Iglesia: Es “un daño mortal a la Orden Jesuita, pero más aún a la Santa Madre Iglesia”.
Sugiere el sacerdote, una política de mayor transparencia, que se convoque a una rueda de prensa donde se respondan “las preguntas de forma transparente, sin tener que hacer añadidos porque les obliguen”.
Invita el Padre Matarazzo al reconocido Padre Hans Zollner, también jesuita y miembro de la Pontificia Comisión para la protección de menores, la cual también busca la protección de los “adultos vulnerables”, a que se pronuncie sobre el particular.
Fuente: es.gaudiumpress.org

Jesuita experto en lucha contra abusos: Dicasterio vaticano debe responder sobre Padre Rupnik

Por ALMUDENA MARTÍNEZ-BORDIÚ– ACI Prensa.
El sacerdote jesuita Padre Hans Zollner, experto en la lucha contra los abusos, dijo que el Dicasterio para la Doctrina de la Fe “debe responder” sobre las interrogantes que rodean el caso del Padre Marko Rupnik, miembro de la Compañía de Jesús acusado de abusos.
En declaraciones a ACI Prensa, el Padre Zollner dijo que cree que “es obvio que tiene que contestar el Dicasterio de la Doctrina de la Fe”.
Aseguró que desde la Compañía de Jesús, a la que él pertenece, “han dicho lo que podían decir y, por lo que veo, las explicaciones sobre a qué llegaron con la sentencia las debe dar el Dicasterio”.
“Ellos son los que han determinado que los hechos han prescrito. No lo puede hacer la Compañía de Jesús, es competencia del Dicasterio”, explicó.
“Eso es según mi parecer, ya que no soy experto, pero el Dicasterio debe responder”, concluyó el Padre Zollner.
Las afirmaciones del Padre Zollner hacen referencia al caso del Padre Marko Ivan Rupnik, conocido sacerdote y artista jesuita que ha sido acusado por abusos que habría cometido contra al menos nueve mujeres.
Según la declaración oficial de la Compañía de Jesús, el Dicasterio para la Doctrina de la Fe recibió una denuncia contra el sacerdote esloveno y solicitó que se iniciara una investigación previa.
La investigación fue llevada a cabo por un religioso dominico que escuchó el testimonio de varias personas.
Durante la investigación previa, se tomaron medidas cautelares contra el Padre Rupnik, como la prohibición de “ejercer el sacramento de la Confesión, la dirección espiritual y la realización de Ejercicios Espirituales”.
El Provincial de los Jesuitas en Eslovenia dijo que el resultado de esta investigación se entregó al Dicasterio de la Santa Sede, que concluyó que “los hechos en cuestión debían considerarse superados” y cerró el caso en octubre del 2022.
A pesar de esto, las medidas cautelares impuestas durante la investigación previa siguen vigentes, pero ahora como “medidas administrativas”.
“Un tsunami de injusticia”
Por su parte, el Padre Gianfranco Matarazzo, Ex Provincial de la Provincia Euro-Mediterránea de la Compañía de Jesús (Jesuitas), dijo que “hoy con el ‘caso Rupnik’ nos aferramos a la ‘prescripción’ y a esperar que todo pueda detenerse ahí. ¿Está el Señor llamándonos a este enfoque?”.
El también delegado para el apostolado social y los abusos en la Iglesia siciliana criticó que el “caso Rupnik” es “un tsunami de injusticia, falta de transparencia, gestión cuestionable, actividad disfuncional, trabajo personalizado, comunidad apostólica sacrificada al líder y trato desigual”.
Para Matarazzo, el comunicado oficial de la Compañía de Jesús es “un caso ejemplar de justicia negada” y “un daño mortal a la Orden Jesuita, pero más aún a la Santa Madre Iglesia”.
¿Quién es Marko Rupnik?
Marko Rupnik, además de sacerdote, es el fundador del Taller de arte espiritual Aletti, responsable de numerosas obras religiosas alrededor del mundo.
En 1996 San Juan Pablo II le confió la renovación del mosaico de la Capilla de la Redemptoris Mater, en el palacio apostólico del Vaticano.
En febrero del 2011, el Centro Aletti, dirigido por el Padre Rupnik, renovó la capilla principal al interior del edificio de la Conferencia Episcopal Española en Madrid.
También en Madrid, el sacerdote esloveno decoró la sacristía mayor, la sala capitular y la capilla del Santísimo en la Catedral de Santa María la Real de Almudena.
El estudio de Rupnik también es responsable del muro del altar mayor del Santuario de la Santísima Trinidad en Fátima, Portugal, situado frente al lugar de las apariciones de la Virgen María.
En Italia, Rupnik diseñó la rampa y la cripta de la Iglesia inferior de San Pío de Pietrelcina, en San Giovanni Rotondo, a donde miles de fieles católicos acuden a venerar al santo de los estigmas.
El sacerdote jesuita es el autor del logo del Jubileo de la Misericordia convocado por el Papa Francisco del 8 de diciembre de 2015 al 20 de noviembre de 2016.
El Padre Rupnik también recibió el encargo de elaborar la imagen oficial del X Encuentro Mundial de las Familias (EMF) que se realizó en Roma del 22 al 26 de junio de 2022.
Entrevistado por la agencia Reuters, el Padre Zollner dijo que los jesuitas habrían recibido una denuncia de una religiosa en 1998.
El sacerdote jesuita dijo que “en aras de la transparencia, necesitamos saber quién sabía algo, qué y cuándo, y qué sucedió después de eso”.
“Podríamos habernos enterado de los diferentes niveles de responsabilidad, lo que podría haber evitado todo esto”, señaló.
“Me pregunto, y pregunto a mi comunidad, los jesuitas: ¿Quién pudo saberlo? ¿Quién lo supo? ¿Quién percibió que algo andaba mal y no fue más allá?”, cuestionó.
El Padre John Dardis, portavoz de la Compañía de Jesús, dijo a Reuters que no encontraron “nada en los archivos” sobre la denuncia de 1998.
Para el Padre Zollner, “probablemente nunca lo sabremos. En la mayoría de los casos no hay documentos”.
El experto en la lucha contra los abusos sexuales en la Iglesia Católica se pronunció también sobre la prescripción de las denuncias contra el Padre Rupnik.
“Entiendo que legalmente hablando, se aplica el estatuto de limitaciones, pero la cuestión legal no es la única”, dijo.
“Por eso pregunto por qué no se levantó el estatuto”, dijo, con lo que se habría permitido que continúe el proceso a pesar de la prescripción.
El Padre Zollner dijo además que “puedo entender cómo las víctimas se sienten traicionadas”.

El Santuario de Loreto sigue ofreciendo ejercicios espirituales con Rupnik, a pesar de prohibírselo

Hace diez días los jesuitas aseguraban que tiene prohibido el «acompañamiento en ejercicios espirituales»

Antonio OliviéPor Antonio Olivié– www.eldebate.com
Diez días después de que la Compañía de Jesús manifestara que el artista y sacerdote Marko Ivan Rupnik SJ tiene «prohibido dispensar el sacramento de la confesión, la dirección espiritual y el acompañamiento en ejercicios espirituales», el Santuario de Loreto continúa ofreciendo ejercicios guiados por él en el mes de febrero de 2023.
Se trata de cinco días de ejercicios espirituales para sacerdotes y religiosos, promovida por la Delegación Pontificia para el Santuario de Loreto entre los días 13 y 17 de febrero. A día de hoy, 12 de diciembre, aún se promociona y está abierta la inscripción en la web oficial, en la que se puede reservar plaza y pagar la estancia.
El comunicado de la Compañía de Jesús con respecto a Rupnik llegó como respuesta a la revelación en una página web italiana, SilereNonPossum.it, de la existencia de varias denuncias por abusos a religiosas en Eslovenia, en el seno de la Comunidad Loyola. En una de las investigaciones, que fue entregada al Dicasterio para Doctrina de la Fe, se asegura que «la versión de las víctimas es creíble y razonable». Pero el problema es que los delitos, de la década de los 90, han prescrito y no hay menores implicados, por lo que en octubre de 2022 se consideró que el caso quedaba cerrado.
El caso deja en evidencia la falta de transparencia, que perjudica especialmente a las víctimas del caso
Ante las conclusiones de esta investigación, la propia Compañía de Jesús decidió adoptar las medidas cautelares mencionadas, así como imponer la prohibición «de ejercitar actividad pública sin el permiso de su superior local». La realidad es que desde que se impusieron las medidas no parece haber cambiado nada en la proyección pública de Rupnik.

«Un tsunami de injusticia»

El caso deja en evidencia la falta de transparencia, que perjudica especialmente a las víctimas del caso. En esta línea se sitúa el mensaje en redes sociales del ex Superior de la Provincia Euro Mediterránea de la Compañía de Jesús, Gianfranco Materazzo. A su juicio, «el caso Rupnik es un tsunami de injusticia, falta de transparencia, gestión discutible, actividad disfuncional, personalización, comunidad apostólica sacrificada al líder y disparidad de trato».
Según Materazzo es preciso aceptar con responsabilidad las consecuencias de los actos y «ofrecer una detallada reconstrucción de todo lo que ha sucedido». Para ello recomienda organizar una rueda de prensa en la que responder a todas las preguntas con transparencia, así como abrir los archivos del caso.
Por su parte, el responsable del Instituto de Antropología de la Universidad Gregoriana, que se ocupa especialmente de la prevención de abusos, el jesuita Hans Zollner, también ha manifestado la necesidad de aclarar el caso. En su opinión, tras el comunicado de la Compañía de Jesús, es preciso que el Dicasterio para la Doctrina de la Fe facilite más información.
Otro de los profesores del mismo centro y especialista en abusos, Antonio Carrón, considera que «la falta de transparencia genera desconfianza ante las instituciones». Pero también asegura que «es preciso tener en cuenta la complejidad del caso, al tratarse de unos hechos que han prescrito canónicamente», por lo que en el ámbito jurídico no se puede ir más lejos. A partir de ahí entra en juego «un acompañamiento espiritual a las víctimas, que desconozco si se ha realizado en este caso».

Besamanos o lavapiés

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LE REGALA ROSARIO A DINA BOLUARTE

Por Luz Martínez– Diario Trome.
Dina Boluarte se mostró agradecida por el regalo de monseñor Carlos Castillo, quien le obsequió un rosario bendecido por el Papa Francisco. “Gracias por este regalo tan bonito, lo voy a llevar siempre conmigo y solamente voy a decir que tenemos que trabajar, con la iglesia católica, con todos los peruanos. Agradezco su visita y ese abrazo tan cariñoso que me ha brindado”, concluyó.

CARTA PÚBLICA A MONSEÑOR CARLOS CASTILLO DE SU SOBRINO DINO CASTILLO

Lima, 23 de noviembre del 2022
Estimado tío:
Luego de los legítimos y bien intencionados consejos que públicamente te han hecho llegar personas (entre ellas yo) preocupadas no solo por tus lamentables y desubicados comentarios, sino también por el rumbo de la iglesia peruana que persistes tercamente en alterar.
Ahora pues, no me quedan dudas que eres una persona que no sabe escuchar, vives atrapado en tu propio cascarón de ilusiones reformistas y hasta revolucionarias.
Tu eslogan “Iglesia de Lima, a ti te digo: levántate”, para mí, no es otra cosa que un mensaje subliminal que equivale a inducir a las masas a rebelarse políticamente.
Mientras todos los peruanos vivimos preocupados por la grave crisis política y económica que nos afecta, tú vives ajeno a la gran pobreza de millones de connacionales que luchan día a día por llevar el pan a sus hogares.
A estas alturas no te importa nada y de espaldas a la realidad vienes aprovechando sigilosamente el tiempo para formar tu ejército de “Laicos Jóvenes” (véase Twitter del arzobispado 20/11/2022) que reemplazarán a los sacerdotes consagrados en cada parroquia.
Vienes perdiendo el tiempo en reformas alucinadas que no te garantizan éxito alguno, cuando deberías actuar ya mismo por los más necesitados… ¿Dónde está la iglesia pobre para pobres?
Es curioso que tanto tú, como Pedro Castillo, estén en cura de silencio… Por supuesto que hay una explicación, ambos son rechazados por la gran mayoría del pueblo, pues cada vez que hablan su popularidad disminuye…
El mismo día en Twitter realizas una maniobra digna de un comunista diciendo: “En muchos momentos de la historia, los jóvenes han sido despreciados y colocados como «carne de cañón», pero”… La verdad tus palabras me hacen recordar a los ideólogos guerrilleros de los años 60 que asesinaron a mi tío Ismael (tu hermano), quienes influían en la población, diciéndoles que sus males se debían al desprecio y marginación a los que habían sido sometidos; como consecuencia de estas malas influencias, los terroristas ganaron adherentes especialmente indígenas que fueron utilizados como “carne de cañón” (muchos de ellos muertos en una guerra que no les pertenecía).
También en Tweet seguido escribes: “Vamos a unirnos a los recordados y queridos Inti Sotelo y Bryan Pintado, que dieron su vida, hace dos años, por todos nosotros…” Al respecto te comparto el enlace para que leas los comentarios que cientos de personas te responden.
https://twitter.com/arzolima/status/1594362878915923975
Por último quiero manifestar mi total e incondicional apoyo a la ejemplar labor del Padre Omar Sánchez (entre otros muchos y verdaderos líderes), así como expresarte mi más enérgica protesta por tu indiferencia y poca solidaridad ante las amenazas cobardes que viene soportando constantemente el Padre, sin que haya habido un pronunciamiento representativo de toda la iglesia.
Atentamente tu sobrino, Dino Castillo Martin.

Consejo de Cardenales reunido con el Papa Francisco

El 5 y 6 de diciembre el Consejo de Cardenales junto con el Papa Francisco se reunieron en Casa Santa Marta del Vaticano, reflexionado sobre la Fase Continental del Sínodo, los recientes esfuerzos de la Comisión para la Protección de Menores al servicio de las Conferencias Episcopales y de la Curia Romana, entre otros temas.
El comunicado emitido por la Oficina de Prensa de la Santa Sede, informó que “estaban presentes sus Eminencias los Cardenales Pietro Parolin, Giuseppe Bertello, Óscar A. Rodríguez Maradiaga SDB, Reinhard Marx, Seán Patrick O’Malley OFM Cap., Oswald Gracias y Fridolin Ambongo Besungu OFM Cap., y el Secretario del Consejo, S.E. el Arzobispo Marco Mellino. El Papa Francisco participó en los trabajos de ambos días”.
El 5 de diciembre -dice el comunicado- el Consejo participó de la Eucarística en la Basílica San Pedro “en sufragio del Cardenal ghanés Richard Kuuia Baawobr M Afr”. Ese mismo día los cardenales y el Santo Padre revisaron “los trabajos de la COP27 en Egipto, introducidos por los informes de los Cardenales Parolin y Ambongo Besungu”.
Y el martes 6 de diciembre, “reflexionaron sobre la fase continental del actual Sínodo, con el tema ‘Por una Iglesia sinodal: comunión, participación y misión’, basándose en un informe del cardenal Mario Grech y en los frutos del camino sinodal digital elaborado en colaboración con el Dicasterio para la Comunicación. Al final, el Cardenal O’Malley presentó los recientes esfuerzos de la Comisión para la Protección de Menores al servicio de las Conferencias Episcopales y de la Curia Romana y, por la tarde, el Cardenal Gracias informó sobre la Conferencia de la Federación de Conferencias Episcopales de Asia celebrada en Bangkok el pasado mes de octubre”.
También afirma el comunicado que “la reunión fue una oportunidad para actualizarse mutuamente sobre algunos asuntos en las distintas zonas geográficas de referencia y hacer un balance general de los avances del Consejo en los últimos años”.
La reunión concluyó el 6, a las 19.00 hora de Roma. Y el próximo encuentro del Consejo de Cardenales se efectuará en abril de 2023.
Fuente: Vatican News.

Marko Ivan Rupnik SJ

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EL PADRE RUPNIK ACUSADO DE VIOLENCIA SEXUAL Y PSICOLÓGICA. EL SILENCIO DE LOS JESUITAS

No sólo es un teólogo, sino también un artista, más conocido por sus famosos mosaicos. Se trata del padre Marko Ivan Rupnik, jesuita esloveno, por muchos años director del Centro de Estudios “Ezio Aletti”.
Ivan Rupnik ha creado obras famosas en todo el mundo. Los mosaicos de la capilla “Redemptoris Mater” del Palacio Apostólico, aquí en el Vaticano, fueron diseñados por él.
Ha realizado los mosaicos de las basílicas de Fátima y San Giovanni Rotondo, los de la fachada del Santuario de Lourdes, los del Santuario de Nuestra Señora de las Flores en Bra, y también los de la Catedral de Santa María Real de la Almudena en Madrid, la Capilla del Obispado de Tenerife en San Cristóbal de La Laguna, la cripta de la Catedral de Santo Domingo de la Calzada, la Iglesia Ortodoxa de la Transfiguración en Cluj, el Santuario de San Juan Pablo II en Cracovia, el Santuario de San Juan Pablo II en Washington, el Santuario de Madonna Ta’ Pinu en Gozo y la Iglesia Madre de Supersano, la Iglesia de San Pasquale en Bari.
Ahora mismo, en Sao Paulo (Brasil), Rupnik está terminando los mosaicos de la fachada del santuario nacional de Aparecida. La estima por el sacerdote esloveno era tan alta que el Papa Francisco en 2016, durante el Jubileo de la Misericordia, celebró una Santa Misa por el Centro Aletti en el Palacio Apostólico.
Abuso espiritual y físico
Las primeras acusaciones contra el jesuita se remontan a 1995, cuando una consagrada denunció que había sido plagiada y había sufrido “abusos psicológicos, físicos y espirituales”. Se abrió un procedimiento canónico y la mujer fue llamada a declarar más de una vez Para esta delicada tarea fue designado el actual obispo auxiliar de Roma para el Sector Central, S.E.R. Monseñor Daniele Libanori. Libanori siempre ha dado muestras de extremo rigor y transparencia al tratar los casos de abusos. En este caso hay que destacar que hay dos razones por las que quizás era mejor elegir a otra persona para realizar la investigación. Libanori es el obispo auxiliar a cargo del clero y, en segundo lugar, también es jesuita.
La consagrada denunció: “Estoy indignada porque, a pesar de las graves acusaciones formuladas contra él y por las que he sido llamada a declarar más veces, el padre Rupnik sigue ofreciendo conferencias por toda Italia y colgando sus catequesis en YouTube”.
Es la sentida súplica de una mujer que abandonó sus aspiraciones de seguir a Cristo y se vio sometida a graves abusos psicológicos y físicos. “Esta triste realidad me hace dudar de que no me hayan creído. Tengo la legítima necesidad de saber, creo, después de tanto sufrimiento, si la Iglesia considera al padre Rupnik un maestro fiable”, escribe la consagrada.
La comunidad en la que supuestamente se cometieron estos abusos fue encargada en 2021, y todo se hizo en el mayor secreto y silencio. Esto plantea algunas preguntas legítimas: ¿por qué? ¿Cómo es que hay realidades que se encargan con mucho ruido mediático y otras no? ¿Quizás porque es un jesuita? ¿Quizás porque, como siempre ocurre en los casos de abuso de conciencia, estamos hablando de un hombre demasiado “idealizado”? El padre Dysmas De Lassus es muy claro al respecto en su texto Riesgos y derivas de la vida religiosa.
Por lo general, cuando los maltratadores son muy apreciados, es difícil que la víctima sea escuchada. En este caso parece que la mujer, pero no es la única, fue creída, pero las medidas parecen haber sido muy tímidas, en comparación con otros casos.
La consagrada informó que estaba tan marcada que incluso pensó en la muerte. “No podía imaginar que las hermanas abusadas fueran otras tantas”, dijo. Un inmenso sufrimiento que se vio agravado por la relación de confianza que vio a Rupnik en el papel de padre espiritual y confesor de estas mujeres.
Sin embargo, la investigación previa se llevó a cabo y el resultado parece haber llegado. El 3 de enero de 2022, el Boletín de la Oficina de Prensa de la Santa Sede informó: “El Santo Padre ha recibido esta mañana en audiencia al reverendo padre Marko Ivan Rupnik SJ”. No hay asignación, las palabras “ex director del Centro Aletti” no aparecen. El Pontífice recibió al padre Rupnik. ¿Por qué? No todos los abusadores son recibidos por el Papa, al contrario, son evitados a propósito. ¿Qué le dijo Francisco al jesuita esloveno?
En la Curia alguien ha dicho que el Pontífice ha comunicado al jesuita la decisión y lo ha invitado a una vida reservada: nada de predicación, nada de celebraciones públicas y prohibición de confesar.
¿Pero es realmente así? El 10 de mayo de 2022 el padre Mark Rupnik predicó un retiro del clero en Larino, en la provincia de Campobasso (Italia). Si el Papa realmente le preguntó esto, ¿por qué Rupnik continúa su actividad? El Prepósito General de la Compañía de Jesús ha firmado un documento que ha sido comunicado también al Vicariato. ¿Qué dice?
Unas preguntas
Las acusaciones contra Marko Ivan Rupnik son muy graves, se trata del más grave abuso de confianza hacia los propios penitentes. Abuso, primero psicológico, luego físico. Rupnik “me obligaba, con presiones y chantajes, a hacer cosas que he referido puntualmente en la sede oportuna”, refiere la consagrada. Pero la respuesta de los miembros de la Compañía de Jesús fue ocultar todo. La señora dijo: “Después de mi primera denuncia, nadie me ayudó, ni la Comunidad, ni el arzobispo de Liubliana de entonces, ni el director espiritual del padre Rupnik, con quien hablé e intenté explicar lo que había sucedido. Todos ellos, incluso los padres jesuitas que eran los superiores directos del Padre Rupnik y los que llegaron a conocer los hechos, decidieron cubrir todo con un manto de silencio”. ¿Se ha enterado el padre Hans Zollner de estas acusaciones? ¿Qué dice?
La Iglesia comenzó la tolerancia cero lentamente, y siguió adelante. Sobre esto, creo que la dirección tomada es irreversible. Es irreversible. Hoy es un problema que no se discute” Papa Francisco.
¿Por qué nadie escuchó a estas consagradas? ¿Por qué el Padre Rupnik ha sido y sigue siendo cubierto? Es derecho del acusado poder defenderse, es derecho de las víctimas saber cuáles son los resultados de la actividad desarrollada por el obispo Libanori y la Congregación. ¿Rupnik es un hombre inocente? ¿O es culpable? Si es culpable, ¿por qué no ha sido reducido al estado laical? ¿El Papa Francisco ha cubierto los abusos de Rupnik? En ese caso estaríamos en el segundo caso en este Pontificado, después del de Inzoli.
También los obispos y los sacerdotes tienen derecho a saber cuál es la condición en la que se encuentra el jesuita, para saber si invitarlo o no a predicar. “Tengo derecho a una palabra de verdad por parte de la Iglesia sobre los hechos denunciados. Estoy muy preocupada de que el Padre Rupnik pueda hacer más daño a alguien”, dice la consagrada. Nosotros, nos unimos a este llamamiento.
Fuente: Silerenonpossum.it

Declaración del provincial de los jesuitas eslovenos sobre el padre Rupnik SJ

El jesuita Miran Žvanut sale al paso de otro jesuita esloveno implicado recientemente en señalaciones de abusos: el conocido padre Rupnik.
DECLARACIÓN DEL PROVINCIAL DE LOS JESUITAS ESLOVENOS SOBRE EL PADRE MARK IVAN RUPNIK
En los últimos días, hemos visto artículos sobre el padre Mark Ivan Rupnik en diversos medios de comunicación. Desgraciadamente, como siempre, están bastante inflados e incluyen muchas falsedades.
En 2021, el Dicasterio para la Doctrina de la Fe recibió efectivamente una denuncia contra el Padre Mark Ivan Rupnik y pidió a la Compañía de Jesús que abriera una investigación preliminar sobre el caso. Es un procedimiento normal. La denuncia no procedía de las monjas, como afirman falsamente algunos medios de comunicación.
La Compañía de Jesús nombró a un investigador externo (un religioso de otra orden) para investigar y varias personas fueron llamadas a declarar. El informe final se presentó al Dicasterio para la Doctrina de la Fe y, tras examinar los resultados de la investigación, el Dicasterio para la Doctrina de la Fe concluyó que los hechos en cuestión debían considerarse prescritos y, por tanto, archivó el caso a principios de octubre de este año.
Sin embargo, en el marco de la investigación preliminar, se tomaron medidas cautelares contra el padre Mark Ivan Rupnik, repito, medidas cautelares, y ninguna sanción o prohibición por parte del Vaticano, como hemos visto en los medios de comunicación. Las medidas cautelares son algo normal cuando hay denuncias de este tipo o similares contra un religioso.
Así pues, el Dicasterio para la Doctrina de la Fe no ha adoptado ninguna sanción contra el Padre Mark Ivan Rupnik, sólo ha informado a la Compañía de Jesús de que el caso ha prescrito.
El padre Marko Ivan Rupnik vive fuera de Eslovenia desde hace más de 20 años, por lo que, como provincial, no está directamente implicado en esta investigación. El Delegado de las Casas Internacionales en Roma es actualmente el responsable, pero por supuesto me mantiene informado de lo que ocurre y supongo que si tiene alguna información nueva me la comunicará.
Permítanme subrayar que la Compañía de Jesús se toma en serio cualquier queja contra uno de sus miembros, y esta queja también se ha tomado muy en serio. La misión de la Compañía de Jesús es también la de la reconciliación y la búsqueda de la verdad, y confío en que las personas a las que se ha confiado la tramitación de este caso lleguen también a la verdad.

Jesuitas se posicionan con una declaración sobre el padre Rupnik SJ

La delegación de los jesuitas en Roma emitió un comunicado en el que además de ofrecer más contexto, dan a conocer algunos aspectos más como las medidas aplicadas al conocido artista.
A raíz de las acusaciones de abuso contra el conocido sacerdote de la Compañía de Jesús, el esloveno Marko Ivan Rupnik, la delegación de los jesuitas en Roma emitió un comunicado en el que además de ofrecer más contexto, dan a conocer algunos aspectos más como las medidas aplicadas al conocido artista.
El Dicasterio para la Doctrina de la Fe (DDF) recibió en 2021 una denuncia contra el Padre Mark Ivan Rupnik SJ relativa a su forma de ejercer el ministerio. No había menores implicados. El DDF pidió a la Compañía de Jesús que iniciara una investigación previa sobre este caso. La Compañía de Jesús nombró inmediatamente a un investigador externo (un religioso de otro instituto) para la investigación. Se invitó a declarar a varias personas. El informe final se presentó al DDF. Tras estudiar el resultado de esta investigación, el DDF consideró que los hechos en cuestión habían prescrito, por lo que archivó el caso, a principios de octubre de este año.
En el curso de la investigación previa, se adoptaron varias medidas cautelares contra el Padre Rupnik: prohibición de ejercer el sacramento de la confesión, dirección espiritual y ejercicios espirituales de acompañamiento. Además, al Padre Rupnik se le prohibió participar en actividades públicas sin el permiso de su superior local. Estas medidas siguen vigentes hoy en día, como medidas administrativas, incluso después de la respuesta del Dicasterio para la Doctrina de la Fe.
La Compañía de Jesús se toma en serio cualquier queja contra uno de sus miembros. La misión de la Compañía de Jesús es también una misión de reconciliación. Y queremos acoger a todo el mundo y a todos abiertamente.
DIR-Delegado
Arturo Sosa em Portugal: “Não temos de publicar cada caso. Uma das coisas a que todos temos direito como pessoas é uma certa privacidade” Foto © Rúben Marques/PontoSJ

Geral dos jesuítas ao 7M sobre o caso Rupnik: “Não ocultámos nada”

Por – Setemargens.com
“Qualquer caso destes é muito doloroso, (mas) não ocultámos nada”, diz o padre Arturo Sosa numa curta entrevista ao 7MARGENS e Rádio Renascença, nesta que é a primeira reacção do geral dos jesuítas ao caso das suspeitas sobre o padre Marko Ivan Rupnik.
Sobre este membro da Companhia de Jesus, que é também artista e teólogo, apareceram notícias dando conta de suspeições levantadas por várias religiosas da Comunidade Loyola, de que Rupnik teria exercido abusos espirituais e sexuais sobre elas. No final de uma visita de cinco dias a Portugal, durante a qual visitou as diferentes comunidades jesuítas do país, bem como algumas das instituições ligadas à Companhia (escolas, paróquias, centros universitários…),
Arturo Sosa esteve no Centro Universitário Padre António Vieira (CUPAV), em Lisboa, onde celebrou a missa do final de tarde de quarta-feira, 7, e participou num encontro com estudantes universitários. Na homilia, evocou os seis jesuítas e duas funcionárias mártires da Universidade de Centro-América, de El Salvador, assassinados em 1989, para dizer que eles acreditaram que era possível acabar com a guerra civil no país, causa pela qual deram a vida.
Nesta entrevista, o geral dos jesuítas, venezuelano assegura que as medidas tomadas contra o padre Rupnik se mantêm em vigor. E acrescenta que condutas como esta são inaceitáveis.
7MARGENS – A declaração da Companhia sobre o caso saiu depois das primeiras notícias. Porque tardou a informação sobre o que se passava?

P. ARTURO SOSA – Primeiro, tenho de dizer que para a Companhia de Jesus qualquer caso destes é muito doloroso. Segundo, não temos de publicar cada caso. Uma das coisas a que todos temos direito como pessoas é uma certa privacidade: há que fazer declarações públicas quando é público; quando não é público, não há nada para o fazer e isso não significa ocultar. Nós não ocultámos nada.
Neste caso, parece-me importante sublinhar algumas coisas. Uma, que não há menores envolvidos. Ou seja, trata-se de questões entre adultos. Segundo, nós não recebemos a denúncia directamente, mas da parte da então Congregação para a Doutrina da Fé [CDF], a solicitação para fazer uma investigação porque eles tinham recebido a denúncia. Precisamente para não ocultar e para fazê-lo de modo mais transparente possível, procurámos investigadores que não fossem da Companhia de Jesus.
Depois, entregámos à CDF o relatório, que havia pedido essa investigação prévia. Uma investigação prévia não é um processo que termine com uma sentença, é uma primeira aproximação ao caso. Esperámos bastante tempo até que recebemos a notícia da Congregação de que tinha estudado o caso e a investigação e que tratava do que tinha sucedido há 30 anos e que, segundo o direito, estava prescrito. Essa é a parte canónica.
O que aconteceu a seguir?
– Desde o momento em que recebemos a petição para fazer essa investigação – a denúncia não a recebemos nós – imediatamente tomámos medidas, que eram proporcionais aos factos. O padre Marko Rupnik foi proibido de confessar, dirigir exercícios espirituais, fazer direcção espiritual e fazer alguma declaração pública, ensino e qualquer actividade desse tipo que tinha que ser autorizada pelo seu superior local.
Isso foi o que se fez durante todo este tempo, depois de termos recebido a notificação da Congregação de que eram factos prescritos. As medidas foram mantidas, porque queremos ir mais além no assunto, ver como se ajuda todos os que estão envolvidos.
Mas a declaração não faz referência às vítimas. Tendo em conta a notoriedade do padre Rupnik, não se justificava a divulgação do caso?
– Tem de se perguntar às vítimas. Não posso tomar a palavra por alguém que não queira.
Porque não se faz referência às vítimas na declaração?
– Porque não há um processo que diga que aqui há uma vítima e ali um vitimar. Estava prescrito. Não há uma qualificação de vítimas, há uma suspeita de factos que foram mais além dos limites do que se faz entre pessoas adultas.
Uma das medidas tomadas foi a saída do padre Rupnik da direcção do Centro Aletti?
– Isso aconteceu muito antes. Deixou o Centro Aletti há mais de um ano [em 2020] por razões internas à organização do centro, porque já estava há muito tempo no cargo e tinha já muitos compromissos com trabalho artístico.
Ele continua viajando e fazendo várias coisas. Por exemplo, em Fevereiro está previsto um retiro no santuário do Loreto. Isso não entra nas medidas previstas?
– Um retiro não creio que esteja previsto, mas não deveria [fazê-lo]. Ele não está detido, nem nenhuma das medidas afecta o seu trabalho artístico. Ele tem compromissos artísticos muito importantes. Ele pode celebrar a eucaristia, do que está proibido é de orientar exercícios espirituais ou confessar. Essas são as medidas, porque tem de ser proporcional aos factos.
Ele continua a ter a mesma mobilidade que qualquer um de nós, por razões de trabalho. Não está constrangido a esse tipo de medidas. Aquelas a que foi sujeito ele tem cumprido.
Este caso e outros que acontecem não podem diminuir o entusiasmo dos jovens em aderir aos convites da Igreja, como a Jornada Mundial da Juventude?
– Em alguns casos, sim, noutros não, não me atreveria a fazer um juízo geral. Há algumas pessoas que perderam a confiança na Igreja ou na Companhia, outras não. Rezamos todos os dias o Pai Nosso. E aí dizemos que queremos perdoar.
Todos estes casos são muito dolorosos. A conduta de muitos religiosos foi, em muitos casos, inaceitável, pecado. O que se faz? Busca-se o caminho de, se é pecado, que seja perdoado. Aplica-se todas as leis civis que são necessárias, aplicam-se todas as leis canónicas mas, no final, o que queremos com as pessoas – as vítimas e os que cometem o facto – é que se perdoem. Ou seja, abrir a esse processo para que as pessoas se possam reconciliar.
Veio tomar o pulso dos jesuítas em Portugal. Que conclusão tira?
– Entre os jovens, entende-se que as situações não são a preto e branco, há muitas coisas que se podem fazer. Aqui em Portugal, o trabalho dos jesuítas com os jovens é admirável, creio que é um modelo para muitas províncias. O contacto que tive com comunidades paroquiais e a comunidade universitária é entusiasmante.
Conhecendo a Igreja em todo o mundo, qual é a sua grande preocupação?
– A grande preocupação é que sejamos capazes de fazer viva essa ideia que agora chamamos Igreja sinodal, que nasce no Concílio Vaticano II, que se tentou durante muitos anos e que agora recebeu um impulso muito grande por parte do Santo Padre e de outras pessoas da Igreja. [Que não] percamos outra vez a oportunidade de converter a Igreja nesse povo de Deus que marcha em conjunto com a humanidade em busca da justiça e da paz.

Sin castigo para Marko Rupnik, el ‘artista de Dios’ acusado de abusar de monjas

La justicia católica declara prescritos los delitos denunciados por religiosas y achacados al jesuita, autor de mosaicos en el Vaticano, Fátima, La Almudena o la sede de la Conferencia Episcopal española

Por Jesús Bastante– Religiondigital.com
Es uno de los artistas católicos más reconocidos del momento. Sus mosaicos pueblan iglesias de todo el mundo, desde una en el mismísimo Vaticano (regalada por los cardenales a Juan Pablo II por sus 50 años como sacerdote) hasta la capilla de la Conferencia Episcopal, donde rezan y celebran misa los obispos españoles. Catedrales como la Almudena y santuarios como la cueva de San Ignacio de Manresa o Fátima en Portugal cuentan con obras del jesuita esloveno Marko Ivan Rupnik.
Los responsables de muchos de esos templos se cuestionan, desde hace días, la conveniencia de mantener abiertas esas capillas decoradas con sus pinturas. ¿La razón? Las acusaciones de abusos psicológicos y sexuales llevados a cabo, presuntamente, por el religioso durante la década de los 90 en una comunidad religiosa de Luibliana, donde el jesuita ejercía como padre espiritual.
“Los abusos han prescrito”. Esa fue la lacónica respuesta de la Compañía de Jesús después de conocerse el escándalo, cuya resolución pone en duda la política de tolerancia cero planteada por el papa Francisco (quien no se ha pronunciado sobre el caso) y auspiciada, al menos en lo tocante a los abusos a menores, por los mismos jesuitas. Y es que, tal y como comentan fuentes cercanas al proceso, Rupnik habría recibido un “trato de favor” en la investigación llevada a cabo por la Congregación para la Doctrina de la Fe el año pasado.
En un comunicado, los jesuitas señalan que el Vaticano recibió la denuncia en 2021 y que, en la misma, “no había ningún menor implicado”. Un modo de subestimar la gravedad de los hechos, investigados por un religioso dominico.
“Nos aferramos a la prescripción y esperamos que todo acabe aquí”
En octubre pasado, Doctrina de la Fe concluía el proceso, dictaminando que Rupnik no podía ser sancionado al haber prescrito los supuestos abusos a religiosas, pero sin negar su existencia. No obstante, las medidas cautelares planteadas por los jesuitas siguen vigentes. Entre ellas, la prohibición de confesar o participar en actividades públicas sin la autorización de sus superiores. En cambio, sí puede seguir celebrando la eucaristía.
“La Compañía de Jesús toma en seria consideración cada denuncia sobre cada uno de sus miembros. La misión de la Compañía de Jesús es también una misión de reconciliación. Queremos acoger a todas y todos de esta forma abierta”, finaliza el comunicado de los jesuitas. Sin embargo, la polémica no ha hecho sino incrementarse con el paso de los días, alimentándose la tesis de que las mujeres, aunque sean adultas, siguen siendo consideradas ciudadanas (y víctimas) de segunda en la Iglesia.
Entre los propios jesuitas, la indignación también es patente. Así, quien fuera provincial de los jesuitas del Mediterráneo, Gianfranco Matarazzo, criticó que “con el caso Rupnik, nos aferramos a la prescripción, y esperamos que todo acabe aquí. ¿Nos llama el Señor a este enfoque?”.
Para Matarazzo, la forma de gestionar este escándalo “es un tsunami de injusticia, falta de transparencia, gestión cuestionable, actividad disfuncional, trabajo personalizado, comunidad apostólica sacrificada al líder y trato desigual”, lo que se evidencia al comprobar que no hay una sola referencia a las víctimas en la declaración oficial de la Compañía de Jesús.
“Un daño mortal para la Orden de los Jesuitas, pero más aún para la Santa Madre Iglesia. Un caso más, por si no fuera suficiente lo ocurrido hasta ahora”, recalca el religioso, quien pide a sus hermanos “ofrecer una reconstrucción detallada de todo lo sucedido” y “aceptar toda la responsabilidad y las consecuencias”, algo que no ha sucedido.
Frente a esto, el general de los jesuitas, Arturo Sosa, afirmaba, en una entrevista al portal portugués 7Margens, que “no hemos ocultado nada sobre el ‘caso Rupnik’” aunque, a día de hoy, no se conoce ni el número de víctimas, ni si estas denunciaron o no, ni en qué consistieron esos abusos. “Este tipo de conductas son inaceptables”, trataba de justificar Sosa, incidiendo en que las sanciones impuestas durante la investigación siguen vigentes, pese a que esta se dio por finalizada. Una forma de admitir la culpabilidad del artista, que sigue teniendo libertad de movimientos por cuestiones laborales. Porque Rupnik sigue interviniendo en decenas de templos y santuarios católicos en todo el mundo, lo que despierta otra pregunta: ¿Se puede separar la obra de un artista de su comportamiento en temas relacionados con violencia de género o abusos a menores o personas vulnerables?
“¿Qué se hace? Se busca el camino de, si es pecado, que sea perdonado. Se aplican todas las leyes civiles necesarias, se aplican todas las leyes canónicas, pero al final, lo que queremos con la gente –las víctimas y los autores– es que se perdonen a sí mismos”, se justifica el general de los jesuitas.

Pretendida reforma

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El camino Sinodal alemán se ha convertido en un quebradero de cabeza para el Vaticano. synodalerweg

El Sínodo alemán y el cristianismo a la carta que denunciaba Benedicto XVI

Un camino de pretendida reforma, en donde sigue pendiente que aparezca en los trabajos el sello de autenticidad: un nuevo impulso hacia la virtud y la santidad

Declan Huerta Murphy

Por Declan Huerta Murphy- www.eldebate.com
El pasado 18 de noviembre tuvo lugar un encuentro entre los obispos alemanes y los cardenales responsables de distintos dicasterios de la Curia romana, en donde se trató el Sínodo emprendido por la Iglesia alemana. Esta reunión, dentro del marco de la visita ad limina de los obispos alemanes al Papa, fue un inusual evento estrella dentro de este tipo de visitas periódicas de los obispos de todo el mundo al Santo Padre. El comunicado conjunto de la Santa Sede y la Conferencia de obispos alemanes deja claro que muchos de los pronunciamientos del sínodo alemán se reciben con preocupación en Roma.

Reforma y crisis

Hay que recordar que el Sínodo en Alemania es una iniciativa distinta a la fase diocesana del Sínodo de los obispos que ha tenido lugar en las distintas diócesis católicas de todo el mundo. Su origen está en una iniciativa de la Iglesia alemana de abrir un proceso de reflexión y reforma tras la crisis provocada por las noticias de abusos de menores por parte de miembros del clero. En ese proceso se han ido abriendo paulatinamente diversos frentes bastante alejados de la cuestión de la reforma de vida de los clérigos y de la prevención de los abusos, pasándose a tratar cuestiones más bien propias de las tensiones internas de la Iglesia en torno al secularismo, en donde las propuestas se acercan más a una homologación con las condiciones ambientales de la sociedad que a una auténtica reforma basada en el Evangelio.

No satisfechos con su cuota de poder eclesial, pretenden emular la distinción entre alto y bajo clero de épocas pasadas

La aceptación e integración de los comportamientos homosexuales son temas recurrentes, con la posibilidad de una bendición ritual de estas relaciones, así como el acceso de la mujer al ministerio ordenado como única forma de solucionar su papel en la vida de la Iglesia. También hay otras cuestiones como son la intercomunión con otras Iglesias en Alemania así como una independencia de la praxis pastoral de la Iglesia alemana sin necesidad de un control por la Santa Sede. Resulta difícil ver en qué puede cooperar esto para sanar la crisis de los abusos de algunos eclesiásticos en los últimos años.
Tampoco les resulta fácil a muchos fieles de la Iglesia en Alemania verse identificados con este camino. Al reiniciarse este curso los trabajos del Sínodo alemán, el pasado 27 de septiembre, se publicó un manifiesto titulado «Nuevo comienzo: un manifiesto por la reforma» en el que un grupo eminente de laicos denuncian la instrumentalización del Sínodo para impulsar una «más que conocida agenda de política eclesiástica» que nada tiene que ver con el retorno a los fundamentos de la vida de la Iglesia, sino más bien con una rendición a las tesis del secularismo, el cual desde hace tiempo ha hecho mella en ciertos estamentos eclesiásticos laicales y clericales. Asimismo, el manifiesto incide en el hecho de que el Sínodo pretende «hablar por todos los católicos en Alemania y tomar decisiones vinculantes en nombre de ellos». Este manifiesto es interesante porque procede de personas que no forman parte de la estructura asalariada de la Iglesia alemana, cosa que no puede decirse de los laicos que forman el staff de las estructuras de este Sínodo en marcha.

Más clericalismo

En la entrevista concedida en noviembre de 1989 por el entonces cardenal Ratzinger, afirmaba que en la Iglesia existe un cristianismo burgués, que estaría compuesto por aquellas personas que ejercen en la Iglesia los mandos intermedios. Los que componen las comisiones, trabajan en la administración, en la academia o que forman parte de la fuerza laboral de las curias. La característica de este cristianismo burgués –decía Ratzinger– es la pretensión de ser la voz de un pueblo eminentemente laical frente al magisterio, así como su capacidad para arrogarse la representación de las Iglesias locales, dada la mayor facilidad de sus integrantes de intervenir en los medios.
Conviene ser conscientes de que el Sínodo alemán puede estar dominado por este cristianismo burgués denunciado por Ratzinger, en donde se pondría de manifiesto no tanto la igualdad secularizada que se pretende promover, sino una forma aún mayor de clericalización de estos mandos intermedios, que no satisfechos con su cuota de poder eclesial, pretenden emular la distinción entre alto y bajo clero de épocas pasadas, arrogándose el papel de rectores de la vida de la Iglesia. Y todo esto en un camino de pretendida reforma, en donde sigue pendiente que aparezca en sus trabajos el sello de autenticidad: un nuevo impulso hacia la virtud y la santidad.

Iglesia alemana «católica, no protestante»

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Monseñor Georg Batzing y cardenal Reinhard Marx.

LA IGLESIA EN ALEMANIA NO SE GUÍA NI POR LA BIBLIA NI POR LA TRADICIÓN

Más de 70 obispos de todo el mundo advierten a los obispos alemanes que su Camino Sinodal puede acabar en cisma

Más de 70 obispos de todo el mundo han publicado una «carta abierta y fraternal» a los obispos alemanes en la que advierten de que los cambios radicales en la doctrina de la Iglesia que propugna el proceso conocido como «Camino Sinodal» pueden conducir al cisma.
En la carta los firmantes expresan «nuestra creciente preocupación por la naturaleza de todo el ‘Camino Sinodal’ alemán», que ha llevado a la confusión sobre la enseñanza de la Iglesia y parece centrarse más en la voluntad del hombre que en la de Dios.
«Al no escuchar al Espíritu Santo y al Evangelio, las acciones del Camino Sinodal socavan la credibilidad de la autoridad de la Iglesia, incluida la del Papa Francisco; la antropología cristiana y la moral sexual; y la fiabilidad de las Escrituras», afirma la carta.
«Aunque muestran una pátina de ideas y vocabulario religioso, los documentos del Camino Sinodal alemán parecen inspirados en gran medida no por la Escritura y la Tradición -que, para el Concilio Vaticano II, son ‘un único depósito sagrado de la Palabra de Dios’- sino por el análisis sociológico y las ideologías políticas contemporáneas, incluidas las de género», continúa la carta.
«Miran a la Iglesia y a su misión a través de la lente del mundo en lugar de hacerlo a través de la lente de las verdades reveladas en la Escritura y en la Tradición autorizada de la Iglesia».
La carta se publicó el martes. Entre sus firmantes iniciales figuran 49 obispos de Estados Unidos. Otros 19 son de África, 14 de ellos de Tanzania. Los organizadores de la carta facilitaron una dirección de correo electrónico -episcopimundi2022@gmail.com- que otros obispos pueden utilizar para añadir sus nombres al documento.
Entre los que prestan sus nombres al documento se encuentran prelados tan conocidos como el cardenal Raymond Burke, el cardenal George Pell, el arzobispo Salvatore Cordileone de San Francisco y el arzobispo Samuel Aquila de Denver.
Aquila publicó en mayo su propio comentario de 15 páginas sobre el primer texto de la Senda Sinodal, diciendo que presenta propuestas «insostenibles» de cambios en la enseñanza de la Iglesia. «Los obispos alemanes están sembrando la confusión para toda la Iglesia y esto debería preocupar a todos los obispos», dijo en una declaración sobre la carta de los obispos.
Otro prelado que firmó la carta, el obispo Thomas Paprocki de Springfield (Illinois), publicó la siguiente declaración: «El Camino Sinodal Alemán se ha alejado del camino de la auténtica sinodalidad y se ha colocado en oposición a las verdades de nuestra fe católica tal y como se ha enseñado a lo largo de los siglos desde la Escritura y la Tradición. En corrección fraterna y en unión con los obispos de todo el mundo, animo a los obispos de Alemania a volver al verdadero depósito de la fe tal como nos lo transmitió Jesucristo».
Esta iniciativa se suma a las advertencias similares realizadas por los obispos polacos y los de los países nórdicos de Europa.
Fuente: CNA/InfoCatólica.Iglesia de Santa María en Wittenberg.

Un pastor luterano, contra la “protestantización” de la Iglesia católica en Alemania

El reverendo Alexander Garth, pastor de Santa María de Wittenberg, considerada “la iglesia madre de la Reforma”, donde predicaba Martín Lutero, ha expresado su preocupación por el camino sinodal de la Conferencia Episcopal católica alemana. Advierte que se trata de un “camino equivocado”, que está “forzando la protestantización de la Iglesia católica”.
En una carta de la que se hace eco Edward Pentin en National Catholic Register, Garth, quien se define como “un protestante con un corazón católico”, teme que el camino sinodal desdibuje la identidad católica, lo que “sería una gran pérdida para la cristiandad”. Ese desdibujamiento también sería “una desgracia enorme” para un mundo necesitado del perfil propio “de la espiritualidad católica, con la fidelidad al Papa, la devoción mariana y el ejemplo de los santos de la Iglesia”.
El camino sinodal, presentado por sus partidarios como un proceso de reforma en respuesta a los abusos sexuales cometidos por clérigos de la Iglesia católica, pretende discutir el celibato sacerdotal, la ordenación de mujeres, la bendición a uniones de personas del mismo sexo, las invitaciones a los protestantes a celebrar juntos la misa y a participar en la Eucaristía, y algunos temas de moral sexual. Aunque algunos obispos alemanes se desmarcaron de la convocatoria desde el principio, la mayoría ha querido seguir adelante, pese a la advertencia del Papa y los serios reparos de la Congregación para los Obispos. Está previsto que el proceso concluya en febrero de 2022.
Al camino sinodal se ha sumado el movimiento María 2.0, creado en 2019 por fieles laicas para impulsar cambios de calado en la doctrina y la disciplina de la Iglesia católica, como la ordenación de mujeres o el fin del celibato sacerdotal. El mes pasado, sus dos fundadoras abandonaron formalmente la Iglesia católica.
Para que la fiebre de cambio no desdibuje la fe católica, el reverendo Garth pide a esos “reformadores” que se pasen a una denominación protestante que ya reconozca “todo aquello por lo que están peleando”: el sacerdocio femenino, los pastores casados, una constitución sinodal…
Es interesante que sea un destacado pastor luterano quien advierta contra el riesgo de banalizar la fe católica. No deja de ser paradójico que un proceso que contempla abrir la recepción de la Eucaristía a los protestantes como signo de “hospitalidad”, termine convirtiéndose en un nuevo obstáculo para el ecumenismo con los más próximos a Roma.
Fuente: National Catholic Register.
‘Hay un «problema» que surge cuando la vía sinodal «proviene de las élites intelectuales y teológicas» ha declarado el Papa a propósito del camino sinodal alemán. GTRES

El Papa Francisco quiere una iglesia alemana Católica no protestante

Por Ary Waldir Ramos Díaz– Aleteia.

Homosexualidad, mujeres sacerdotes, la formación del clero, entre los temas aún por resolver entre el Vaticano y la Iglesia de Alemania en el marco del Sinodo sobre sinodalidad

Los obispos alemanes concluyeron su visita ad limina en el Vaticano (14-19 de noviembre). La Iglesia alemana quiere incluso reformas estructurales en la Iglesia, pero el Vaticano se opone y habla de «moratoria» del sínodo alemán. Incluso la doctrina de la Iglesia sobre la sexualidad no encuentra soluciones comunes.
En este sentido, el 19 de noviembre, en un encuentro con la prensa desde Roma, el presidente de la conferencia episcopal Georg Bätzing refutó la opinión del Vaticano de que las reflexiones sobre el sacerdocio de las mujeres y de la homosexualidad estuvieran ya cerradas.
El Vaticano por su parte, insistió –con la voz del cardenal Pietro Parolin– asegurando a los obispos alemanes que sigan pensando en las «reformas», lo cual expresamente significa: «reformas de la iglesia y no de iglesia» (Comunicado conjunto entre los obispos alemanes y el Vaticano: 19.11.2022).
Tras siete años de no venir a Roma, los obispos tuvieron ‘un cara a cara’ con el papa Francisco sobre el Sínodo en Alemania, país donde ya hay «una gran y hermosa Iglesia protestante», y no se necesita otra, o mejor: que «no querría otra»: «Quiero que sea católica». Así lo dijo el Papa pensando en los católicos alemanes (Vuelo de regreso de Bahrein 06.11.2022).

Moratoria

El 18 de noviembre, el Vaticano envío un comunicado en nombre de los 62 obispos y la Curia Romana. El Vaticano habla de moratoria, es decir que los problemas han quedado pospuestos y no se han resuelto.
El Sínodo alemán es un proceso que debería estar bajo el techo del Sínodo sobre la sinodalidad en el que el pueblo, junto al clero alemán reflexionan sobre propuestas de cambio en la Iglesia. Sin embargo, los temas son de difícil discernimiento, como por ejemplo el sacerdocio femenino (zanjado con un «no rotundo» por papa Juan Pablo II), el celibato sacerdotal o reflexionar sobre la moral sexual sobre la homosexualidad y la bendición de uniones de parejas del mismo sexo, entre otros.
El Papa, que se había reunido con los obispos el día anterior, no participó en el encuentro para hacer síntesis y sacar el comunicado antes mencionado, que fue una oportunidad para una «confrontación informal, pero necesaria y constructiva», según el cardenal secretario de Estado Parolin.
En el Instituto Augustinianum, a pocos pasos de la Plaza de San Pedro, los obispos alemanes se encontraron con la Curia Romana. El moderador de la reunión, el cardenal Parolin, mencionó en su introducción las «preocupaciones que suscita el camino sinodal alemán”.
El Presidente de la Conferencia Episcopal Alemana (DBK), Monseñor Georg Bätzing, obispo de Limburgo, respondió recordando que los abusos del clero estaban en el origen de su planteamiento y recordó los principales temas tratados en las asambleas de Alemania.
En efecto, hay que dar un paso atrás para entender porque el sínodo alemán inició antes del sinodo sobre la sinodalidad.
El punto clave es el informe del 2018 sobre los abusos sexuales en el que se documentan más de 3,670 casos contra menores en los últimos decenios. Por tanto, el terremoto de la perdida de miles de donaciones y el abandono en masa: Casi 360,000 personas dejaron la Iglesia católica en Alemania en 2021 tras los escándalos de abusos (27.06.2022).

No romper el diálogo

Durante la reunión en Roma, algunos de los participantes -probablemente un gran número de obispos alemanes, que votaron a favor de las propuestas del sínodo alemán el pasado mes de septiembre, defendieron la necesidad de «continuar la reflexión» llevada a cabo por este sínodo nacional, según el comunicado antes mencionado.
Los cardenales Marc Ouellet, Prefecto del Dicasterio para los Obispos, y Luis Francisco Ladaria Ferrer, Prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, intervinieron en este sentido, expresando «franca y claramente» sus preocupaciones y reservas respecto a «la metodología, los contenidos y las propuestas del Camino Sinodal alemán». Propusieron, «por el bien de la unidad de la Iglesia», que las propuestas que surgieran fueran «incluidas» en el sínodo sobre el futuro de la Iglesia.
El contexto de este intercambio ha sido el camino sinodal alemán que inició antes (en 2019) que el Sínodo convocado por el Papa desde Roma (2021) debido a los escándalos de los abusos en Alemania. Mientras que el Sindodo sobre la sinodalidad ha sido prolongado aludiendo -argumentó el Papa- que se necesita más tiempo para el discernimiento, así se realizará en dos sesiones: 2023 y 2024 (16.10.2022).
De esta «confrontación de posiciones diferentes», subraya el comunicado, se desprende «la importancia y la urgencia de profundizar en ciertas cuestiones» planteadas durante los debates. Especialmente las relativas a las «estructuras de la Iglesia», el «ministerio sagrado y su acceso» o la «antropología cristiana”.
La cuerda entre el Vaticano y los obispos alemanes no se rompe. El cardenal Parolin, para concluir, reconoció que esta confrontación no puede «ser ignorada» en el futuro. Todos los participantes acordaron que este «diálogo» continuará «en los próximos meses, para contribuir al enriquecimiento de la vía sinodal alemana y del Sínodo universal de la Iglesia».

Monseñor Bätzing: No es un opción dejar de hablar de los temas candentes

El presidente de los obispos alemanes impugnó la opinión del Vaticano, pues afirmó que una moratoria en el camino sinodal alemán «no es una opción». Monseñor Bätzing, en una conferencia de prensa celebrada en el día siguiente al comunicado del Vaticano, desde el Augustinianum, aseguró que, aunque había escuchado las «reservas» de la Curia Romana, la Conferencia Episcopal Alemana «quiere y debe dar respuestas a las preguntas de los fieles» (19.11.2022).
En la conferencia, el arzobispo Bätzing sostuvo que la charla de dos horas del pontífice a los 62 obispos alemanes el 17 de noviembre les había «animado». El Papa, explicó, escuchó las diferentes posiciones de los obispos alemanes y luego les instó a tener valor y paciencia para resolver sus tensiones. «No estamos de acuerdo en cuestiones teológicas importantes, especialmente en lo que se refiere a la vía sinodal», admitió el obispo alemán. Y descartó la propuesta de moratoria que había surgido.
El obispo Bätzing por ejemplo dijo que sobre las bendiciones a las parejas del mismo sexo. «No voy a retirar» la posibilidad de bendecir a las parejas del mismo sexo que «crean y pidan la bendición de Dios», insistió.

No al lenguaje cismático

Una fuente consultada desde Alemania confirmó a Aleteia que, de hecho, hubo una confrontación entre dos posiciones muy diferentes. La Iglesia alemana quiere incluso reformas estructurales en la Iglesia, pero el Vaticano se opone. Incluso la doctrina de la Iglesia sobre la sexualidad no encuentra soluciones comunes. La Iglesia alemana no quiere una nueva reforma al margen de la Iglesia universal, sino que espera esa «actualización» deseada por papa Juan XXIII desde el interno.
En efecto, el cardenal Reinhard Marx ha pedido mirar a la tradición, mientras que se camina como Iglesia junto al pueblo. «No hay que romper con el pasado. Todo lo contrario, debemos tener el valor de empezar algo de nuevo a la luz de la tradición y mantener el tesoro del pasado. Pero, sobre todo, debemos mirar hacia adelante», aseguró Marx en una homilía en la Basílica de San Pablo (18.11.2022).

Iglesia sinodal inclusiva:

Y del documento continental también se pueden observar esas voces provenientes de Estados Unidos, así como del sínodo alemán, que indican una visión de una iglesia inclusiva y volcada a la hospitalidad –según las enseñanzas de Jesús-:
«en lugar de comportarnos como custodios que intentan excluir a otros de la mesa, tenemos que hacer más para asegurarnos de que la gente sepa que todos pueden encontrar un lugar y un hogar aquí» (comentario de un grupo parroquial de Estados Unidos). Estamos llamados a ir a todas partes, sobre todo fuera de los territorios más familiares, «saliendo de la posición cómoda de quienes dan hospitalidad, para dejarnos acoger en la existencia de los que son nuestros compañeros de viaje en la humanidad» (CE Alemania). (Punto 31– DOCUMENTO DE TRABAJO PARA LA ETAPA CONTINENTAL).

Abusos

En definitiva, un punto importante compartido entre los obispos de Alemania y el Vaticano es el rechazo a los abusos. Aunque si se distancian en la manera de enfrentar la reforma. De ahí, el proceso de «escucha del pueblo de Dios». Por ello, cabe destacar lo que revela el texto continental sobre los abusos que se ha publicado recientemente; considerados el obstáculo más grande para confiar en la Iglesia.
En efecto, muchas iglesias locales informaron de que se enfrentan a un contexto cultural marcado por la disminución de la credibilidad y la confianza debido a la crisis de los abusos del clero. Algo que también sucede en Alemania, como recordamos. Este es uno de los problemas que emergen del documento que servirá para preparar el Sínodo sobre la sinodalidad.
«Un obstáculo especialmente importante para caminar juntos es el escándalo de los abusos cometidos por miembros del clero o por personas que ejercen cargos eclesiásticos: en primer lugar los abusos contra menores y personas vulnerables, pero también los de otro tipo (espirituales, sexuales, económicos, de autoridad, de conciencia)».
Una dolorosa admisión sobre la lacra de los abusos en la Iglesia que ha llevado a muchos grupos sinodales a pedir «un cambio cultural» en la institución hacia una mayor transparencia y responsabilidad. Además se pide más espacio para las mujeres, mayor acogida para los divorciados, escuchar la voz de los indígenas, y hasta acoger el cansancio y la desilusión de los sacerdotes que ya no tienen la misma fuerza de antes.
Igualmente, el texto pide «un diálogo más incisivo y un espacio más acogedor a quienes, por diversas razones, sienten una tensión entre la pertenencia a la Iglesia y sus propias relaciones afectivas, como, por ejemplo los divorciados vueltos a casar, los padres y madres solteros, las personas que viven en un matrimonio polígamo, las personas LGBTQ». Algo que también los obispos alemanes plantean a Roma, luego de «escuchar» las voces de los fieles, incluso no practicantes. Sin embargo, la cuestión quedar abierta: ¿logrará la iglesia en Alemania canalizar su propuesta sinodal nacional en el torrente sinodal de la Iglesia sinodal universal?

El Papa nombra nuevo prefecto de la Secretaría para la Economía

Tras la renuncia al cargo del jesuita español Juan Antonio Guerrero por motivos de salud, el Santo Padre designó a Maximino Caballero, quien hasta ahora ejercía como Secretario de este organismo que gestiona la actividad económica de la Santa Sede. Así, un laico más asume la dirección de una importante repartición vaticana. Francisco agradeció a Guerrero por los frutos obtenidos en su gestión.
El Papa Francisco ha aceptado la renuncia al cargo de Prefecto de la Secretaría para la Economía (SpE) presentada “por motivos personales” por el padre Juan Antonio Guerrero Alves SJ. La dimisión entrará en vigor el jueves 1 de diciembre. Lo sucederá en su rol el economista Maximino Caballero Ledo, actual Secretario de la SpE, ligado a Guerrero por una larga amistad, a quien el Pontífice nombró prefecto y quien tomará posesión del cargo ese mismo día. Caballero se convierte así en otro laico que dirige un organismo de la Santa Sede.
El Papa -informa la Oficina de Prensa de la Santa Sede- agradeció calurosamente al padre Guerrero “la dedicación mostrada en su servicio a la Santa Sede”. El Padre Guerrero “logró poner en orden la economía, fue un trabajo fuerte y exigente que dio muchos frutos. El Santo Padre le asegura sus oraciones”.
Coincidiendo con el anuncio, el padre Guerrero envió una carta a los empleados y colaboradores de la Secretaría para la Economía, en la que explica los motivos de su decisión: “Como saben, he sido intervenido quirúrgicamente a lo largo de este año, a consecuencia de lo cual estoy sometido a un tratamiento médico que me está produciendo ciertos efectos secundarios que me dificultan especialmente el desempeño de una tarea tan exigente como la que estoy realizando, y que requiere una eficacia física y una concentración mental mejores que las que tengo en este momento”, detalla el sacerdote.
En la carta, Guerrero hace un recorrido por los últimos tres años, explicando que se va “con tristeza, pero también con una inmensa gratitud al Señor, al Santo Padre y a todos ustedes, y con la satisfacción de que juntos hemos hecho una contribución a la reforma económica pedida” por el Papa Francisco. “Juntos, y en colaboración con otras instituciones curiales -escribe el Prefecto saliente de la SpE-, hemos ayudado al Santo Padre a dar pasos importantes en la organización económica de la Curia Romana, en la transparencia, en la credibilidad de la Santa Sede en materia económica. Hemos contribuido a tener normas más claras, pero todavía hay muchas cosas en proyecto: la centralización de las inversiones, la mayor regulación y simplificación de los procesos de contratación, para hacerlos más transparentes y ágiles; la puesta en marcha de la Dirección de Recursos Humanos, que es un nuevo reto para mejorar las condiciones y el clima de trabajo en la Santa Sede; la planificación de un mayor uso de procedimientos informáticos”.
Se entra ahora en una nueva etapa, explica Guerrero, que “requiere una persona más competente y, sobre todo, que pueda estar en la plenitud de sus energías”. A continuación, el prefecto saliente añade: “Hemos experimentado que en el proceso de reforma hay pasos hacia adelante y pasos hacia atrás, pero a medida que pasan los años vemos un progreso real. Ahora no estamos en el mismo punto en el que empezamos. En cualquier caso, sabemos que ser un órgano de control siempre implica estar en una posición incómoda para quienes son controlados. Estoy seguro de que ustedes seguirán haciendo el trabajo con humildad y con espíritu de servicio y cooperación con las demás instituciones curiales. La economía debe ser siempre servidora, nunca señora, y más aún en una institución como la Santa Sede”.
Fuente: Vatican News.

¿Sólo “motivos personales” tras la renuncia de Juan Antonio Guerrero como prefecto?

El periódico francés, haciéndose eco de fuentes vaticanas, apunta “a otra razón, más relacionada con un ‘excesivo deseo de control’ que habría ejercido el jesuita español”

“Según altas fuentes vaticanas, habría mostrado una fuerte resistencia en la aplicación de la Constitución Apostólica, especialmente en la transferencia del patrimonio al ‘Banco Vaticano’”, señala La Croix

Por José Lorenzo– www.religiondigital.org“
Por motivos personales”. Esas fueron las razones aducidas en el comunicado vaticano para la sorpresiva renuncia del jesuita Juan Antonio Guerrero Alves como prefecto de la Secretaría para la Economía (SpE), aceptada este 30 de noviembre por el papa Francisco, quien le agradeció “la dedicación mostrada en su servicio a la Santa Sede”, donde “logró poner en orden la economía”, en lo que “fue un trabajo fuerte y exigente que dio muchos frutos”. El Santo Padre le asegura sus oraciones”.
El propio Guerrero, en una carta a enviada a sus colaboradores de la SpE, aseguraba que “como saben, he sido intervenido quirúrgicamente a lo largo de este año, a consecuencia de lo cual estoy sometido a un tratamiento médico que me está produciendo ciertos efectos secundarios que me dificultan especialmente el desempeño de una tarea tan exigente como la que estoy realizando”.
Sin embargo, según sostiene el diario La Croix, además de las razones de salud habría otros motivos que habrían estado detrás de esta salida del religioso extremeño.
“Otras voces dentro del Vaticano también apuntan a otra razón, más relacionada con un ‘excesivo deseo de control’ que habría ejercido el jesuita español. Según altas fuentes vaticanas, habría mostrado una fuerte resistencia en la aplicación de la Constitución Apostólica, especialmente en la transferencia del patrimonio al ‘Banco Vaticano’, decidida en agosto por el Papa. Estas diferencias de opinión, junto con su estado de salud, habrían contribuido a acelerar su marcha”, señala el periódico francés.
El 22 de agosto, por medio de un Rescriptum ex audientia tras un encuentro con el cardenal Secretario de Estado, Pietro Parolin, Francisco decretó que los cambios en la gestión financiera de la Santa Sede promulgados en la Constitución Apostólica Praedicate Evangelium, tengan “una fuerza firme y estable”.
Transferir bienes y activos al IOR
“Debe interpretarse en el sentido de que la actividad de gestión de bienes y custodio del patrimonio mueble de la Santa Sede y de las Instituciones relacionadas con la Santa Sede es responsabilidad exclusiva del Instituto para las Obras de Religión”, apunta el Papa en el texto.
De esa, manera Francisco establecía que “la Santa Sede y las instituciones vinculadas a la Santa Sede que posean activos financieros y activos líquidos, cualquiera que sea su forma, en Instituciones financieras distintas del IOR, deberán informar al IOR y transferirlos a éste lo antes posible en un plazo de 30 días a partir del 1 de septiembre de 2022”.

Becciu graba llamada

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En el 2018, Francisco nombró a Becciu cardenal y le asignó la labor de elegir a los futuros santos católicos. ANDREAS SOLARO/AFP.

Cardenal Becciu intentó librarse del juicio por corrupción en su contra grabando una conversación con el papa Francisco

El hecho se conoció durante la 37 audiencia contra Angelo Becciu, quien llegó a ser la tercera persona más poderosa del Vaticano, y otras nueve personas a quienes se les investiga por malversación y asociación ilícita.

Un audio difundido durante la última audiencia en contra del cardenal Angelo Becciu revela los intentos del acusado por corrupción de obtener una declaración del papa Francisco para librarse del juicio en su contra.
¿Me dio o no la autorización para iniciar las operaciones para liberar a la monja? (…) Creo que le informé de todo eso, ¿recuerda?”, pregunta una voz muy nerviosa a través del teléfono. A un lado de la línea se encuentra Angelo Becciu, un cardenal que llegó a ser el tercer hombre más importante del Vaticano. Al otro lado, perplejo, se encontraba el papa Francisco, quien se venía recuperando de una reciente operación al colon.
La conversación se produjo el 24 de julio del 2021, tres días antes de que la justicia italiana iniciara un juicio contra Becciu, acusado de malversación de fondos.
Una persona que se encontraba en la misma habitación que Becciu se encargó de grabar dicha llamada sin conocimiento del Sumo Pontífice católico, según ha revelado el fiscal jefe Alessandro Diddi durante la trigésimo séptima audiencia contra el cardenal.
Para la difusión del audio se ordenó a los periodistas presentes abandonar la sala. Sin embargo, el sitio web JustOut, dirigido por la periodista Maria Antonieta Calabró, tuvo acceso a la transcripción.
Abogados involucrados en el proceso confirmaron posteriormente a las agencias The Associated Press y EFE que dicha conversación existió, fue grabada y difundida durante la audiencia. Los defensores del cardenal, sin embargo, aseguraron que no tenían conocimiento sobre las nuevas pruebas en contra de su cliente.
Becciu, además, le había dicho a Francisco que “usted ya me ha condenado, es inútil que se siga el proceso”.

DEL VATICANO AL DAESH

Becciu se convirtió en sacerdote en 1972. Como parte de su trabajo religioso estuvo en la República Centroafricana, Nueva Zelanda, Reino Unido, Francia, Estados Unidos y Cuba, entre otros, hasta que en el 2011 el entonces papa Benedicto XVI lo nombró Secretario para Asuntos Generales en la Secretaría de Estado del Vaticano, el equivalente a la Cancillería de la Santa Sede.
Este cargo convirtió a Becciu en el tercer hombre más importante del Vaticano entre el 2011 y el 2018. Ese último año, además, pasaron dos cosas trascendentales en la vida del religioso: por un lado, Francisco lo nombraría cardenal y le asignaría la labor de elegir a los futuros santos católicos; por otro lado, Becciu terminaría envuelto en una trama de desvío de fondos de la Iglesia.
En el 2018 la Secretaría de Estado del Vaticano contrató a Cecilia Marogna, una supuesta analista de seguridad que estableció una empresa en Eslovenia, por 575 mil euros (unos US$598 mil) para liberar a una monja colombiana que estaba secuestrada por terroristas vinculados a Al Qaeda en Mali.
Durante la llamada, se sospecha que Becciu buscaba que el Papa confirmara que aprobó esa partida de dinero a la empresa de Marogna.
Según las investigaciones en curso, sin embargo, Marogna habría gastado gran parte del dinero enviado desde el Vaticano en comprar artículos de lujo y visitar centros de salud.
Junto a Becciu y Marogna hay otras 8 personas investigadas por la justicia del Vaticano en torno a este caso.
La rehén era Gloria Cecilia Narváez, quien se desempeñaba como misionera en la frontera entre Mali y Burkina Faso cuando fue secuestrada por el Frente de Liberación de Macina en febrero del 2017.
Narváez fue liberada recién en octubre del 2021 tras negociaciones entre los terroristas y los gobiernos de Mali, Colombia, Senegal y Ghana. Según el comunicado emitido por el Ejecutivo maliense tras la liberación de la religiosa, no se pagó ningún rescate económico.

En el 2021 Becciu se convirtió en el primer cardenal investigado por delitos inmobiliarios en el Vaticano. VATICAN MEDIA/AFP

El cardenal Becciu, investigado también por asociación ilícita en el Vaticano

Este audio, que aún no ha sido aceptado como prueba por el tribunal, forma parte de una nueva acusación en contra de Becciu por el concepto de asociación ilícita, aseguró el fiscal Diddi. El religioso viene siendo investigado desde el 2020, cuando estalló un escándalo que lo vinculaba a un controvertido acuerdo para invertir en un edificio de lujo en Londres con fondos de la iglesia.
Según la acusación, Becciu habría destinado US$232 millones de las arcas vaticanas, entre ellas dinero obtenido de las limosnas, a través de empresas extranjeras para adquirir la lujosa propiedad en Sloane Avenue.
Por otro lado, las autoridades del Vaticano también acusaron a Becciu de utilizar fondos de la iglesia para favorecer a sus familiares directos, entre ellos una cooperativa en la región de Cerdeña que era dirigida por su hermano o a un hospital romano en ruinas que empleaba a su sobrina, detalla un artículo de la BBC.
El escándalo, que se convirtió mas bien en un terremoto dentro del Vaticano, llevó a que Becciu renuncie en septiembre del 2020 a su cargo como cardenal por pedido del mismo Francisco.
En agosto de este año, sin embargo, Becciu participó del Consistorio convocado por el Papa para la designación de nuevos cardenales y las conversaciones en torno a la reforma de la Curia Romana.
Al cierre de este artículo, la oficina del Papa no se ha pronunciado sobre el audio revelado en la audiencia.
Fuente: Diario El Comercio.

Papa Francisco al Cardenal Becciu: «le pido disculpas y perdón si esto le ha ofendido y lastimado»

Se ha dado a conocer una correspondencia entre el Papa Francisco y el Cardenal Becciu: Se trata de una misiva en la que el Cardenal Becciu manifiesta al Papa su enojo porque este saludó en una audiencia general en el Vaticano a Francesca Immacolata Chaoqui.
En el contexto del proceso contra el Cardenal Becciu, se ha tenido una nueva sesión. En esta ocasión se ha dado a conocer una correspondencia entre el Papa Francisco y el Cardenal Becciu: Se trata de una misiva en la que el Cardenal Becciu manifiesta al Papa su enojo porque este saludó en una audiencia general en el Vaticano a Francesca Immacolata Chaoqui, condenada por la justicia vaticana en 2016, por filtración de documentos, y quien ha entrado al proceso del Cardenal Becciu como parte acusatoria.
La carta es del 19 de agosto de 2022 y en ella el Cardenal Becciu dice al Papa (traducción de ZENIT):
Santo Padre,
Lo siento, pero no puedo evitar expresar mi profunda consternación por la publicación de las fotos en las que se ve a la Sra. Chaouqui autorizada a saludarlo durante la audiencia de ayer. He aquí las razones de mi decepción:
Cuando, en 2017, me presenté ante usted, instándole a indultar a la señora para condonar los pocos meses que le quedaban antes de que se extinguiera su condena, usted me contestó, en un tono severo que nunca antes había visto, en estos términos: «Mi respuesta es negativa y no debe volver a mencionar este nombre». Además, la prohibición de entrar en el Vaticano sigue vigente para siempre.
En estos términos, como Sustituto [de la secretaria de Estado, puesto que tenía entonces el Cardenal. NDR], contesté en su nombre a la señora. Reaccionó duramente acusándome de haber sido yo quien se opuso al indulto y amenazando con una cruel venganza contra mí.
Llevo dos años pagando esta venganza y está ante los ojos de todo el mundo.
Con el besamanos de ayer he quedado públicamente desmentido y la señora cogerá más fuerzas para seguir demoliéndome con todos los medios satánicos de los que es capaz.
El hecho más grave es el siguiente y forma parte del proceso penal en curso contra mí. Con el gesto de ayer usted, Santo Padre, rompió su tan proclamado compromiso de neutralidad en el Proceso. Sabéis que esta señora aparece en los documentos judiciales como una de mis acusadoras, ahora al recibirla habéis mostrado solidaridad con ella y apoyo indirecto a sus tesis acusatorias contra mí. En términos procesales su acto no será visto como emanado del Papa sino del Primer Magistrado del sistema legal del Estado Vaticano, y por lo tanto como interferencia en el Proceso.
Por ello, me he sentido en la obligación de comunicárselo y, mientras tanto, le envío un cordial saludo.
Cardenal Angelo Becciu.
El Papa contestó ese mismo día al Cardenal y la respuesta también se ha dado a conocer en esta nueva cita del proceso:
Muchas gracias por su correo electrónico.
Siento que este gesto de saludo pueda herir. Me preguntaron si la señora podía venir con sus hijos a la Audiencia General y tener un besamanos…, y pensé que, si le hacía bien, que viniera.
Entonces, te digo que casi he olvidado la «aventura» de esta Señora. Ni siquiera sé si está implicada en el juicio (no voy a entrar en eso).
Le pido disculpas y perdón si esto le ha ofendido y lastimado. Es culpa mía, también la costumbre de olvidar las cosas malas. Por favor, perdóneme si le he ofendido.
Rezo por ti, por favor, hazlo por mí.
Que el Señor os bendiga y la Virgen os guarde.
En declaraciones a periodistas, Francesca Immacolata Chaoqui dijo: «Contaré primero cómo el Cardenal me distanció del Santo Padre y luego cómo el Santo Padre me llamó de nuevo a su lado (…) cómo luché con él para que continuara la transparencia que comenzó con la comisión Cosea».