Por Martha Meier Miró Quesada- Diario EXPRESO.
El Congreso necesita mecanismos disciplinarios eficientes y drásticos para destituir, sin mayor trámite, a filoterroristas, defensores de narcodictaduras como la de Nicolás Maduro, a quienes son repudiados por la región que supuestamente representan, y a aquellos que lucen prendas con la imagen de prófugos de la justicia. Es decir, para evitar que personas como María Agüero Gutiérrez ocupen una curul mientras desprecian al Perú y a su población. Ese tipo de personas destruyen desde dentro un poder tan importante del Estado.
Agüero es conocida actualmente como la “diez por ciento” por apropiarse de ese porcentaje del sueldo de quienes trabajan para ella. Una comunista mochasueldos, amargada y filosenderista que insulta al Legislativo con su polo rojo, estampado con la cara del fugitivo Vladimir Cerrón. Como si esto fuera poco, esta “madrastra de la patria” ha sido declarada persona non grata por varios distritos de Arequipa, la región que representa, y fue abucheada por adolescentes escolares, maestros y padres de familia. Esto último ocurrió debido a los comentarios despectivos que profirió contra los emblemáticos colegios Independencia Americana y Micaela Bastidas, y contra la propia Arequipa.
El desprecio por la región que representa y por los mencionados centros educativos brotó de su boca como veneno en 2021, frente a un reportero y una cámara. El veneno resurgió en televisión, lo que llevó a Agüero a disculparse. Sin embargo, su hipocresía irritó a los dignos hijos de Arequipa, quienes respondieron lanzándole huevos y botellas plásticas vacías. También hubo inflamados discursos de los estudiantes, destacando entre ellos un joven afrodescendiente, a quien sin duda le espera un brillante futuro político. No se apoya la violencia, pero lo que expresó la “Gringasha” en 2021 fue extremadamente insultante.
Primero, afirmó que no se sentía arequipeña y que, cuando regresó de Estados Unidos –donde ingresó ilegalmente hace varios años–, “la gente” le decía que sus hijos, educados en Beverly Hills (vaya huachafería), no podían asistir a esos colegios de hijos de ambulantes, cortacaras, lesbianas y delincuentes, refiriéndose a los mencionados centros educativos. Como buena comunista, considera la homosexualidad un delito, al igual que cortar caras, por ejemplo. Por esa razón, la congresista Susel Paredes la denunció ayer ante la Comisión de Ética.
Arequipa, como bien sabemos, es tierra de personas combativas, valientes, decididas, de espíritu independiente y rebelde, que sienten un profundo orgullo regional. Los arequipeños son apasionados y de carácter fuerte, lo que se refleja en su resistencia y participación en protestas. A lo largo de nuestra historia, Arequipa ha sido cuna de oposición política y social, y de varias revoluciones. Sin embargo, Agüero intenta disculparse tras haber clavado el puñal.
Cuando la que no se siente arequipeña juró como representante de esa región, dijo: “Por Arequipa revolucionaria, por una Asamblea Plurinacional Constituyente. ¡Que viva el Perú, kausachum!”. ¿Podemos devolverla a Beverly Hills? Gracias.
“Harvey Colchado debe ser dado de baja por el acoso a Alan García”, sostiene Pedro Chávarry
Exfiscal de la Nación declaró que “Colchado ha intervenido indebidamente en todos los casos emblemáticos, haciendo gala de su poder con arrogancia”
Por Aaron Salomón– Diario EXPRESO.
El juicio por el caso Cócteles comienza a desmoronarse. La sala que lleva el caso ordenó anular la imputación de obstrucción a la justicia planteada por José Domingo Pérez. ¿Cómo analiza esta situación?
Ya había previsto esta decisión. Era evidente el sesgo político en los fiscales de Lava Jato y, por ello, en su momento opté por reemplazarlos.
¿Cómo es posible que el fiscal Pérez haya acusado a Keiko Fujimori, al doctor Arsenio Oré y a la abogada Giulliana Loza, entre otros, por obstrucción a la justicia, siendo él el supuesto afectado? Estamos hablando de que fue juez y parte.
Ellos estaban politizados, y su sesgo era evidente. Parecía que seguían el mandato del señor Gorriti, atentando contra la imparcialidad que debería primar en toda investigación fiscal.
También cometieron abusos contra diversos juristas, como el caso de Arsenio Oré, cuyo estudio jurídico fue allanado.
Se atentó contra el principio de la legítima defensa de los investigados. Fue una arbitrariedad. Quienes conocemos al doctor Arsenio Oré hemos observado que siempre colaboró con el Ministerio Público, con aportes intelectuales y académicos. Se ha atentado contra un caballero a carta cabal.
Pero el Tribunal Constitucional finalmente le dio la razón y señaló que es imprescindible respetar el secreto profesional. Allanar un estudio jurídico, además, debería ser una medida extraordinaria.
Claro, pero ellos no tenían reparos en atacar a sus opositores. Estos individuos, que actuaron de manera maliciosa, contaban con el respaldo de Martín Vizcarra. Deben ser sancionados severamente por el daño causado al Estado peruano.
El doctor Oré le pidió a Rafael Vela que reemplazara al fiscal a cargo para que otro continuara con la investigación por obstrucción a la justicia, pero Vela rechazó la solicitud y Pérez continuó.
Obedecían a mandatos de Odebrecht y a operadores políticos. Su objetivo no era sancionar a Odebrecht, sino a funcionarios peruanos de mando medio.
¿Cree que se va a caer el caso Cócteles?
Lo que se está investigando (aportes irregulares de campaña) no constituye un delito de lavado de activos. Es evidente el marcado sesgo político en contra de la señora Fujimori y del expresidente Alan García.
¿Entonces se caerá el caso?
Definitivamente tiene que caerse, porque los delitos restantes, como el de organización criminal, no cumplen con los requisitos establecidos en el Código Penal. Además, la ley emitida por el Congreso ha aclarado lo que constituye una organización criminal.
¿No hay organización criminal porque no existe una estructura vertical ni están definidos los roles de los integrantes?
No se ha detallado el papel de cada uno de los supuestos miembros de esta organización criminal. Espero que la denuncia se archive pronto en este extremo, ya que no existe tal organización.
Se dice que el coronel PNP Harvey Colchado será dado de baja. ¿Cree que esa es la sanción adecuada después de haberse burlado del allanamiento de la casa de la presidenta Dina Boluarte, donde se derrumbó la puerta con el popular “torito”?
Desde el principio advertí que la Diviac, dirigida por él, no estaba cumpliendo adecuadamente su labor de apoyo al Ministerio Público. Hemos visto cómo el coronel Harvey Colchado ha intervenido indebidamente en todos los casos emblemáticos, mostrando arrogancia. En mi caso particular, amenazó a los miembros de mi resguardo para que me inculparan y dijeran que yo había ordenado deslacrar la puerta de una oficina del Ministerio Público para obtener pruebas contra la señora Keiko Fujimori, lo cual era completamente falso.
¿Los efectivos se negaron a inculparlo?
Sí, pero han solicitado la baja de todos ellos, simplemente por no obedecer las órdenes de este mal policía, quien siempre hizo gala del poder que le otorgó el Equipo Especial Lava Jato.
Tenía tanto poder que le llamó a usted el fiscal del fujimorismo y señaló a Patricia Benavides como cabecilla de una organización criminal, cuando ni siquiera existía una investigación.
Así de grande era su poder. Hay que recordar que la Diviac fue creada durante la gestión de Carlos Basombrío como ministro del Interior, quien es uno de los llamados “caviares”, los mismos que han causado tanto daño a la administración de justicia.
Al haberse convertido en un policía político, ¿cree que Colchado debe ser dado de baja?
No solo debe ser dado de baja, sino también responsabilizado por el acoso que sufrió el expresidente García. Este fue acosado por la Diviac y el Equipo Especial, que intervinieron sus líneas y lo siguieron. Todo eso contribuyó a la triste consecuencia del suicidio del expresidente Alan García.
Fiscal en aprietos
“El sesgo político del fiscal José Domingo Pérez desmorona el caso Cócteles y pone en tela de juicio la imparcialidad en la investigación”. “El Tribunal Constitucional protege el secreto profesional, mientras el caso Cócteles se tambalea ante las acusaciones infundadas de organización criminal”.