El encomendero de Paria, Lorenzo de Aldana, había creado un Mayorazgo o fundación benéfica a favor de la religión y de los indígenas encomendados a él. Los padres Agustinos vinieron desde España y se dedicaron a la evangelización del Altiplano boliviano. Sus primeras llegadas son en Challacollo, Paria, Toledo y Capinota en 1559. Aldana muere en el 1573, diez años antes que Francisco Tito Yupanqui tallara, en 1583, la Imagen de la Candelaria para el santuario de Copacabana, igualmente confiado a los Agustinos en 1588. Aldana había nacido en 1508 en Extremadura, en la ciudad de Cáceres, donde era grande la devoción a la Virgen de la Candelaria.
Los Agustinos traían una fuerte devoción mariana desde España, donde la fiesta de la Candelaria se había establecido ya en el siglo XI como una de las cuatro principales fiestas marianas. Saliendo de España, habían tocado como último puerto, antes de cruzar el océano, Tenerife, en las Islas Canarias, donde existía un Santuario dedicado a la Virgen de la Candelaria. De ahí la devoción a la Candelaria “se había popularizado especialmente entre los marineros que la tomaron como abogada y la izaron al lado de los timones en las procelosas travesías hacia América.
La imagen de la Virgen de la Candelaria registra su presencia desde el año 1580, en la Meseta del Collao. En el año de 1642, se funda la Parroquia San Juan Bautista en Puno, en cumplimiento de la ordenanza prelatural del obispo de La Paz, y se desmembra de la parroquia de Paucarcolla, de la que dependía administrativa y parroquialmente. Hecho que el mismo año fue puesto en conocimiento del Virrey García Sarmiento de Sotomayor, Conde de Salvatierra, del Virreynato del Perú. La capilla guarda la imagen de la Virgen de la Candelaria. Los misioneros jesuitas y dominicos, se encargaron de la catequización de la región.
En 1887, el templo se encontraba totalmente reconstruido, casi tal como se aprecia actualmente. En el día de la Fiesta de la Presentación de Jesús en el Templo, monseñor Jesús Mateo Calderón Barrueto, obispo de la Diócesis de Puno, elevó el templo parroquial de “San Juan Bautista” a la categoría de “Santuario de la Santísima Virgen de la Candelaria” el 7 de febrero de 1988.
CENAMIS INFORMA Nº52-Julio 2010
Editorial: Todos al “Mundial” de la Misión
Es la hora de los laicos. Entrevista a Marjorie Denisse Vargas Arroyo, peruana, miembro de la Asociación de Misioneros Seglares del Vicariato Apostólico de Puerto Maldonado (MISEMA), hace 42 años se encuentra trabajando para las misiones.
Monseñor Romero: Profeta y Mártir- Hermana Amine Abrahao da Costa.
Misión y cuidado de la naturaleza: De Copenhague a Cancún- Dr. Víctor Nomberto CONAMIL
Misión en la Periferia Urbana
Solidaridad con el Hermano Paul Mc Auley fsc- Reflexiones de Monseñor Alberto Campos ofm, Presidente de la Comisión Episcopal de Misiones
Laicos Misioneros de MIDSAMPO celebran 15 años
Noticias: Curso de Formación Misionera MISIÓN EXPERIENCIA DE ENCUENTRO CON CRISTO RESUCITADO. Del 14 al 17 de setiembre ISET Juan XXIII. Informes 4631010-Anexo 285.
Congreso de la Infancia Misionera OMP Perú: Conoce a Cristo, Ámalo y Anúncialo. 7 al 10 de octubre. Coliseo del Colegio Salesiano Huancayo.
Oración ante los restos de Rodrigo Bazán Díaz
Por Agnes Rodríguez
Con profundo dolor por la muerte de un amigo entrañable y compañero de ideales Rodrigo Bazán Díaz, venimos a este campo santo para despedir y orar por su alma y unirnos al dolor de Flora, sus hijos y nietos que lloran tan terrible pérdida.
Nuestra amistad viene de lejos, empezó en nuestra querida ciudad de Talara, en 1949 cuando Rodrigo llegó invitado por su tío Gregorio Vásquez, Director de la querida Escuela Fiscalizada Nº1.
Ingreso a trabajar a IPC en la Oficina de Tiempo, cuyo Jefe era don Tomás Calenzani.
Desde su llegada, se afilió como la mayoría de los jóvenes de entonces, a la Juventud Aprista Peruana, atraídos por los ideales de reivindicación, libertad y amor a la Patria.
El lema “Juventud, prepárate para la acción y no para el placer” no solo fue un lema, sino la firme convicción de nuestros principios.
Su habitación, era centro de reunión partidaria. De aquellos días recuerdo algunos nombres: Ramón Maldonado, Juan Ferroni, Silvio Sánchez, Darío Sifuentes, Carlos Polo, Rufino Fernández; los que llegamos de Negritos: Ricardo Cortez, Teodomiro Valladares, Ramos Jiménez, Jorge Pacherres, Zorobabel Rojas, Agnes y Aldo Rodríguez; y tantos otros jóvenes que nos nutrimos de principios, normas de vida, de conducta que templaron nuestro espíritu, elevaron nuestro civismo y amor a la Patria.
Esta fue una etapa idealista y fraterna que marcó nuestras vidas.
Rodrigo formó un hogar feliz con Flora Ramírez Godos, basado en normas y principios, en la formación y educación de sus tres hijos profesionales, que le dieron seis nietos; y se sentía feliz y orgulloso de ellos.
Rodrigo fue dirigente sindical y político: Secretario General del Sindicato de Empleados de IPC y Secretario General del Comité Provincial del Partido Aprista de Talara.
Con el voto insobornable de los petroleros fue elegido Diputado por la provincia de Talara en el periodo 1985-1990.
Autor de la incorporación de los trabajadores petroleros de Talara a la Ley 20530, beneficiándolos.
Nuestra firme convicción cristiana nos da el consuelo, la resignación para superar esta pérdida; pero al mismo tiempo también nos da la alegría de la Resurrección.
Porque la muerte es el tránsito para la vida eterna.
Por eso querido amigo, rogamos que el Señor perdone tus pecados y te de el premio de la vida eterna.
Rodrigo descansa en la paz del Señor.