A 10 días de culminar su gestión al frente de la Municipalidad de Lima con un 82% de desaprobación, la alcaldesa Susana Villarán ha dejado importantes obras inconclusas que han causado gran malestar en la población y que deberán ser tomadas en cuenta por su sucesor, Luis Castañeda Lossio, cuando asuma el cargo este próximo 1 de enero.
El puente Bella Unión en San Martín de Porres es una de sus obras inconclusas más polémicas. Tras el colapso de parte de su estructura en febrero de 2013, la administración de Susana Villarán instaló un puente bailey provisional en uno de sus tramos. Sin embargo, la congestión vehicular que se genera en dicho lugar lo ha convertido en tierra de nadie, ya que los delincuentes aprovechan para cometer robos al paso y asaltos con la modalidad del ‘bujiazo’.
No solo los limeños que viven en el Cono norte se han visto afectados por estas obras inconclusas, sino también aquellos que viven en los distritos cercanos al litoral debido al cierre de la Costa Verde, una obra que se inició el 6 de agosto y que se proyectaba duraría 3 meses por trabajos de ampliación de las vías a tres carriles, pero que hasta la fecha no hace más que martirizar a los conductores que transitan por ahí.
A este malestar se suma el causado por las obras en Vía Parque Rímac, el túnel subterráneo de 2 kilómetros de longitud que unirá Ate con el Callao en 20 minutos que estará operativo –según lo estimado– en julio de 2015, pero la maquinaria pesada abandonada, tramos de la Vía de Evitamiento cerrados y un avance de la obra a la vista dejan mucho que desear a los miles de conductores que transitan por dicho lugar.
Otra de las obras que heredará la administración de Susana Villarán a su sucesor es la construcción del túnel Santa Rosa, que unirá San Juan de Lurigancho con el Centro de Lima, cuyos trabajos fueron retomados luego de tres años y solo registra un avance del 10% en su infraestructura. Se estima que el proyecto iniciado en el 2010 durante la gestión de Luis Castañeda Lossio será culminado en el 2016.
También figuran la construcción del mercado Tierra Prometida en Santa Anita, donde los minoristas desalojados de La Parada iban a ser reubicados pero que en la actualidad ocupan los alrededores del mencionado ex centro de abastos; y el Parque del Migrante en La Victoria, proyecto que debió haber sido entregado a finales de noviembre pero que la propia alcaldesa aseguró que iba a inaugurar el pasado viernes 19 de diciembre.
Fuente: Diario Perú21.
El legado de Villarán
Por Pedro Ortiz Bisso- Diario El Comercio
El abandono que sufren ciertos distritos, a pocos días del cambio de autoridades, suele graficarse en montañas de basura que se acumulan en avenidas, acompañadas por alcaldes que balbucean explicaciones y pronunciamientos de la Defensoría del Pueblo y el sector Salud.
Pero no es la única forma de abandono. Ahí están los municipios que dejaron de pagar a sus empleados porque luego de las elecciones se les acabó el dinero, como denunciaron serenos de La Victoria este mes.
¿Y el colapso del Centro de Lima, inundado por una marea infinita de vendedores callejeros, no es una señal también de que en la Municipalidad de Lima ya se olvidaron de la ciudad? ¿El tráfico infernal en Barranco y el circuito de playas por las obras en la Costa Verde o la próxima -y francamente abusiva- alza del precio del pasaje en el Metropolitano no son muestras de que la alcaldesa ya tiró la toalla?
Digamos que existe una pequeña diferencia. Mientras los alcaldes en problemas están casi casi no habidos, Susana Villarán no se ha escondido. Ha intentado poner la cara ante los problemas, aunque con declaraciones que más parecen manotazos de ahogado. En realidad, está terminando su mandato tal como lo empezó: abrumada por la responsabilidad.
La realidad de una ciudad como Lima siempre la sobrepasó. Su voluntarismo no pudo disimular las flaquezas de su gestión, de ahí que estos cuatro años haya gobernado en medio de sobresaltos, muchos de ellos generados por una oposición implacable, pero también nacidos de sus indecisiones y su incapacidad para rodearse de un equipo idóneo para gobernar.
Incluso aciertos innegables como la recuperación de La Parada o el inicio de las operaciones del corredor azul se vieron ensombrecidos por la manera poco prolija con que se enfrentaron. En el primer caso, la fracasada operación inicial dejó dos muertos, mientras la alcaldesa se encontraba en el exterior atendiendo asuntos personales. En cuanto al corredor, la falta de un patio de maniobras para los buses acrecentó la molestia de usuarios y diluyó el esperanzador inicio que tuvo.
En el haber suman las firmas de contratos para obras viales, tangibles a partir del 2015 (Vía Parque Rímac, la ampliación de la Vía Expresa, la modernización de las Panamericanas Sur y Norte, y la autopista Ramiro Prialé) y el trabajo de la Gerencia de Cultura. En el debe, el ‘olón’ de La Herradura es una infeliz anécdota frente a las obras inconclusas, el escándalo de la Caja Metropolitana y las denuncias sobre coimas en el mercado Santa Anita.
Pese a todo, la alcaldesa le deja un importante encargo a su sucesor que este no podrá torear: la necesidad de continuar con las reformas. El corredor azul y los siguientes requieren modificaciones, pero dar marcha atrás sería un suicidio. Lo mismo ocurre con la comercialización mayorista de alimentos. Por primera vez, Luis Castañeda está obligado a hacer cambios de verdad. Y esto -no seamos mezquinos- debemos agradecérselo a Villarán.
Inyección
El saliente regidor capitalino Fernán Altuve-Febres, miembro de la comisión de transferencia de la comuna limeña, reveló a EXPRESO que, tras los informes preliminares y sesiones de coordinación realizadas, se puede advertir que la Municipalidad de Lima está institucionalmente quebrada, luego de cuatro años de gestión de la alcaldesa, Susana Villarán.
En entrevista con esta casa editora, el funcionario comentó que básicamente los focos detectados donde al parecer existen evidentes irregularidades de orden financiero y administrativo son la Caja Metropolitana de Lima y el nuevo Mercado de Santa Anita; y advierte que la documentación entregada por parte de la gestión Villarán no cumple con las exigencias que establece la Contraloría.
Doctor, ¿cuál ha sido su primera impresión luego de recibir la documentación que sustenta la gestión de la alcaldesa Susana Villarán en estos cuatro años?
Sobre el contenido de esta documentación todavía no se puede decir nada porque son 46 tomos que hay que revisar. Lo que sí se puede advertir es que hay documentos sin foliar, sin orden, sin firma de ningún responsable, como la alcaldesa de Lima Susana Villarán y su gerente (José Miguel Castro). Y así es muy difícil incluso hacer un análisis.
¿Cómo debió entregarse esta documentación importante para conocer el interior de la gestión Villarán?
De acuerdo a las disposiciones de la Contraloría General de la República, los documentos tienen que estar firmados en todas sus páginas por la alcaldesa y el gerente de la Municipalidad, y eso no ha sucedido, incluso se han entregado copias simples. Yo no puedo prejuzgar nada, pero sí puedo afirmar que, efectivamente, la gestión Villarán ha entregado una documentación, pero que esta no se ajusta a lo que exige la Contraloría. Es decir, no estamos de acuerdo con la forma como se ha entregado la información, pero por el contenido no puedo decir nada.
¿Es verdad que la Municipalidad de Lima está literalmente en quiebra como se advirtió hace unos días?
Sí, la Municipalidad Metropolitana de Lima está en quiebra, y eso se puede advertir luego de escuchar los informes verbales, exposiciones y reuniones de coordinación que hemos sostenido con los responsables de varias áreas. La quiebra es la impresión que tenemos muchos de los miembros que integramos esta comisión de transferencia.
¿En qué áreas, principalmente, se advierte una quiebra total en lo económico y financiero?
La Caja Metropolitana de Lima es una de las instituciones que pertenece a la Municipalidad Metropolitana de Lima. Con decirles que la gestión de Villarán ha citado para el 23 de diciembre (este martes) a sesión de concejo para aprobar la “inyección de capitales a la Caja Metropolitana de Lima”. Es decir, a siete días que entreguen el cargo, esta administración quiere inyectar dinero a la Caja. ¿Por qué será, no? Eso es un escándalo, que se tiene que denunciar públicamente.
Es decir, ¿estarían pretendiendo tapar un forado económico que pudiera existir?
La verdad es que faltando siete días para que te vayas del cargo, querer utilizar una buena cantidad de millones para reforzar una institución, es sorpresivo, por decir lo menos. Cómo es posible que se pueda convocar para eso, y lógicamente lo que uno se pregunta es cuánto es la pérdida.
Debilitamiento financiero viene del 2013
Pero frente a lo que usted está diciendo, ¿de dónde va a salir el dinero para esa “inyección de capitales”?
Esa es otra gran pregunta, de dónde van a sacar el dinero a estas alturas del año, cuando la mayoría del presupuesto debería estar ejecutado pues ya concluye la actual gestión. Insisto en que hay una quiebra institucional en la Municipalidad Metropolitana de Lima, en diversas áreas, y la Caja es una de ellas. Es decir, a siete días antes de irse se han dado cuenta que la Caja Metropolitana tiene una debilidad, entre comillas, una debilidad financiera, y ahora quieren un fortalecimiento de capital. Hay una gran interrogante en todo esto.
¿No se pudo advertir esta situación de quiebra antes?
Cuando fracasó la emisión de bonos en agosto de 2013, vimos que había un problema serio, porque una institución sana no sufre una pérdida financiera, que se le caen sus bonos que emite, esto solo pasa cuando financieramente no estás bien. Y de eso dejamos constancia en su momento. Es decir, ese debilitamiento financiero viene desde ese entonces.
Fuente: Diario Expreso.
El negocio de Anna Zucchetti
La mentada “quiebra institucional” del municipio de Lima, por el dispendio y la deficiente administración financiera, tiene como uno de sus principales referentes al Servicio de Parque de Lima (Serpar), apuntaron los miembros de la comisión de transferencia edil Fernán Altuve y Alfredo Saavedra.
Tras la entrega del informe de cuentas de la gestión de Susana Villarán, el pasado sábado, Fernán Altuve advirtió que de los 300 millones de soles del presupuesto de Serpar para parques, solo hay un 30% de ejecución de obras en tres áreas verdes, de las ocho proyectadas.
Sin obras
Similar versión dio Saavedra, quien recordó que, durante la reunión de transferencia, se le preguntó a Serpar “¿cuántos nuevos parques zonales hay en Lima? y la respuesta fue “no hay nuevos parques”, pues los tres que se habían cerrado por remodelación son los heredados por la gestión de Luis Castañeda.
Señaló que Serpar es una de las áreas donde el aumento de personal fue de 800 en el 2010 a 1,700 en la actualidad.
Otra irregularidad es el desmesurado aumento del gasto corriente en el Servicio de Administración Tributaria (SAT) que pasó de S/.13 millones a S/.63 millones y el gasto de S/.7 millones de consultorías de Emmsa.
Saavedra informó que entre las deudas pendientes están los 19 millones de soles por servicios prestados en el 2013 y 2014 de la empresa de limpieza Innova. Lo peor es que no se ha realizado el nuevo proceso de concesión para el 2015.
Fuente: Diario Correo.