Según el especialista en temas de subversión Pedro Yaranga, ‘Alipio’ por ser un mando militar caminaba escoltado por 40 hombres divididos en tres columnas. Sin embargo, este grupo habría quedado al mando de Teodoro Benítez, alias ‘camarada Dino’, mientras que Franklin Tello Ishajalla, alias ‘camarada Lucio’, lideraría a los 30 hombres que manejaba ‘Gabriel’ en la provincia de La Convención (Cusco).
Mientras tanto, el ‘camarada José’, cabecilla del clan, se desplaza con ocho miembros de su seguridad personal más una “guardia dorada” de 30 mujeres, así como con 30 hombres a su disposición divididos en dos columnas. Su hermano ‘Raúl’ tiene a su mando a 40 terroristas.
“A este grupo hay que añadirle el que maneja la ‘camarada Olga’ y los ‘pioneritos’ que ya están en la etapa de la adolescencia. Con todo, este grupo armado debe manejar un promedio de 400 hombres”, indicó Yaranga.El analista precisó también que, hasta la fecha, el dominio de esta facción subversiva abarca una parte de la provincia de Huancayo y de los distritos de San Martín de Pangoa y Río Tambo, en la provincia de Satipo (Junín). En Huancavelica, su influencia alcanza a la provincia de Tayacaja. Y, en Ayacucho, las huestes dominan sectores de las provincias de Huanta y de La Mar. Su dominio también se proyecta a las provincias de Chincheros y Andahuaylas, en Apurímac.
Yaranga advirtió que las columnas subversivas están bien equipadas con fusiles Galil, HK-G3 y armamento de Corea del Norte.
“También están utilizando las ametralladoras PKM con las que derribaron los últimos dos helicópteros en Kepashiato y Kiteni, en La Convención (Cusco)”, añadió.
Fuente: Diario Perú21.
Narcoterrorismo
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