Necio locuaz

[Visto: 488 veces]

Pensamiento Gonzalo ha muerto: el genocida terrorista más infame

En la visión de Rolando Ames Cobián, Abimael Guzmán representa “el final de una etapa ya pasada”. “Era alguien que no estaba políticamente vigente. Hay que ser muy rigurosos en lo que se diga. La violencia revolucionaria es un producto ya caduco en el Perú y en el mundo, en el sentido de una vanguardia política que puede derrotar militarmente a un ejército institucional. Esa idea de que desde el Estado puedes cambiar el mundo ya no es viable. La sociedad es más informada y pensante, pese a todo”, señaló.
Acá terruqueas, acá todos son Sendero Luminoso, y hay que salir de esa mirada desfasada”, sostuvo. En ese sentido, de acuerdo con Ames, “en el Perú se necesita de un proyecto democrático de país, no solo político”.
Lo positivo de estos momentos es que la política volvió a ser interesante para los campesinos, para los grupos más poderosos. La tarea que hace falta es que discutamos qué país queremos y cómo hacerlo”, afirmó.
Fuente: Diario La República.

Abimael Guzmán y Augusta Deyanira La Torre Carrasco se casaron en 1964, cuando ella todavía era menor de edad (la mayoría de edad se alcanzaba a los 21 por ese entonces) y él ya estaba cerca de los 30. Foto: Archivo Baldomero Alejos.

LA MUERTE PASA FACTURA

Por Miguel Gutiérrez R.- Diario La República.
En 1991, la Dirección contra el Terrorismo-DIRCOTE halló un revelador video. Las imágenes mostraban el cuerpo de una mujer envuelto en una banderola roja con la hoz y el martillo. El cadáver velado por Guzmán y otros dirigentes correspondía a Augusta La Torre. Policías y senderistas están de acuerdo en que su muerte se produjo el 14 de noviembre de 1988. En el video Guzmán pronuncia unas palabras mientras contempla a su difunta esposa y levanta el puño derecho golpeando el aire con fuerza. “Ella fue capaz de aniquilar su propia vida para no levantar la mano contra el partido. Ella, en su lamentable confusión, en su enfermedad nerviosa, prefirió aniquilarse antes de golpear al partido“. Guzmán se refería claramente a un suicidio.
Al descubrirse documentos internos de la organización terrorista, se halló un acta de marzo de 1989 que consignaba que durante la realización de la tercera sesión del primer congreso los dirigentes aprobaron, a pedido de Guzmán, que La Torre fuera considerada “heroína de la revolución“. La directiva se cumplió. Repentinamente, aparecieron cánticos y consignas escritas en paredes de universidades y prisiones presentando a la “camarada Norah“, como se hacía llamar Augusta La Torre, como el símbolo de “heroicidad” senderista.
Nadie, sin embargo, supo al interior del partido las causas reales de la muerte de La Torre. Su cuerpo fue colocado en un ataúd y enterrado en el jardín interior de una casa en Comas. Un año después, la desenterraron y trasladaron a un lugar desconocido. Los documentos senderistas incautados y la posterior declaración de Óscar Ramírez Durand (a) “Feliciano” indican que las interrogantes también se sembraron en la dirigencia senderista, al punto que un grupo promovió la formación de una comisión para investigar el fallecimiento de “Norah“. Pero nadie se animó a formar parte de la iniciativa.
Carlos Tapia, excongresista y experto en temas de subversión, dice estar de acuerdo con la opinión del coronel PNP (r) Benedicto Jiménez, uno de los hombres que organizaron la captura de Guzmán. Jiménez asegura que La Torre se dejó morir por una enfermedad: “Augusta sufría una enfermedad renal y definitivamente ella necesitaba salir de la clandestinidad para ser tratada, pero eso ponía en peligro a toda la dirección senderista. Habría decidido entonces seguir en la clandestinidad“, afirma Tapia.
En su libro “El megajuicio de Sendero“, Óscar Ramírez relata que a fines de noviembre de 1988 fue convocado a Lima por la dirección del partido para que ocupara el puesto vacío dejado por Augusta La Torre. Guzmán e Iparraguirre, según “Feliciano“, le dijeron inicialmente que “Norah” se había suicidado ahorcándose con una soga. Feliciano no les creyó. Para él “Norah” pudo haber sido asesinada por varias razones. La primera, porque ella no estuvo de acuerdo con la militarización y el aniquilamiento de campesinos, calificados como “mesnadas” por Guzmán. Una segunda razón tiene que ver con el triángulo amoroso que se formó en la dirección senderista con Guzmán, La Torre e Iparraguirre. En todo caso, es sólo una versión que ahonda más el misterio de su muerte y que se mantendrá hasta que Guzmán y Elena Iparraguirre decidan finalmente contar lo que pasó realmente veinte años atrás.
“MAS CHÚCARA QUE UN VENADO”
Poco antes de que Augusta La Torre Carrasco conociera a Abimael Guzmán tuvo un novio adolescente, recuerda una de sus amigas de la infancia en Huanta. Probablemente el único anterior a Guzmán. “El río Cachi dividía la hacienda Iribamba de la familia La Torre de la hacienda Santa Rosa, donde vivía el joven. Recuerdo que todas las mañanas él pasaba a caballo frente a la hacienda y que el tío de Augusta siempre le pedía quedarse un rato para almorzar o tomarse un té. Fue así que se conocieron“, relató a La República la amiga de La Torre.
Contó que Augusta le confió que una vez su madre, doña Delia, la reprendió al descubrir la relación. Es que el chico venía a ser tío de Augusta. “Su mamá no quería que saliera con él. Pero ella le dijo: ‘Mamá, me invita al cine, me invita a tomar café’. Su madre le advirtió: ‘Él no es tu primo, él es tu tío. Eres una jarjacha (incestuosa)’.
Ubicamos al antiguo enamorado, pero prefirió mantenerse en el anonimato. “Augustita era más chúcara que un venado. No usaba pantalones, solo faldita. No usaba zapatos sino chaplas, pero ella era linda, ingenua y buena persona hasta que se topó con Abimael Guzmán“, dijo el ex novio.
Relató que se molestó al enterarse del matrimonio de Abimael Guzmán con Augusta porque no lo invitaron. “Él era un tipo que andaba siempre con un libro en el sobaco y se vestía con un saco que le quedaba todo el tiempo muy grande. Era un personaje pintoresco. No puedo creer que se trata de la misma persona que hizo todo lo que hizo“, expresó.

Cremación

El presidente del Consejo de MinistrosGuido Bellido, se pronunció a favor de la decisión de la Fiscalía entregue el cuerpo del terrorista Abimael Guzmán a sus familiares directos “debidamente acreditados” conforme a la Ley General de Salud y el Código Procesal Penal, es decir a la esposa y terrorista Elena Iparraguirre, quien purga condena en la cárcel.
Cabe señalar que, por estar condenada por delitos de terrorismo, Iparraguirre no puede recibir el cuerpo. Por ello, la estrategia para conseguir los restos del genocida Guzmán es usar un “poder escrito otorgado por Iparraguirre” para que otra terrorista conocida como “camarada Bertha” e identificada como Iris Yolanda Quiñonez Colchado sea la encargada de recibir el cuerpo. Además, Quiñonez aparece en el informe de la CVR por el asesinato del Coronel PNP Manuel Tumba Ortega.
Fuente: Diario Perú21.

Poder Judicial niega pedido de Elena Iparraguirre para la entrega del cuerpo de Abimael Guzmán

El abogado Alfredo Crespo Bragayrac, defensor de la Elena Iparraguirre Revoredo, interpuso una demanda de hábeas corpus ante la Corte Superior de Justicia de Lima para dicho pedido.

El Poder Judicial, a través del Primer Juzgado de Investigación Preparatoria Permanente del Callao, a cargo del juez Sergio Martín Núñez Palacios declaró infundado la demanda de proceso constitucional de hábeas corpus interpuesto a favor de Elena Iparraguirre Revoredo, contra el fiscal de la Tercera Fiscalía Provincial Penal Corporativa del Callao y el director de la División Médico Legal del Callao, por la presunta vulneración a la integridad personal y libertad religiosa, así como su derecho para enterrar a su familiar Abimael Guzmán Reinoso.
Alfredo Crespo Bragayrac, abogado Elena Iparraguirre Revoredo, interpuso una demanda de hábeas corpus ante la Corte Superior de Justicia de Lima.
“El objeto de la demanda constitucional tuvo como finalidad que se ordene al fiscal del Callao y al director de la División Médico Legal del Callao que cumplan con entregar el cadáver de Abimael Guzmán Reinoso a quien Iparraguirre Revoredo designe mediante carta poder, en tanto esta última se encuentra privada de su libertad”, sostiene.
En consecuencia, el juzgado del Callao resolvió, entre otros, realizar una investigación sumarísima para: a) recibir el dicho del fiscal provincial emplazado; y, b) constituirse en el despacho de la Tercera Fiscalía Provincial Penal Corporativa del Callao para recibir el dicho del fiscal emplazado y recabar las copias pertinentes en relación con el deceso de Abimael Guzmán.
Fundamentos
La Corte del Callao sostiene que, de acuerdo al marco constitucional, el hábeas corpus encuentra fundamento ante la amenaza o violación de los derechos constitucionales, es decir, procede ante una situación que genere un riesgo para el derecho protegido o ante la sola vulneración de este.
Sin embargo, señala que esta amenaza no puede ser de cualquier magnitud; sino que, por el contrario, debe ser cierta y de inminente realización.
En este caso, afirma que los fundamentos se basan en conjeturas y suposiciones de lo que ocurriría más adelante. Por lo cual el órgano jurisdiccional no consideró argumentos suficientes que evidencien una vulneración a la integridad personal ni a la libertad religiosa de Iparraguirre Revoredo.
Fuente: Diario Gestión.

Puntuación: 5 / Votos: 64

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *