Chismes y morbo
En entrevista para Exitosa, el arzobispo de Huancayo, cardenal Pedro Barreto, consideró que sería una catástrofe aprobar la vacancia contra el presidente Martín Vizcarra en las circunstancias que vive el Perú.
“Lo digo y afirmo. Ya vivimos una catástrofe nacional por la gestión de la pandemia de la covid-19. En ese sentido, pensar que se tenga una situación como la vacancia presidencial, faltando 7 meses para que culmine el período constitucional, sería una catástrofe”, señaló en Hablemos Claro.
En diálogo con Karina Novoa y Nicolás Lúcar, el cardenal precisó que la sociedad civil y la Iglesia están haciendo un esfuerzo muy grande para combatir la lucha contra el covid-19, en medio de la crisis sanitaria, política y económica que afronta nuestro país.
En ese sentido, dijo que el Perú merece tranquilidad y serenidad, y no estar envueltos en ‘líos de comadres’.
Fuente: Exitosanoticias.pe
Cocacho de Tubino
Barreto es conocido por sus simpatías políticas con el gobierno de Vizcarra. El excongresista Carlos Tubino, lo crítico duramente hace poco por haberse olvidado del Octavo Mandamiento que dice ‘no dar falsos testimonios ni mentir‘, porque, dice Tubino, el representante del catolicismo “no dice una sola palabra de las mentiras que viene propalando Vizcarra”. Tubino, de Fuerza Popular cerró su mensaje con la frase quechua ‘ama llulla’ (no seas mentiroso).
Fuente: Diario La Razón.
Circo mentiroswing
Por Martha Meier Miró Quesada– Diario EXPRESO.
Vizcarra tiene un extraño afecto por la mentira y una capacidad sobrenatural para tener siempre “la conciencia tranquila”, pese a sus constantes cagarrutas políticas y legales. ¿Será porque tiene a la gran prensa como concubina y en su nómina de pagos a buena parte de periodistas, convertidos en sus perritos falderos?
El jueves el ex contralor y hoy congresista Edgar Alarcón presentó tres audios, uno de ellos muy complicado para el mandatario pues se le oye coordinar con Karem Roca, ex asistente del despacho presidencial y su colaboradora por más de diez años, las respuestas que ella debía dar ante la Fiscalía sobre las visitas a Palacio de Richard ‘Swing’ Cisneros. Fue citada por el Ministerio Público por las presuntas irregularidades en las contrataciones de ‘Swing’ con el Estado, asunto también investigado por el Legislativo. En el audio se escucha al ‘no electo’ buscando deslindar de tres, de las cinco, visitas registradas del amiguis. En otro audio Roca conversa nuevamente con Vizcarra, quejándose sobre temas laborales y de allegados como la secretaria del despacho presidencial, Miriam Morales. El dizque presidente, ay se arrebata y le dice: “Tienes la cabeza llena de odio y de mentiras, ¿Sabes qué? Ya me hartaste también, ya”. Minutos antes ella le había dicho que lo consideraba “un padre”. En el tercer audio, ‘Swing’, el visitador tres veces negado, palanganea diciendo “Yo conozco a Vizcarra. Tengo audios con él desde que hacíamos todo desde Canadá […] Todo es todo y hay cosas que tú no sabes. ¿Qué no tengo de Martín?”, poniendo nuevamente sobre el tapete el influjo que ejerce sobre el okupa de Palacio.
Tras la difusión de los audios, el ex apoderado en Moquegua de Graña y Montero, dio un mensaje tratando infructuosamente de victimizarse y deslizó la estupidez de que todo es una patraña “que busca desestabilizar la democracia” como si él fuera la democracia. La trica de audios y un mensaje hueco le han ganado a Vizcarra la discusión de una posible vacancia; aunque ayer salió al rescate su fiel multiusos: cantante coach, asesor, amiguis. A medio día fue al Palacio de Gobierno para pedir una cita urgente con Martincito y le dejó una carta, esto tras su circo mañanero, asegurando que todo lo dicho en el audio fue un cuento que armó al notar que le grababan y solo para “saber hasta dónde llegaba este Congreso”. ¿Hasta dónde cree esta lumbrera que se llega en política con todas las atrocidades que dijo, y cuál partecita sería “el cuento”?
Vizcarra se desmorona por mentirosín, para el caso por ‘mentiroswing’.
Vizcarra confidencial
Por Ricardo Uceda- Diario La República.
Hasta antes del domingo, la implicación penal de los audios de Martín Vizcarra pasó a un segundo plano por la preeminencia del debate sobre la vacancia presidencial. Era lógico. Aun así, ya era posible adelantar que luego de su mandato el presidente afrontaría una investigación por obstaculizar a la justicia. Los primeros audios lo delataron organizando una versión falsa sobre las visitas a Palacio de Gobierno de Richard Swing, cuyas dolosas contrataciones con el Estado están bajo escrutinio del Ministerio Público.
Otros audios, difundidos la noche del domingo ‑y distintos más‑ agravan el escenario. No hay duda sobre su autenticidad, porque Martín Vizcarra los reconoce. En los primeros, situados en Palacio de Gobierno, pese a que faltan corroboraciones, un audio muestra un acto de corrupción en sí mismo, orientado a interferir con las investigaciones de la Fiscalía. Vizcarra queda al desnudo. En las nuevas conversaciones, donde hablan dos personas, una de ellas la recientemente despedida secretaria Karem Roca, se mencionan supuestos actos de corrupción, cada uno de los cuales requiere un despliegue investigativo por parte de la Fiscalía. Son dichos de una persona que hace sus confesiones a otra, el abogado Fabio Noriega. De comprobarse, serían de extrema gravedad.
Las confesiones
Karem Roca se expresa con absoluta convicción sobre el rol del ministro Carlos Estremadoyro como “cajero” del presidente. Esta palabra es repetida para referirse a un empresario, Claudio Vanini, quien con su esposa posee un grupo empresarial ganador de obras públicas y que tendría una estrecha relación con Mario Vizcarra, hermano del mandatario. Aunque las referencias son coloquiales e imprecisas, hace falta investigarlas radicalmente. Vizcarra ha mantenido un control absoluto, obcecado y anormal, a través de allegados moqueguanos, sobre los ministerios de Vivienda y de Transportes y Comunicaciones. La prensa que no está enamorada con la imagen de Vizcarra como paladín de la lucha anticorrupción ‑es remarcable, entre otros, el distinto ánimo de Panorama, que dirige Rosana Cueva‑ ha publicado informes parciales al respecto.
Según Roca, el ex ministro de Vivienda Rodolfo Yáñez se negó a mentir para encubrir la historia de contratos en el Ministerio de Vivienda en favor de la ex pareja de la secretaria general de la Presidencia, Mirian Morales, y del esposo de su adjunta, María Aguirre. Ante lo cual Vizcarra lo sacó y colocó en su lugar a Carlos Lozada. El funcionario que los nombró, Ciro Zavaleta, habría sido premiado con un cargo en el Ministerio del Interior.
El encubrimiento
Por otra parte, los audios elevan hasta un nivel de gran conspiración el operativo para librar a Vizcarra de toda responsabilidad en los contratos de Richard Swing. Roca narra la permanencia ocultada a la seguridad de Palacio de Gobierno, durante casi todo un día, de la ex ministra de Cultura Patricia Balbuena, a fin de que pudiera hablar tranquilamente con Vizcarra respecto de la versión que brindaría a los investigadores. Ella fue la primera de seis ministros del sector que contrató delictuosamente a Swing, quien tras dos años se embolsicó 155,400 soles. A Balbuena le habrían prometido un puesto en el exterior.
En un informe emitido a comienzos de mes, la Contraloría General de la República encontró responsabilidad en dieciséis funcionarios de Cultura por las contrataciones de Swing. En la versión de Roca, el secretario general del ministerio, Jorge Antonio Apoloni, ha asumido toda la culpa. Se confundió, fue negligente, no estableció los términos de referencia adecuados para la contratación.
¿Es posible corroborar estos asertos? Para fiscales empecinados será más sencillo reconstruir la arquitectura del blindaje a Vizcarra en el caso Swing, que descubrir si el presidente recibió coimas en obras de construcción. Aquí llegamos a un aspecto clave de la problemática, más importante aún de lo que ocurra en el Congreso. ¿Hay algún nivel de infiltración del gobierno en las fiscalías?
La amiga Zoraida
Lo que dice Karem Roca puede ser falso, una invención originada en su resentimiento. El Ministerio Público debe esclarecerlo. Pero ella asegura haber sido testigo de la relación estrecha, impropia, entre el presidente y la Fiscal de la Nación, Zoraida Ávalos. Fruto de la misma habría sido la facilitación de un mayor presupuesto institucional y la priorización de denuncias ante el Congreso contra los parlamentarios Edgar Alarcón y Omar Chehade.
Karem Roca sostiene, además, que el nombramiento de la esposa del fiscal José Domingo Pérez en Perú Compras fue un favor de Vizcarra. Pérez, como se sabe, investigó inicialmente denuncias que recibió Vizcarra por su gestión como gobernador en Moquegua. Pablo Sánchez, en la versión de Roca, también formaría parte del entorno palaciego. Ayer el Ministerio Público informó que abrió una investigación preliminar contra Pérez y este negó las imputaciones.
Nueva corrupción
¿De qué manera el Ministerio Público va a brindar garantías de una investigación independiente? Hay fuertes indicios de que oscila entre un sector corrupto y otro aliado del gobierno. Es indudable que durante el proceso de investigación de los audios su labor debe estar bajo el escrutinio de la Junta Nacional de Justicia, del Congreso y de la prensa. No hay que olvidar que la estatua erigida a la Fiscal de la Nación tiene bases de barro. Es muy posible que aparezcan evidencias de que su ascenso tuvo como arquitecto al manipulador del ex CNM José Luis Cavassa.
En un ambiente polarizado, las instituciones del Perú deben investigar una nueva corrupción, la de un cacique provinciano que accedió al poder por circunstancias únicas.
Los escándalos por lavado de dinero
Por Federico Prieto Celi- Diario La Razón.
A partir de la renuncia y/o deposición del presidente Alberto Fujimori se inició una cacería de brujas contra el fujimorismo. Uno de los pretextos fue el delito de lavado de dinero. El tradicional lavado de dinero lo hacen las mafias que se dedican al tráfico de personas, a la producción y distribución de droga, a secuestros sistemáticos con cobro de recompensas, o a la imposición de cupos a las empresas formales para no ser dañadas por un incendio intencional.
Las leyes que regulan el financiamiento de los partidos y sus propagandas electorales, surgidas en las últimas décadas, son limitantes de la recepción de dinero y exponen al donante a una hipoteca partidaria. Por tanto, unos y otros buscan hacer y recibir los donativos de manera oculta. Luego, tienen que formalizar ese dinero, y ahí se produce inevitablemente un lavado de dinero, de naturaleza muy distinta a la tradicional de las mafias.
Pienso que las leyes que regulan el financiamiento de los partidos son perjudiciales para la salud de la democracia. Creo que deben derogarse. Muerto el perro se acabó la rabia. Que quien quiera financiar un partido lo haga, el partido que quiera recibir dinero, que lo tome. Si se quiere publicitar se publicite, si se quiere silenciar se silencie. En caso de que después se descubra una acción dañina al bien común de la autoridad elegida entre otras cosas por los donativos recibidos, con tráfico de influencia o información privilegiada, recién entonces intervenga la fiscalía. De lo contrario se afecta al principio de inocencia.
Como las dan, las toman. Quienes usaban el lavado de dinero para manchar a fujimoristas, ahora se encuentran manchadas por el mismo delito. Paola Ugaz negó la información de Expreso y mintió a raudales. Susana Villarán queda seriamente implicada. Ahora no las salva ni el gong. Hemos pasado una vez más a una guerra de odios y venganzas. Quién a hierro, mata a hierro muere.
El Congreso, en vez de hacer absurdos proyectos de ley podría reunirse un día para estudiar con asesores competentes, se entiende, un proyecto de ley de amnistía para todos los implicados en lavado de dinero, con el fin de reducir la judicialización de la política partidaria, sean de izquierda, de centro o de derecha -todos pecan igual- en vísperas de elecciones generales y del bicentenario de la República. Ya tenemos bastante desprestigio universal en ser el país con más muertos por millón de habitantes por covid-19, como para dar más espectáculos lastimosos que se pueden evitar. Por último, saldrían ganando tiros y troyanos.
No se trata de convocar a todos los partidos a la unidad. Eso sería formar un partido único, totalitario, contrario a la democracia, que es precisamente pluripartidaria. Se trata simplemente de hacer un poco de baja policía. Es necesario dar señales de buena intención. Limpiar la cancha antes del partido. Fumar la pipa de la paz. Olvidar los rencores del política partidaria, sean de izquierda, de centro o de derecha -todos pecan igual- en vísperas de elecciones generales y del bicentenario de la República.
Ya tenemos bastante desprestigio universal en ser el país con más muertos por millón de habitantes por covid-19, como para dar más espectáculos lastimosos que se pueden evitar. Por último, saldrían ganando tiros y troyanos.
No se trata de convocar a todos los partidos a la unidad. Eso sería formar un partido único, totalitario, contrario a la democracia, que es precisamente pluripartidaria. Se trata simplemente de hacer un poco de baja policía. Es necesario dar señales de buena intención. Limpiar la cancha antes del partido. Fumar la pipa de la paz. Olvidar los rencores del pasado y los odios del presente. Jugar limpio. ¿Será posible?