Por Rocío Maldonado- Diario La República.
En medio de un debate parlamentario sobre la justicia militar en el país, el Ministro de Defensa General (r) Daniel Mora, arremetió contra los Organismos No Gubernamentales de Derechos Humanos y la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). A las primeras las acusó de querer desaparecer a las Fuerzas Armadas y a la segunda de ser injusta en sus sentencias contra el Estado peruano por casos de violaciones de los derechos fundamentales.
“Estoy convencido de ONGs que quieren desaparecer a las FFAA. Es más, hay estudios hechos en otros países que preconizan la desaparición de las FFAA. Más aún han querido ‘policializar’ las FFAA, que se encarguen de tareas policiales”, expresó Mora Zevallos durante una sesión de la Comisión de Defensa Nacional.
De igual manera, criticó a la CIDH, organismo internacional, que, en su opinión, no ha sido justo con el Estado peruano.
“La Corte Internacional de DDHH tampoco ha sido justa con el país. Todas las sentencias que salen en contra del Estado peruano parecen un mismo cliché, pues comienzan diciendo que el Estado peruano violó sistemáticamente los DDHH y eso no es cierto”, dijo Mora, quien lamentó que se parta de la premisa de que todos los militares salen deliberadamente a la guerra a matar.
Las declaraciones del Ministro de Defensa surgieron luego de que el presidente del Tribunal Supremo de Justicia Militar Policial, Carlos Mesa Angosto, quien se presentó para informar sobre el nuevo Código Penal Militar, afirmara que el Fuero Militar Policial estuvo al borde de la eliminación por las maniobras de ONGs “de inclinación antimilitarista”, cuyo objetivo final –afirmó– era no solo desaparecer a la justicia militar sino también a las FFAA y la PNP.
Ante la pregunta del legislador Heriberto Benítez sobre a qué organizaciones se refería, Mesa Angosto acusó directamente al IDL y a la Coordinadora de DDHH.
Benítez discrepó de Mesa, mientras que las legisladoras Luisa María Cuculiza y Luz Salgado lo respaldaron y destacaron el rol de las FFAA en la lucha contra el terrorismo.
Salgado defendió incluso la labor de los jueces sin rostro, mientras que Cuculiza pidió ser agradecida con las FFAA.
“Quién nos salvó del terrorismo: los militares. Ellos fueron los que se fajaron los lomos por dejarnos un país libre”, afirmó.
Mora agradeció “la defensa heroica” de las congresistas para con los institutos castrenses.
Previamente el ministro había ratificado que las FFAA actuarán en el VRAE. Asimismo, informó que su sector esperaba la respuesta del Ministerio de Economía y Finanzas sobre el aumento en las remuneraciones para los militares y policías.
Miguel Jugo, secretario adjunto de la Coordinadora de DDHH, dijo que le causaba preocupación las declaraciones de Mora Zevallos, pues no entendía cómo un ministro de un gobierno democrático podía tener la lógica de que las ONG tengan como objetivo desaparecer a las FFAA. Precisó que lo único en discusión es qué tipos de delitos son para el fuero militar y cuáles para el fuero común. “Son declaraciones infelices y podríamos repetir las palabras del presidente del Congreso, Daniel Abugattás: (Mora) cada vez nos huele más a Rafael Rey”, expresó.
Por su parte, Diego García Sayán, presidente de la CIDH, señaló que no quería entrar en ninguna polémica con Mora. No obstante, subrayó que las sentencias de la corte interamericana en relación con el Perú no se ajustan a lo dicho por el ministro de Defensa. “Los argumentos de hecho y de derecho son otros y cualquier persona puede leer las sentencias. Aparentemente un asesor mal informado le ha transmitido esa información al ministro”, refirió.
Por Doris Aguirre-Diario La República
‘Camarada Omar’, así se hace llamar el terrorista que asesinó al comandante EP Esneider Vásquez Silva y al capitán EP Jenner Vidarte Campos, el 14 de setiembre, en San Martín de Pangoa.
Es un asesino experimentado. Un tirador senderista que ha participado en otras acciones similares. La inteligencia militar y policial del Valle de los Ríos Apurímac y Ene (VRAE) ya lo tiene ubicado.
Para cumplir con su brutal cometido, el ‘camarada Omar’ usó una de las ametralladoras MAG de calibre 7,62×51 mm que los senderistas robaron al helicóptero Mi-17 derribado en Sinaycocha, en Huancayo, Junín.
El jefe de la Región Militar del VRAE (RMV), general de división Víctor Montes Barrios, confirmó a La República que el ‘camarada Omar’ es el responsable del ataque de San Martín de Pangoa.
“Ese terrorista consiguió librarse de una operación de barrido que se hizo en la zona de Pangoa y se atrincheró en un profundo hueco. Desde ahí atacó al helicóptero con una ráfaga directamente disparada a la cabina del piloto”, contó el general Víctor Montes.
“Se trata del ‘camarada Omar’, un experto en fusiles de guerra y en el derribamiento de helicópteros”, precisó el jefe de la RMV.
Actualmente, ‘Omar’ pertenece a la compañía del senderista Orlando Borda Casafranca, ‘camarada Alipio’.
Según testimonios de varios colaboradores eficaces desertores de las filas senderistas, el ‘camarada Omar’ es de la zona del distrito de Puerto Ocopa, provincia de Satipo, Junín, y en consecuencia es un profundo conocedor del teatro de operaciones donde atacó al helicóptero en el que murieron dos oficiales.
El ‘camarada Omar’ sería un licenciado de la Fuerza Aérea, según versiones de los testigos que proporcionaron información a la Policía Nacional que también opera en el VRAE.
Es natural de la zona
Las fuentes policiales dicen contar con información de ex senderistas que han contribuido a obtener la verdadera identificación del terrorista, a quien se le atribuye otros ataques similares.
“Como es licenciado de la FAP, conoce mucho del material aéreo. Sabe cuáles son las vulnerabilidades de un helicóptero. Por eso siempre ubica sus disparos en la cabina del piloto, en el motor o en el tanque de combustible”, refirieron las fuentes.
Es uno de los hombres de confianza del ‘camarada Alipio’, un experto en el manejo de armas y consumado francotirador.
Por su parte, el general Víctor Montes explicó que uno de los proyectiles impactó en la espalda del capitán Jenner Vidarte, en el preciso momento en que este subía al helicóptero. Segundos antes, dicho oficial primero hizo subir a la aeronave a su tropa y prefirió ser el último. Así actúa un comando.
Otro proyectil le atravesó el tórax al comandante y piloto del helicóptero, Esneider Vásquez. El proyectil impactó en una zona que no estaba protegida por el chaleco antibalas que portaba el oficial.
Según los médicos forenses, el capitán Jenner Vidarte falleció como consecuencia de un shock hipovolémico, debido a que la bala le perforó los pulmones.
En el caso del comandante Esneider Vásquez, el proyectil ingresó por el lado intercostal izquierdo y comprometió órganos vitales.
El jefe de la RMV explicó que el capitán Vidarte formaba parte de un plan de operaciones en el que participaban cuatro patrullas militares que tenían como objetivo la ubicación y destrucción de campamentos narcoterroristas en la zona de San Martín de Pangoa.
Exitosa operación
“El capitán Vidarte había llegado un día antes a la zona conocida como Flora, donde se produjo el ataque. Había cumplido su misión. Tenía varias semanas efectuando interdicción y barridos con su patrulla. El 14 era su último día, iba a ser replegado, pero ocurrió la tragedia”, relató el general Montes.
“¿Faltó inteligencia?”, le preguntamos.
“No, inteligencia sí hubo y nuestro plan de operaciones fue un éxito”, contestó.
“¿Con dos oficiales muertos?”, interrogamos.
“Sí, pero eso fue al final de la operación”, respondió: “Nosotros ingresamos en sus campamentos sin ser vistos por los terroristas, por eso digo que fue un éxito. Lamentablemente, en la zona de interdicción que se escogió y se planeó había un individuo escondido en el monte, en una trinchera, y por más que hubo dos helicópteros de ataque que ablandaron la zona con fuego, ni un solo proyectil le cayó al sujeto. Al parecer estaba bien atrincherado y esperó el momento propicio para atacar. Eso fue lo que pasó”.
Acciones contraterroristas
El general Víctor Montes manifestó que, cuando se produjo el atentado, las patrullas habían cumplido con sus labores y que se encontraban en pleno proceso de repliegue. Y que no solo se estaba retirando a la patrulla que lideraba el capitán Jenner Vidarte, sino a otras más.
“La evacuación de las patrullas se hizo con el apoyo de otras aeronaves, nada se dejó al azar, todo estaba completamente planificado, pero en una guerra sucede este tipo de incidentes. Incluso antes que los helicópteros procedieran a recoger a los efectivos, se hizo fuego preventivo en toda la zona, pero el tal ‘camarada Omar’ se ocultó en un hueco muy profundo y aprovechó el aterrizaje –con el fin de sacar al personal– para atacar”, explicó el general Montes.
El jefe de la RMV señaló que los remanentes de Sendero Luminoso que dirige Víctor Quispe Palomino, ‘camarada José’, en la zona del VRAE, ya no forman columnas ni compañías, sino que ahora se diseminan ante la presencia de las patrullas militares.
“Es una de las modalidades más recientes de los narcoterroristas”, dijo: “Solo uno se localiza en un punto estratégico donde van a pasar las patrullas o los helicópteros y ataca. Es difícil ubicarlo porque; está en su trinchera de profundidad, de pie, apoyado con una horqueta de madera para colocar su fusil y de allí dispara al objetivo”.
La improvisación mata
Preguntado si pudo haberse evitado el atentado contra el helicóptero del Ejército en San Martín de Pangoa, ya que han aparecido críticas según las cuales el Alto Mando pone en riesgo a sus tropas ordenando patrullar en zonas en las que existe inteligencia previa, el general Víctor Montes respondió que todo movimiento es consultado, aprobado e inspeccionado.
“No actuamos a la libre”, contestó: “Nos desempeñamos profesionalmente. El Comando Conjunto revisa e inspecciona todo nuestro trabajo. Estaba conforme con el planeamiento y con la ejecución porque era el sexto día de patrullaje. Ingresamos en su territorio sin que lo supieran. De lo contrario, nos habrían emboscado”.
Se le dijo al general Montes que el comandante Esneider Vásquez aterrizó porque el capitán Jenner Vidarte le reportó que toda la zona estaba limpia. ¿Fue una falla?, preguntamos al general Montes.
“No hubo ninguna falla”, aseguró el jefe de la RMV: “La pregunta es si llegamos a cumplir nuestra misión, y la respuesta es contundente: ‘Señor, sí, la misión se cumplió’. Muchas veces se cumplen los objetivos a pesar de las bajas”.
Ante la pregunta de si se estaba aplicando una nueva estrategia, el general Víctor Montes contestó positivamente.
“Pero los resultados no se observarán de la noche a la mañana”, indicó: “Estamos ante un conflicto de características muy particulares, en una zona de combate cuya geografía es muy singular y con un grupo de personas con amplio manejo del ámbito de guerra. Pero estamos seguros de lo que hemos hecho y de lo que hemos avanzado. Pronto habrá mejores noticias. Así es la guerra”.