Ejerció su ministerio entre los católicos de Inglaterra en una época de persecución. Bajo los reinados de los Tudor, Enrique VIII e Isabel I, la Iglesia católica fue desplazada por la Iglesia de Inglaterra. Los monasterios ingleses se disolvieron en 1541 y el clero y los laicos católicos fueron perseguidos y asesinados.
Edmund Campion podría haber sido la estrella más brillante de la Inglaterra isabelina. Impresionó a Isabel con su discurso de bienvenida cuando visitó la Universidad de Oxford en 1569. Bajo su patrocinio, el camino hacia el poder y el prestigio estaba asegurado. Campion pensó primero en seguir ese camino, siendo ordenado originalmente como diácono anglicano. Pero su corazón estaba arraigado en la fe católica. En 1571, Campion viajó a Douai, Francia, para estudiar en el seminario católico. Varios años después, caminó hasta Roma, donde fue aceptado por los jesuitas. Los años siguientes, Campion enseñó en Viena y Praga.
Campion podría haberse quedado a salvo en Praga, pero escuchó el llamado a ejercer su ministerio entre los católicos de Inglaterra. Sólo podía hacerlo viajando disfrazado, celebrando los sacramentos en secreto y evitando a los numerosos espías que lo buscaban. Pero Campion no mantuvo su misión en secreto. Escribió y distribuyó el Desafío al Consejo Privado para que debatiera con él sobre todas las cuestiones entre protestantes y católicos. Su misión comenzó en 1580, pero pronto terminó con su arresto en 1581.
Después de su arresto, Campion fue declarado culpable de traición, sufrió la dislocación de sus huesos en el potro de tortura y siguió defendiéndose en los debates contra sus perseguidores. Isabel I, que mostraba su estima por su persona, se reunió con él e intentó atraerlo de nuevo a la Iglesia de Inglaterra. Campion se mantuvo firme en su fe católica. Finalmente, Campion fue ahorcado, arrastrado y descuartizado el 1 de diciembre de 1581.
Edmund Campion SJ, fue declarado santo por el Papa Pablo VI en 1970.
Cuarenta mártires de Inglaterra y Gales
Grupo de Mártires católicos romanos ejecutados por las autoridades inglesas durante la Reforma, la mayor parte durante el reinado de Isabel I. Una ley del Parlamento de 1571 declaró alta traición cuestionar el título de la reina como jefa del Estado y la Iglesia de Inglaterra —convirtiendo así la práctica del catolicismo romano en alta traición— y autorizó la confiscación de la propiedad de los católicos romanos, muchos de los cuales huyeron al continente europeo. En la persecución subsiguiente, 183 católicos ingleses fueron ejecutados entre 1577 y 1603; en total, unos 600 católicos murieron en las persecuciones de los siglos XVI y XVII. Algunos fueron ejecutados por delitos tan triviales como obtener una licencia papal para casarse. Cuarenta de estas víctimas fueron canonizadas por el Papa Pablo VI en 1970 como representantes de todos los mártires, entre ellos Santa Margarita Clitherow, San Cuthbert Mayne y San Edmundo Campion SJ. En 1987, el Papa Juan Pablo II beatificó a otros 85 mártires que murieron entre 1584 y 1689 en Inglaterra, Escocia y Gales. Muchos eran sacerdotes o miembros de órdenes religiosas, pero 59 de ellos, incluidos siete de los canonizados, eran católicos laicos. Su festividad, el 25 de octubre, conmemora la fecha de su canonización.
Fuente: Enciclopedia Británica.
Grabado del siglo XIX por William Barraud que representa al Conde de Arundel Felipe Howard, en la Torre de Londres.
San Felipe Howard
Nació en Strand, Londres. Fue el hijo mayor de Thomas Howard, IV duque de Norfolk y de Mary FitzAlan, quien tras la muerte de su hermano Henry en 1556 heredó el condado de Arundel de su padre Henry FitzAlan, XIX conde de Arundel. Fue bautizado en el Palacio de Whitehall, con la asistencia de la Familia Real y en honor a su padrino, el rey Felipe II de España.
A la edad de catorce años se casó con su hermanastra Anne Dacre. Después de años separados se reunieron y construyeron un matrimonio muy fuerte.
La reina Isabel I de Inglaterra encarceló a su padre en Norfolk en 1569 por su tentativa de matrimonio con María I Estuardo, reina de Escocia. Y tras su puesta en libertad, participó en la conspiración de Ridolfi con el rey Felipe II de España, para poner a María en el trono inglés y restaurar el catolicismo en Inglaterra, aunque algunas personas ponen en duda su participación en dicho complot. Fue ejecutado por traición en Tower Hill en 1572 y enterrado en San Pedro ad Vincula, en la Torre de Londres.
Felipe Howard heredó el condado de Arundel en 1580. Él, y gran parte de su familia, siguieron siendo católicos durante el reinado de la Reina Isabel de Inglaterra, cuando era muy peligroso hacerlo. También trató de salir de Inglaterra sin permiso. Mientras que algunos podrían haber hecho esto sin levantar la atención, Howard era primo segundo de la reina. Fue enviado a la Torre de Londres el 25 de abril de 1585. Si bien los cargos de alta traición nunca se demostraron, pasó diez años en la torre, hasta su muerte por disentería a los 38 años de edad. En su lecho de muerte, había solicitado a la reina que le permitiera ver a su esposa e hijo, que había nacido un año después de su encarcelamiento. La reina respondió que si se convertía al protestantismo su solicitud sería concedida. Él se negó y murió solo en la torre. Fue inmediatamente reconocido como un mártir católico.
Fue condenado en 1589, pero su hijo Thomas fue reconocido como heredero, recuperando el condado de Arundel, así como otros títulos menores de su abuelo. Actualmente Conde de Arundel es el título de nobleza más antiguo existente con la dignidad de par de Inglaterra.
El conde de Arundel Felipe Howard fue enterrado sin ceremonia bajo el suelo de la iglesia de San Pedro ad Vincula, intramuros de la torre. Veintinueve años más tarde, su viuda y su hijo obtuvieron permiso del rey Jaime I de Inglaterra para trasladar sus restos a la Capilla de los FitzAlan, justo debajo del Castillo de Arundel. Su tumba fue trasladada a la catedral católica en Arundel en 1971 y es hoy un lugar de peregrinación.
En la localidad de Arundel (Sussex Occidental) existe una catedral dedicada a este santo con el nombre Iglesia Catedral de Nuestra Señora y San Felipe Howard.