Por Mario Ghibellini– Diario El Comercio.
Conforme nos acercamos al 28 de julio, es cada vez más claro que el JNE terminará proclamando a Pedro Castillo presidente. Todos los pedidos de nulidad de actas vistos hasta ahora han sido desestimados en esa instancia y nada hace pensar que la suerte de los que falta revisar vaya a ser distinta. Como se sabe, la forma en que la máxima autoridad electoral viene funcionando desde el apartamiento de Luis Arce Córdova enfrenta problemas legales (señalados hasta por quien ha tenido que sucederlo en la responsabilidad: el fiscal Víctor Rodríguez Monteza), pero eso no parece turbar a Salas Arenas y en consecuencia el final del drama que lo tiene como protagonista resulta previsible.
Para Fuerza Popular y sus actuales aliados esto tiene que resultar tan evidente como para cualquier otro y sin embargo, ellos persisten en cuestionar algunos aspectos del registro de los votos emitidos en la segunda vuelta a través de marchas, manifestaciones y gestos de diverso tipo, unos más afortunados que otros…
La pregunta que esto sugiere, por supuesto, se cae de madura. ¿Qué sentido tiene todo ese despliegue de recursos ante un desenlace cantado? ¿Será acaso solo la actuación de una pataleta generada por la enésima derrota? ¿O, como pretenden los más sofocados de los objetores de la agónica resistencia, se tratará de un embozado llamado a los cuarteles? Pues en opinión de esta pequeña columna, la respuesta correcta no es ninguna de las anteriores.
–Pato a la norteña–
En Estados Unidos y algunos otros países de cultura anglosajona se utiliza la expresión ‘lame duck’ (pato rengo) para referirse al político que ostenta un cargo de elección popular cuya vigencia está próxima a expirar. La identificación entre uno y otro tiene que ver con el hecho de que a ambos se les hace difícil el movimiento y por lo tanto están expuestos a los ataques de quienes andan tras ellos, ya sea que hablemos de cazadores, opositores o simples fiscalizadores.
En nuestro país, no obstante, estamos acostumbrados a que los fenómenos políticos habituales en otras latitudes se presenten de manera caprichosa, y se diría que esta no es una excepción, pues lo que tenemos en estos días no es un pato rengueando a la salida de nada, sino más bien en el umbral de algo que está por definirse.
Sin haber sido siquiera proclamado, efectivamente, Castillo exhibe una cojera que podría complicarle un eventual ejercicio de la presidencia. Entre las causas de su paso desigual se cuentan desde luego las dudas, legítimas o infladas, sobre el conteo de votos que el JNE está a punto de validar –y que Fuerza Popular y sus aliados han alimentado tan perseverantemente–; pero también hay otras.
Nadie puede ignorar, por ejemplo, el flaco favor que le están haciendo los destapes del caso “Los Dinámicos del Centro” y la tesis –planteada por la Fiscalía– de que la campaña de Perú Libre habría sido financiada con dinero proveniente de sus actividades ilícitas. Tampoco lo ayuda, como es natural, el cerco que se está estrechando en torno al congresista electo de ese partido Guillermo Bermejo y sus presuntos vínculos con los Quispe Palomino. Y por si eso fuera poco, los anuncios de la referida organización política sobre sus intenciones de castigar a la prensa que recoge las denuncias incómodas para sus líderes con una ley de medios que “termine” con ellos han refrescado el recuerdo de las más crudas amenazas de Castillo contra el sistema democrático durante la campaña.
Con todos esos pesos a cuestas, el profesor cajamarquino luce, pues, como un pato norteño que arrastra un pie en su afán por llegar a Palacio y no parece comprender las dificultades que esa cojera podría imponerles a sus devaneos, empezando por el de la “instalación” de una Asamblea Constituyente a la que no tendría cómo convocar sin atropellar el orden institucional.
Para impulsar una movida chavista de esas dimensiones, él necesitaría de una legitimidad de origen sobre la que no pesara ni una sombra de duda y de una popularidad avasalladora en las calles. Y tenemos la impresión de que ninguna de las dos cosas está por el momento a su alcance. La primera, por la actividad febril de quienes insisten con la teoría del “fraude en mesa”; y la segunda, por todos los otros problemas mencionados líneas arriba.
La poción del poder, sin embargo, produce visiones engañosas y nos tememos que, si llegara a beberla, Castillo no se percataría de su andar desacompasado e intentaría de todos modos empujar el proyecto de ribetes autoritarios que lo desvela. Y ahí es cuando podrían aparecer los cazadores furtivos.
–Ejercicio ocioso–
Un Castillo cuestionado en la fuente de su mandato y sin un respaldo abrumador de la población que pretendiese avanzar sobre el nuevo Congreso sin la Constitución en la mano atraería, en efecto, de inmediato la atención de sus más jurados opositores. Y también su puntería.
Y aunque por la salud de la democracia en el país, lo deseable sería que alguien de su confianza le aconsejase que, de llegar a ceñirse la banda embrujada, mejor no se le ocurra apartarse del cauce constitucional, ya se sabe que advertir a un pato rengo contra los peligros de dar un paso en falso es por lo general un ejercicio ocioso. Qué horizonte tan gris el que se vislumbra en estos días de invierno.
PATRIA Y VIDA
“Abajo la dictadura”: los cubanos protestan contra el Gobierno en la marcha más grande desde 1994
La inédita manifestación tiene lugar en medio de una grave crisis económica y sanitaria en el país caribeño.
Cientos de personas han salido este domingo a la calle a protestar contra el Gobierno en distintos puntos de Cuba al grito de “¡abajo la dictadura!”, “libertad” y “patria y vida”. La protesta antigubernamental se ha convertido en la más grande que se registra en la isla desde 1994.
Las protestas de Cuba tienen lugar en medio de una grave crisis económica y sanitaria, con una preocupante falta de alimentos, medicinas y otros productos básicos. Se han producido en diferentes localidades del país caribeño como San Antonio de Los Baños, Güira de Melena y Alquízar en la provincia occidental de Artemisa, Palma Soriano en la oriental Santiago de Cuba, Cienfuegos y también en La Habana.
En La Habana, cientos de cubanos han salido a las calles al grito de “libertad” en varias manifestaciones pacíficas, que han sido interceptadas por las fuerzas de seguridad y brigadas de partidarios del Gobierno, produciéndose enfrentamientos violentos y arrestos.
Los choques entre los manifestantes y los pro-Gobierno se han producido en el céntrico Parque de la Fraternidad, frente al Capitolio, donde han llegado a congregarse más de un millar de personas con una fuerte presencia de las fuerzas militares y policiales, que llevaron a cabo varios arrestos.
“La gente empezó a gritar, hay apagones horribles, de seis horas, esto no para, y es todos los días. Empezaron a caminar, muy pacíficos, lo único que hacían era gritar. Había mucha gente joven”, ha explicado por teléfono a Efe una vecina de San Antonio de Los Baños que se encontraba dentro de una tienda en el momento de los hechos.
En las redes sociales han comenzado a circular vídeos de otros lugares, como el pueblo oriental de Palma Soriano (Santiago de Cuba) donde cientos de personas también se han movilizado en las calles y se escuchan consignas como “no más mentiras” y “no tenemos miedo”
El presidente llama al combate
Miguel Díaz-Canel se trasladó a San Antonio de los Baños pocas horas después de que se difundiera esa primera protesta, y posteriormente compareció en la televisión estatal instando a sus partidarios a salir a las calles listos para el “combate”.
“La orden de combate está dada, a la calle los revolucionarios”, dijo el gobernante, quien calificó las manifestaciones de “provocaciones de la contrarrevolución” y añadió que no permitirá “que nadie defienda un plan anexionista”. Díaz-Canel acusó a “gente mercenaria pagada por el gobierno de Estados Unidos” de organizar las protestas.
Las palabras de Díaz-Canel fueron respondidas de forma airada por numerosos cubanos en las redes sociales, donde condenaron que el jefe del Estado instara al enfrentamiento entre civiles en lugar de llamar a la pacificación y el diálogo.
Tras ese llamamiento a los lugares de las protestas acudieron, muchos a bordo de autobuses estatales, brigadas ciudadanas gritando consignas a favor de la Revolución como “Yo soy Fidel” o “Canel, amigo, el pueblo está contigo”, además de un fuerte dispositivo policial y decenas de agentes vestidos de civil.
Fue entonces cuando se multiplicaron los choques con los manifestantes antigubernamentales.
Esta es la protesta antigubernamental más grande que se registra en la isla desde el llamado “maleconazo”, cuando en agosto de 1994, en pleno “periodo especial”, cientos de personas salieron a las calles de La Habana y no se retiraron hasta que llegó el entonces líder cubano Fidel Castro.
EEUU, “muy preocupado”
Por su parte, el Gobierno de Estados Unidos aseguró estar “muy preocupado” por las llamadas al “combate” que ha hecho el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, para detener las protestas contra el régimen en la isla, a la vez que defendió la “libertad de expresión y reunión” de los cubanos.
“Estamos muy preocupados por las ‘llamadas al combate’ en Cuba”, dijo en un mensaje en Twitter la subsecretaria de Estado interina de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental de EE.UU., Julie Chung, que subrayó el apoyo de la Administración estadounidense al derecho de los cubanos a manifestarse pacíficamente.
Chung, además, hizo una llamada a la “calma” y condenó “cualquier tipo de violencia”.
Poco después, comentó las protestas en el país caribeño el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, quien remarcó que “EEUU apoya la libertad de expresión y reunión en Cuba” como “derechos universales”, también en un mensaje en la misma red social.
Preguntado por la situación en Cuba al llegar a la Casa Blanca esta noche tras pasar el fin de semana en su residencia en Wilmington (Delaware), el presidente estadounidense, Joe Biden, evitó responder a los periodistas.
Guaidó respalda las protestas
El líder opositor venezolano, Juan Guaidó, ha mostrado este domingo su apoyo a las manifestaciones contra el Gobierno de Cuba. “Desde Venezuela, reiteramos nuestro respaldo a todo el movimiento pro-democracia en Cuba. Nos une la lucha por vernos libres y democráticos”, escribió Guaidó en su cuenta de Twitter.
En esa misma red social aseguró que “el deseo de cambio, libertad y la exigencia de derechos fundamentales son fuerzas incontenibles” y terminó replicando uno de los eslóganes de los manifestantes “¡patria y vida!”.
Preocupación internacional
Los sucesos llegan después de que en los últimos días haya ganado visibilidad internacional la campaña SOS SOS Cuba, lanzada por la sociedad civil en las redes debido a la crisis galopante, el desabastecimiento de medicinas y a la situación crítica debido a la pandemia en la provincia de Matanzas.
Fuentes de varias embajadas en La Habana, entre ellas las de la Unión Europea y España, dijeron a Efe que siguen con atención el desarrollo de los acontecimientos.
También organizaciones internacionales como Amnistía Internacional o Freedom House se hicieron eco de las protestas en Cuba y llamaron al Gobierno a que “respete el derecho de asamblea pacífica”.
En casi toda la isla rige un toque de queda nocturno por la pandemia, por lo que las personas que estén en la calle durante la noche pueden ser detenidas por violar esa medida.
Fuente: ElEspañol.com
CONGRESO: APRUEBAN ACUSACIONES CONTRA VIZCARRA
El expresidente Martín Vizcarra enfrentará cargos por ser presunto autor de una organización criminal, y haber incurrido en los supuestos delitos de colusión agravada, cohecho pasivo propio, negociación incompatible, tráfico de influencias y falsificación de documentos relacionados con el caso “vacunagate”.
Así lo acordó hoy la Subcomisión de Acusaciones del Congreso al aprobar dos denuncias formuladas contra el expresidente Martín Vizcarra, por haberse inmunizado con las vacunas chinas de Sinopharm durante el ensayo clínico de las mismas.
La acusación constitucional incluye a Germán Málaga y la exministra de Salud, Pilar Mazzetti, a quienes se les sindica de ser los presuntos coautores de los delitos que se le imputan al exmandatario.
El informe final de la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales será remitido a la Comisión Permanente de acuerdo con el procedimiento establecido por el reglamento del Congreso de la República.
De ser aprobado en esta instancia, las acusaciones serán elevadas al pleno del Congreso para escuchar los alegatos de la defensa de los imputados; y posteriormente someterlas al debate y a la votación de la representación nacional.
Fuente: Guik.pe