El pacto secreto
En caso de ser gobierno, el profesor manejaría el Ejecutivo y la campaña por el referéndum, y el exgobernador de Junín se encargaría del Congreso.
Por PLINIO ESQUINARILA- Diario EXPRESO.
Todo indica que el actual rol del partido Perú Libre pasaría a segundo plano en las próximas semanas, si Pedro Castillo es proclamado presidente de la República, para dar pase al Frente Social del Perú (FSP), la organización que tomaría la posta para implementar el Plan del Bicentenario y dejar atrás, poco a poco, el ideario programático marxista leninista de la organización política fundada por Vladimir Cerrón.
Esta es la visión de los nuevos estrategas de citado FSP que ya trabajan a todo dar en el local de la cuadra 8 de Jirón Azángaro del Centro de Lima donde también funciona la agrupación Democracia Directa liderada por Andrés Alcántara.
Y las primeras consecuencias de las divergencias entre los dos líderes que, en determinado momento, llevó al profesor de Chota a señalar que, dadas las nuevas circunstancias, a Cerrón “no lo van a ver ni siquiera de portero en ninguna de las instituciones del Estado”.
¿Quiénes dirigen el citado Frente Social? El presidente es Javier Fernando Arce Alvarado, congresista electo al Parlamento Andino; el secretario general es Víctor Oliva Miguel, líder del velasquista Partido Socialista Revolucionario; y José Gonzales de la Flor, sociólogo por la Universidad Mayor de San Marcos, tiene el cargo de secretario de organización.
En esta alianza frentista se han unido, además, los humanistas que nuclea Yehude Simon Munaro, los etnocaceristas de Antauro Humala, el aparato de la Confederación General de Trabajadores del Perú (CGTP), organización sindical que le facilitó a Castillo su frontis de la plaza Dos de Mayo para el cierre de campaña de la segunda vuelta.
No es que se vaya a una colisión total con la dirigencia de Perú Libre, sino a un real politik en que Castillo manejaría el Ejecutivo, tal vez en alianza con otros grupos de izquierdas, como Juntos por el Perú de Verónika Mendoza.
Entretanto, el sector de Cerrón -Perú Libre- que insiste en gobernar con base en el ideario fundacional de este partido, con las nacionalizaciones de recursos principalmente mineros, gasíferos y petroleros y un Estado más interventor que coordinador, se haría cargo del Congreso.