“Captura de Abimael Guzmán se dio bajo mi comando y supervisión”
El exjefe de la Dirección Nacional contra el Terrorismo (Dincote) Ketín Vidal, dijo desconocer por qué el Congreso, no lo tomó en cuenta para la distinción por la llamada “Operación Victoria”, en cuyo marco se capturó al cabecilla de Sendero Luminoso, Abimael Guzmán Reinoso.
En ese sentido, aseguró que él fue el artífice de la captura del cabecilla senderista, pero afirmó que pese a ello no buscó ningún tipo de reconocimiento, pues solo “cumplió con su deber”.
Antonio Ketín Vidal afirmó además que nunca reclamó el éxito de la captura, pues “fue un trabajo en equipo”.
“[La captura de Abimael Guzmán] se dio bajo mi comando y supervisión. […] No sé [porque no he sido tomado en cuenta]. Esa no es mi decisión, habría que preguntarle al Congreso. El Congreso ha debido llamar al jefe de Dincote para ver cuál fue el comportamiento [de los que participaron]. Yo he cumplido con mi deber y eso es todo”, dijo en el programa 2017 de Canal N.
“No solo yo [cumplí con mi trabajo], hay 10 mártires de la Dincote que han entregado su vida y sus familiares no van a recibir ninguna condecoración. Ellos trabajaron en muchos operativos”, agregó el general PNP en retiro.
Dijo que lamentablemente se le hizo mala fama por ser un jefe “muy derecho y digno”, incluso se le acusó de traidor.
“Sí, injusta, no la historia, porque la historia aún no ha terminado de escribirse, hay muchas cosas”, afirmó tras ser preguntado si la historia le había sido injusta, tras ser acusado de supuestas irregularidades en el periodo de la captura a Abimael Guzmán y no haber sido reconocido por su trabajo en el operativo.
En otro momento, dijo que su relación con el coronel PNP en retiro Benedicto Jiménez siempre fue buena, pero con el general PNP en retiro y actual congresista de Fuerza Popular, Marco Miyashiro “casi no lo he visto porque él no era el jefe del GEIN para nada”.
“Miyashiro es héroe desde que es candidato al Congreso”, dijo Vidal, luego de rechazar que haya administrado los 2 millones de dólares que se destinó para las labores de Inteligencia del GEIN.
“La comisión se manejó de manera limpia, yo he dado ejemplo de honestidad y dignidad, hay gente que vive pues de la captura para toda la vida, yo he sido espada de honor de mi promoción, tengo una formación fuera del país en inteligencia y he sido un oficial digno en toda mi carrera”, concluyó Ketín Vidal.
Fuente: Canal N.
Un flash del noticiario 90 Segundos sacudió a la señora Amelia Tello de Núñez, como a muchos peruanos, ese sábado 12 de septiembre de 1992. Alrededor de las diez y treinta de la noche, el canal 2 interrumpió la película de acción que pasaba y un presentador de noticias dio la noticia que todos querían escuchar hacía mucho tiempo: “Abimael Guzmán ha sido capturado”.
Una gran noticia para la señora Amelia como para la inmensa mayoría de peruanos. Solo que para ella esta empezaba a transformarse en pesadilla, conforme se iban conociendo los detalles de la captura. Y es que el lugar donde se escondía el terrorista más buscado del Perú era la casa que ella había alquilado hacía cuatro meses atrás a una guapa bailarina y a su esposo, un arquitecto joven y amable. (…)
Apenas cinco horas antes de conocerse la noticia, Patricia Awapara Penalillo y su pareja Celso Garrido-Lecca Seminario llegaron a la casa de la urbanización Los Sauces sin imaginar, ni siquiera remotamente, que la visita a Maritza Garrido-Lecca los iba a involucrar en una noticia de alcance global, asociándolos a la dirigencia de uno de los grupos terroristas más letales del mundo. Veinticinco años después, Patricia Awapara decidió romper su silencio. Contar cómo conoció a Maritza Garrido-Lecca y lo que vivió esa noche que cambió su historia y la historia del Perú. (…) Recuerda que esa tarde de sábado era la tercera vez que visitaban a Maritza en esa su nueva casa, donde vivía con Carlos Incháustegui desde el mes de mayo. Patricia y Celso estuvieron a punto de dejar una nota debajo de la puerta porque por varios minutos no respondían sus llamados. No era raro en Maritza, siempre se demoraba en abrir, pero esa tarde la espera se prolongaba más de lo usual.
Mientras los hombres del GEIN coronaban la Operación Victoria, la captura tomó a todo el mundo por sorpresa; incluyendo a la cúpula del poder. El presidente Fujimori descansaba en un villorrio perdido de la selva, después de haber pescado en una cocha del río Amazonas cercana a Iquitos. Su súper asesor de inteligencia, Vladimiro Montesinos, terminaba de comer conejos en una casa campestre de Chaclacayo.
Fuente: Revista CARETAS.