Esperamos sus disculpas
CHILE TIENE LA PALABRA
la importancia de no espiarse
A este nivel, es emblemático el perdón que en 2000 el presidente de Alemania Johannes Rau le extendió al pueblo judío en su discurso de orden ante el parlamento de Israel. Está claro que el holocausto contra los semitas no se produjo durante el mandato de Rau, pero su gobierno consideró que la nación alemana le debía a la judía unas disculpas tan genuinas como las que sólo pueden brindarse en la sede legislativa del agraviado; de allí que dicha visita constituya un lugar de la memoria que hasta hoy estrecha los lazos entre ambos países.
Ya para casos específicos en los que el espionaje deriva en las disculpas del país perpetrador tenemos, más bien, un panorama variado. De los últimos tiempos se destaca la respuesta de Barack Omaba a las escuchas telefónicas de la NSA en 2013 a las presidentas Angela Merkel y Dilma Rousseff, de Alemania y Brasil respectivamente. La respuesta de Omaba no fue la misma para cada caso.
A su manera, Obama extendió sus disculpas a la Primera Ministra alemana. En una larga entrevista concedida a ZDF, la segunda cadena de la televisión pública de su país, aquel le aseguró a la Merkel que su teléfono no volvería a ser espiado y que no permitiría que las labores de inteligencia dañen las relaciones entre ambas potencias. En esa ocasión, el líder norteamericano añadió que “las diferencias de opinión no justifican el espionaje telefónico”.
A pesar de ello, las disculpas de Omaba no lograron impedir las graves repercusiones que este espionaje le infligió a la relación bilateral. Así por ejemplo, el jefe de los espías en la embajada estadounidense de Berlín fue expulsado de Alemania y fuertes titulares de la prensa teutona fustigaron el hecho, como lo hizo el prestigioso matutino “Die Zeit” que señalo:
“Queridos americanos, ¿cómo podéis ser tan tontos de reclutar como agente doble a un empleado de los servicios secretos alemanes y dejaros pillar? ¿No os bastó con el enfado por la información que filtró Snowden? ¿Os da completamente igual que el antiamericanismo se extienda en Alemania, que aquí haya algo fundamental que puede romperse?”
Distinta fue la actitud del Presidente de los Estados Unidos ante las escuchas a su homóloga brasileña pues se negó a disculparse a pesar de la insistencia, reiterada, de la mandamás de nuestro vecino amazónico. La negativa americana enfrió considerablemente las relaciones bilaterales, llegando la presidente Rousseff a “desairar” a su homólogo norteamericano cancelando una visita a Washington. En esa ocasión, el gobierno de Brasilia señaló que “Las prácticas ilegales de interceptación de las comunicaciones y datos de ciudadanos, empresas y miembros del gobierno brasileño constituyen un hecho grave, atentatorio a la soberanía nacional” e “incompatible con la convivencia democrática entre países amigos”.
Un tercer caso de disculpas ante una situación de espionaje muy pertinente a nuestra situación es la suscitada entre Chile y Argentina en 2003, recientemente merecedor de un titular de Perú 21. En esa ocasión dos efectivos de la Región Militar Austral de Chile fueron descubiertos interviniendo la caja fuerte del Consulado argentino en Punta Arenas precisamente cuando la actual Presidenta de Chile, Michelle Bachelet, se desempeñaba como Ministra de Defensa del Presidente Eduardo Lagos. Este último, a diferencia de la posición hasta ahora asumida por su entonces ministra, fue enfático en disculparse ante la Argentina y dar rápidamente de baja a los dos militares involucrados en el acto de espionaje.
La contemporaneidad del espionaje
A estas alturas podemos anticipar dos conclusiones quizá contradictorias: la primera es que el espionaje es una práctica vigente en el mundo actual; la segunda es que su vigencia no la convierte en una práctica aceptable y que, por el contrario, su detección puede lesionar gravemente la relación entre países con intereses en común y que mantienen relaciones cordiales.
Respecto de nuestra primera afirmación es evidente que la CIA y la NSA realizan actividades de espionaje a todo nivel en contra de los países o grupos armados que consideran una amenaza como podrían serlo Pakistán o “Estado Islámico”. Asimismo, en tiempos de alto desarrollo de las comunicaciones, wikileaks y chuponeos incluidos, parece casi ingenuo pretender desactivar las actividades de hackers al servicio de la inteligencia de los estados.
Sin embargo, cuando se trata de países amigos o socios existe un mayor espacio para la discusión sobre la pertinencia o no de las prácticas de espionaje, dadas las graves consecuencias que puede acarrear su detección, como el severo enfriamiento de los vínculos bilaterales con afectación incluso del intercambio comercial. Para citar un ejemplo, tras la detección de las escuchas teléfonicas a su Primera Ministra, Alemania le canceló contrato a la empresa de telecomunicaciones Verizon, de los Estados Unidos. Para el caso de Brasil, sus relaciones con Estados Unidos aún no recuperan los niveles de normalidad que ostentaban en 2013, antes de conocerse las escuchas.
Perú/Chile y la confianza mutua
Pasemos finalmente a ver el caso que nos ocupa. Perú y Chile no son dos países a los que eventualmente podría convenirles ser socios. El Perú y Chile ya son socios aunque no lo quieran porque resulta que a su tradicional e irreversible vecindad se le suma el hecho de que hace 20 años la China inició su revolución industrial y poco antes de eso lo hicieron los “tigres del Asia”.
Resulta que, debido a dicha revolución industrial, la demanda de materias primas del sudeste asiático a nuestros países se ha multiplicado n veces porque estamos precisamente al frente, en la misma cuenca, la del Pacífico; y resulta que esa demanda es tan grande que en Asia-Pacífico no nos ven como Perú, Chile o Colombia sino como región, como puertos proveedores de todo lo que ellos necesitan.
Ciertamente, he podido enfocar la cuestión desde una mirada histórica o socio-cultural pero centrémonos esta vez en la interrelación económica que a estas alturas es irreversible además de fundamental para la viabilidad misma de ambos estados en tanto que proyectos, porque a la globalización mundial no se concurre en solitario. De suerte que si nuestras clases políticas buscan el bienestar de sus respectivos pueblos tendrán que considerar que Perú y Chile constituyen una alianza absolutamente estratégica y hacer lo necesario para fortalecerla.
Y es en este punto que entra a tallar todo aquello que yo coloco en el universo de lo imaginario; es aquí donde entran nuestras emociones, recuerdos, sensibilidades; emociones que también experimentan las personas que toman las decisiones y es por eso que hace tanto tiempo vengo reclamando la reconciliación y que el Perú y Chile conversen con franqueza de lo que les pasó y de lo que nunca les volverá a pasar. Por eso insisto en crear instituciones binacionales y tratar desde las escuelas de ambos países esas viejas percepciones del “expansionismo chileno” y el “revanchismo peruano”.
Es por todo eso que si existen dos países que no pueden espiarse, esos países son el Perú y Chile, porque aún llevan dentro una fuerte y recíproca carga de suspicacia que no han alcanzado a superar. Entonces no espiarse debería convertirse en una política binacional acordada al más alto nivel y formar parte de los otros instrumentos binacionales con los que nuestros dos países ya están construyendo ese difícil status llamado confianza mutua.
Las paralelas, según dicen, se juntan en el infinito. Los terrenos de lo objetivo y lo subjetivo también se juntan en el infinito de la política y la negativa percepción del otro mañana implicará alguna mala decisión que nos afectará en lo material. Por eso hoy Chile tiene la palabra; por eso hoy Chile nos debe unas disculpas, por el TLC, por la Alianza del Pacífico, por la corrección de ambos países en el litigio ante La Haya, porque juntos ejecutamos la sentencia en tiempo record; por la integración fronteriza y social y sobre todo por los jóvenes que no quieren heredar los viejos prejuicios que aun impregnan a nuestras generaciones.
Pero disculparse es apenas el primer paso, y no espiarse más es apenas el segundo. Ojalá alcancemos a ver el día en el que nos miremos sin recelo y le contemos a nuestros hijos que en determinado momento dos antiguos rivales decidieron emprender juntos la senda del desarrollo.
Publicado hoy en Punto de Encuentro
http://www.puntodeencuentro.pe/columnistas/daniel-parodi-revoredo/chile-tiene-la-palabra.html
12 marzo, 2015 at 9:25 am
Sr. Parodi, existiendo algunas inexactitudes en su nota, quiero centrarme solamente en la actitud que Chile adoptará, toda vez que para Santiago es el Pdte. Humala quien ha tensado la cuerda.
http://www.rpp.com.pe/2015-…
y el Sr. Humala continúa en esta línea de trabajo y se declara que
http://www.revistavelaverde…
El tema se ha puesto demasiado tenso ya que si Perú no adhiere a la CONVEMAR implicaría que la sentencia del Fallo no se ha concretado y Chile podrá continuar navegando en el triángulo marítimo asignado al Perú.
El Sr. Humala habría querido cortar relaciones diplomáticas con Chile, TT lo habría evitado. Actualmente el Sr. Humala tiene muchos problemas internos/familiares que querría tratar de diluir, pero ha iniciado una peligrosa estrategia cuyos resultados desconocemos.
12 marzo, 2015 at 10:54 am
Saludos amigos:
De auerdo con el Dr. Parodi…Sus comentarios en caja, y sobre todo su invocación final.Pero…¿cómo hacemos para que nuestros vecinos comprendan la situación?.
Tienen la sartén por el mango, pero nos miran como si por culpa de los peruanos la tuvieran por el plato de freir y sobre el fuego….
Los peruanos, a pesar de todo lo que nos hecho -y NO es un decir- siempre estamos dispuestos a la BUENA VECINDAD, y de allá, SIEMPRE ESTAN BUSCANDO
motivos de discordia. Los herederos de Pinochet tienen
mucha influencia…¡Cuando MANDEN los civiles, las cosas serán diferentes. ¡Así sea!.
12 marzo, 2015 at 11:00 am
Sr. Nuñez,
Sus trascendidos son suyos y es Ud. responsable por ellos. .
Por lo demás, en este espacio ratificamos nuestra posición peruanista a la vez que favorable a la integración con Chile, lo que no obsta la discrepancia y el intercambio alturado de ideas.
Ate.
DPR
12 marzo, 2015 at 11:00 am
No sólo el Pdte Humala tiene problemas internoos, familiares;Iguelmente los tienela Presidenta Bachelet, como es sabido,Y en la clase políica existe ell escándalo "PENTA".Para reflexionar! En todo caso Chile queda bien si se disculpa, lo que no sé es si le interesa quedar bien!
12 marzo, 2015 at 11:10 am
Este análisis junto con el de Agustín apuntan certeramente al problema. Sin embargo, en las relaciones Internacionales, existen practicas como las que bien explica Maquiavelo y de las que no se hablan ni integran al campo de la teoria. ¿Que es espionaje?. ¿Existe algún país que no espie?. Valoro el examen tuyo y de Agustín, además estan bastante por encima del lamentable artículo de Valle Riestra.
12 marzo, 2015 at 3:23 pm
Quisiéramos tener a Chile como buen vecino:eso mejoraría muchas cosas,Pero no, no es así .Tenemosque estar alertas, Recomiendo leer lle libro del chileno ex-diplomático Demetrio Infante Figueroa llamad "Confidencias limeña;Charaña, espionaje y algo más,El libro es desordenado pero vale la pena,se vende en Lima.
Chile no es hasta ahora buuen vecino, porque ya van tres los casos de espionaje descubiertos; tampoco lo es porque desobedeciendo el art 175 del Fallo de la Haya se ha apoderado del "triánguloo terrestre" violando el Tratado de 1929; no loes porque no devuelve el Archivo del Ministeruio de RREE del Perú hasta 1881 ni devulv la nutrida correspondencia de los gerales de la pprieemra partede la Repúblic y otros materiale esos, coloniiales, todos saqueados en Lima durante la ocupacióon chilena de Lima, por Vicuña Mackenna y que se hallan en el Archivo Nacional de Chile, No hay ningún gesto al respecto salvo la devolución hace poocos años de 3800 libros de lla BNP, faltando muchos que han siido vistos en la BN de Chile últimamente, Ojalá las cosas mejoraran,,,
12 marzo, 2015 at 3:42 pm
La diferencia, sr. de Althaus es que aquí se han servido de un caso que estaba oculto de la luz pública. Solamente se necesitó que la investigación judicial llegará a golpear las puertas del Partido Nacionalista, para que súbitamente el caso se hiciera público.
Con respecto a los casos de corrupción en Chile, Penta y del hijo de Bachelet, ambos están judializados y hasta ahora no se ha utilizado ninguna cortina de humo. Ni siquiera el caso del espionaje.
12 marzo, 2015 at 7:19 pm
Yo no sé al final que provecho pueda obtenerse del recíproco enrostramiento de debilidades. Habría que intentar ser más propositivo, más allá de que confiamos en que la diplomacia resuelva este caso específico con satisfacciones adecuadas al Perú.
Saludos
DPR
12 marzo, 2015 at 10:31 pm
De acuerdo,profesor Parodi; hay que ser propositivos, aunque cuesta ttrabajo, porque ante esa actitud correcta, Chile puede sentirse no obligado a nada,Que Chile appilque el art 175 delFallo de La Haya y deje de apropiarse dle "triángulo terretre", si no, pue al arbitaraje del Presidente de los Estados Unidos como etpa establecido en el Tratado de Lpimiites terrestres de 1929.
Y qu Chile, en gesto de buena voluntad, devuelva los innumerables documentos de le Historia del Peru llevados a Chile por Vicuña Mackenna,
Y el Archivo del Ministerio de RREE peruano hasta 1881, No es tan difícil y para los peruanos es reconstruir parte importantte de su Historia!
13 marzo, 2015 at 11:11 am
Creo que hay que esperarde la Cancillería chilena, una Nota Diplomática bajando los decibeles del caso y dando agú tipo de satidafcción acptale aunque no uese exactamente la que uno desea. E que la diplomacia tiene sus lenguajes, Porque claro, si los peruanos somo peiists al respecto, Chile puede ennviar una notta dura, ppoco aceptable, Hay que dejar que las Cancilerías trabajen en reserva este tema,
13 marzo, 2015 at 11:32 pm
Saludos amigos:
Porqué insistir en que Chile quiere apoderarse del llamado triángulo…Ese pedazo de la Patria fue entregado por Pérez de Cuellar en 1968 y "aceptado" por Chile sin ningúb Tratado, ni un acuerdo ni una carta reversal de las verdaderas. El gobierno del Perú no se enteró hasta que el 2001 Pérez de Cuellar volvió con Paniagua
y los chilenos nos clavaron la caseta en el arenal.
El triángulito está YA OCUPADO por Chile desde 1968,
por eso NO debemos ir a un arbitraje…Si los agentes de La Haya no van a pedir a los jueces que exliquen a los chilenos y les exijan cumplir con el fallo, con el que les dijeron que los límites terrestres NO SUFRÍAN cambios porque tienen el Tratado de 1929, ese pedazo del Perú se perderá por que lo regaló Pérez de Cuellar.
De eso NADIE QUIERE HABLAR…ué pena!.
14 marzo, 2015 at 11:53 am
Señor hugo Ramíirez Canaval;
Ninguna frontera terrestre se modifica porque a un diplomático se le "ocurrió" hacerlo, y un a un Jefe de estdo se le ocurrio afirmaloa sinquerreer el art, 175 del Fallo. Un Tratado de fronteras se modica sólo por otro Tratado e fronteras, que dbe ser aprobado poor los Congresos de ambos países,ratificado luego por ambos Jefes de Estado y canjeados,Y el día de hoy , inscrito en la ONU, Por eso cabe ell arbitraje del Pdte de los Estados Unidos, sgúnn el Tratado de1929, ¿Aveer si a un Jefede Estao peruano se leocurrieraa ceder tacna a Chile, serí acto válido,según Usted?
16 marzo, 2015 at 1:37 pm
Saludos amigos:
Con relación a los comentarios sobre el "art. 175" del Fallo, creo que si los agentes peruanos en La Haya NO se hubieran DESENTENDIDO de su responsabilidad, NO estaríamos con el este problema.
Ellos debieron acudir a la Corte, el mismo día del Fallo, luego de escuchar a Piñera que habló del triángulo, para solicitar que los Jueces llamen a los agentes chilenos y les EXPLIQUEN lo que les dijeron con la lectura del Fallo: "los límites terrestres NO SUFREN MODIFICACIÓN, porque el Tratado de 1929 está vigente". Todavía estamos a tiempo:¡Denunciándolos por NO CUMPLIR con el Fallo…".
Tengo la impresión de que "para que se pueda cumplir" el regalo que hizo Pérez de Cuellar" en 1968, algunos prefieren que el Perú pierda ese arenal "más pqueño que la chacrita" de uno de los agentes.
18 marzo, 2015 at 8:02 pm
Para mejorar las relaciones Chile-Perú, es preciso que Chile devuelva los documentos llevados a Santiago durante le ocupación chilena de Lima: las cartas de los primeros caudillos peruanos post-Independencia, que son muchas y parte importante de lla Historia del Perú. Esos fueron llevados por Vicuña Mackenna están en el Archivo Nacional de Chile.Lo mismo con los documentos deJose Toribio Medina escogió y llevó a Lima en esa misma oportunidad. Y libros de la BNP que no han sido devueltos, entre los cuales la "ENCICLOPEDIA de Diderot, que tiene los sellos de la BNP por lo cual no pudo se expuesta al público en Chile.Verán commo mejoran las relacioones.Aquello que se puedaenmendar de la Guerra delPacíficodbe ser hecho,y no dejarheridas abiertas que se puedan curar.
19 marzo, 2015 at 9:14 am
Sr. Ramirez, ¿puede explicarnos de la torre que existía en el lado peruano y que entre gallos y media noche desapareció?
Ud dice:" Denunciándolos por NO CUMPLIR con el Fallo…"; le pregunto, ¿ha cumplido el Perú con las exigencias del Fallo; qué pasó con la firma de la CONVEMAR a la que llamó la CIJ?
31 marzo, 2015 at 12:03 pm
Los países se es´pían entre sí.Pero la estartegia chiena es exasperr al Perú con revelaciones de espionaje cada cier tiempo;el primero fue el de la época dell dictador Francisco Morales Bermúdez con el fusilamiento de un supuesto espía y el Embajador de Chile, Bulnes Sanfuente declarado personanon grata,La segunda vez, hace poco con Ariza y esta es la tercera vez es la que se filtra una conversacion entre los marinos jefes de inteligencia de ambos países, con lo cual Humala cayó e la trampa; exige a Chile una nota de admisión y de disculpa,No se ha puesto a pensar en qué hare el y el Peerú si tal nota no llega nunca. Estos espionajes públcos de vez en cuando son una trampa chilena, yy ahora más en que noles ha ido bien en La Haya!