Estimados Amigos:

Adjunto interesante análisis de la cuestión minera en el país, cuyo autor ha preferido mantenerse en seudónimo. No suscribo la tesis de que la minería y la actividad petrolera sean poco rentables (aunque el autor se refiere a lo social) , de hecho, creo que el país vive de dichas actividades, aunque debería modificar paulatinamente su matriz productiva. Sí suscribo la denuncia de las malas prácticas en la actividad minera y de la corrupción que rodea la actividad.

Cordialmente

DANIEL PARODI REVOREDO

A ver, metiendo mi cuchara en el tema de las actividades extractivas, de las que algo conozco.

1-¿Cuál es el beneficio para el país? Ahí hay un problema que tiene que ver con dos cosas relacionadas: el marco legal-normativo, que en el Perú está hasta las huevas, protegiendo en todo al inversor y dejando sin herramientas al Estado. El segundo tema es la forma como el Estado negocia con los inversores: con los calzoncillos bajados. Trabajo con los que negocian con los petroleros y trabajé alguna vez en Southern: los funcionarios del MINEM se bajan los calzoncillos ante todo lo que diga la empresa, no son capaces de decirle no en nada, así de simple. En esas condiciones, el governement take a nivel minero o petrolero es risible, y está entre los más bajos del mundo, no sólo de Latinoamérica. Como que a nivel de petróleo competimos con los africanos por ver quién les cobra menos a las petroleras.

2-Cuàles son los perjuicios de la actividad extractiva?
A-Perjuicios económicos-La enfermedad holandesa o la maldición de las industrias extractivas. Aquí para decirlo claro, el éxito en atraer inversiones es el fracaso como país. Veámoslo de esta manera: en Trujillo en 1990 había 150 mil personas empleadas en la industria del calzado y la cadena productiva desde la curtiembre. La bonanza generada por la minería en los 1990s y 2000s se ha traído al suelo el tipo de cambio, con la consecuencia que prácticamente fuera de algunos productos gourmets y exquisiteces artesanales, no es rentable producir casi nada en el Perú, y la producción nacional en muchos sectores como el de la curtiembre-calzado ha sido destruida. El resultado es que hoy la curtiembre trujillana está destruida, de casi 150 curtiembres hoy no quedan más que media docena, y de los 150 mil trabajadores hoy no quedan más que 15 mil en el sector curtiembre-calzado. El incremento de la delincuencia y de la inseguridad ciudadana, es pues un by-product del éxito del país en atraer inversión minera y petrolera.

Para no hablar del daño moral que implica cosas como el Canon: las regiones y los municipios dejan de gravar a actividades empresariales en sus jurisdicciones porque es más fácil recibir las transferencias del Canon desde el gobierno Central. Y a éste le conviene echar la culpa de la pobreza a la incapacidad regional y local para gastar eficientemente los recursos transferidos. En lo cual no deja de haber verdad, cuando uno revisa en los elefantes blancos en los que gastan sus ingresos los municipios o los gobiernos regionales.

B-Perjuicios ambientales. Aquí hay varios puntos:
I-Inexistente o débil capacidad de regulación, supervisión y fiscalización del Estado, empezando por el marco normativo-legal que permite a las empresas hacer casi cualquier cosa con impunidad. Casi todas las multas que ha impuesto Osinergmin u otras autoridades han sido impugnadas en el poder judicial o anuladas por éste. La legislación ambiental es tan gaseosa que cuando uno le dice a digesa, la ana o a osinergmin o la oefa supervisa o fiscaliza tal actividad de la empresa lo que ellos te dicen es que la ley y las normas les impiden hacer eso, o no les facultan a hacerlo. Agreguemos el poder de las empresas para impedir la salida de normas que incrementen los estándares ambientales (por ejemplo con Límites máximos permisibles o estándares de calidad ambiental menos africanos y más cercanos a los de la OMS), las multas o la capacidad de fiscalización del Estado, o para sacar normas con nombre propio (no sólo Doe Run cuando incumplió repetidas veces su PAMA, también Southern cuyo máximo funcionario legal le pide en junio del 2003 al Estado posponer inversiones de su PAMA, en julio el mismo funcionario es nombrado ministro de minería y en agosto saca un decreto supremo aceptando lo que él mismo había pedido, para retirarse en setiembre del ministerio)

Ii-sistema de evaluación ambiental que no reconoce la mayoría de los impactos ambientales de los proyectos mineros o petroleros, y los subvalora monetariamente, de manera tal que los proyectos salen como les resulta más económico a los inversores y no considerando la internalización de las externalidades negativas. En la mayoría de los casos se desechan opciones técnicamente viables que minimizan impactos ambientales para reducir costos e incrementar ganancias. Y, como los funcionarios de las direcciones generales de asuntos ambientales del minem, produce y otros ministerios están por CAS, sin estabilidad laboral, con sueldos míseros, tienen todos los incentivos para aprobar EIAs mal hechos. Y son los promotores de la inversión (minem, produce, mtc, etc.), los que evalúan los EIAs. Para que tengan una idea de la calidad de la evaluación ambiental: en Madre de Dios se presentó un EIA de un proyecto petrolero en el que se hablaba de las especies piscícolas de los ríos Pastaza, corrientes y marañón (todos en Loreto), en el que no había ninguna referencia a las especies animales o vegetales de la región. Y ese estudio fue aprobado por el MINEM.

Iii-Generación impune de pasivos ambientales: estos días la Red Mauqui ha sacado un suplemento en los diarios en los que recuerda derrame de relaves ocurridos en varios ríos en años pasados, y por los cuales no ha habido ninguna sanción: bien porque las instancias correspondientes en varios años no han podido generar un reporte que indica que hubo daño, bien porque las multas y sanciones han sido impugnadas en el incorruptible poder judicial. SEDAPAL gasta cada año millones de dólares en limpiar las aguas del Rímac de los metales pesados vertidos al río por la Procesadora Tamboraque cerca de San Mateo de Wanchor, SEDACAJ gasta millones en limpiar el agua contaminada que entrega Yanacocha y SEDAILO igual gasta millones en limpiar el agua contaminada que entrega Southern, porque sino los pobladores de Lima, Cajamarca o Ilo consumiríamos la tabla periódica en el agua entubada. Para no hablar de los pasivos generados por la minería y que el Minem considera Huérfanos, y que inundan todo el territorio, o los pasivos generados por las petroleras en la selva desde 1972.

Iv-Destruccción del medioambiente y la biodiversidad: los EIA no miden los impactos conjuntos, sinérgicos de las actividades, sino impactos puntuales. Ya es hora de cambiar la legislación para que los EIA midan impactos por cuenca, y no como se dice ahora las normas que establecen que los impactos directos son los que se dan en quinientos metros a la redonda de donde se producen las actividades extractivas. Pero antes, debemos tomar conciencia que la Amazonía peruana, tanto en selva alta como en selva baja, así como los andes, son uno de las 3 zonas más biodiversas del planeta en todos los órdenes faunísticos y de flora (junto a Indonesia y Madagascar). Contamos con las mayores cantidades de endemismos faunísticos y florísticos en el mundo en todos los órdenes, de aves a anuros, etc. Y tomar conciencia que es la política de empobrecimiento campesino seguida desde los años 1950s y de no hacer la reforma agraria, las que han empujado a los campesinos andinos y costeños a emigrar a zonas de alta biodiversidad, y que al mismo tiempo son las más sensibles a los impactos campesinos. Hablo de política de empobrecimiento adrede, porque las políticas que bajan consistentemente los aranceles a los alimentos importados desde los años 1950s, perjudican a los campesinos, que tiene cada vez precios más bajos por sus productos, y se ven obligados a abandonar sus campos y a migrar a nuevas zonas (inicialmente porque las tierras estaban monopolizadas por los hacendados, antes de la Reforma Agraria). A quién ha beneficiado los precios bajos de los alimentos? a los empresarios urbanos que así no tiene que pagar sueldos más altos a los trabajadores para que puedan cubrir canastas mínimas de alimentos, además por supuesto de a los importadores de alimentos.

3-Las empresas gigantes dicen porqué se fijan en mí si los microempresarios mineros o los informales contaminan más. El argumento es falaz por varios lados: primero, toda la minería informal del Perú sumando sus impactos no le llega al meñique a los impactos que ha generado Yanacocha o cualquiera de las que explota a tajo abierto: la cantidad de toneladas de tierra que remueven, la cantidad de insumos peligrosos que usan, la cantidad de relaves que generan simplemente no tiene comparación. Por otro lado, toda la producción de la minería pequeña o informal, al final entra al mercado formal, por medio de empresas medianas o grandes formales que son las que blanquean el oro o los metales informales. No queremos minería informal? Fácil córtales los suministros de insumos, córtales las fuentes de compra. No se hace por que falta voluntad política (al quien dijo parlamentarios del APRA, Fujimorismo, humalistas?).

En conclusión, me parece que las actividades extractivas generan más perjuicios que beneficios al país. Se benefician sólo algunos empresarios que les dan servicios a las extractivas, algunos estudios de abogados y algunos funcionarios estatales del sector, y les llega algunas migajas a los obreros y a algunos dirigentes locales comprados por las extractivas, se perjudica el país por los impactos ambientales, por la pérdida de la biodiversidad, por la pérdida de miles de puestos de trabajo y de competitividad empresarial debido a la enfermedad holandesa, porque vuelve a los distintos niveles del estado dependiente de la droga generada por los ingresos que las extractivas transfieren (regalías, impuestos, cánones)..

Hechas las sumas y las restas, pocas, poquísimas de las minas son socialmente rentables, así como no lo son la mayoría de lotes petroleros o de concesiones forestales o permisos de pesca harinera.
He dicho
El Kronikeur Klandestino