La noche estaba destinada a ser peruana en California. Tras las victorias en la antesala de los púgiles nacionales Juan Zegarra (noqueó en apenas dos rounds) y Carlos Zambrano (bregó para ganar en ocho), el apoyo de 3,500 aficionados (en su mayoría compatriotas) se hizo presente para recibir a nuestra campeona super pluma Kina “Dinamita” Malpartida y brindarle su aliento en la pelea contra la británica Lindsey Scragg.
La retadora, haciendo honor a su apelativo de “Tough Cookie” (“Galleta Dura”), complicó bastante el desempeño de Kina, al demostrar con su contundente golpe de zurda que, a diferencia de la defensa de junio pasado, no iba a ser una “gatita de sofá” como Dos Santos e iba con todo en pos del campeonato en la categoría.
La caída de su rodilla en el sexto round del combate hizo temer lo peor a la esquina peruana; sin embargo, Kina se repuso y acordándose de su diestra conectó, desde allí en adelante, los derechazos certeros que desequilibraron la balanza en su favor, tanto en el ring como en la decisión unánime de los jueces (98-91, 98-91 y 98-92). Kina ganó con dientes paretados pero es cuando más se sufre, que más se goza este triunfo.