Insensible presencia

[Visto: 1185 veces]

Mi piel se eriza
con el implacable frío
y suda goteras
con el tórrido calor.

Mis manos palpan
los cansinos pesos
y reciben alegres
las quietas monedas.

Mis pies cansados
no ocultan su trajín
de idas y vueltas,
de tropiezos sin fin.

Mas el latente corazón
no insufla a mi ser
la vibrante alegría
ni la hosca tristeza.

Frío de indiferencia
que no es frío de calma:
es insensible presencia
que cubre mi alma.

Puntuación: 3.00 / Votos: 1

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *