Hoy posteo mi entrada 101, pero no encuentro ningún motivo para celebrar. Todo lo ocurrido esta semana me tiene revueltos los pensamientos y amargo el corazón. Entiendo el natural derecho de los nativos de la selva a proteger sus tierras, pero no a secuestrar policías, torturarlos y matarlos. Entiendo la zozobra que viven los trabajadores y ex empleados de Panamericana Televisión, pero no el aprovechamiento mediáticos sobre un medio de comunicación convertido, irónicamente, en noticia. Entiendo la legítima preocupación de los puneños por los niños que mueren a diario en la puna, pero no la irresponsabilidad de algunos comerciantes de vender, obra de magia incomprensible, ropa donada a estas zonas.

Hoy sólo pido respeto a aquellos que ya sufrieron, sean policías, nativos o niños del altiplano, y también a aquellos que, como el sacrificado personal de canal 5, aún sufren.