(viene del capítulo anterior)
“Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que te vi”, dijo Álvaro intentando romper el hielo acumulado durante tantos meses. Sixto asintió con la cabeza: “ya no recuerdo si fue hace un año o tres meses”, sonrió mirándole con profusa melancolía.
Sixto se sentó en la silla y, antes que su amigo pudiera comentar algo más, resumió su tragedia en la siguiente frase: “estoy emocionalmente quebrado”. Álvaro, que no podía creer lo que oía, le preguntó a qué se debía eso. “Terminé con Estela hace un mes. Aún no sé cómo superarlo”, respondió envuelto en tristeza.
Para Álvaro se le hace difícil pensar siquiera en un desenlace en esa historia. Si bien no se habían visto desde hace mucho, siempre mantenían comunicación constante por el Facebook. Así pudo saber que, desde hace ocho meses, el soltero empedernido de Sixto tiene enamorada. O al menos la tuvo, a juzgar por la reciente actualización.
Álvaro le preguntó por qué había sucedido la ruptura. “Pues… por discusiones sin sentido… en temas sin sentido”, respondió Sixto a la defensiva, como si le torturaran a confesar la verdad, en vez de entregarla por iniciativa propia. “Pero, eso no es lo peor de todo”, añadió él, encendiendo las alarmas de Álvaro que siente predecir la aparición de una nueva revelación.
(continuará)