PICHILULI Y EL HONDO SUSPIRO DE LA TIERRA XAUXA

[Visto: 3408 veces]

Darío A. Núñez Sovero

Un reciente video musical, producido por RECÁMARA FILMS de Luigi Peña López y la dirección fotográfica de Edher Barzola Yaringaño, en el que participan reconocidos artistas jaujinos, ha devuelto al primer plano de nuestra atención algunos ricos y pintorescos paisajes de nuestra provincia.

De dichos paisajes, capturó poderosamente la visión de los que veíamos este valioso documento musical las vistas de algo que parecía eran secuencias del paisaje color ladrillo del pálido y sofocante Cañón del Colorado o del Cañón del Colca. Sino hubiera sido porque mirando hacia el fondo descubríamos la belleza de la Laguna de Paca nos hubiéramos persuadido que así era, pero no. Se trataba del Parque Natural de Pichiluli, ubicado en Jauja y a donde podemos llegar utilizando variados accesos: por el mirador de Paca, por Chuclú (detrás de su cementerio) o por Pachascucho, tal como se aprecia en el siguiente mapa:

Vemos, que continuamente las cartillas que orientan a los turistas visitantes de la región Junín dirigen el interés de ellos hacia formaciones parecidas ubicadas en Huancayo (Torre Torre), ignorando que en Jauja el Parque Natural de Pichiluli es una formación extraordinaria de roca y arcilla inmensamente más grande y majestuosa todavía.  Esa marginalidad es la que nos indigna, por ello reivindicatoriamente estas líneas tratan de restaurar esta deliberada amnesia para presentar ante los visitantes y el turismo nacional e internacional esta riqueza geográfica que, obsequiosamente, Dios regaló a la provincia de Jauja.

Pichiluli, al igual que los restos arqueológicos de Pueblo Viejo, son dos expresiones patrimoniales turísticas de la provincia de Jauja que necesitan ser promovidas intensamente por la originalidad y grandeza de lo que contienen. La primera, por ser el resultado de la obra magistral de la naturaleza a través de millones de años y en donde existe una riqueza geológica, flora y fauna particular y, la segunda, por contener, casi intactos, restos arqueológicos que nuestros antepasados nos han legado.

En este sentido, Pichiluli es la hija del caos griego, de ese caos original de rojiza arcilla  que ha creado todo el universo. En Pichiluli están resumidos el principio de la vida y de la tierra, y su existencia nos recuerda la brevedad de nuestras vidas. Cuando, casi agotados por el caminar, llegamos a él, ver la imponencia de aquellas formaciones que talló la lluvia y los relámpagos del cielo xauxa nos asombran casi hasta el desmayo y nos dicen  que es la magistral obra divina resultado de los miles y miles suspiros hondos de la tierra ante la permanente tragedia humana. Es el numen de los estallidos eructados por la tierra en incontables formaciones pétreas forjados por el antojo divino. La belleza de Pichiluli es solo comparable con la que despiertan tus sentimientos y tus sentidos al ver a la mujer amada.

No puedo terminar este post, sin antes reconocer y felicitar por ese interés de RECÁMARA FILMS para promover los ingentes recursos turísticos de nuestra provincia y brindarle al ego plural de los que somos naturales de esta tierra el orgullo siempre vivo de haber nacido en Jauja.

Finalmente, cabe indicar que, conocer el Parque Natural de Pichiluli, es un deber de todo jaujino. Es así que nuestro paisano Fano Terrel ha ido recientemente a este hermosísimo lugar y nos comparte las siguientes fotos:

¡Dios mío! Gracias por haber recreado en Jauja los paisajes y lugares más sorprendentes de nuestro país.

Fotos: Edher Barzola Yaringaño y Fano Terrel.

Video: Recámara Films (tomado de la cuenta de Renacer en Youtube).

Puntuación: 5 / Votos: 3

3 pensamientos en “PICHILULI Y EL HONDO SUSPIRO DE LA TIERRA XAUXA

  1. Raùl Antonio Gòzar Alarcòn

    Dos cosas contradictorias pero importantes. Primero, es una experiencia dolorosa, porque se abre al mundo y casi ha perdido su dulce y enigmática virginidad. Su existencia y su valor era casi un secreto quizas de los últimos; que la desenfrenada humanidad con su culto al dinero ya la están hollando. Soy Raùl Gòzar Alarcòn, un jaujino de 76 añitos y mi familia paternal vecinos de nuestro noble Pachascucho, los GOZAR DE LA CRUZ, siendo cabeza mi abuelita Doña INES DE LA CRUZ ROJAS, en su niñez conocida como “La Flor de Pachaschucho” por ser nieta de un afincado español en Acolla, esposa de Don JULIAN GÒZAR, que pasaron tiempos inolvidables en su casona cerca al ÑAHUIN PUQUIO y de aquì muy cerca al ingreso de este tesoro escondido PICHILULI y el desconocido PUEBLO VIEJO, parajes que desde niño recorrì lleno de asombro y cariño, sintiendo una inexplicable uniòn porque me atraìa algo que casi nadie veìa, su silencio majestuoso, la riqueza de sus formas, lo enigmàtico de su travesìa contorneando por un inmenso laberinto natural y sagrado, donde aùn habian zorros, lechuzas,etc. que eran dueños de tan espectacular paraje. ¡ Que recuderdos de niño y luego puber!, alguna vez subiendo temerariamente a Pueblo Viejo aprovechando el desmoronamiento de la tierra, en fin….hay mucho y duele que no siga igual, grande, indescifrable, desconocido, puro y quizas….ilusamente mio.
    Segundo, me alegra, que sea conocido y admirado por todos pero, imponiendo respeto y mucho cuidado, formando conciencia de la necesidad y obligaciòn de ingresar con la solemnidad que se hace a un templo faustuoso que nos ha regalado el tiempo y las fuerzas de la naturaleza. Bien, porque nuestra señorial JAUJA por mucho tiempo tan venida a menos por sus hijos ingratos y por sus vecinos, con este aporte a la cultura y al turismo será mucho mas grande de lo que es por su gran historia, por los restos arqueológicos lamentablemente descuidado; solo como ejemplo lo que hoy llaman la cruz, el mirador; al complejo de Hatun Xauxa o Sala Grande, donde se unieron construcciones jaujinas e incas. Ahì estuvo preso nuestro Inka HUASCAR. Como olvidar a la inmensa TUNANMARCA, capital de la confederación Xauxa-Huanca, mudo testimonio de la ferocidad inca que la dejó destruida piedra sobre piedra, lugar fascinante por donde recorrí saltando de piedra en piedra; que hablar del indescifrable Tragadero y su gran pantano,… en fin JAUJA es realmente eso, es decir, a la usanza antigua: EL PAIS DE LAS MARAVILLAS. Esto da alegria y esperanza pero, sin quererlo, se convierte junto con nuestra añoranza, en un inmenso remolino de risas y llantos, de penas y alegrias… ¡Oh, AMADA Y ETERNA JAUJA!

    Responder
    1. Nataly

      Estimado Raúl,
      Buen día, comparto mucho su sentimiento respecto a este parque, a pesar de eso, creo que es muy importante que se genere mayor conocimiento, y con ello mayor protección. Recordemos que en el país existen zonas protegidas, y tan espectacular parque, debería ser tratado como tal!…

      Por otro lado, explorando me quede con la siguiente duda: ¿A qué distrito de la provincia de Jauja pertenece el parque natural de Pichiluli?:
      Distrito de Acolla
      Distrito de Paca
      Distrito de Pacán
      Distrito de Jauja
      Espero me pueda ayudar. Muchísimas gracias de antemano. Que tenga excelente día!

      Responder
  2. Luis Ramírez ponce

    Un fuerte abrazo y mis felicitaciones por esta publicación. Porq no hacé participe aquí en lima al club jauja, que tanto se enorgullece de ser los mejores jaujinos, a las asociaciones de estudiantes de San José, el Carmen y San Vicente. Para que todos podamos exigir a nuestras autoridades de jauja y sus distritos a crear un verdadero y activo centro de atractivos turísticos de nuestra jauja . Porq no aprovechar la organización del 20 de enero de nuestros hermosos carnavales, para incluir a todo la juventud a los turistas invitados de estas fiestas a visitar estos templos naturales y construcciones de nuestros antepasados y vean y sepan que en Jauja se formó un imperio poderoso,trabajador, antes que el incaico.
    Ojalá mi estimado escuchen nuestros paisanos. De mi parte trataré de conversar con el grupo al q pertenezco del San José.
    Gracias, un abrazo sincero.

    Responder

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *