Con este sugerente y poético nombre, que no podía ser de otra manera, acaba de ponerse en circulación en el firmamento literario de Jauja una bella edición, perfectamente editada en formato oblongo, llamada “Derramando Cielo” que es una compilación de los trabajos ganadores del I Premio Nacional de Poesía “Jaime Galarza Alcántara” con motivo de la Primera Feria del Libro “Presencia Xauxa”.

Los responsables: Ingrid Maldonado Villar y el poeta Marx Espinoza Soriano, han tenido la acuciosidad de presentar este trabajo como colofón de dicho evento, con lo cual están demostrando su alta responsabilidad en el cumplimiento de un certamen que concitó la atención de la intelectualidad nacional. En la carátula de la publicación se advierte una sugerente ilustración como sólo el arte de Zoilo Bullón Méjico sabe regalarnos y en el que se advierte la parte superior del palacio municipal de Jauja con el fondo de nuestra Iglesia Matriz.

Leer el contenido de esta obra, tan necesaria en estos tiempos de sequía cultural en nuestro medio, nos hace transportar por las interioridades de nuestras existencias transidas de dolor y desesperanza. Los ganadores, Alberto Estrella y Wilfredo Rodríguez (en franco empate), nos llevan, a través de su poesía, a una dolorosa constatación de nuestra cotidianeidad. El mundo en que se desenvuelven estos poetas tiene ribetes de tal sencillez que sólo leyéndolos es como podemos darnos cuenta de aquello que nos ocurre frecuentemente y que, paradógicamente, lo dejamos desapercibido. Es hermoso constatar que nuestras vidas, sin darnos cuenta, están cargadas de un alto contenido poético (¡gracias poetas ganadores por hacérnoslo ver!). Finalmente, la obra presenta el trabajo del segundo lugar que corresponde a Graciela Ramírez, una poetisa autora del poemario “Mandrágora”, en la que revela una sensibilidad leve y fina, que trasunta los pasillos del eros y thanos griegos, pero contemporizados magistralmente para nuestros tiempos.

En suma, esta publicación es un regalo que enaltece nuestros espíritus y que nos mueve a agradecer al afán de los responsables que nos la han posibilitado. Desde aquí queremos alentar a todos los jaujinos a seguir por esta senda de cultivar nuestro Parnaso tan abandonado últimamente y donde duermen promesas que necesitan descubrirse.