Todo hombre es un hijo, pero no todo hombre necesariamente padre. Esto lo hace más o menos hombre? Todo hombre tiene que ser padre? Para haber llegado a ser padres, de alguna manera consensuada y responsable, es porque se tendría uno que sentir lo suficientemente preparado, sobre todo en el aspecto psicológico. Pero como los márgenes de ésta índole pueden ser aún materia de debate, aparición de otras más completas y detalladas, el no poder decir a otros qué hacer o qué no, sino solo a manera de consejo, y más si se es un irresponsable empedernido, no podemos normalizar lo universal como se haría con lo individual. Aunque las leyes lo intenten, aunque las políticas lo intenten, aunque la psicología lo intente y así con el arte y la ciencia. Sería injusto dejar a las masas pisoteadas por el poder y al poder pisoteado por a quienes trata de controlar. Pero como ellos votan, cómo podrían ir en contra de lo que decidan por quienes votaron. Qué abogado o persona común no conocerá la frase “hecha la ley hecha la trampa”? qué tan bajo podría haber llegado una clase política a la que a sus leyes se la llame o compare con trampas, algo que parece tener una connotación de no libertad? Es que con las leyes y en ellas no puede haber libertad? Las leyes regulan la libertad? Una libertad regulada? Lo tipos de leyes trampa tendrían que ser esos que regulan la libertad y una ley ley, la que hace o apoya a la libertad. Como los que dieron la libertad a los esclavos y más derechos a las mujeres. Habiendo hecho ya todo el castillo, cómo querría echarlo abajo? Se le hace difícil cortar todo y recomenzar o lo mismo o algo distinto. El hombre alguna vez se dirá rendido y hundido, pero cuando verdaderamente lo esté, ni lo sabrá ni podrá modificar lo ya hecho. No se dará cuenta y aunque se diere, será como si el éter más liviano y algún quantum muy veloz quieran tocarlo. Es que acaso no lo hace? Estos los traspasan a placer y los otros no se dan ni cuenta, no se quieren dar cuenta, no quieren ser parte de ello y solo se quedan en sí mismos y en sus creencias. Más parece que pudieran atar pero no desatar y cuando pueden desatar ya no atar. Aunque puedan ver en un crimen y en cegar la vida de otras personas como si pudieran así deshacerse o apartar algún problema, solo “salen” de uno para entrar en otro, se condenan más. Bien hechos los que bien atan y desatan. Alguien que desate pero no ate; padre? Alguien que ate pero no desate; padre?
Hay un hombre que está acostado en algún apacible lugar mirando hacia arriba. De rato en rato cruza las piernas, pone su tobillo en su rodilla flexionada, ya no puede seguir más y se aburre. Otro en algún otro lugar y en la misma posición, está pensando, ni siquiera le importa moverse, tiene ruidos en el oído y tampoco le interesa, los trata de olvidar por algún instante. Soñar y darse cuenta de lo que se sueña, soñar lo que se desea, aprender de ello. Si te contienes en tus sueños, cuánto más de despierto. No llegar a recordar hacía donde es derecha o izquierda, hacía arriba o hacía abajo, no recordar en dónde se está y no por algún exceso de licor o algunas otras sustancias. Desear y querer llegar a un estado tal por placer y algún modo de escape. Si se desea escapar es porque en donde se está, la persona no es quien quisiera ni debiera ser, sentimiento de falta, de sentirse incompleto. A donde pudiese escapar, tendría que ser algún lugar mejor, en donde sea él mismo y completo, así solo o acompañado. Quién busca hacerse desgraciado? Hacia donde haya podido escapar y crear que era mejor que su presidio, siendo inevitable que tenga que volver a ella hasta que muera, debería atraer todo lo mejor que haya podido captar en su intento de fuga y hacerlo propio para sí y para con quienes le toque estar. El que se aburrió sin siquiera llegar a cavilar algo, inventa alguna distracción tanto para sí como para los otros y se emboban. De esas distracciones no a todas se les puede llamar buenas ni malas ni mejores ni peores. Su mejor escudo, decir que el otro tiene decisión, apagar o prender, quedarse o irse. El embobado que no sabe que lo está, el embobado que se sabe tal aunque no le importe ni quiera cambiar y el que los maneja aunque digan que decide.
Veía los kilos y kilos de buen tomate desechados porque el precio que daban por ellos no era el que debería, preferían botarlos. El hombre les preguntaba: “y no les da pena?”. A unos sí aunque lo hacían y a otros quién sabe. “Algunos podrían venir a cogerlas (seguramente inferimos por lo general gente pobre)?”. Y le respondían “no, no les dejan” y acusaba algunas trabas estatales de salubridad. Eran tomates buenos. Como con estos, seguro hay otros alimentos desechados y desperdiciados. Panes, tubérculos, vegetales, frutas, leche, etcétera. ?