Que se mantenga, es raro, pero que se mantenga! Todos ellos que se reúnen y se acompañan. Raro porque más nos gusta nuestra propia compañía. Alguien sin ninguna enamorada o novia conocida, aunque sin la necesidad de ser casto. Para evitar estar en algo sin querer o estar a medias. O es que tal vez también podamos perdernos y andar de un lado a otro con más de uno. Aunque más presente se nos hace la idea de que ese tiempo ya pasó. Es más fácil flojear solo o acompañado? Con toda la cháchara aunque repetida, con los solo hasta luego, porque al rato u otro día nos vemos. Y pues tienes que ceder. Así también está como cada uno se llena y se nutre, pareciera ser lo más natural imitar lo bueno y obviar lo malo. No poder ver esa ingente cantidad de rutina; sobre todo la rutina con apariencia de salubre y hasta lujoso que no es más que desperdicio y contaminación. Gastar lo de doce meses en ocho, en su afanosa búsqueda de lo novedoso. Llegar al extremo de no saber ni por qué compra uno algo. Sí, hasta la música, la pasada y la que vendrá, son algo común. Quien pueda escapar de ella, ser ese distinto, alguien sin ningún maquillaje nunca ni por ningún motivo. Como el no saber ni menos siquiera intentar convivir. Despilfarrar es no saber ni poder convivir con lo que se despilfarra. Leer es convivir y hasta mejor con otros tiempos; a no tener ningún tipo de referencia.Tal vez alguien quien se quite la vida ya no pueda convivir ni consigo mismo, no poder entenderse en lo más mínimo; entenderse que también implica interrelación. Lo que se hace y se deja de hacer, más si está a nuestro alcance. Se puede limitar el convivir, pero no se puede estar sin convivir en toda la vida. Por todo el transcurrir de los días. La rutina del cuerpo propio, su forma, su aspecto y, la que debería ser la mejor de todas, la que uno quiera seguir, con la cual uno se quiera comprometer; a lo que dará su paciencia. No puede haber compromiso con lo negativo pues ya es dudoso de por sí. Puede haber trato con delincuentes? Porque se puede hacer lo mismo con uno que con otro; acaso eso no es rutina! Inventar kamasutras de kamasutras… Desear exclusividad, que está ligado seguramente a lo novedoso, pero haciendo justamente todo lo contrario. Quien es feliz sin necesidad de tener que estar buscándose uno u otro y hasta sintiéndose “mejor” por haber encontrado a otros más, debe de ser porque se trata de un ser más pleno. Toda la concupiscencia no es más que repetición (rutina) y hasta meras monerías. No se puede dejar de lado lo que a uno le agrada, sino sólo porque ya le desagrada, porque es algo que desprecia. Evitar mirar lo que podrías mirar, ser alguien solo para alguien o para muy pocos. Para nosotros es mejor alguien que nunca haya consumido algo nocivo para sí, aun así hasta por el solo hecho de afectar y alterar sus sentidos; su exclusividad radica en que no hace lo que todo el común hace. Uno depende y el otro no. No tener nada demás. Cuál de ambos es más exclusivo? En este punto hasta nos parecen sospechosas las inyecciones, pastillas y tónicos sin importar su fin, prefiriendo sanar por propios medios y sin deseo de tratamiento en caso de una enfermedad terminal. Hasta qué punto el ser padre o progenitor en general no es ese miedo a dejar de existir? Aun así lastimosamente una cosa es antes y otra después. Sería mejor hacerlo trizas para luego volver a componerlo. “Más vale un puñado con tranquilidad, que las dos manos bien llenas a costa de fatigas y de correr tras el viento”. Debe ser una de las frases con la cual más nos encontramos, la que seguro es una de las que más rápido viene a nuestra mente, con la cual no se perderían doce meses en ocho (cosa que vale la pena repetir hasta el cansancio aunque quizás ni surta efecto). Por otro lado, el “puñado” de la frase puede llegar a ser muy personal, cada uno con sus propios límites y aspiraciones. Lo caro o barato aún es relativo para todas las personas. Es más fácil pensar en cotidianidades que en rebuscadas bellas ideas. Cosas que se consiguen con algún dinero o las que no se puede comprar de ninguna manera. Tratar de atrapar esas ideas como números que deben estar rondando el espacio, que aun habiendo solo simios estarían. Capturar alguna opinión naciente.