Diversidad
La diversidad puede llegar a ser tanta que logre confundir. Aun en pequeñas proporciones siempre radica en ella la complejidad, lo complejo y lo diverso no podrían estar separados. Lo complejo, sin embargo, también podría llegar a ser lo homogéneo y unitario. Los números son los objetos más diversos que puede haber, hay otros objetos diversos que están más al alcance de las personas, mas aun así, no es menos la confusión que pueden llegar a producir. En lo homogéneo, en el que no podría haber más que una sola confusión, a diferencia de las múltiples confusiones que conllevarían los objetos heterogéneos, desde su sola naturaleza, es lo que lo hace diverso y complejo. Múltiples objetos y un solo problema? Podría ser el caso que todas las partes de eso múltiple tuvieran soluciones separadas o podrían ser también que una sola solución baste para todas las partes. Lo que parece más complicado es saber si un solo objeto pueda tener múltiples problemas. Si se supiera a ciencia cierta que todos los problemas tienen su correspondiente solución, múltiples objetos, una vez respondidos, tendrían una sola solución. Atribuyéndole alguna confusión a lo homogéneo, solo podría tener una; cómo podría dar más complicaciones algo que ya está reducido al mínimo? Lo homogéneo solo podría darse con plena libertad y razón. Antes se tienen que crear precauciones para no ser atrapados por la diversidad que podría mostrar su peor lado negativo posible. Nuestro ideal de neutralidad nos empuja a creer que no todo lo diverso tiene que ser completamente malo ni completamente bueno, siempre está en manos de alguno y no actúa por propia voluntad. Con un solo tipo de munición para pistolas, por ejemplo, podrían ser más difícil saber de qué arma vino un disparo; en cambio, con distintas clases de armas como de municiones, se podría ir descartando hasta llegar al posible autor del disparo. Con la diversidad viene la alegría y los colores, lo no diverso podría ser solo lo opaco en cualquiera de sus escalas. Sin diversidad no podría haber competencia; cómo podrían luchar y combatir objetos idénticos con las mismas fuerzas y habilidades? Se sabrían sus movimientos por anticipado, terminar siempre empatados. La creatividad tampoco podría suceder en la homogeneidad, la creatividad está inherente-mente ligada a lo diverso. Al tener a muchos dioses, se tendría que festejar más veces en un año que teniendo uno solo, aunque también, hay excusas de sobra para cuando se tenga que festejar. Tampoco el hábito ni la costumbre podrían residir en circunstancias más homogéneas e ideales, pues “aunque todo nuestro conocimiento comience con la experiencia, no por eso procede todo él de la experiencia”. La experiencia que en alguna medida es habito y costumbre también, solo está cuando hay diversidad de cualquier tipo. En el peor de los casos, como en lo del principio, una sola vez se tendría que haber habituado y acostumbrado un algo para luego mantener eternamente eso adquirido, tener una sola oportunidad de experimentar algún suceso. Aunque no podamos conocer si lo diverso es completamente bueno o completamente malo, no dudamos, por creencia propia, en que lo homogéneo es mucho más bueno, eterno y valedero a diferencia de lo heterogéneo. No se puede dudar tampoco que haya homogeneidad en la heterogeneidad mas no heterogeneidad en la homogeneidad. El mejor grupo es seguro es el que más compenetrado y unido tiene todos sus componentes, también como sucede en la forma y orden, de las que depende su comportamiento, que presentan las partículas. Una forma de saber que dos partes han sido muy bien soldadas, es que si se volviera a partir, no tendría que ser por la parte soldada. Lo heterogéneo podría hacerse homogéneo, si y solo si, por estar extraviado o roto. Las bellezas y demás virtudes de lo unitario y homogéneo son distintas a las que hay en lo diverso. Lo parco que anda bello. Lo parco de andar bello. Que se nos diga que nada se habría de perder para decir que lo heterogéneo es lo bello!