Todas las lenguas, en algún momento de su historia, han estado en contacto con otros idiomas, lo que, naturalmente, repercute en ellas. El español, por ejemplo, tuvo una relación lingüística intensa con el árabe, por lo que el castellano posee un amplio repertorio de palabras de ese origen. Al respecto, Melvyn Resnick afirma que el árabe ha proporcionado más palabras al español que ninguna otra lengua, con excepción del latín (1981:14). De hecho, de acuerdo con Lucía Quintana y Juan Pablo Mora, estas constituyen el 8% de nuestro vocabulario total (2002: 705).
En concordancia con lo mencionado, se pueden encontrar arabismos en la lengua española en casi todos los campos semánticos (Quintana y Mora 2002: 705). Por ejemplo, Ignacio Hualde y otros destacan varios términos que comienzan con al- o a- (artículo árabe) que forman parte del léxico de productos naturales, como alfalfa, azúcar y alcachofa; de elementos de la vida doméstica, como almohada, alcoba y alfombra; y, también, de términos científicos y matemáticos, como álgebra, algoritmo o alquimia (2010: 320-321).
De especial interés para este artículo son las etimologías de ojalá y hazaña. Ambas, como ya se puede sospechar, son de origen árabe.
Ojalá
Según la Real Academia Española (RAE), ojalá es un término que denota un intenso deseo de que algo suceda y, además, es una interjección que presenta una alta frecuencia de uso entre los hispanohablantes. Ella proviene de waša’ Allah, lo cual significa “y quiera dios” (Hualde y otros: 320-321).
Hazaña
Por otro lado, hazaña es uno de los vocablos excepcionales del árabe en castellano que se refieren al campo de los sentimientos o emociones, tal como lo señalan Quintana y Mora: “[…] casi todos los campos de la actividad humana cuentan en español con arabismos: solo parece quedar excluido el vocabulario de sentimientos y emociones (con la originaria excepción de hazaña) (2002:705). La RAE registra que este término proviene del vocablo árabe hispánico ḥasána y, este, del árabe clásico ḥasanah, que significa ‘buena acción’, y lo define como un acto o hecho especialmente ilustre y heroico.
En conclusión, el contacto histórico del español y el árabe, sin duda, ha influido en el castellano, sobre todo a nivel léxico. Sin que sea necesariamente de conocimiento general, los hispanohablantes usamos constantemente la expresión árabe ojalá, por lo que se puede afirmar que esta manifiesta una gran vitalidad en la lengua en cuestión y, también, empleamos diversos términos del mismo origen, entre ellos, hazaña.
Elaborado por Mariana Carlin y Sonia Valdez
Bibliografía
HUALDE, Ignacio y otros
2010 “El elemento árabe en el español”. Introducción a la lingüística hispánica. Segunda edición. Cambridge: Cambridge University Press, pp. 320-321.
QUINTANA, Lucía y Juan Pablo MORA
2002 “Enseñanza del acervo léxico árabe de la lengua española”. Ponencia presentada en XIII Congreso Internacional de la Asociación para la Enseñanza del español como Lengua Extranjera (ASELE). El español, lengua del mestizaje y la interculturalidad. Universidad de Murcia. Murcia, 2-5 de octubre 2002
https://cvc.cervantes.es/ensenanza/biblioteca_ele/asele/pdf/13/13_0697.pdf
RESNICK, Melvyn C. y Robert M. HAMMOND
2011 Introducción a la historia de la lengua española. Segunda edición. Washington: Georgetown University Press https://books.google.com.pe/books?hl=es&lr=&id=cybGiUrRz1kC&oi=fnd&pg=PA1&dq=pr%C3%A9stamos+%C3%A1rabes+en+la+lengua+espa%C3%B1ola&ots=AJE9JVNX66&sig=b1xJ06i7FJmB5WzCXOFxXYTRNIc#v=onepage&q=pr%C3%A9stamos%20%C3%A1rabes%20en%20la%20lengua%20espa%C3%B1ola&f=false