El Blog de Redacción, en esta oportunidad, ofrece un modelo de respuesta para un examen de ICOE. La pregunta abordada solicita la redacción de un párrafo comparativo en el que se desarrollen al menos dos criterios de comparación entre dos distintos elementos: el cine y la televisión. A continuación, se revisará detenidamente la pregunta.

1. Redacte un párrafo de comparación. Considere, por lo menos, dos criterios de comparación y elabore un esquema. Subraye la oración temática de su párrafo.

Es necesario concentrarse en leer bien la consigna y tratar de extraer de ella la estructura de nuestra respuesta. Al leerla debemos atender a ciertos conceptos relevantes: párrafo de comparación, criterios de comparación, oración temática. Debemos entonces recordar rápidamente las definiciones básicas de estos conceptos. En primer lugar, un párrafo de comparación es un tipo determinado de párrafo en el cual se estima las diferencias entre dos o más elementos de distinta naturaleza. En segundo lugar, esta comparación se verá evidenciada al principio o al final del párrafo por la oración temática, la cual cumple la función de poner al descubierto cuál es la intención del párrafo y cuáles son los elementos a comparar. En tercer lugar, esta comparación se desarrollará de manera lógica al considerar algunos criterios de comparación, los cuales darán la pauta sobre las diferencias entre los elementos contrastados.

Una vez realizado el primer paso, debemos tratar de organizar nuestra comparación en base a criterios. Estos criterios serán por lo general una abstracción, el fruto de una conceptualización; es decir, serán el producto de una operación lógica aplicada sobre la observación de las características de los elementos a comparar. En resumen, trataremos de establecer relaciones entre las diversas características de los elementos para fijar los conceptos que darán lugar a los criterios de comparación.

De esta manera, lo primero que debemos hacer es enumerar las diferencias entre nuestros elementos a comparar: el cine y la televisión. Para ello, hacemos una lluvia de ideas.

1) El cine solo ofrece películas, mientras que la televisión ofrece también series, novelas, noticias, programas de concurso, etc.
2) Para ver una película en el cine, se debe pagar una entrada, ir hasta a la sala de proyección, etc., mientras que la televisión solo necesita ser encendida para poder encontrar una película (se puede ver una película a cualquier hora).
3) Las películas en el cine pueden ser elegidas de entre la cartelera, mientras que las que pasan en la televisión no son elegidas por uno, sino impuestas por la programación de los canales.
4) El cine estrena películas; en cambio, la televisión no (ya que recicla las proyectadas en el cine para lucro de los canales).
5) La televisión brinda la oportunidad de ver las películas predilectas más de una vez sin pagar ningún costo adicional, lo cual no puede hacer el cine.
6) En el cine, siempre se encontrará un buen aparato de sonido y una pantalla gigante mientras que en la televisión la calidad de sonido e imagen dependerá de nuestro aparato receptor, el televisor.

Luego, lo que debemos hacer es relacionar las diferencias en distintos grupos preguntándonos “¿qué vincula cada característica con la otra?” y, sobre todo, “¿por qué se produce cada característica discrepante de esa manera y no de otra?”. Luego de responder estas preguntas, podremos extraer ciertos conceptos, los cuales se convertirán en los criterios de redacción: el contraste entre el cine y la televisión es la diferencia entre lo único (el estreno, la experiencia exaltada por los parlantes y la pantalla gigante) y lo repetible (lo que se puede ver mil veces, lo que se puede seguir –la telenovela y la serie-); entre lo inmediato (el quedarse en casa y prender el televisor) y lo mediato (el ir hasta el cine, el pagar la entrada, el atenerse a un horario establecido por otros). De esta manera, podemos afirmar que tanto la televisión como el cine plantean una interrelación distinta con los espectadores: en primer lugar, a nivel “físico” (mediatez e inmediatez material de cada medio) y, también, a nivel “emocional” (predisposición anímica). Estos son los criterios de comparación para nuestro párrafo comparativo.

Ya fijados los criterios de comparación, se debe redactar el párrafo incluyendo la oración temática y desarrollando las ideas con alguna información adicional. No debemos olvidar cumplir con las reglas de ortografía, con la variedad formal y de utilizar conectores lógicos de contraste. En el siguiente enlace, podrá descargar la respuesta.