Pero qué es tu vida? Todo lo que has hablado pero que no ha sido guardado. Todos tus momentos. Igual, se han juntado; tal vez era que así tenía que ser. No habría sido un “tal” que hubiese hecho tanto mal o uno que haya hecho mucho bien. Esos que hayan dado vida a otro y así hasta el verdadero inicio. Porque es claro que nadie estaría si no tuviese ascendencia. Pero hasta dónde llega el ascendiente de todos? Uno tiene y debe de tener algo de su ascendencia. Ascendencia con todas las capacidades de uno del cual se pueda decir que es. Ser en sí. Creemos (opinión) que si esa primera ascendencia fuese propiamente mala, quizás ya no existiríamos, pues ya nos hubiésemos aniquilado hace mucho tiempo. Represión? Un universo que no pare vidas. Como no podemos ser buenos, en principio por nosotros mismos, quizás luego por nuestras influencias, es que se duda todavía si es que somos buenos o malos en realidad. Qué debiera durar más, lo bueno o lo malo? Una cosa tan ínfima como para romper una singularidad, lo que le faltaba a algo para ser. Cómo estás vivo? De seguro no mucho la carne. Porque no es solo el tamaño sino también su velocidad. Son objetos que lo único que quieren hacer es retomar las posiciones tomadas por otros; debería resultar obvio que a cada momento hay objetos que nos traspasan con su tamaño y velocidad. Cómo podría ser posible que ello pase por muy desapercibido? En cierto modo se es una carne que produce energía, así ya no solo se es carne, sino también energía. Esa pugna de posiciones tal vez sea lo que nos haga viejos, pues en su naturaleza de retomar sus lugares, nos desgastan de forma lenta, a su propio compás. Seguro no todos tenemos la misma energía. Y como lo bello y lo bueno son cosas difíciles, no porque tengan que serlo, sino por ellos (los otros) que son las partes que se tienen que reunir, obviamente se espera que lo hagan más y mejor pulidas que antes; lo que en una dimensión pueda ser grande, en otra pueda ser pequeño. Por qué medirnos con las estrellas? Qué proporción de todo ese espacio y de todo ese tiempo se es? Por qué se le tendría que obviar fácilmente? Como esperar, lo que le queda al Hombre, es buscar; claro también es que existimos quienes no sabemos ni lo que esperamos ni lo que buscamos; lo que ocasiona que no necesariamente se acepte bien. Seguro, unos saben más de ello que otros y por lo mismo son en algo mejores. Cómo estás muerto? Si se diera el último número se darían todos. Ya buenos o ya malos, pero no por su ascendencia primera, sino por el mal uso de su albedrío, su propia ceguera. Su animación incontrolada. Porque además de esperar y buscar se tiene que aceptar. Es lo que le espera, al menos, a uno que tenga cierta animación, de otro modo no existe ninguna otra preocupación.